Capítulo 13: Batalla en Genosha parte 2

Mientras se encontraba tumbado en el suelo solo podía sentir un extremo cansancio, sus brazos dolían, sus piernas dolían, sus ojos dolían, su abdomen dolía mucho más que las anteriores partes del cuerpo mencionadas, para ser más específico todo su ser le dolía. Procedió a sentarse con dificultad a la vez que sus ojos vagaban por todo su cuerpo, encontrando extraño no ver ninguna herida a pesar del notorio dolor que claramente sentía.

Su ropa estaba intacta, sin ningún corte que pudiera verse, se veía tan nuevo como en el momento que se lo dieron, justo como antes de que la invasión a Genosha comenzará.

...

Un segundo?... Genosha?

El ataque a la nación mutante, los centinelas, los X-Men, la Hermandad, sus amigos, su maestra, Kitty... Nimrod.

Oliver se levantó bruscamente ignorando el dolor punzante en todo su cuerpo e intentó regresar a la pelea, si recordaba bien, el resto aún deberían estar haciéndole frente al más fuerte de los centinelas por lo que debía apresurarse para ir ayudar.

No obstante... Esto no sería posible y esto se debía a que se encontraba en un lugar completamente diferente al que estaba antes, el cielo estaba despejado, sentía mucho calor y había miles y miles de kilómetros de una arena extremadamente blanca. Sus ojos voltearon a ver en todas las direcciones posibles sintiéndose ampliamente preocupado al no poder ver absolutamente nada ni a nadie.

-N-No lo entiendo... Dónde... Dónde carajos estoy?- Exclamó en voz baja el pelinegro estando muy confundido.

Era extraño, lo último que recordaba era estar peleando junto con Jean contra Nimrod y que este lo... atravesará con un rayo láser en el abdomen.

Oliver rápidamente llevó su mano a dónde se supone que el centinela lo había herido, pero al igual que cuando desperto no había nada más que la sensación de dolor, no había ninguna herida que pudiera ser visible.

-Acaso... Estoy muerto?...- Se preguntó no hallando alguna otra razón lógica para la situación.

-No... Aún faltan algunos años para eso...- Una voz carente de sentimientos se escuchó a su espalda.

Rápidamente el pelinegro giró su cuerpo poniéndose en guardia estando listo para pelear de ser necesario, solo para encontrarse a una figura de negro encapuchada sentada en lo que parecían ser algunas rocas, mientras que al mismo tiempo cocinaba alguna clase de comida en una fogata.

Lo que hacía extraño y sospechoso toda está imágen era el hecho que segundos atrás, dicha figura no se encontraba ahí.

-Quién... Quién eres tú?- Oliver preguntó tras estar unos segundos en silencio.

-Eso no es importante...- Respondió la figura con el mismo tono de antes y sin mirar al chico.

Oliver entrecerro sus ojos con sospecha, todo lo que estaba sucediendo desde que despertó era confuso, no sólo no sabía dónde estaba ni quién era la figura encapuchada enfrenté de él, también estaba el detalle de que tampoco sabía de dónde carajos dicha figura había sacado los malvaviscos que cocinaba en ese momento.

Como decía todo era muy confuso.

-Dónde estamos?- Intento averiguar el de ojos marrones.

-...- La figura no respondió, en su lugar sólo volteó el malvavisco que cocinaba para que se tostara por otro lado.

-Oye!... Te hice una pregunta!!- Un poco incómodo el pelinegro recordó.

-Lo sé...- Fue la simple respuesta de la figura.

-Y bien?... No me piensas responder?- Oliver cuestinó con una ceja alzada.

-No tiene sentido que lo haga...- Comentó esta vez con un tono aburrido el encapuchado.

Esto confundió al mutante, a que se refería con eso?

-Por qué dices eso?- Oliver preguntó confundido.

-Simple... No estás listo para tal respuesta- Contestó la figura mientras llevaba el malvavisco ya listo a su boca, la cual Oliver no podía ver debido a la capucha.

-No estoy listo?... No entiendo nada- Aún más confundido que antes el de cabello negro mencionó.

-Tch!... Por supuesto que no... Como dije, no estás listo- La figura que en un principio no mostró emoción alguna, a ojos de Oliver empezaba a fastidiarse y deducía que era por su culpa.

El silencio se sostuvo entre ambos por algunos momentos en los que sólo el sonido del fuego quemando la leña de la fogata era lo único audible del lugar.

-Siéntate... Todavía estarás aquí por un rato- La figura ordenó a Oliver.

Al mismo tiempo que sacaba otro malvavisco de algún lugar desconocido.

-Cómo... Cómo sabes eso?- Oliver cuestinó.

-Eso es fácil...- Oliver no lo veía pero podía jurar que la figura encapuchada tenía una sonrisa ahora mismo.

Y en cierto modo esa sensación era correcta.

-Eso es porque en el mundo real... Te estás muriendo....- Reveló el encapuchado con voz muerta, dejando ver un ojo de color naranja oscuro en la oscuridad de su capucha.

Oliver abrió los ojos como platos impactado ante tal noticia, el encapuchado por su parte solo se limitó a seguir cocinando su malvavisco sin mirar al pelinegro.

"Me... Estoy muriendo?"- Pensó en estado de shock.

Sip, sin duda alguna, todo era muy confuso.

Mundo real.

