Capitulo 22. Calma.
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Estuvo esperando el momento adecuado para ir a hablar con Shouto, no se sentía cómodo con ese tipo de vestimenta para un baile real, pero por más que lo buscaba este tenía demasiado trabajo últimamente y termino antes dormido que poder encontrarse.

Despertó en medio de la noche, un poco adolorido por la mala postura y lo primero que pensó es que finalmente era un momento oportuno, Shinsou dormía profundamente en su "lugar" que consistía en un pequeño tapete cerca del librero, el insistió en que como aventurero estaba más acostumbrado en dormir así ¿Cómo? A él le dolía todo y dormía en una gran cama ¿Cómo es que Shinsou dormía como una roca allí?

Otro que parecía acostumbrado a dormir donde sea era Kiri, dormido en la silla junto a la puerta "montando guardia" sujetando fuertemente la lanza que le habían dado con el uniforme.

Se había tropezado con uno de sus cascabeles que quien sabe de dónde se cayó y ni así reaccionaron los dos, salió sin que le vieran y al estar los pasillos solos solo se escuchaban sus pasos.

Shouto no estaba en la oficina, dudo un poco pero fue a su habitación, aunque tenían tanto tiempo trabajando juntos jamás había ido debido a la alta seguridad, pero ahora con la guerra los pasillos principales estaban abandonados, pues los soldados dormían en el ala de entrenamiento.

Sabía cuál era el cuarto, el rey era alguien más de comodidad que extravagancia así que su habitación por fuera se veía igual a todas las demás habitaciones del pasillo, solo que sus sirvientes se habían encargado de colocarle piedras preciosas en el marco para distinguirlo.

Tocó suavemente, no hubo respuesta, entro en silencio y primero se tuvo que acostumbrar a la falta de luz. El cuarto real estaba cubierto de cortinas rojas en todas las paredes y ventanas, impidiendo cualquier entrada de luz, todo el piso estaba alfombrado. Pese a lo ostentoso que se veía eso se sorprendió un poco por la poca cantidad de muebles que tenía.

Un solo ropero, un pequeño buró en la esquina junta a la cama, un espejo de gran tamaño en una de las paredes, y la cama, una cama simple pero enorme donde las sábanas blancas escurrían a montones.

— ¿Su majestad? —

Se acercó poco a poco esperando no molestarlo, hasta que algo crujió bajo sus pies, al darse el tiempo de mirar encontró hojas, y no era una, muchísimas hojas esparcidas por todo el piso, quizás era por la falta de luz pero solo podía deducir que eran mapas, reconocía algunos de los territorios, pero también había mapas humanos, los levantó con cuidado hasta poder finalmente quedar junto a la cama.

Allí estaba, dormido, con los largos cabellos rojos esparcidos por las mullidas almohadas y marcas bajo los ojos por falta de sueño.

— ¿Terminaste de husmear, Denki?

Casi le da algo, aunque debía predecir que ya sabía que estaba allí, el rey era demasiado intuitivo para su bien.

— Venia a hablar contigo, pero no quería despertarte Shouto — 

El rey le indico que se acercara, dejándole tomar asiento en la cama mientras se levantaba con algo de pesadez. Denki noto que su majestad se tapo el rostro con frustración, se tallo los ojos un par de veces como los niños y finalmente su par de ojos rojos lo vieron. Pese a que era el gran Rey Demonio, el rubio lo sintió como un igual en ese momento al verle tan fatigado y con los cabellos revueltos, podía jurar que maldecía en sus adentros de lo cansado que estaba.

— No creí que su majestad fuera tan desordenado — Empezó la charla riendo suavemente mientras señalaba todo el desastre de papeles, Shouto se rió un poco aceptando que no estaba en sus mejores condiciones.

— Eso es algo que a ti no te interesa — Suspiro profundo dejándose caer de nuevo en la cama mirando el techo, necesitaba dormir un poco más.— Ahora dime la razón de tu repentina visita —

— Sobre el traje...

— Denegado, te ordene algo en específico ¿Quieres irritarme? — Cambiado de humor Shouto se levantó sobando con sus dedos parte de su frente molesto — Creo que te estoy consintiendo demasiado— Ahora ya no tenía sueño... Maldición.

Sintió que había arruinado todo al mencionarlo, quizás Kiri tenía razón y no debía preguntar, Shouto se levantó con brusquedad empezando a acomodarse la ropa y atandose el cabello en su coleta, las cadenas resonaron al arrastrarlas para ponerlas.

