5. Un exnovio, un nuevo asistente y un par de problemas

-¿Se conocen o no se conocen?-, pregunto divertido Enji Todoroki.

-No... Bueno si, pero...- Sin poder evitarlo mi lengua comenzó a enredarse, señal de mi nerviosismo.

-Nos topamos de casualidad en el tren,-la chica de cabellos café me ayudo a aclarar la situación, por fin cerro la puerta por la que acaba de entrar y se la veía claramente inestable.

Como si mi presencia la o fuera señal de mal augurio para ella. Se sento en una de las tantas sillas que rodeaban la gran mesa, y yo me quedé estático viendo todo y nada en si.

Esta definitivamente es la peor de las primeras impresiones

-Ya veo,-Todoroki que parecía también algo irritado y a la defensiva después de que dije que conocía a la bella chica de traje carmín, relajo los hombros y tomo asiento al lado de la que creo, es alguien importante en la empresa Endeavor.

-Parece el destino, ¿no lo crees, Ochaco?-, Enji-san miro de manera sugerente a la chica, y está solo sonrió con un poco de molestia divertida en su ceño fruncido.

-Tu y tus suposiciones, te está haciendo mucho daño pasar tiempo con Aoyama, está comenzando a meterte esas tontas ideas del destino, los chacras y signos zodiacales.-Esta le señaló con su dedo índice y movió en un péndulo su muñeca, para darle ese toque de advertencia juguetona a el que podría ser mi jefe.

-¡Oh mira quién habla!-, Shoto sonrió socarron de lado, retando a la castaña,-la que cree en la ley de la atracción del universo y el karma.

Nunca había visto este comportamiento en mi algo bicolor, siempre fue serio, reacio y podría decir que hasta tímido. Pero el Shoto que estaba ante mi, era alguien que desconozco, cabe decir que sorprende el simple hecho de haber estudiado toda una carrera con su ceño inexpresivo; y que ahora, lo este viendo hacer muchos gestos en menos de un día.

-Es muy diferente, el karma si existe y la ley de la atracción es ni más ni menos que el resultado de tus propias acciones, Todoroki-kun.-La mujer de labios regordetes se soltó su cabello que tenía apresado en un moño en la nuca, dejándolo caer por su cuello.

Sus finos cabellos me llamaron mucho la atención, tenía un largo y forma familiar. Cabe decir que el color y la manera en que acunaban su rostros, me parecía haberla visto antes en otro lado.

-Ahm... Disculpen, pero...

-¡Uuy, lo lamentó Midoriya!-, el pelirrojo se disculpó, dándose cuenta que se habían olvidado por un momento de mi presencia.-Por favor, toma asiento.

Cohibido, mire todos los asientos vacíos sin saber en cual elegir. El tintinante sudor de vergüenza e inquietud comenzó a bajar por mi espalda.

-Esa está libre,-el de mirada zafiro señalo con su barbilla la silla al lado de la única mujer en el lugar.

Trague grueso, y con lentitud mecánica saque un poco la silla y me senté en esta. Mis manos en mis muslos hechos puños, hombros arriba y mirada decaída. Estaba casi, literalmente esperando un rechazo rotundo por llegar tarde.

-Bien, Ochaco quiero presentarte a Midoriya Izuku,-la voz era adecuada y algo fría de parte del dueño del lugar en donde estaba, como si fuera habitual en él presentar a un chico sin experiencia que solo tuvo una nota alta, ante una persona que lo más segura tenía mucha experiencia como si fuera la gran maravilla del momento.-Él será tu nuevo asistente apartir de hoy, espero tengas en consideración la conversación que tuvimos y no sobre cargues de trabajo al pobre muchacho.

-Aguarda un segundo, tío Enji.-Se levantó de golpe, poniéndome aún más nervioso,-¿no se supone que esto era una entrevista? ¿y qué si lo consideraba apto aceptaría que trabaje conmigo?

-Lo cierto es que si, pero viendo que te preparaste para cuestionarlo no será necesario.

-¿Cómo qué se preparó, viejo?-. Ingado Shoto, lo cual le agradezco por el rabillo de mis ojos por hacer una pregunta que no me animo a formular.

