2
Parte 2. Renacimiento.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Leves murmuros fue lo que le obligo a abrir sus ojos, parpadeo rápidamente y el miedo se adentro en cada uno de sus huesos.
No veía nada.
Trato de moverse y de igual forma, no había respuesta, se estaba desesperando, estaba consiente sin poder hacer nada mas o saber donde estaba ¿Que había pasado? Lo último que recordaba era haber comido aquel pastel y regresar con sus amigos.
— Moriste —
Ah, eso tenia sentido ahora entendía porque no podía hacer nada... Espera ¿Qué?
— Salvaste a tu amigo comiendo el pastel, moriste, pero relajate, Dios te a bendecido, tu acto bondadoso te a dado la oportunidad de seguir con tu vida —
Entre el terror y el proceso de asimilar su propia muerte poco le prestaba atención a la voz que le hablaba, nuevamente trató de abrir sus ojos.
Todo lo que veía eran luces tintineantes en el fondo negro, de forma interminable mientras la voz infantil que le hablaba se reía.
— ¿Continuar con mi vida? — No estaba seguro de aceptar, es decir, no había salvado al idiota de Ikki, solo había comido aquello por pena, aunque en el fondo le aliviaba que su amigo no fuera el muerto..
— Renacerás, en un mundo donde no volverás a estar aburrido, con tu misma edad, podrás continuar donde te quedaste en un mundo problemático. —
— ¡Acepto! Envíame, acepto renacer —
Denki sintió emoción, verdadera emoción al escuchar esas palabras ¡Era como en los mangas! Seria enviado a un mundo diferente donde podría cumplir sus sueños, donde verdaderamente le emocionara vivir.
— Espera ¿Dijiste problemático? —
— Suerte, trata de no morir pronto —
Y antes de que pudiera seguir preguntado, sintió su cuerpo, o lo que podía ser su cuerpo, ser absorbido por aquellas luces tintineantes y cerro los ojos, sintió montones de pellisquitos en su piel y como si "algo" que faltaba le fuera devuelto.
Volvió a abrir sus ojos cuando su olfato capto el fresco aroma de la naturaleza, y sus ojos lo corroboraron; todo lo que veía eran las copas de muchos árboles, sentía el pasto debajo suyo y miraba el cielo claro.
Con un poco de incomodidad se sentó, observando todo con cuidado, hasta la mas pequeña mariposa que pasaba, cuando se miro a si mismo, pudo notar que vestía una ligera túnica blanca, sus pies eran cubiertos por un par de sandalias y sentía su cabello un poco mas largo de lo que lo traía, el encanto aumento cuando sintió lo mas desconocido de su cuerpo, sus orejas.
Quiso llorar se alergia al sentirlas largas, porque eso solo significaba una cosa ¡Había renacido en un mundo mágico como en sus sueños! Era un elfo ¡Un ser místico!
— ¿Quien eres tu? —
Su felicidad por su nuevo cuerpo no duro mucho, la voz grotesca provenía de un orco ...
Y no tenia buenos recuerdos de los orcos.
Tembló, aterrado, recordó las palabras de "Dios" antes de que fuera enviado y paso saliva. De que iba a sobrevivir, iba a sobrevivir.
No dio mas tiempo para pensar cuando hecho a correr como pudo tratando de alejarse del monstruo ¡Necesitaba hallar una aldea humana! Posiblemente allí podría recibir un trato mejor que con los orcos.
Pero su mala suerte fue grande cuando sin poder detenerse término estrellándose contra una carroza. Cayó al suelo inconsciente y el orco le alcanzó.
— ¿Que fue eso? — Preguntó el hombre lagarto que bajo de la carroza alarmado y con cuchillo en mano.
— Un loco ¿Que más? Ni hablar me dejo — El Orco, molesto por la descortesía pateo levemente al elfo para ver si seguía vivo.
— Se hace tarde, sube lo, quizás en la capital sepan de donde es, y si no, en el palacio del Rey aceptan sirvientes de todas las especies podemos ganar algo — Sin mucho interés, lo que parecía ser un hada observo al muchacho, dando el visto bueno dejo que el orco lo subiera a la carroza no sin antes amarrarlo bien.
Los locos eran problemáticos en los viajes.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top