Una tarde, mientras el sol se ponía y llenaba el estudio de Taehyung con una cálida luz dorada, Jungkook entró silenciosamente, llevando consigo dos tazas de té. Taehyung estaba absorto en su último proyecto, una serie de lienzos que exploraban las emociones humanas a través de colores y formas abstractas.

-¿Cómo va la obra maestra? -preguntó Jungkook, acercándose para dejar una taza en la mesa junto a Taehyung.

Taehyung sonrió y se apartó un poco del lienzo para recibir el té.

-Va bien, aunque a veces siento que nunca está completamente terminado. Siempre hay algo más que podría añadir o cambiar.

Jungkook tomó un sorbo de su bebida y miró los cuadros con admiración.

-Eso es lo que hace que tu arte sea tan especial. Siempre está evolucionando, siempre tiene algo nuevo que decir, tu arte no es para cualquiera.

Taehyung lo miró a los ojos, agradecido por el apoyo incondicional de Jungkook.

-No podría haber llegado hasta aquí sin ti. Tu fe en mí me ha dado la fuerza para seguir adelante

Jungkook se acercó y lo abrazó, sintiendo el latido constante del corazón de Taehyung.

-Y yo no podría estar más orgulloso de ti. Eres increíble.

Justo en ese momento, el teléfono de Taehyung vibró en la mesa. Era un mensaje de la señora Lee. Con una mezcla de curiosidad y anticipación, Taehyung lo abrió y leyó en voz alta

-Querido Taehyung, me complace informarte que una de tus obras ha sido seleccionada para ser exhibida en la próxima exposición internacional en París. Esta es una oportunidad maravillosa para que tu talento sea reconocido a nivel mundial. ¡Felicidades!"

Ambos se quedaron en silencio por un momento, asimilando la magnitud de la noticia. Luego, Taehyung dejó escapar un grito de alegría y abrazó a Jungkook con fuerza.

-¡Vamos a París! -exclamó Taehyung, sus ojos brillando con emoción.

Jungkook lo levantó en el aire, riendo.

-¡Vamos a París!

La noticia se extendió rápidamente entre amigos y familiares, quienes organizaron una pequeña celebración para felicitar a Taehyung. La señora Lee asistió y le dio un cálido abrazo.

-Sabía que tenías un talento especial desde el momento en que vi tu primera obra, Solo me deje llevar -dijo la señora Lee, con una sonrisa orgullosa-. Este es solo el comienzo de todo lo que vas a lograr.

Con el apoyo de la señora Lee, Jungkook y el amor de sus seres queridos, Taehyung se embarcó en un nuevo capítulo de su vida. La exposición en París no solo representaba una oportunidad profesional, sino también un símbolo de su crecimiento personal y artístico.

Jungkook lo acompañó a la ciudad del amor, donde juntos exploraron museos, cafés y calles llenas de historia y arte. La exposición fue un éxito rotundo, y Taehyung recibió elogios de críticos y artistas de todo el mundo. Pero lo más importante, Taehyung y Jungkook fortalecieron aún más su relación, compartiendo sueños, aventuras y, sobre todo, un amor que seguía creciendo con cada nuevo día.

Y así, con París como telón de fondo, Taehyung y Jungkook continuaron su viaje, sabiendo que, sin importar dónde los llevara el destino, siempre estarían juntos, apoyándose mutuamente en cada paso del camino.

Después de su regreso de París, la vida volvió a su rutina habitual, pero con una nueva chispa de entusiasmo y determinación. Taehyung y Jungkook se dedicaron a su trabajo en el SPA, donde Taehyung era el masajista estrella y Jungkook se encargaba del papeleo y la administración, siendo también el dueño del negocio.

Los días en el spa eran largos y ajetreados, con una clientela creciente atraída por la reputación del lugar. Taehyung se dedicaba a sus masajes con la misma pasión que ponía en su arte, mientras que Jungkook se ocupaba de la gestión, asegurándose de que todo funcionara a la perfección.

Taehyung y Jungkook decidieron pasar un día de relajación juntos en un lujoso SPA. Después de disfrutar de las instalaciones y tratamientos del spa, Taehyung sugirió darle a Jungkook un masaje relajante para ayudarlo a liberar la tensión acumulada en los músculos.

-Se ve que ha sido un día largo -dijo Taehyung, acariciando suavemente la espalda de Jungkook.

-No tienes idea -respondió Jungkook, dejándose caer en el sofá-. Entre las citas, los proveedores y el papeleo, siento que no he parado ni un segundo.

Taehyung se sentó a su lado, acariciando su cabello.

-¿Qué te parece si te doy un masaje?,Podría ayudarte a relajarte.

