Jericho ya habia comenzado con su traje. No es como si necesitara mucho tiempo para hacerlo. 
Era viernes por la noche y Jericho se encontraba en la taberna, no le agradaba la idea de dejar  a Zeal sólo en casa, aunque el dijo que estaría bien. 
Estaba sentada entre Ban y King 
Durante toda la noche tuvo varios roces con Ban. Lo cual no habia pasado desapercibido para nadie 

-¿Y ya buscaron a alguien para dejar la soltería atrás? - les pregunto el capitán 

-No moleste capitán. - Dijeron ambos a la vez y después suspiraron y se recargaron en la silla.

-Ustedes dos pasan tanto tiempo juntos que ya hasta hay sincronía en ustedes - Les dijo Guila. 

-No pasamos tanto - ambos replicaron y callaron a la par -Tiempo- jericho rodó los ojos 

-¡Quieres continuar!- A las chicas les pareció lindo y gracioso lo que pidió Jericho. 

-Y qué hacen en esos tiempos juntos-. Preguntó el capitán

-Nada de interés-. Dijo Ban

-Yo creo que es hora de irme-. Anunció Jericho.

-Pero sí es temprano 

-Es demasiado temprano, capitán es la una treinta am. Si es temprano-. Jericho no se hayaba del mejor humor esa noche.  Pero, no era su culpa. El hospital había aumentado sus días y ahora iba dos días más. Miroku no estaba muy contento con eso. Y ella tampoco, descansaba menos.

-Que rápido pasa el tiempo-. Dijo el capitán en tono soñador

-Nos vemos después. 

-¿Porqué no la acompañas Ban?- Le preguntó Margaret
 
-Puede irse sola. -Guil descubrió el pasatiempo de su novia por dejar a Ban y Jericho a solas. Lo cual le pareció totalmente extraño.

-Entonces... no te molestará ver cómo todos estamos aquí con nuestra pareja- acto seguido beso a Guill. Que tramaba Margaret se pregunto Guill

Ban se levanto sin decir nada y salio de la taberna.
Alcanzo a Jericho unas cuadras después. 

-¡Estas aquí!-. Jericho no pudo evitar emocionarse. 

-Súbete. -Jericho solo asintió. 

-¿Porqué has venido?- pregunto mientras abría la puerta 

-Tu amiga Margaret. Es muy rara 

-Se lo agradezco. Mañana es mi día libre y podemos hacer algo interesante esta noche-. Le sonrió coqueta. El descanso es para débiles. 

-Me agrada esa idea.

 
-Ban...-. Le llamo mientras se removía en la cama. 

-Crees qué sospechan algo 

-No lo sé .

Jericho se acomodó en el pecho de Ban. Tenía un nuevo lugar favorito. Y era ese. Escuchar su corazón era lo mejor de dormir a su lado. 
Ban se sintió extraño. En sus últimos encuentros ella siempre estaba así. Se acomodaba sobre su pecho y dormía 
¿Estaría muy cómodo?

Por la mañana Jericho intento levantarse. Pero no le fue posible. En cuanto se intentó levantar fue jalada y regresada a la cama.

-Qué haces .

-Quiero que me ayudes con algo-. Le sonrió Ban.

-¿Tu problema matutino?
Tenemos 15 minutos antes que despierte Zeal 

-Lo dices sin ningún pudor

-Es parte de la anatomía humana. No le veo algún problema.

-Sucia..- Le bromeó Ban.

-Es una lastima... Yo iba a ayudarte -  dijo Jericho con fingida decepción, siguiéndole la broma.

-Tonta-. Jericho se acercó a  besarlo. Le encantaban los días en que sólo estaban ellos.

(.....)

El tan esperado día de Halloween llego. No supo como había pasado el tiempo tan pronto. Y mucho menos, como pudo ponerse ese traje. El cual iba cubierto por un sacó. 

Simon estaba frente a la puerta con cara de pocos amigos.
 
-¿Y tu disfraz?-. Le pregunto incomodo.

-Por ahí-. Respondió de la misma forma. 

-¡Jericho!'. Simon no quería ser el único avergonzado.

-Esta cubierto por el sacó. Es demasiado vergonzoso
 
-Lo sé-. Confirmo Simon. 
 
-¿Entonces por qué lo usamos?