Y el solo se sintió pequeño, esperando que el rey dijera algo para no morir pensando que había hecho algo mal, pero no lo hizo, paso sobre los mapas en el piso y salió de la habitación dejándolo solo en aquella oscuridad.

Recogiendo el poco ánimo que le quedó, se bajó de la cama y cuidando de no pisar nada se dirigió a la salida.

— Denki ya está... — Al salir choco contra su rey, que venía de regreso y se mostró extrañado porque estuviera allí — ... En fin, ya está terminado el salón de baile real, ya que mi pequeño canario no puede dormir ¿Quieres ir a verlo?

El elfo se sintió animado de nuevo asintiendo efusivamente, dejando encerrada en aquella habitación aquella sensación tan incómoda, nuevamente se la paso jugueteando alrededor de su rey mientras se dirigían al edificio donde se llevaría a cabo el baile.

Allí si se encontraban varias personas, unas desde paseando hasta otras aún trabajando o entrando en turno. La gran puerta del salón era intimidante y el sonido que causó al abrirse quizás podría despertar a todo el castillo, al entrar todo era... Perfecto.

Quizás era porque era un baile demoníaco, pero la mayoría de todos eran oscuros, desde el cereza de las cortinas, hasta el verde enebro de las alfombras en las orillas del salón, el piso era un espejo perfecto, el cual absorbía el color negro del techo con simulaciones de estrellas.

— ¿Y? ¿Que te parece el salón de tu primer baile real?

— Esto... Es diferente a como lo pensaba — Recordaba vagamente que en su mundo original todo era brillante, en colores oro y blanco, tan elegante y digno que el salón místico y mágico que estaba frente a él no era su ideal, pero no se iba a quedar, debía ser la diferencia de culturas.

Al estar solos, los pasos del soldado que entró fueron bastante claros, Shouto algo molesto respondió a su llamado revisando los papeles y su humor solo empeoró.

— Den, tengo que ir, disfruta el salón y vete a dormir —

Así, el elfo se quedó solo de nuevo, sentándose en medio del salón disfrutando de la vista y sonriendo ante la idea de cuánto estaba aprendiendo.

Shouto fue a discutir con algunos soldados, volviendo bastante tarde a su dormitorio, incómodo por todo lo que había sucedido en esos días se desvistió para dormir como debía y finalmente se enredo en las sábanas cerrando forzadamente los ojos. Rendido al no poder volver a dormir se quedó mirando el techo de nuevo.

El único adorno importante de aquella habitación estaba allí, tan a simple vista pero nadie lo notaba, aquel mapa era su mayor aspiración. Alzo la mano como si tratara de alcanzarlo y solo sonrió, algún día...

— ¡Su majestad! — Uno de sus nuevos asistentes entro al cuarto de golpe, pero apenas paso el umbral de la puerta un fuego abrazador lo rodeo, se tiró al piso agonizando y Shouto tuvo que levantarse a socorrerlo, con solo un chasquido de dedos el fuego se apago, y con otro poco de magia alivio sus quemaduras.

— Antes de atreverse a entrar en mi habitación, deberían saber que siempre está activa mi magia para matar a todo el que trate de entrar, nadie se mueve en este castillo sin mi permiso, todo lo que pasa y sucede en mi casa yo lose así que recuérdalo para la próxima vez — Le molestaba bastante que los secretarios y ayudantes nuevos que le mandaron los duques y condes del reino como su apoyo para la guerra fueran tan poco razonables.

Era obvio que cualquiera que se atreviera a entrar en su espacio moriría en el acto.

***

Ahora algunas notas!

Este es el mapa que tiene Shouto en el techo, es importante pero no necesitan recordarlo ya que lo actualizaré seguido.

Ojo que la información cambiará así que eso sí léanlo bien, puede que hasta predigan futuras cosas que ocurrirán.

Punto 2. Si, mis reinos tienen nombres de cactus porque no tenia más imaginación jijiji

Haworthia es un tipo de "familia" de captus, de entre ellas, Retusa y Cooperi son dos especies.

Retusa es la capital humana, mientras que cooperi es "Ciudad capital" osea, capital del reino de los demonios, porque si, haworthia es un solo territorio que an disputado ambos reinos.

El país vecino, que no será muy relevante pero les recomiendo recordarlo, es otra familia de cactus "Rhipsalis" que solo tiene dos tipos, uno de ellos es Pilocarpa, de allí la capital "Pilo"

Fin de los datos curiosos.