Charles Xavier observaba con seriedad a todos los ciudadanos de Genosha que habían logrado refugiar en el castillo, al mismo tiempo con su telepatía trataba de enviar sentimientos de calma a todos los presentes, algo muy necesario ya que la mayoría de mutantes se encontraban estresados y preocupados, algo que era entendible teniendo en cuenta que robots especializados en matar mutantes habían llegado para invadir el país.

A su vez, pensaba en su reciente conversación con su mejor alumna, Jean Grey, la pelirroja le había transmitido un mensaje preocupante, el centinela más fuerte llamado Nimrod parecía ser un hueso más que duro de roer y ni siquiera los más fuerte podían hacerle mayor daño, por eso la telépata le había pedido que avisará a los demás para que estuvieran listos ya que era posible que ellos no pudieran ganar.

-Charles... Te encuentras bien?- La voz de una mujer logró sacar de sus pensamientos al telépata.

-Emma... Qué ocurre?- Indagó el hombre en silla de ruedas mientras observaba a la llamada reina blanca.

-Tengo reportes de que los centinelas normales parecen estar disminuyendo... Pronto la ciudad estará fuera de peligro- La rubia reveló mirando con curiosidad al hombre.

-Eso... Eso es bueno- Murmuró el telépata.

-Lo es... Además parece que la mayoría de ciudadanos han logrado llegar a salvo al castillo- Comentó Emma.

-Eso quiere decir que los equipos de evacuación y de combate están más desocupados... Cierto?- Preguntó el telépata.

-Sí, eso es correcto...- Contestó la rubia.

-Perfecto... Avísales que estén listos para pelear contra Nimrod- Charles dijo mirando seriamente a la reina blanca.

-Ok... Suficiente, qué es lo que ocurre?... Actúas de manera extraña- La rubia demandó saber.

-Qué sucede?- La voz de Bestia, quien se encontraba atendiendo algunos civiles heridos preguntó.

-Lo mismo me gustaría saber... De repente dijo que todos deben estar listos para pelear contra Nimrod- Emma explicó con el seño fruncido.

-Charles... Viejo amigo, de que hablas?- El científico peludo quiso saber.

-... Hable con Jean... Las cosas no parecen estar saliendo bien, Nimrod esta ganando- El telépata reveló sorprendiendo a los dos mutantes que estaban con él.

Dichos mutantes se miraron entre sí preocupados, por la mente de Bestia la principal preocupación era que si los de nivel Omega no podían vencer al centinela, que quedaría para el resto de ellos?

Por otra parte, Emma tenía pensamientos similares al del científico peludo a su lado, con la preocupación extra de aquel joven muchacho que se encontraba luchando en ese momento. El inicio entre ambos fue complicado, sin embargo, con el pasar del tiempo dicho muchacho había logrado hacer un pequeño hueco en su corazón, en otras palabras,  Oliver era alguien importante para ella y no quería perderlo.

-Qué haremos?- Emma preguntó al telépata en silla de ruedas.

-Hablar con los demás, en el momento que terminen con los centinelas normales, que se dirigan con rapidez a dónde Nimrod se encuentra... Aparte de eso tengo que pedirte un favor Hank- Pronunció Charles mirando primero a la rubia y luego al científico.

-Qué cosa?- Preguntó el mutante peludo.

-Analiza a Nimrod... Debemos de descubrir si tiene algún punto débil- Dijo seriamente el telépata recibiendo un asentimiento del científico en respuesta.

Seguido de esto Bestia se fue camino a la sala donde habían tenido la reunión con la Hermandad de Mutantes horas antes del ataque, desde ahí podría analizar a Nimrod con mayor facilidad.

-Te encargo el aviso Emma...- Comentó Charles viendo a la rubia.

-De acuerdo...- Fue lo único que respondió la reina blanca.

Charles la miró cerrar los ojos y también sintió como la rubia empezaba hacer uso de sus poderes telepáticos, mientras tanto él mantendría la tranquilidad en todos los civiles esto sin descuidar en ningún momento lo que sucedía a las afueras del castillo.

Con Oliver.

-Entonces... Estoy muerto?- El pelinegro indagó mientras tomaba asiento enfrente de la figura encapuchada.

-Aún no... Pero es posible que lo hagas...- Musitó en tono neutro la figura.

Seguido de esto el lugar quedó en silencio, más que todo porque Oliver se encontraba procesando la idea de que se estaba muriendo, era algo extraño, no tenía miedo, siempre pensó que al llegar un momento así estaría aterrado, pero no era el caso. Lo que sí que sentía era un poco de molestia consigo mismo, cuando despertó sus poderes se había jurado a sí mismo ser un héroe y vengar la muerte de sus padres, pero aquí estaba, en un lugar completamente desconocido sin haber cumplido ser un héroe y sin vengar la muerte de sus padres todo esto mientras él moría.

-Eso quiere decir... Qué este lugar es una especie de limbo?- Estaría muriéndose, pero aún así quería respuestas sobre en dónde estaba.

-...Podría decirse... Aunque no es del todo acertado- Contestó la figura llevándose otro malvavisco a la boca.

En serio... De dónde los sacaba?

-Ok... Y tú qué haces aquí?- Oliver preguntó.

-Solo paso el rato...- El pelinegro puso los ojos en blanco ante tal respuesta.

-Me dirás...- Intentó hablar pero rápidamente sería interrumpido por el encapuchado.

-No te diré quién soy... Desiste sobre esa idea...- Se adelantó a la pregunta el encapuchado sorprendiendo a Oliver.

-Esta bien lo entiendo... No estoy listo para esa respuesta verdad?- Habló Oliver con fastidio.