-No tengo la más mínima idea 
Una chica salió del auto en el que llego Simon, era la novia de Simón. Jillian

-Al menos a tu novia le luce increíble el atuendo

-Nos tomamos la foto-. Ordenó Jillian

-Ah, sí. - Jericho los dejo pasar. Y ya dentro Guila les tomo una foto. Primero a los dos y después con la novia de Simón. 

-Qué vas a hacer-. Le preguntó Simon

-Voy a quedarme en casa, ya que Zeal fue con sus amigos-. Simon se despidió, era una pena que no tuvieran mucho tiempo para ellos.  Jericho se puso el abrigo para no sentirse tan desprotegida.  Tal vez debería ir a cambiarse.

Guila tomo sus llaves y después arrastro a Jericho por toda la acera. Hasta llegar a la fiesta de las lionés
 
-¿Y tu disfraz?- Le pregunto King
 
-Es este. 

-Ajá, así qué eres detective-. Le preguntó Meliodas

-Mentirosa - Le dijo Diane 
Y entre Diane, Merlín y Guila le quitaron el abrigo. 

-Me siento ultrajada. - Margaret sonrió divertida al ver a Ban quien no le quitaba la vista de encima a Jericho. 

-Yo digo que se te ve muy bien-. Le sonrió Margaret. 

-Y yo digo que me devuelvan el sacó- Unos tipos pasaron dando piropos a Jericho. Lo que   incomodo a Jericho, molesto a Ban y divierto a Margaret.
 
-Ya Jericho. Velo por este lado. Esta noche puedes salir con novio-. Le intentó animar Merlín, mientras que  Margaret no pudo contener una risita al ver cómo se ponía Ban. 

-¿Paso algo?- Le pregunto Gill.
 
-Nada, amor. 

-Enserio. Puedes devolverme mi saco-. Le exigió a Merlín

-No. - se levantaron hasta dejarle espacio junto a Ban

Estuvieron hablando de trivialidades toda la noche, mientras Jericho se congelaba.

'Ashu' estornudo  Jericho. 
Pero Merlín ya le habia dicho que no le devolveria su saco. 
Así que se resignó a morirse de frío. Cuando algo callo en su cabeza. Era la sudadera de Ban

-Si te enfermas molestarás más de lo usual-. Jericho no contesto. Porque en verdad se estaba congelando. Se lo puso rápidamente y se auto abrazo para calentarse más rápido.

-¿Traes tu moto?-. Le preguntó. La verdad era que Jericho quería refugiarse en los brazos de Ban, pero se conformaba con irse.

-Porqué
 
-¿Si o no?

-Si la traje.
 
-¡que bien! porque no quiero caminar. 

-¿Crees que te voy a llevar?-. Jericho lo reto con la mirada ante tales palabras. 

-Siempre puedo llamar a Matt

-Has lo que quieras-. Ban se cruzó de brazos e intentó darle la espalda. 

-Présteme tu teléfono-. Le pidió

-¿para qué?.
 
-Para llamar a Matt 

-Tu tienes el tuyo.
 
-Pero no lo traje 

-Entonces resuelvelo-. Ban bufo, Jericho lo hacía enojar muy fácilmente.

-Un volado. Si cae águila me llevas a casa. Y puedes quedarte. Si no. Le hablo a Matt. 

-Ustedes dos que discuten-. les pregunto Diane. Dirigiendo la atención  de todos a ellos. 

-Intentaba convencer a Ban para que me llevara a casa. 

-¡Tan temprano!-. Le replicaron todos. 

-Si, debo ir a la universidad

-Guila y Elizabeth también, y mírala-. Le dijo Merlín 

-Pero Guila y Eli entran tarde.
 
-Siendo así... Ban llevala, Es una orden de tu capitán.
 
-Tss. Vámonos 

-Me puedes devolver mi saco-. Le pidió a Merlín. 

-Si. Supongo que ya puedo 
Jericho le regreso su sudadera a Ban 
En verdad necesitaba su saco.
 
-Sabes que si me pedías que te trajera. Lo hubiese hecho 

-Ellos ya creen que pasamos mucho tiempo juntos-. Se defendió

-¿Y no es verdad?

-Esta semana solo ha sido una noche. 

-¿Y quieres mas noches?

-No estaria mal.

(......)

