Capitulo dedicado a CatalinaGzlez1225
Y marce-army22 espero les guste 🥰🥰

El sol comenzaba a salir sobre Seúl cuando Jungkook y Taehyung salieron de la casa donde habían pasado las últimas horas dándose amor

-¿Estás seguro de que no te importa llevarme a casa?,-preguntó Taehyung, mirando a Jungkook con una mezcla de gratitud y timidez.

-Por supuesto que no, Tae. Además, necesito que te cambies de ropa antes de llevarte al spa,- respondió Jungkook con una sonrisa cálida. -No puedes ir vestido así. Mis clientes pensarán que estás modelando para una revista de moda, no trabajando.

Ambos rieron mientras caminaban hacia el coche de Jungkook, un lujoso sedán negro que brillaba bajo la luz del sol. El trayecto hasta la casa de Taehyung fue tranquilo, con la música suave llenando el espacio entre ellos.

Al llegar, Taehyung invitó a Jungkook a entrar mientras se cambiaba. La casa de Tae era acogedora y reflejaba su personalidad artística. Cuadros coloridos adornaban las paredes y había una colección de vinilos antiguos en una esquina.

-Siéntete como en casa, no tardaré,- dijo Tae antes de desaparecer en su habitación.

Jungkook se acomodó en el sofá, observando el ambiente a su alrededor. No podía evitar sonreír al ver cómo cada detalle del hogar de Taehyung mostraba su pasión y creatividad. Después de unos minutos, Tae regresó vestido con un atuendo más adecuado para el trabajo unos pantalones negros elegantes y una camisa blanca de lino.

-Listo,- dijo Tae, ajustándose la camisa. -Vamos.

El trayecto al spa fue corto. Al llegar, el personal los recibió con sonrisas y saludos cálidos.

-Tae, puedes cambiarte en el vestuario del personal. Yo iré a mi oficina por un rato,-dijo Jungkook, dándole una palmadita en el hombro.

-Claro, nos vemos luego,-respondió Taehyung, dirigiéndose hacia el vestuario.

Mientras Tae se preparaba para su turno, Jungkook subió a su oficina. Desde allí, tenía una vista panorámica del spa, donde podía ver a sus empleados trabajando con dedicación. Se sentó en su escritorio y comenzó a revisar algunos documentos, pero su mente seguía volviendo a Taehyung. en la noche tan especial

En el área de tratamientos, Taehyung se unió a sus compañeros, quienes lo recibieron con entusiasmo. Tae era conocido no solo por su talento, sino también por su calidez y amabilidad. Sus manos eran mágicas, y los clientes siempre salían de sus sesiones sintiéndose renovados.

-¡Hey, Tae! ¿Estás listo para un día ocupado?,-preguntó Jimin, uno de sus colegas, con una sonrisa.

-Siempre,-respondió Tae, devolviendo la sonrisa. -Vamos a hacer que nuestros clientes se sientan como en el paraíso.

Las horas pasaron rápidamente mientras Tae y el equipo atendían a los clientes. El ambiente en el spa era relajante, con música suave y aromas de aceites esenciales llenando el aire. Cada vez que Jungkook miraba desde su oficina, se sentía orgulloso del trabajo que estaban haciendo.

Aproximadamente a las ocho de la noche, cuando el último cliente se había ido y el personal comenzaba a limpiar y cerrar el lugar, Jungkook decidió bajar para ver cómo iban las cosas. Encontró a Taehyung en una de las salas de tratamiento, organizando las toallas y asegurándose de que todo estuviera en su lugar.

-¿Cansado?,-preguntó Jungkook, apoyándose en el marco de la puerta.

-Un poco, pero me encanta lo que hago,-respondió Tae, mirándolo con una sonrisa.-Y tú, ¿cómo ha ido tu día?

-Productiva, gracias a ti y al equipo,- dijo Jungkook, entrando a la sala. -Te gustaría quedarte un rato más? Podríamos relajarnos en la zona de hidroterapia.

La propuesta sorprendió a Taehyung, pero aceptó con entusiasmo. Después de todo, una noche especial merecía un final especial. Ambos se dirigieron a la zona de hidroterapia, donde el silencio se mezclaba con el suave murmullo del agua y las luces tenues creaban un ambiente íntimo y relajante. Jungkook y Taehyung se sumergieron en las aguas termales, dejando que el calor y las burbujas aliviaran sus músculos cansados.

-Esto es perfecto,- susurró Taehyung, cerrando los ojos y dejándose llevar por la sensación reconfortante.