La figura en contestación sólo asintió.

Otra vez el silencio reinó entre ambos, lo que molestaba y desesperaba a Oliver, tenía mejor cosas que hacer que estar hablando con un encapuchado que evadía la respuesta a cualquier pregunta importante que hiciera.

-Maldición... Entonces que hago aquí?- Murmuró más que para sí mismo que para el encapuchado.

-Esperar...- Sorpresivamente el encapuchado respondió.

-"Eso es un avancé... Aunque no era mi intención"- Pensó Oliver.

Debía aprovechar este momento para ver si podía sacar alguna otra información.

-Esperar a que?- Rápidamente el pelinegro cuestinó.

En respuesta, el encapuchado se levantó de su asiento para seguidamente con el simple chasquear de sus dedos apagar la fogata y desaparecer las piedras en las que se encontraba sentado previamente, esto último tambien incluía las piedras en que Oliver estaba sentado, por lo que al estás desaparecer el pelinegro cayó de bruces contra el suelo lastimándose un poco.

-Oye eso dolió!- Se quejó el chico.

-...Y?- Fue lo que dijo el encapuchado, lo que hizo molestar más a Oliver.

Sin embargo, sabiendo que esto sería algo contraproducente para su busca de información, el pelinegro optaría por respirar profundo para calmarse.

-Por favor... Qué debo esperar?- El chico prácticamente suplicó.

-...Curar... Debes esperar curar- Respondió el encapuchado empezando a caminar lejos de Oliver el cual sin pensarlo se lanzó a perseguirlo.

Mundo real.

Un potente disparo de energía atravesó la cabeza de un centinela haciéndolo explotar, al mismo tiempo no muy lejos de ahí, alguien lanzaría una pared de ladrillos perteneciente a una casa destruida a uno de los androides asesinos logrando aplastarlo y hacerlo explotar luego de eso.

-Buen trabajo Coloso- Un hombre con visor mencionó.

-Lo mismo puedo decir de ti Scott- El ruso respondió al mismo tiempo que se sacudía el polvo de las manos.

-Grrr... Ya no hay tanto centinelas- Una pelinegra que se encontraba sentada en unos escombros afilando sus garras comentó.

Ambos X-Men se miraron entre sí para luego observar el entorno que los rodeaba, comprobando que lo que la clon de Wolverine decía era cierto, ya no había tantos centinelas en el lugar.

-Eso se explica fácil niña... Ya casi no quedan centinelas normales- Una voz muy conocida por el trío de mutantes se escucho.

Al voltear el trío se encontró con una cara conocida, siendo este Wolverine quién para sorpresa de sus compañeros se encontraba junto a unas personas con quién en circunstancias normales estarían intentando matarse entre sí.

-Quiénes son tus amigos Logan?... Me los presentas?- En tono burlón Cyclops se dirigió al mutante longevo.

-Grrr... No te recomiendo colmarme la paciencia Summers... Jean no esta aquí para salvarte- Logan amenazó haciendo que Scott frunciera el seño.

La amenaza no había gustado nada al líder actual de los X-Men.

-Aunque sería divertido verlos pelear entre sí caballeros, me temo que hay cosas más importantes en este momento- Una hermosa mujer de piel azul y cabello rojo interrumpió con una sonrisa traviesa en su rostro.

-Yo opinó que los dejes matarse... No es como si importará- Un rubio con un lanzallamas en la espalda pronunció.

-Cierra la boca Pyro!!... No digas tonterías, Wolverine es mío- Sabretooth amenazó al rubio mientras sacaba sus garras.

-Jajaja!... Eso sonó muy raro Sabretooth- Apareciendo en una estela celeste Pietro Maximoff se burló.

-Es acaso la convención de idiotas lo que veo... Porque si es así me gustaría irme de aquí con mis amigos- Una voz femenina se escucho arriba de todos burlándose de los miembros de la Hermandad.

Desviando su atención a dicho lugar, todos observaron a una hermosa bicolor de traje verde y amarillo viéndolos con una sonrisa divertida en el rostro, la cual no se encontraba sola, ella estaba acompañada por un muchacho cubierto de hielo siendo este Bobby que rápidamente aterrizó y se sentó a un lado de su amiga Laura dando un suspiro cansado por el esfuerzo realizado.

-Oh pero miren nada más... Sí no es otra que mi querida hija- Mystique comentó viendo a Rogue la cual al escuchar lo dicho por la mutante frunció el seño.

-Fiuu!!... Que preciosura!- Silbando Quicksilver mencionó cautivado por la belleza de Rogue.

Pero su apreciación de la belleza sureña se vería interrumpida al sentir como alguien pasaba su brazo alrededor de sus hombros.

-Concuerdo.. Pero no la mires demasiado, esta bien mon ami?- Gambito quién era el responsable de esto dijo con una sonrisa a la vez que mostraba una de sus cartas llena de energía cinética.

Para Pietro quedo claro, debía tener cuidado al momento de hablar de Rogue si el cajún estaba presente.

PUFF!!

-Llego tarde?- Un hombre de piel azul con cola preguntó.

-Es bueno verte Kurt...- Wolverine le dijo al mutante azulado.

-Lo mismo digo... Me he dado cuenta que ya casi no hay centinelas, eso quiere decir que vamos ganando- Nightcrawler comentó con una sonrisa hacia los presentes.

-"Me temo que debo refutar esa afirmación..."- La voz de Emma Frost se escucho en la mente de todos los mutantes presentes.

