Naruto y compañía avanzaban por los distintos niveles, la poca presencia de aventureros tenía en alerta a la mayoría pero, había algo que llamaba la atención de naruto y eso eran las dudas de Bell mientras caminaba, en parte lo entendía pero si quien debe dirigirte duda expones al peligro a todo el equipo, también observó a Wiene, la pequeña avanzaba a su lado, con su mirada al frente pero cada cierto tiempo movía sus orejas al detectar cualquier sonido, eso era excelente, era parte de su instinto trabajando, algo que no quiso enseñarle ya que en ella debía ser natural.

-"Estamos por llegar al piso 17, ojalá y el goliat haya sido derrotado o deberemos derribarlo nosotros"- comentó Welf.

-"En realidad la vez que vinimos por ustedes"- pero Mikoto guardó silencio al sentir la mirada del pelirrubio sobre ella -"tuvimos  la fortuna que la familia Loki había derrotado al gigante antes que nosotros"- por un instante sintió como un gran peligro caía sobre ella, pero su sensei no sería capaz.

-"Se acercan"- dijo Wiene, quien tomó su chokuto tal cual lo hacía Naruto, cosa que le sacó una sonrisa al Uzumaki.

-"Wiene chan, ya sabes que hacer"- la peliazul asintió, esto llamó la atención de todos, al parecer la pequeña e indefensa Wiene había desaparecida para presentarse ante ellos una aventurera. Naruto comenzó a caminar mientras Wiene se quedaba atrás vigilando todo, delante del pelirrubio aparecieron 6 lobos expulsando fuego por sus hocicos.

-"vengan cachorritos, no tengan miedo"- comentó Naruto en calma, los canes en sincronización lanzaron bolas de fuego, todos miraron sorprendidos por el actuar el pelirrubio, Haruhime avanzó en dirección al Uzumaki pero fue detenida por la hija de Naruto.

-"NARUTO"-  gritó la renard viendo como la llamas cubrieron al Uzumaki, todos los demás miembros de la familia Hestia estaban por reaccionar pero una onda de viento que disolvió el ataque detuvo cualquier acción, de entre pequeñas brazas rodeado de un aura azul Naruto seguía su camino, sacó su chokuto y la batió de izquierda a derecha generando rachas de viento que expulsaron a los lobos hacia atrás matándolos al momento de chocar con las paredes.

-"Pero que?"- susurró Welf tratando de entender lo que sucedió, para Mikoto no era nada sorprendente lo que acababa de suceder, su sensei era más de lo que representaba, no por nada era un dios, algo superior a todos ellos, no existía ni conocía algún entrenamiento que la pudiera acercar a esa condición.

-"Es mejor avanzar, nos detendremos en el piso 18, ahí levantaremos un pequeño campamento, descansaremos y ya con unas horas de descanso podremos seguir con calma"- ordenó Naruto mirando a los demás, Wiene asintió y corrió para ubicarse al lado del Uzumaki -"bien hecho Wiene chan, proteger a tus seres queridos, esa es tu misión, del ataque me encargaré yo"- explicó Naruto acariciando el cabello de su hija.

-"Si padre"- respondió Wiene.

-"Naruto sama"- pensó Haruhime mirando al pelirrubio, la energía que rodeaba a Naruto parecía no tener fin, era como si el mundo lo protegiera brindándole su energía.

-"me disculpo si te preocupé Haruhime"- se disculpó Naruto rascando la parte posterior de su cabeza, Haruhime solo negó, y el grupo siguió su camino.

El piso 17 se encontraba libre por lo que pasaron con calma al nivel adaptado para que los aventureros que venían de los niveles más altos pudieran descansar, levantaron un campamento, cenaron y todos se fueron a dormir, bueno casi todos, un tanto alejado a la orilla de un pequeño riachuelo se encontraba Naruto afilando la Chokuto de Wiene, no es que necesitara tantos cuidados pero el hacerlo le relajaba, levantó la hoja para observar su filo y por el reflejo notó como una cola de color amarillo y blanco sobresalía del tronco de un árbol.

-"Hay algo en lo que te pueda ayudar Haruhime?"- preguntó Naruto, en respuesta solo escuchó una expresión de sorpresa por parte de la renard que salió de su escondite.