Jungkook sonrió, observando a su novio con cariño. La noche había sido mágica, llena de complicidad y momentos especiales que fortalecían su conexión. Se acercó a Taehyung y lo rodeó con sus brazos, sintiendo el latido de sus corazones sincronizarse en un ritmo armonioso.

-Gracias por esta noche, Tae. Significa mucho para mí,-dijo Jungkook en un tono suave.

Taehyung abrió los ojos y miró a Jungkook con ternura.

-No tienes que agradecer, Kookie. Estar contigo es todo lo que necesito para ser feliz.

Se quedaron un rato más en la zona de hidroterapia, compartiendo risas, confidencias y momentos de complicidad. El tiempo parecía detenerse a su alrededor, creando un espacio íntimo y especial donde solo existían ellos dos y su amor.

Finalmente, decidieron salir del agua y envolverse en suaves batas blancas antes de dirigirse a la zona de descanso. Se acomodaron en cómodos sillones, disfrutando del silencio reconfortante que los envolvía.

-¿Qué tal si terminamos la noche con una taza de té en el jardín zen?,-propuso Taehyung, mirando a Jungkook con una sonrisa juguetona.

-Me parece perfecto,- respondió Jungkook, levantándose y extendiéndole la mano a Taehyung para ayudarlo a ponerse de pie.

Caminaron juntos hacia el jardín zen,donde la luz de la luna iluminaba las piedras dispuestas con cuidado y los árboles se mecían suavemente con la brisa nocturna. Se sentaron en un banco de madera, compartiendo una taza de té caliente y disfrutando del silencio sereno que los rodeaba.

-¿Sabes, Tae? Esta noche ha sido especial y la de ayer . Gracias por estar a mi lado,-dijo Jungkook, mirando a Taehyung con amor en sus ojos.

-Gracias a ti por hacerme sentir amado y especial cada día,- respondió Taehyung, entrelazando sus dedos con los de Jungkook.

Se quedaron un rato más en silencio, disfrutando de la paz y la tranquilidad del jardín zen.

El suave murmullo del agua del estanque y el susurro de las hojas al viento creaban una atmósfera casi mágica a su alrededor. Las luciérnagas comenzaron a aparecer, iluminando el jardín zen con pequeñas luces titilantes que parecían reflejar los sentimientos que ambos compartían.

Jungkook, aún con los dedos entrelazados con los de Taehyung, sintió una oleada de gratitud. No era solo por la noche, sino por cada momento que habían compartido, cada risa y cada susurro en la oscuridad.

-Tae,- dijo suavemente, girándose un poco para mirar a Taehyung directamente a los ojos, -quiero que sepas que estar contigo me ha enseñado a ver la belleza en las cosas simples. En estos momentos tranquilos, en las pequeñas muestras de cariño. Nunca había sido tan feliz.

Taehyung sonrió, sus ojos brillando con la misma emoción.

-Jungkook, tú eres mi inspiración. Contigo todo parece posible. Me haces querer ser una mejor persona, no solo para ti, sino también para mí mismo.

Ambos se quedaron en silencio nuevamente, pero esta vez el silencio estaba lleno de promesas no dichas y sueños compartidos. La noche avanzaba lentamente, pero ellos no tenían prisa. Tenían todo el tiempo del mundo.

De repente, Taehyung se levantó, aún sin soltar la mano de Jungkook.

-Ven,- dijo con una sonrisa traviesa, -tengo una sorpresa para ti.

Jungkook lo siguió, curioso y emocionado. Cruzaron el jardín hasta llegar a una pequeña estructura que Taehyung había estado trabajando en secreto durante semanas. Abrió la puerta y reveló un pequeño estudio de arte, lleno de lienzos en blanco, pinceles y pinturas.

-Quiero que pintemos algo juntos, algo que represente esta noche y lo que significa para nosotros,- explicó Taehyung, sus ojos brillando con entusiasmo.

Jungkook lo miró, sorprendido y conmovido. Jamás penso que eso estaba ahí

-Me encantaría, Tae. Será un recuerdo que guardaremos para siempre.

-Lamento no haberte dicho, y hacerlo sin tu autorización,-Declaro Tae apenado

-No te preocupes bonito, la verdad jamás me hubiera dado cuenta, ya que está alejado de todo,-Decia Jungkook mientras se acercaba a Tae

Hola mis lectores
Les traigo un nuevo capítulo
Espero les guste 🥰