-Sal de mi cabeza perra blanca!- Escupió con veneno Mystique.

Esto se debía a que la mutante de hermosos ojos amarillos odiaba que se metieran en su cabeza, la razón? Era desconocida por todos.

-"Relajate... No te dejaré en coma si eso es lo que te preocupa"- La rubia telépata se burló.

-Volviendo al tema... A qué te refieres con que no vamos ganando Emma?- Rogue dijo mientras aterrizaba en el suelo cerca de Gambito.

-"Espera... Primero debo traer a todos al enlace mental... Necesitaremos toda la ayuda posible"- La reina blanca mencionó preocupando a más de uno.

No muy lejos de ahí, un grupo de chicas caminaba por las destruidas calles de Genosha, habían pasado mucho tiempo luchando contra los centinelas que tenían el objetivo de matarlas y capturarlas siendo este el caso específico de una hermosa castaña, pero por fin después de un largo rato luchando las fuerzas invasoras parecían prácticamente vencidas.

-Todo está más calmado...- Parló una muchacha de rasgos asiáticos.

-Eso es bueno... Tal vez ya no haya tanto peligro- Una rubia con acento ruso y con una espada en su mano comentó.

-Lo dudo... De ser así, ya nos hubieran dicho- Atinó a decir esta vez una peliverde.

-Bueno, tienes un punto con eso... Pero hace algunos minutos que ningún centinela nos ataca ni vienen a buscar a Kitty- Jubilee le dió la razón a la hija de Magneto para luego apuntar a su amiga.

Magik giró su cabeza a hacia está, dándose cuenta de que se encontraba callada y siempre mirando hacia una dirección en particular, la rusa no necesitaba ser muy lista para descubrir el porque de esto, después de todo, en aquella dirección se encontraba cierto pelinegro luchando contra un centinela sumamente peligroso y poderoso.

No la juzgaba, ella estaba casi o igual de preocupada por ese peculiar muchacho de ojos marrones que habían conocido hace tan solo unas semanas atrás.

-Kitty... Te encuentras bien?- Illyana le preguntó.

-Eh?... Sí, me encuentro bien solo...- La castaña quiso hablar pero fue interrumpida.

-Preocupada por Oliver?... Despreocúpate  nuestro amigo estará bien- Jubilee ánimo a su amiga, aunque por dentro estaba en un estado similar al de ella.

-No conozco mucho a Oliver, en realidad solo he cruzado algunas palabras con él... Pero por lo que he visto es alguien fuerte, de seguro estará bien- Polaris intentó animar.

Kitty por su parte sonrió, era verdad estaba aterrada, y lo estuvo aún más cuando después de besar al chico lo vió saltar de la cima del edificio para lanzarse a pelear contra un robot homicida de mutantes, pero sí algo era cierto era que Oliver es una persona realmente capaz de salir de situaciones adversas, por lo que esta no debería ser la excepción.

Claramente, ella no sabía que en ese momento Oliver se debatía entre la vida y la muerte.

-PATÉTICO!... ESTOS CENTINELAS SON PATÉTICOS!- La voz de alguien realmente furioso se escucho cerca de ahí.

Las chicas no necesitan ser muy inteligentes para saber de quién se trataba, sobre todo Polaris la cual era de las presentes la que más veía a la persona responsable de tal grito. Tras unos cuantos segundos caminando el grupo de chicas se encontró con Juggernaut que era quién había gritado y este estaba acompañado de otros dos mutantes muy peculiares, siendo estos Blob y Sapo.

-Quiero chocolate...- Murmuró el mutante gordo sin importarle el arrebato de su compañero.

-Ya lo sé Blob... Qué tal si te calmas Juggernaut? No conseguirás nada así- Sapo intentó razonar, solo para callarse al recibir una mirada de muerte del gigante.

Pero justo antes de que el medio hermano de Charles Xavier pudiera decir algo, este se daría cuenta de la presencia de las chicas por lo cual sonrió, podría divertirse atacándolas viendo que los centinelas no le daban pelea.

-Cálmate Juggernaut... Recuerda que tienes un casco de metal cubriendo tu cabeza- Anticipándose a los pensamientos del gigante, Polaris amenazó con un pequeño destello verde en sus ojos.

Al escuchar esto el gigante maldijo a la peliverde, cuando se trataba de Magneto y su hija, debía siempre morderse la lengua para evitar decir algo estúpido, esto a menos de que quisiera que su cabeza fuera aplastada.

-"Están juntos... Eso facilita mucho las cosas"- La voz de Emma hizo eco en sus cabezas, exceptuando la de Juggernaut quién por su casco no podía escuchar nada.

-Profesora Emma?- Jubilee preguntó.

-"La misma Jubilee... Ahora que tengo la atención de todos sera mejor que escuchen con cuidado"- Emma mencionó.

-"Al punto!!"- Exigió Sabretooth.

-"Necesito que todos se dirigan a donde los demás pelean con Nimrod... Todos y cada uno, sin excepción"-Emma reveló.

-"Que? Por qué?"- Bobby confundido indagó.

-"Nimrod esta ganando..."- Fue lo único que dijo la reina blanca.

Lo que provocó que todos se pusieran algo tensos ante tal información.

-"Oliver..."- Pensó para sí misma muy preocupada Kitty Pryde.

Con Oliver.

-Oye... Ya llevamos un rato caminando- Oliver le dijo al encapuchado a su lado.

-Así es...- Respondió.

-Por qué?- Preguntó el muchacho.