-Ashu-. Jericho  llevaba dos semanas conque se enfermaban o no. Y estaba cansada,  
Matt la llevaba cargando en su espalda. Se habia torcido el tobillo cuando callo en las escaleras. El piso estaba mojado y termino resbalando, ya no se le hacía muy extraño, pues las ultimas semanas le habían pasado muchas cosas. 
Matt la  llevo a casa y la dejo en el sofá.

Zeal ya estaba en casa y se dedicó a cuidarle. Pero aun debía ir a trabajar. El dolor ya habia pasado, Pero aun estaba algo inflamado. Era viernes, y el día siguiente era libre. Pudo ocultar su maleatar durante todo su turno. No habia sido tan grave. Aunque no se fue ni volvió caminando.  Miroku se dio cuenta de que cojeaba un poco y le dejo ir antes. Miroku era el mejor jefe.
 
Ban entro cuando aplicaba pomada en su pié. El dolor empezaba a regresar. 

-¿Que te pasó?

-Cai en las escaleras 

-¿Aquí?,

-No. En la escuela. 

-¿Te duele mucho?

-Ya no 

-Te dejaré descansar-. Ban caminó a la ventana y Jericho se apresuró a detenerlo.

-No estoy cansada. 

-¿Entonces no lo necesitas?

-Si te preocupa mi salud solo podemos dormir.

-¿y crees qué te dejaría hacerlo?
 
-No. Pero si no apoyo mi pie no hay problema 

-Entonces. Podemos hacer muchas cosas-. Concluyó Ban

-Las que quieras 

Jericho se sentía fatal. Y nuevamente era llevada por Matt a la enfermería 
Alguien empujó a Matt y ambos terminaron en el piso.
Y ahí Jericho comprobó que si estaba enferma. Cuando no pudo ponerse de pie. Había tomado las medidas necesarias para no enfermarse, pero no importó lo que hizo.

-La encontramos. Jericho habia vuelto a perder sus cosas-. Cómo lo había hecho los últimos días. 

-Está pegajosa-. Se quejó

-Estaba en el basurero . Le dijo Matthew tímidamente.  

-Saben, siento que eh vuelto al instituto -Matthew rió. -Estoy cansada de las bromas pesadas.

-Siento que es mi culpa-. Le sonrió Matt apenado

-¿Sólo lo sientes?-. Jericho sabia que  no culpa de Matt. Al menos no completamente, pues el no había pedido que le hicieran esas cosas 

-Hay que llevarla a la enfermería. No se ve muy bien-. Dijo Matthew

Matthew reviso la mochila de Jericho y había una hoja con una frase escrita con tinta roja. 
Debiste alejarte de Matt 

Llevaba semanas recibiendo esos mensajes acompañados de bromas pesadas. Como cuando le arrojaron huevo, una soda. También cerveza. La peor habia sido las bolitas de papel con saliva y el aceito de revalo que iba en un globo, tardo mucho en quitarse el olor. Incluso Ban se habia burlado de ella. Pero a ella en definitiva, no le parecía gracioso. Ya estaba cansada de las bromas y ya sabia quien era. Habia hablado con ella y lo único qué consiguió fue que las bromas empeoraran. 

Matt volvió a cargarla para llevarla a la enfermería. Jericho cada vez se veía peor. 

Pero volvieron a empujarlos. Matt logro mantener el equilibrio. Jericho abrió los ojos, ya que los había cerrado en la espera del golpe, el cual no llegó 

Tenía enfrente a Britney. Ya estaba cansado de esa chica. Eran de diferentes facultades. Pero no habia dejado de acosarla.

-Britney. Quítate, debo irme-. Le hablo Matt con mucho cansancio, pero era que Britney ya lo había cansado. ¡Estaba loca!

-O no cariño. Tengo asuntos que atender con tu amiguita.
 
-No ahora. Esta enferma

-Solo voy a ahorrarle una doble vuelta a la enfermería- Unos tipos agarraron a Matt, Matthew y Henry y dejaron a Jericho.  
Eran los estúpidos enamorados de Britney. Britney era una figura en la escuela, sólo porque sus padres donaban generosas cantidades de dinero a la escuela.

La chica se acerco a Jericho y tomo su cabello. 
Y Jericho rió- Eres una cobarde, porque no me enfrentas cuando estoy bien.

-¡Yo no soy una cobarde!- Le dio un tirón al cabello de Jericho y acto seguido Jericho se libero. Britney le lanzo un puñetazo que Jericho cogió en el aire.
 
