Introducción.

Nota:Esta historia está narrada en pasado, luego verán porqué.

Tomé aire y cerré la maleta que llevaría conmigo hacia mi nueva aventura, un internado.

Bajé las escaleras de mi casa y me dirigí a la cocina para despedirme de mi adorada madrastra, nótese el sarcasmo,  y desayunar.

Al terminar, decidí ir hacia afuera a esperar al taxi que me llevaría a mi nueva escuela a partir de ahora.

La nostalgia me invadió al dar una mirada hacia mi casa, tantos años que había vivido allí. Era un lugar donde llevé amigas, hice cosas increíbles y la pasé genial.

La bocina de un auto me sacó de mi ensimismamiento y volteé a ver, el taxista me estaba esperando.

Abrí la puerta de aquel auto y metí la maleta adentro antes de sentarme y cerrar la puerta. El conductor me saludó con simpatía, yo le correspondí al saludo por cortesía.

—¿Sus padres no la acompañarán, señorita? —preguntó mientras miraba por el espejo retrovisor.

—No... No van a poder —respondí bajo—. Lléveme al Blue College.

Y no, no iban a poder porque estaban muertos. Sólo que en el pueblo no lo sabían.

—¿Segura? —abrió los ojos con sorpresa ante mi respuesta—. ¿Qué hará allí?

—Será mi nueva escuela, por favor, conduzca —espeté un poco impaciente. Necesitaba alejarme de la que fue mi casa o la tristeza me invadiría y acabaría por no ir.

El hombre no dijo nada más y se puso en marcha, yo observaba por la ventana, los árboles se alejaban conforme el auto seguía en marcha.

Una hora después, bajé de aquel auto cómodo y le pagué el viaje al hombre. Era un buen hombre, me había contado en el viaje que yo le recordaba a sus hijos. Era mi vecino.

Una vez fuera del auto, frente a mí se imponía una gran fachada con inmensas rejas negras y un paredón.

Estaba frente al Blue College.

Toqué el timbre en el paredón y esperé pacientemente, escuchaba a las aves revolotear y cantar. Parecía un ambiente sereno.

Una voz me asustó, pero luego entendí que venía del timbre.

—¿Quién es? —se escuchó la voz de una mujer.

Presioné otra vez el botón para hablar—. Vengo por mí inscripción, soy Dafne Vantest.

La puerta se abrió y yo me introduje dentro del terreno.

Ese día, ya no era Vania More. Era Dafne Vantest.


Mercink~

Estamos frente a una historia nueva, realmente espero que les guste tanto como a mí me gusta escribirla y planearla.

Comenzaremos con esta nueva historia al final de Aquel año en WhatsApp, aunque, puede que vaya subiendo capítulos si es que tardo más de lo planeado en terminar Aquel año en WhatsApp.

Nos vemos💕

No olviden colocar esta historia en sus bibliotecas, así no se pierden nada.

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