-No hay un porque...- Contestó.

El pelinegro contrajo un tic nervioso en su ojo derecho por esa respuesta, desde que llegó a este lugar y se encontró con el encapuchado todas sus preguntas a excepción de algunas contadas eran evitadas o respondidas de manera insatisfactoria, lo que solo ponía más nervioso al chico.

-Sabes que tengo cosas más importantes que hacer que estar aquí contigo verdad?... Hay gente que me...- Habló pero fue interrumpido.

-Te necesita?... Te recuerdo que te estás muriendo- El encapuchado recordó deteniéndose.

-Lo sé... Pero dijiste que estoy aquí para curar no?... Cómo lo hago? Cómo lo consigo para volver y ayudar al resto?- El pelinegro preguntó.

En respuesta en el encapuchado alzó los hombros en señal de desconocer tal información, cosa que Oliver sabía muy bien que era una burda mentira, este hombre sabía muy bien el porque de su presencia, de otro modo, por que se presentaría ante él?

-Vamos en serio necesito ayudarlos- Oliver pronunció un poco desesperado.

-Ayudar?... Tú?... Cómo podrías hacer eso?... Cómo podrías hacerlo siendo tan débil?- El encapuchado dijo en un tono frío.

Al escuchar estas palabras Oliver se enojó, por lo que sin pensarlo sus ojos se tornaron rojos para después lanzar un puñetazo al encapuchado, este en respuesta tomó el puño del pelinegro con suma facilidad sorprendiéndolo, para luego arremeter con una fuerte patada que se clavo en el abdomen del chico lo que provocó que Oliver saliera disparado por los aires a causa del tremendo impacto.

-Cof! Cof!... Mierda... Dolió- Oliver murmuró adolorido.

Levantándose con dificultad, el pelinegro vió como el encapuchado se acercaba hacia él y a juzgar por su lenguaje corporal parecía estar molesto, muy molesto.

-Cómo podrías ayudarlos siendo tan débil?- Volvió a preguntar el encapuchado antes de lanzarle un puñetazo a Oliver.

Con mucha dificultad el pelinegro lograría esquivar el ataque, sin embargo, un segundo puñetazo y luego una fuerte patada se estamparon en su rostro tan rápido que ni siquiera sus ojos pudieron verlo.

-Tanto poder en tu interior... Pero lo usas de una manera estúpida!!- El encapuchado gritó, tomando a Oliver de su traje y lanzándolo hacia el suelo.

-No se de que hablas, intento dar lo mejor de mi en cada pelea...- Musitó aún en el suelo el pelinegro

Cuando Oliver pudo levantarse abrió los ojos con un poco de miedo al ver una gigantesca llamarada de fuego dirigiéndose hacia él, por lo cual sin opción a esquivar puso sus brazos en X esperando soportar el ataque.

...

Ataque que nunca llegó, lo que hizo que el pelinegro alzará la mirada solo para encontrarse con el encapuchado enfrente de él.

-Puede que sea cierto... Pero aún así no es suficiente, de otra forma no estarías aquí en primer lugar- El encapuchado mencionó en tono neutro.

-Que carajo fue eso??- Gritó Oliver aún en guardia y confundido por el abrupto cambio en la actitud del encapuchado.

-Tch!!... No te quejes mocoso, tu fuiste el primero en atacar- El encapuchado explicó.

-Eh?- Era cierto, pero aún así estaba confundido.

-Supongamos que lograste sobrevivir y regresar a pelear... Cómo pretendes vencer a Nimrod?... Porque solo veo a un chico que fue apaleado con ganas de que lo vuelvan apalear- El encapuchado mencionó de manera sería.

-Yo... No lo sé...- Respondió Oliver.

-Entonces van dos... Curar y descubrir una manera de hacerte más fuerte para vencer a tu enemigo- Reveló el encapuchado sorprendiendo a Oliver.

El cual sonrió, al menos era un avancé.

-Eres esa clase de personas que les gusta enseñar con acertijos o algo así?- Oliver preguntó con una sonrisa.

Pero de repente un fuerte puñetazo en el rostro que no pudo anticipar lo haría caer fuertemente contra el suelo.

-Número uno... Aclaro, no soy tu maestro... Y número dos... Prefiero enseñar a golpes- Notándose un poco de diversión en el tono de voz el encapuchado mencionó.

-Vete a la mierda...- Dijo Oliver adolorido.

Solo para que una potente patada se estampará en su abdomen.

Esto iba a durar un rato.

Mundo real.

Se puede observar lo que alguna vez fue una playa hermosa, tranquila y llena de vida, pero que en este momento se encontraba totalmente destruida, humo y enormes cráteres causados por diversas explosiones era lo único que se podía llegar a observar, esto y unos cuantos cuerpos que yacían derrotados en el suelo como resultado de una brutal pelea.

-Quisieron evitarlo, fueron lo suficientemente arrogantes como para creer que podrían detenerme... Pero aquí están, todos ustedes mutantes, vencidos a mis pies- La voz robótica de Nimrod hizo eco en la destruida playa.

El centinela más fuerte jamás creado observó con una notoria tranquilidad como los cuerpos de Magneto, Jean Grey, Storm y Wanda Maximoff se encontraban en el suelo completamente derrotados. Al comienzo a causa de su incontenible ira los mutantes dieron pelea y le costo contrarrestar los ataques no por nada eran mutantes de nivel Omega, no obstante, esto no duró demasiado lo que provocó que actualmente todos estuvieran a sus pies, al igual que Oliver Davies quien había sido el primero en caer de todo el grupo.