-No estaré muy bien. Pero no sera fácil 

-¿A no? -Jericho se puso de pié y la chica volvió a lanzarle un golpe. 

-¡Esto es estúpido!-. Grito Jericho, ella debería estar en la enfermería no jugando con una niña boba

-¿Porque no me golpeas?

-Porque no vales la pena.

-¡Maldita zorra!. ¡Defiendete!
 
-Cuida tus palabras-. Le advirtió Jericho 

-No quieres que todos se enteren que te cojes con aquéllos tres. ¡Eres una zorra!-. Jericho estaba perdiendo la paciencia y luchaba contra el deseos de arrancarle la cabeza. 

-¿No te mordiste?-. Le preguntó con burla.

-¿Dices que somos iguales?-. Preguntó la chica enfadada.

-Hay por favor... Porqué diría eso, yo podré ser una zorra. Pero tu. A lo mucho una rata o aun más acertado un parasito. 

-Qué me dijiste.
 
-Lo que escuchaste. 
Jericho le dio la espalda. No iba perder su tiempo y poca energía peleando con ella.
 
-¡Vuelve con los maricas de tus amigos!-. Jericho la miro furiosa. Esa estúpida no podía insultar a sus amigos.

-Escuchame bien. A mi podrás decirme lo que quieras y hacerme todas las estupideces que se te ocurran. Pero con mis amigos no te metas. 

Jericho volvió a darle la espalda y sólo sintió un golpe en su pierna baja y luego el piso. Esa estúpida la habia pateado.

-¡Maldita zorra! ¡Como tu madre!
-. Jericho estampo su puño en la nariz de Britney. Si algo nunca permitiría es que hablaran de esa forma de su madre, y más aquella estúpida que no sabía nada de ella.  Escucho un grito y Britney lloraba. 

Unas chicas la tomaron de las manos y la pusieron de rodillas. Las reconocía, porque ellas habían llevado a cabo todas las bromas pesadas.
Acto seguido Britney le dio un puñetazo entre el cachete y la nariz, el cual no hubiera dolido si no trajera anillos. 

-¿Eso es todo?- Jericho trato de zafarse pero las tipas forzaron su agarre. Haciéndole daño en los brazos. Y en esos momentos no contaba con mucha fuerza.

Britney  la pateó un par de veces en las costillas. 
Sus amigos forsejearon con los tipos que los agarraban. Era una "pelea" evidentemente injusta.  
Jericho logro zafarse y se abalanzo contra Britney. 

-¡Voy a mostrarte lo que es golpear!

Jericho le dio una patada en el estómago. Le saco el aire, pero la chica era más fuerte de lo que cualquiera pudiese imaginar. Britney se volvió a abalanzar y en un momento terminaron en la fuente de la escuela. 

Jericho pudo hacer tantas cosas, pudo ahogarla. Golpeara más. Incluso ahorcarla, Pero una parte de ella le grito que no volviera a perder el control, no otra vez. No frente a sus amigos. 

Alguien las separo. Era un profesor. Y estaban rodeados de personas. Al parecer ya era cambio de hora y habían escuchado la pelea. Jericho era cubierta por algo. Cuando logró recuperar un poco la orientación vio a Guila, Elizabeth y sus tres amigos a su alrededor. Era cubierta por el suéter de Matt.
Fueron llevadas a la dirección donde Britney se hizo la victima, que podía esperar de ella. 

-Director, necesitan atención medica-. Le dijo Matt, tan respetuoso como le fue posible.  Mientras sostenía a Jericho, quien perdía la fuerza, a cada instante. 

-No irán a ningún lado hasta resolver este asunto. 
El director les sermoneo
-Señorita Britney. Ya no espero tanto de usted. Pero esperaba usara la cabeza, al menos una vez.  No se como se lo explicará a sus padres. 

Y usted señorita Jericho, de usted si  esperaba mas. De las mejores en su clase, con grandes referencias de los docentes, y de su familia. Incluso el hospital nos ha dado excelentes noticias de usted. Es una decepción. Lo que hicieron a merita su expulsión. Pero no lo haré, se irán suspendidas dos semanas-. Ahí estaba su sentencia, al menos parte de ella -y señorita Jericho.  Perderá la beca otorgada por la escuela-. Jericho no pudo replicar, ni terminar de escuchar, porque ya no pudo sostenerse ni mantenerse consciente. 