-Los últimos candidatos al puesto a la hora de su entrevista, Ochaco si quiera se preocupo traer su currículo con ella para hacer preguntas. Solo se limito a cuestionar cosas típicas y necesarias en cada una de estás,-comenzó a explicarse el mayor, mirándome y eso solo logro que me encogiera aún más, si es que eso era si quiera posible en mi sitio.-Esta vez es diferente, puedo reconocer el sobre que le entregué hace unas horas con los datos del joven Midoriya sobre salir de su bolso-. Enji dejo de mirarme para posar sus iris en el bolso de la chica, y no fue el único yo también deparé en mirarlo, y efectivamente ahí estaba la carpeta que hace unos días le entregué a Aizawa sensei para que se la entregará a Enji-san. -Es obvio que lo trajo consigo porque está interesada realmente en sus habilidades y, que respuestas pueda llegar a responderle si lo interroga en base a su expediente.

-¡No soy tan predecible, tío!

Chilló la castaña, haciendo un puchero que hacía aún más vuluminoso su labio inferior de lo que ya era.

-Si lo eres, sobrina. Además Izuku es el tipo de hombre que te demostrará que puede adaptarse a cualquier ritmo, ¿no es así muchacho?- ahora todos me miraban, eso me hizo tensarme.

Con cobardía, alce mi mirada gacha y asenti.

-Por supuesto, mis pasantías fueron en la empresa Ave real, una de las empresas mas grandes de Japón.-Diciendo ese dato, la cara de la chica solo se modifico con un alzamiento de ceja a modo de cuestión, sus pensamientos era claro que se concentraban en mi pero no podía describir que estaba pasando en su cabeza con solo ver sus ojos, sabía esconder sus expresiones.

-Cabe decir que esa empresa acepta a muchos residentes, pero al poco tiempo muchos desisten de seguir realizando sus prácticas ya que no pueden con la presión y lo laborioso de los trabajos que se les encargan,-Enji Todoroki se levantó de su siento y comenzó a caminar por enfrente de nosotros, detrás de él se veía una gran ventana que dejaba ver la espléndida vista de los rascacielos de la ciudad,-y los que no renuncian, son despedidos porque no pueden con el trabajo que les dan a desempeñar. Midoriya no es ninguno de los dos casos, él fue parte del 3% de los pasantes que pudo con el ritmo del trabajo de manera excepcional. El dueño de la empresa Ave Real es amigo mío, me hablo maravillas de su forma de trabajar, su mente brillante y actitud emprendedora. Sin mencionar que es de los pocos que tiene una carta de recomendación de parte de Keigo.

Enji dejo de divagar enfrente del gran ventanal, y con sus manos sobre la mesa le sustuvo la mirada a la que había llamada sobrina.

-Va a trabajar para ti, Ochaco. No está a discusión, sobre todo porque tu cara me confirma que tenía razón, y investigaste a el muchacho.

-Bien, pero te lo diré desde ahorita tío. Si este mocoso comete un solo error como los anteriores, puedes trasladarlo a otro departamento luego de que lo deseche.-La castaña le sustuvo la mirada a el imponente hombre que era el señor Todoroki.

-Lo tengo muy presente desde el último asistente, sobrina.-El mayor dejo su pose amenazante y revolvió el cabello de la castaña.

Tienen una extraña relación tío y sobrina

Estaba desconcertado, todo estaba pasando muy rápido. El encuentro en el tren, su amable y hasta podría decir actitud coqueta conmigo, mi llegada tarde a la entrevista que ensi, no era una entrevista sino una contratación inmediata; la tensión entre Shoto y Ochaco-san al enterarse el bicolor que yo conocía a la chica, y por último pero no menos importante, la apuesta y amenaza que habían lanzado sobre la mesa Enji y mi ahora jefa que me involucraba.

Es mucho que procesar

La castaña se levantó tomando sus cosas, sin despedirse ni mucho menos dirigirme la palabra o algo, solo salió del lugar con un aura retadora. Era intimidante y muy imponente.

-Será mejor que la sigas, y no te preocupes cuando se calme verás que es una buena persona. Solo esta molesta porque le expuse ante su exnovio,-Enji-san tocó mi hombro con su gran mano dandome apoyo moral.

¿Exnovio? ¿se refiere a Shoto?

Por puro reflejo solo asenti antes de comenzar a pensar en cosas que no tenían que ser de mi incumbencia. Me apresure a seguirla, no fue difícil dar con ella por el insesante sonar de sus tacones que me guiaron hasta su paradero.

-¡Señorita, por favor espere!-, de verdad caminaba muy a prisa para ir encima de unos tacones tan altos.

-No tengo que esperarte, ¿no que muy bueno para seguir el ritmo de los demás?