No hallando nada más por hacer en este lugar, Nimrod dio media vuelta con la intención de volver a la ciudad, dónde sus dos objetivos principales se encontraban, pero su intento de marcharse sería interrumpido al notar como uno o más específicamente una de los mutantes que creía haber derrotado se volvía a poner de pie.

-Eres alguien persistente...Wanda Maximoff- Nimrod comentó viendo a la hija de Magneto.

Está se encontraba en un estado deplorable, sus una vez ropas escarlatas en este momento se encontraban muy dañadas y llenas de suciedad, con diversos cortes por dónde su sangre se filtraba sin intención alguna a detenerse. Pero aún con todas estas heridas sobre su cuerpo, sus ojos seguían brillando de un fuerte color rojizo demostrando así una gran determinación en la mirada de la castaña, la cual no tenía pensado rendirse en lo absoluto.

-Hablas... Demasiado- Soltó con un poco de dificultad la gemela de Pietro Maximoff.

-Eso puede solucionarse...- Mencionó Nimrod fríamente.

Y un segundo después, Nimrod con cuchilla en brazo apareció delante de la castaña quién ante esto solo pudo generar un débil domo de energía para protegerse. La cuchilla de Nimrod se estampó contra este domo fuertemente haciendo que Wanda poco a poco empezará a retroceder.

Cuando de repente, lo inevitable pasó, por culpa de sus heridas la hija de Magneto no pudo sostener por más tiempo el escudo que la protegía, por lo que solo pudo ver como la cuchilla del centinela bajaba en cámara lenta hacia ella con la intención de arrebatarle la vida.

...

-Uff!!... Llegue a tiempo!- Cierta voz muy conocida por Wanda se escucho.

-Pi-Pietro?- Sorprendida de ver a su hermano gemelo en ese lugar, la castaña expresó.

-Qué?... Acaso no lo viste venir?- El peliblanco preguntó con una sonrisa en su rostro mientras observaba a su hermana.

Wanda sonrió levemente ante las ocurrencias de su hermano, incluso en una situación tensa como esta, él siempre lograba hacer que ella sonriera y se calmará. Pietro por su parte dejo de mirar a su hermana para enfocarse en su alrededor, logrando observar como la playa se encontraba completamente destruida por la pelea incluso viendo como en algunas zonas en las que antes había arena, ahora esta era remplazada por pequeños fragmentos de vidrio que nacieron por el tremendo calor que las explosiones provocaban al hacer contacto con la arena.

También pudo ver como los cuerpos de las dos miembros de los X-men, Jean y Storm, se encontraban inconcientes en el suelo con varias heridas por todo su cuerpo, mismo caso con el hombre que ostentaba el titulo de padre para él y sus dos hermanas, luego observó a Nimrod quién lo hizo temblar un poco ya que desde que salvo a su hermana gemela, el centinela no le había quitado la vista de encima ni por un segundo.

-No deberías estar aquí Pietro...- Wanda mencionó viendo al peliblanco.

-Sí ajá... Lo que tu digas... No vine solo si es lo que te preocupa- Habló Pietro a la vez que bajaba a su hermana lentamente.

-Qué quieres decir?- Extrañada la castaña preguntó.

En respuesta el peliblanco sonrió, para luego señalar al cielo confundiendo aún más a su hermana al no ver absolutamente nada, pero de repente el sonido de algo acercándose a una alta velocidad llamaría su atención, para seguido poder ver como un borrón verde y amarillo se estrellaba contra la figura de un desprevenido Nimrod quién no pudo hacer nada para cubrirse del ataque, haciendo que el centinela saliera volando varios metros hasta estrellarse contra una formación rocosa.

-Lo siento dulzura... Pero debía tomar retribución por lo que me hiciste en nuestro primer encuentro- Rogue dijo con una sonrisa en el rostro, al mismo tiempo que se sacudía un poco de arena que había caído en su cabello.

A su vez en el cielo, Wanda observó con sorpresa como se abría un portal amarillo de gran tamaño, mismo caso con una repentina humareda azul que desprendía un peculiar olor azufre, siendo Magik y Nightcrawler los responsables de estos fenómenos trayendo consigo en el proceso a casi todos los miembros de los X-Men y de la Hermandad.

-Wanda!!- La voz de Polaris llegó a oídos de su media hermana.

-Lorna...- Aún sorprendida Wanda musitó.

-Por dios tus heridas... Se ven horribles!!- Asustada la peliverde habló.

- Estoy mejor de lo que parezco...- Con una mueca de dolor al hacer un mal movimiento la castaña comentó intentando tranquilizar a su hermana.

-No seas tonta... No hagas movimientos bruscos!- Regaño Pietro.

Por otro lado, nos centraremos en los X-Men, más precisamente en Wolverine quién al notar a Jean y Storm desmayadas en el suelo, no dudo ni un segundo en lanzarse hacia ellas con tal de verificar su estado, siendo seguido rápidamente por Coloso y Gambito quienes se disponían ayudarlo.

-Roja, Ro... Están bien?... Respondan!!- Exigió preocupado el mutante longevo.

-Debemos apartarlas del conflicto- Mencionó el ruso cubierto de metal.

-Estoy de acuerdo... Dónde está el chico maravilla?- Se preguntó Gambito al no visualizar a Oliver por ningún lado.