Matt la llevo a toda prisa a la enfermería acompañado de Guila, Eli, Matthew y Henry. 
Estuvo cerca de una hora hasta que la Dra. Les dijo que podían llevarsela. 

Todos sus amigos terminaron en casa de Guila. E incluso Gustaf,
Ban habia entrado directo a su habitacion.
Estaba peor que cuando peleó con Deriere. Empezó a examinarla.
Un golpe en la cabeza. Varias cortadas en sus mejilla y estaban algo hinchadas. El labio partido.
Levanto su blusa. Ya habia visto el video. De la paliza que le dieron. Estaba por todos lados.  Tenía varios moretones. Pero gracias a quien fuese que tenia que agradecer no tenía ningún hueso roto.
Ban delineo el moretón. Era demasiado grande.
Golpeo con frustración la pared. Cómo era que sucedió eso 

-Tranquilo Ban. Esta bien.- le dijo Margaret. Quien iba entrando a la habitación. Margaret estaba segura de que Ban debería estar afectado con todo eso. No importaba que tipo de relación tuvieran, sabía que Jericho le importaba mucho.

-Te parece que está bien. ¡Lleva horas inconsciente!

-Y seguirá inconsciente. Lo mejor para ella es dormir. 

Ningúna de las chicas quería irse. Pero sabían que nada podían hacer. 
Al igual que los amigos de Jericho. Guila prometió mantenerlos informado. Y que cuidaría de ella. Aunque Ban se negó a irse al igual que Gustaf y ambos estaban en la habitacion de Jericho sin preocuparse de la parecencia del otro.

Decidieron llevarla al hospital cuando la fiebre aumento y Jericho no reaccionaba. Asi que un día después el hospital tenia sala llena. Ya qué incluso Elena, Lena y Hendrixon estaban en el hospital. Buscando noticias de Jericho. Tal parecía que Jericho era muy famosa en el hospital.

Jericho despertó tres días después. 

Gustaf fue el primer en entrar a verle. Seguido de las chicas, los chicos incluido Ban. 
Quien volvió horas después. Jericho los lleno de disculpas por preocuparlos. Sentía que era lo menos que podía hacer. Aunque siempre odio disculparse.

Matthew y Henry le explicaron la decisión del director. A Jericho no le preocupaban las semanas de suspensión, pero si le afecto saber lo de su beca. Habia trabajado tanto para obtenerla. No quería admitirlo, pero odiaba a Britney...
Fue dada de alta el día siguiente. Miroku le dio mas días libres. 
Ya casi no había moratones. Pero aun se notaban. 
Ban entro en el momento justo en que se aplicaba una pomada. Y le ayudo a aplicarla en su espalda baja
Ban la abrazo y Jericho se dejó un tiempo. 

-Ban 

-Cállate. - Jericho hundió su cara en el pecho de Ban estaba apunto De pasar lo de hace casi 2 años. Iba a llorar en el pecho de Ban 
Y solo pensó en una cosa que la distrajera.
Así que lo besó con fuerza, con deseo. Pero Ban la detuvo. 

-Puedo lastimarte. 

-No lo harás- Fue todo lo que Ban necesito, se habían extrañado esos días y sus manos exploraron cada parte de ellos.
 
-Siento haberte hecho esperar varios días 

-Deja de disculparte. 

Jericho se durmió nuevamente sobre el pecho de Ban. Y Ban la abrazo con fuerza. Se habia preocupado tanto por ella. 
Estaba tan molesto con ella, con él. Con todos porque no pudo protegerla 
Ella esta bien. Le repitió su mente. 
¿Pero qué tal si no?. Si le hubiese pasado otra cosa. Por qué preocuparse tanto por ella. Fácil, era su amante pero antes de ello, era su amiga. Y si era Su, porque era suya y el debio protegerla. Era suya, porque el la hizo mujer, era su porque ella solo pensaba en él, y era el único que escuchaba su nombre salir de sus labios mientras la hacia suya una y otra vez. Era suya porque sólo el conocía cada parte de su cuerpo, solo el la besaba, solo el la tocaba. Y nadie tocaría algo que era suyo. Porque el era Ban. El zorro de la avaricia. Y lo suyo era intocable.