En su voz se escuchaba la molestia y irritación. No entendía su enojo, mucho menos porque se desquitaba conmigo que no le había hecho nada. Pero si quería este trabajo, tendría que superar muchos obstáculos, y el primero de ellos parecer ser que, será una jefa que la trae en mi contra desde el primer día. Tengo que darme a respetar y arreglar esto, si es que no quiero trabajar con una persona que cree que puede pisotearme como si fuera la primera dama cuando ella deseé.

-Lo digo no porque no pueda seguir su paso, sino para poder conversar debidamente.-Explique, logrando por fin estar a su mismo nivel de andar.

-No tenemos nada que conversar, tu solo sigue mis órdenes.-Se detuvo de golpe, mirándome muy de cerca, con una mirada que decía desprecio hacia mi persona.

-¿Tiene algo contra mi?-, la rete, sosteniendo sus ojos fieros,-si es así me gustaría saberlo, porque hasta donde yo sé ni le hice nada.

Parpadeó aún con su ceño fruncido, este se frunció un más pero con unos sentimientos diferentes. Suspiro cansada, se aparto regresandome mi espacio personal.

-No, no tengo nada en contra de ti. Es algo personal, pero el simple hecho de que seas tú mi asistente me traerá muchos problemas por eso estoy tan fastidiada y molesta con mi tío.-Sus dedos liberaron estrés apretando el puente de su nariz,-lamento mi comportamiento de tener algo contra ti y más si lo sentiste así, cuando no lo es.

-Sé que apenas nos conocemos, es decir apartir de hoy seremos compañeros. Pero sería un honor que me tomarás en cuenta no como tú asistente, sino también como tú amigo. Si puedo ayudarte de alguna manera lo haré, así que puedes confirmar en mi para desahogarte.-Entonces sucedió, ví a la verdadera Ochaco que el señor Enji decía que era.

Una mujer fuerte pero vulnerable. En ese momento pude ver mucho estres, problemas y cansancio en su semblante. La sonrisa triste que le provocaron mis palabras, la reconfortaron de cierta forma, pero no tanto como para que dejara de mirarme con esos ojos que gritaban ayuda y pedían más que palabras de aliento.

Deslicé mi mano de su hombro hasta que quedó en uno de sus omóplatos, y me acerque un poco más para terminar de envolverla en un abrazo.

Ella se tenso, pero en poco tiempo se relajo, no esperaba que correspondiera el abrazo. Solo que lo aceptará y eso hizo. Escondió su rostro en la curvatura de mi cuello y apenas logré percibir un sollozo salir de sus labios la estreche aún más contra mi.

-Has estado cargando con muchas cosas, ¿no es así?.-Le confesé, acaricié su cabello suelto, era suave y desprendía un aroma que me agrado y era familiar.

-Yo... Lo siento, no debí tratarte así... Yo...

La silencie, dejando que se desahogará.

-Sshh, no tienes que disculparte. Creo que me pondría igual si me obligarán a trabajar con alguien que no conozco y tuviera mucho en que pensar,-empatice con ella, sintiendo sus temblores.

Esta chica ha estado pasando por mucho y la noticia de mi llegada fue su punto de quiebre, pero ¿porqué?

-Midoriya.

Mire por encima de mi hombro, y ahí estaba Todoroki. Mirándonos, su postura era parecida a la que tomo cuando escucho que yo conocía a la señorita Ochaco. Solo que peor, tenía los puños apretados a cada uno de sus lados, mandíbula tensa y mirada asesina sobre mi.

Perfecto Izuku, ahora uno de tus amigos creerá que tienes algo con su ex...

¿Este día no podría ponerse peor?

Me separé temeroso del mal entendido que ya corría por la cabeza de Todoroki y puse a la castaña detrás mío.

-Todoroki, esto no es lo que parece, déjame explicarte.

-¿Qué vas a explicarme, Izuku?-, se acercó a paso veloz a mi, aflojando su corbata roja, listo para molerme a golpes si no hablaba con cuidado.-¿Qué mi novia me dejó porque tú apareciste en el medio?

¡¿Eh?!

-Todoroki-kun no es lo que crees,-Ochaco salió detrás de mi, y con el maquillaje algo arruinado le hizo frente a Shoto con una mirada desafiante.-Yo te deje en claro que termine contigo porque ya nada era lo mismo, deja de querer justificar la razón de nuestra ruptura de modo que creas que no eres culpable, cuando los únicos culpables somos tú y yo.-Puso su dedo índice encima de su pecho, logrando que el enojo de Shoto fuera reemplazado por una tristeza y melancólica que solo a los que les rompen el corazón conocen.

-No vengas a mentirme, Uraraka. Es obvio que tienes algo con Midoriya, ví como se abrazaban.