A la distancia Scott veía como Jean Grey, su pareja, se encontraba herida e inconsciente, una parte de él quería ir a verificar su estado junto a sus compañeros, asegurarse de que estuviera bien, pero no podía, no cuando observó como lentamente Nimrod empezaba a levantarse.

-Estén atentos todos, se esta levantando!!- Gritó Cyclops.

-Cierra tu boca enano... Yo me encargaré de él!!- Parló Juggernaut pasando por un lado del líder de los X-Men dispuesto a enfrentara Nimrod.

-Te acompañó... Será entretenido...- Murmuró Sabretooth con una sonrisa salvaje en su rostro.

Cyclops intentó refutar al dúo de mutantes, pero una mano que se posó en su hombro se lo evitó, mano la cual pertenecía a Nightcrawler.

-No vale la pena Scott... No escucharán razones...- Comentó el mutante de piel azul.

Ahora centrándonos esta vez en otra mutante de piel azul, se puede ver como Mystique intentaba darle primeros auxilios a Magneto quien se encontraba muy herido por su pelea, siendo ayudada por Sapo y Pyro que hacían lo que podían.

-"No te mueras Erik"- Pensó la mutante.

...

-"Dónde estás?"- Se preguntó cierta rubia conocida como la reina blanca.

Emma que había llegado al lugar con ayuda de Magik, veía a todos lados en busca de su alumno, poniéndose nerviosa al no poder visualizarlo por ningún lado, un caso bastante similar al que llevaban unos cinco adolescentes que buscaban a su amigo.

- Alguna lo ve?- Bobby preguntó nervioso.

-No- Respondió seca Magik, aunque por dentro estaba nerviosa.

-No logras detectar nada con tu olfato Laura?- Jubilee preguntó a la clon de Wolverine.

-Sniff  Sniff!!... De hecho sí... En esos escombros!- Luego de oler por algunos segundos la pelinegra apunto hacia una montaña de escombros.

A una velocidad impresionante Kitty paso al lado de todos sus amigos y se dirigió a ese lugar, llegando en un instante, solo para ver una amarga imagen, Oliver estaba ahí, pero en ese momento parecía más muerto que vivo, sus ojos cerrados y todo su cuerpo maltratado cubierto de heridas y sangre, una imagen realmente fuerte para la castaña enamorada.

OLIVER!!- Gritó llena de pavor la chica.

Rápidamente sus amigos llegaron y vieron la misma escena, esto era una imagen mucho peor de lo que habían visto cuando Trask logró herir a varios miembros de los X-Men. Desde el mismo lugar que antes, Emma cerró los ojos y respiro profundamente luego de escuchar a Kitty gritar, sus ojos se llenaron de lágrimas que se negó a dejar caer, no podía, no era el momento de mostrarse débil, no con el peligro enfrente de todos.

Obviamente el grito llamó no solo la atención de los amigos de Oliver y de Emma, ahora todos sabían que Oliver se encontraba mucho peor que el resto de los heridos, descendiendo de los aires Rogue se apresuró a revisar al chico, forcejeó un poco con Kitty para separarla del pelinegro, para luego entregársela a Bobby y poder ver mejor al chico, apretó los dientes al verlo, él estaba realmente grave.

La bicolor apenas y podía detectar su respiración, la sangre no paraba de salir y el enorme hoyo en el abdomen de Oliver no ayudaba para nada en esto.

-Su factor curativo no está reaccionando...- Murmuró la sureña.

-Yo puedo ayudar en eso...- Una voz le habló a la hija adoptiva de Mystique, que al voltear pudo ver a una lastimada Wanda Maximoff siendo ayudada a caminar por su media hermana Polaris.

-Cómo?...- Preguntó la bicolor.

-Puedo potenciar su factor curativo con mis poderes... Pero no será suficiente, necesito de tu ayuda- Wanda explicó al mismo tiempo que lentamente se arrodillaba junto al cuerpo del pelinegro.

-Cómo quieres que te ayude?- Escéptica la sureña preguntó.

-Absorbe mis poderes, entre las dos tal vez podamos ponerlo estable- La castaña explicó viendo a la bicolor.

Esta frunció el seño ante la idea de la hija de Magneto, pero sabiendo de que si no actuaban rápido perderían a Oliver, la sureña aceptó con un asentimiento de cabeza.

-De acuerdo... Hazlo de una vez- Wanda murmuró.

Rogue asintió nuevamente, para luego quitarse el guante y tocar por pocos instantes el brazo de la castaña de ropas escarlatas. Luego de eso, ambas mutantes colocaron sus manos sobre el abdomen del chico para después activar sus poderes y tratar de salvar a Oliver.

Trabajo que no sería sencillo.

Con Oliver.

Oliver lanzó un golpe electrificado al encapuchado el cual este último desvío con suma facilidad, provocando que el golpe del pelinegro se estrellará contra la arena haciendo un pequeño cráter, luego de esto, el chico intentó atacar nuevamente esta vez con una patada al encapuchado pero este simplemente lo mando a volar casi sin esforzarse.

-"Llevo un rato intentando acertar un golpe... Pero este tipo bloquea o esquiva todo lo que intento... Qué tan fuerte es en realidad?"- Se preguntó el pelinegro quien no notó como un humo peculiar lo empezaba a rodear.

Por su parte el encapuchado luego de mandar a volar a Oliver, dirigió su mirada hacia dónde el ataque previo del chico había impactado, miró con mucho interés como el cráter que en un principio era pequeño, ahora era un poco más grande.

-"Golpe de doble efecto"- Pensó el encapuchado.