-"Acaso usted no va descansar?"- preguntó la pelirrubia ubicándose a dos pasos de distancia del Uzumaki que devolvió la chokuto a su funda.

-"No es necesario, termino aquí y me dedicaré hacer guardia, en algún momento de mi vida para mi esto era común por lo que no me afecta el no dormir un día o dos, pero creo que tu deberías volver con tu familia y descansar, mañana pasaremos a niveles más peligrosos y deben estar atentos"- Haruhime se acercó al lado de Naruto y con cuidado se sentó al lado de el, Naruto la miró un instante y solo cerró los ojos -"sucede algo?"- preguntó el pelirrubio.

-"Por un instante creí que le había sucedido algo, que ese ataque lo habría podido dañar, pero al verlo salir de las llamas sin ningún rasguño, me hizo recordar a los antiguos guerreros  de leyendas, quienes dominaban los elementos a su favor"- Naruto solo escuchaba, pero su mente estaba en otra parte, en los recuerdos de su vida anterior.

-"se sincera Haruhime, sientes lastima de mi?"- preguntó naruto mirando a la chica zorro, esta miró sorprendida al Uzumaki.

-"Jamás Naruto sama, yo no podría, solo que"- Haruhime guardó silencio para pensar bien en sus palabras -"Siento como si estuviera destinado a caminar solo, como si este no fuera su mundo y no tuviera un lugar al cual llamar hogar, como si estuviera perdido, y creo que usted no se merece estar en esa situación, siempre está para todos, cuando todos están por caer en la desesperación, usted aparece para dispersar cualquier niebla, es la luz de los perdidos, o eso es lo que creo, me disculpo si en algo me equivoqué"- Haruhime solo esperó alguna respuesta del Uzumaki pero Naruto no dijo nada.

-"En algo tienes razón, y es que yo no soy de este mundo, vengo de otro mundo del cual fui expulsado por ser demasiado fuerte, lo que podría generar envidia de las demás personas, hice todo para salvarlos pero un dios de mi mundo creyó que lo mejor era eliminarme del mapa para que todos fueran felices, me arrebató a mi familia, mis amigos, todos mis lazos fueron rotos, quizás mis amigos de aquel entonces ya murieron y solo quedo yo, me dijo que en este mundo podría tener una mejor vida, pero yo no quería una mejor vida, yo quería vivir mi vida con normalidad, pero uno no siempre obtiene lo que desea"- Haruhime miró atentamente al Uzumaki como este miraba los cristales en el cielo, de manera lenta acercó sus manos a la mano derecha de naruto y la tomó con cuidado, naruto sintió el suave rose de la pelirrubia  y la observó, Haruhime tenía lagrimas acumuladas en sus ojos.

-"siempre podrá contar conmigo Naruto sama, se que no podré compensar todo el dolor y la soledad que le han generado los dioses pero quiero que tenga presente que aunque el mundo se ponga contra usted, yo siempre estaré esperando su regreso, no importa el tiempo que se tome, vea en mi una confidente"- Naruto miró las manos de la renard, y se permitió bajar la guardia, la soledad estaba consumiendo su alma, por mucho tiempo había guardado el dolor de la soledad, su forma de ser le prohibía presentarse débil ante lo demás.

-"Puedo descansar en tu regazo?"- preguntó Naruto mirando a los ojos a Haruhime, esta notó la tristeza en los ojos del Uzumaki y asintió, Naruto se recostó y posó su cabeza en el regazo de la pelirrubia -"gracias por estar aquí Haruhime"- susurró Naruto comenzando a llorar, la pelirrubia comenzó a acariciar el cabello del Uzumaki.

-"Siempre que me necesite puede contar conmigo"- respondió Haruhime, no supo cuanto tiempo estuvo en aquella posición solo que se durmió

La luz iluminaba todo el valle, de a poco todos se comenzaron a despertar, así mismo Haruhime que se sorprendió al estar en su bolsa para dormir, si mal no recordaba ella estuvo con.

-"Buenos días Haruhime"- saludó Naruto preparando lo que parecía el desayuno -"Espero hayas descansado bien"- la pelirrubia asintió.

-"Si, y buenos días para usted Naruto sama"- Naruto asintió y siguió cocinando