-Solo me consoló, no lo entiendes estás tan ocupado pensando en ti y nada más que en ti, que no te diste cuenta que estaba mal desde que llegue. Y el único que pareció darse cuenta de mi estado es este desconocido, lo único que hizo fue darme lo que tú no has podido desde hace dos años, atención y cuidado.-La castaña empujó a el bicolor, este estaba en un extremo estado de shock mientras miraba como su exnovia le reclamaba entre lágrimas.-¿¡Aparte a ti que te importa si un desconocido me abraza!?, ¡Ya no somos nada desde hace un año!. ¡Y para colmo quieres venir a hacerme una escena de celos cuando te gusta Momo!

Esto parece una novela de las que mamá ve

¡No es momento de reírse ni de tomar con humor esto, Izuku céntrate!

Trate de calmar a la chica, la alejé tomándola por los hombros y está solo se dejó arrastrar, volvió a refugiarse en mi y hundió su cara en mi pecho. Llorando y temblando.

-Todoroki lo que dice Uraraka-san es cierto, solo fue un malentendido. Yo nunca la había conocido hasta hoy, y no te haría eso. Eres mi amigo y sé lo mucho que aún amas a esta chica.-Explique, para que el cerebro algo lento y, que creaba teorías locas de mi amigo heterocromático se calmara.

-Si, lo sé Midoriya... Lo lamento yo no... Creo que debería irme.-Avergonzado y triste, dió media vuelta y se fue desapareciendo por el pasillo que lleva de regreso a la sala donde estuve.

-Lamento haberte involucrado en mis problemas personales,-ya más tranquila se alejo de mi secándose sus lágrimas.

Tenía el maquillaje corrido, y parecía un mapache pero de cierta manera no me pareció desagradable, sino tierna e indefensa.

-Son cosas que pasan, además parece que todo se solucionó.-Rasque mi nuca y aparte la mirada de su rostro, últimamente me dejaba cautivar muy fácilmente por cualquier chica, y eso me estaba preocupando.

No seas un desesperado, Izuku

Tengo que concentrarme en mi trabajo, no puedo pensar en lo hermosa que es mi jefa eso es inmoral, incorrecto y, sino quiero problemas es mejor que solo la vea cómo eso, como mi jefa.

Además... Aún sigo esperando el mensaje de Uravity

-Permiteme comenzar de nuevo,-aclaro su garganta en un carraspeó y me extendió su mano,-Ochaco Uraraka, jefa del departamento de finanzas. Es un gusto conocerte, y poder trabajar contigo. Espero nos llevemos bien.

Su disponibilidad para colaborar en paz está nueva etapa para ambos me saco una sonrisa.

-El gusto es todo mío, Uraraka-san. Mi nombre es Izuku Midoriya.-Acepte su apretón de manos, y nos sonreímos cordialmente.

~

Atrasado, ¡lo sé!. Pero he tenido muchas cosas que hacer, ya saben vida de una universitaria y hija única (a quien engaño si tengo hermanos, pero no lo parece porque no hacen nada).

Este es un capítulo, atrasado, no sabía cómo plasmarlo lo siento, pero quería que vieran que por fin ya están juntos aaahh que emoción. Ahora sí se viene lo chido, ujujuy.

Deku si tan solo supieras que Uravity es tu jefa y tendrás una batalla interna contigo mismo y tú moral por saber si deberías terminar de enamorarte de la hermosa mochi humana. Pero aaaaahhh, eso es asunto para capitulos mas adelantes.

Y mi Shoto, ay mi pobre Shoto no puede pasar página ¿porqué?, Ya abre los ojos la Momo está esperando para que vayas y ella sane y cuide tu corazoncito roto maldito invierano...

Y Endeavor-san, por favor deje de pasar tiempo con Aoyama es mala influencia.

La canción de multimedia más que nada, representa los sentimientos de Todoroki hacia Uraraka, ya que él se siente muy frustrado y arrepentido porque la perdió por haberse comenzado a enamorar de Momo. Muchos van a odiarme porque ni yo shipeo a UrarakaxTodoroki, pero es solo una historia chicos, necesitaba una razón para que Enji y Uraraka fueran cercanos y ya ven porque, esto tomara sentido más adelante tengo grandes planes para Uraraka referente a su desempeño como trabajadora en la empresa, ya verán. Solo déjenme ser ¿si?. Confíen en mí ;).

Bueno, eso es todo mis oficinistas amantes del Izuchaco, nos vemos el próximo capítulo chachaou.

¡Mamá Shark 🦈💖 y Maleficent 🖤✨ fuera!