-No te distraigas!!- Gritó Oliver intentando sorprender a su oponente.

Sin embargo, éste solo lo vió con aburrimiento, para luego tomar su brazo y estamparlo contra la arena fuertemente. Un poco adolorido Oliver intentó recomponerse, pero un repentino peso en su espalda se lo impidió, siendo este peso el propio encapuchado que se había sentado sobre la espalda del Davies para evitar que se levantará.

-Oye!!... Quítate de encima!!- Se quejó Oliver.

El pelinegro estuvo apunto de volver a quejarse cuando de repente, un coscorrón se encontró con su cabeza causándole un poco de dolor al chico.

-Ouch!!- Exclamó Oliver con dolor.

-Golpe de doble efecto... Servicial, sobre todo si quieres sorprender a tu oponente pero... También indica un pésimo control sobre tus poderes eléctricos- El encapuchado comentó mientras de la nada sacaba una bolsa de malvaviscos.

-Qué?- El chico soltó sorprendido.

-Un pésimo control y una notable reducción del poder a la hora de acertar un golpe... Sí, esas serían las principales desventajas- Murmuró el encapuchado en un tono aburrido, para luego llevar un malvavisco a su boca.

-De qué hablas?- Tomando interés en lo que el encapuchado decía el pelinegro preguntó.

Tras la pregunta el encapuchado se levantó dejando que Oliver pudiera pararse, tras unos cuantos segundos ambos estaban de pie enfrente el uno del otro.

-Usas tu poder de manera ineficiente...  De eso es lo que habló- Explicó el encapuchado.

Oliver lo vió sin entender, cosa que hizo suspirar de manera cansada al encapuchado.

-Cuando utilizas tu control sobre la electricidad en tu cuerpo, la envías al lugar en especifico que deseas emplear cierto?- Indagó seriamente.

-Claro... Por qué lo preguntas?- Oliver preguntó.

-He ahí el problema... Tus ataques serían más eficientes si dejaras que todo tu poder corriera por tu cuerpo de manera constante y luego lo diriges al lugar que usarás para atacar en el último instante, esto provocaría que a la hora de impactar un golpe este sea mucho más potente que cuando diriges la energía al lugar de uso de manera abrupta- Respondió la pregunta del chico.

-Creo entender lo que dices... Es como una batería, la energía recorrería mi cuerpo cargándose hasta que la dirija a dónde quiero usarla y como la he estado acumulando, saldría con mucho más poder que antes... Asombroso, un golpe mucho más potente...- Murmuró Oliver con una sonrisa emocionada.

-...Es una analogía extraña... Pero sí, basicamente sería eso- Llevándose otro malvavisco a la boca el encapuchado confirmó.

-Podría vencer a Nimrod con eso?- El chico indagó.

-Tal vez...- Respondió el encapuchado alzando los hombros.

-Bueno nunca he usado mis poderes de ese modo... Pero aquí vamos!!- Mencionó el chico antes de ponerse en posición.

-No espera!!... Es una mala idea...- Trató de advertir el encapuchado, pero fue muy tarde.

Oliver dió rienda suelta a sus poderes dejando que estos recorrieran todo su cuerpo de manera rápida, inmediatamente sintió como su cuerpo se tensaba provocándole un poco de dolor, apretó los dientes pensando que esto sería suficiente para poder aguantar lo que sentía, sin embargo, el dolor aumentó rápidamente haciéndose prácticamente insoportable para el pelinegro, quién al no poder seguir por más tiempo corto sus poderes para luego caer de rodillas contra el suelo mientras jadeaba y sudaba a mares.

-P-P-Por... Q-Q-Qué?- Preguntó a duras penas el chico.

-Intente advertirte... Tú cuerpo no está acostumbrado a que uses tu poder de tal manera- Respondió el encapuchado mientras le lanzaba una botella de agua a Oliver.

Otra vez... De dónde sacaba estas cosas?

-Entonces... Como puedo usar este golpe más potente para vencer a Nimrod sí no puedo soportar la carga?- Después de tomar agua de la botella Oliver cuestionó mirando al encapuchado.

-Eso es algo que tienes que descubrir tú mismo... Y rápido- Respondió el encapuchado chasqueando los dedos y que luego apareciera una roca donde posteriormente se sentó.

-Por qué lo dices?- Confundido por la última frase Oliver no pudo evitar preguntar.

En respuesta, el encapuchado solo se limitó alzar su dedo índice en dirección al propio Oliver, el cual sólo lo miró sin entender.

-Simple... Estas curando- El encapuchado mencionó.

Esto hizo que Oliver centrará su atención en su propio cuerpo, al hacerlo el pelinegro se percató de un peculiar humo escarlata que rodeaba su cuerpo lentamente.

-"Wanda?"- Pensó sorprendido el muchacho.

-Te queda poco tiempo... Recomiendo que los uses para practicar ese golpe que quieres dominar...- El encapuchado mencionó.

Esto sacó de manera casi inmediata a Oliver de sus pensamientos, para luego colocarse y centrarse en dominar ese golpe más potente al que quería llegar, tenía poco tiempo lo que significaba una sola cosa.

Su regreso al campo de batalla, estaba cerca.

Fin del Capítulo

Buenass como están? Yo espero que bien.

Aquí un nuevo capítulo que nos acerca al final de este arco, si les gusto dejen su voto, su comentario y díganme que les pareció?.

Sin nada más que decir, hasta el siguiente capítulo, cuídense!!!