Jungkook asintió, agradecido.

-Eso suena maravilloso.

Taehyung lo ayudó a quitarse la camiseta y lo guió hacia la camilla, donde Jungkook se tumbó boca abajo.

Taehyung preparó un aceite de masaje con aroma a lavanda y comenzó explicando suavemente cada paso a Jungkook.

Primero, Taehyung aplicó el aceite tibio en las manos y frotó para calentarlas. Luego, comenzó a hacer movimientos suaves y largos a lo largo de la espalda de Jungkook, utilizando sus palmas y dedos para aplicar una presión relajante.

Con cuidado, Taehyung se centró en los hombros y el cuello de Jungkook, donde sabía que solía acumular tensión. Utilizó movimientos circulares suaves para aflojar los músculos y aliviar el estrés.

Jungkook cerró los ojos y se dejó llevar por la sensación reconfortante de las manos expertas de Taehyung. Con cada movimiento, podía sentir cómo la tensión se disipaba y una sensación de calma y relajación lo invadía.

-Tus manos son mágicas, Tae -murmuró Jungkook, medio adormilado.

Taehyung continuó el masaje con movimientos de amasamiento suaves en los músculos más tensos de la espalda y los hombros de Jungkook, aplicando la presión justa para aliviar cualquier nudo muscular.

Taehyung sonrió, disfrutando de la intimidad del momento. Decidió llevar el masaje un poco más allá, sus manos deslizándose hacia los muslos de Jungkook. Al aplicar una presión suave y circular, notó cómo la respiración de Jungkook se volvía más profunda y un ligero gemido escapaba de sus labios.

-Me parece que alguien está disfrutando esto más de lo normal -dijo Taehyung en un tono juguetón, sus dedos rozando ligeramente la parte interna de los muslos de Jungkook.

Jungkook se removió ligeramente, su cuerpo respondiendo al toque de Taehyung.

-Tae, tienes unas manitos muy traviesas -dijo con una sonrisa pícara.

Taehyung rió suavemente y continuó con el masaje, sus movimientos volviéndose más intencionados y provocativos. A medida que sus manos se acercaban a la entrepierna de Jungkook, sintió una clara respuesta física.

-¿Qué puedo decir? -respondió Taehyung, inclinándose para susurrar en el oído de Jungkook-. Me encanta verte disfrutar.

Jungkook se giró ligeramente, mirándolo con ojos llenos de deseo.

-Entonces, ¿qué estás esperando?

Taehyung no necesitó más invitación. Con un movimiento fluido, se deslizó sobre Jungkook, cubriendo su cuerpo con el suyo. Sus labios se encontraron en un beso apasionado, mientras sus manos exploraban cada rincón del cuerpo del otro.

Jungkook empezó a sacar la ropa de taehyung, sin dejar de besarlo salvajemente, su mente en estos momentos, deseaba a taehyung de cuando probó su cuerpo por primera vez era una droga para el, Pero también respetaba cada decisión de el.

Cuando ambas ropas estaban en el piso Jungkook se levantó y cargo a tae enrollando sus piernas en su cintura, girando con el en brazos, acostandolo en la camilla, Jungkook acariciaba los muslos de tae con la punta de sus dedos hacia un recorrido por todo el lugar. Provocando un escalofrío en el cuerpo de tae, en la habitación se sentía el ambiente de un deseo y una excitación que pronto acabaría.

Sin esperar Jungkook tomo una pierna de tae y empezó a dejar besos húmedos y hizo el mismo recorrido que había hecho con sus dedos, cada vez que se acercaba a la entre pierna de tae, pasaba su lengua y volvía a recorrer con besos

-J~jungkook por favor -suplicaba tae en un susurró

Jungkook solamente le dió una sonrisa de lado y siguió en lo que estaba haciendo, tomó la otra pierna y se puso ambas en su hombro y hizo exactamente lo mismo, pero ahora era diferente, al llegar a la polla de tae, se detuvo y levantó la mirada para ver a su novio

-¿Puedo cariño?,-pregunto Jungkook

Tae solo asintió y eso fue todo para que Jungkook se arrodillara y empezará a chupar la polla de tae, haciendo que un gran gemido saliera de su novio, cada chupada y lamida hicieron que tae se estremeciera y se dejará llevar por la sensación que estaba teniendo, sin pensarlo enterró sus dedos en el cabello de Jungkook haciendo que este chupara con más ganas la polla.

-ah~~, S~si cariño.. así házlo,-Decia un tae demasiado excitado, todo era nuevo para el y le encantaba que lo estaba haciendo con su novio

Jungkook se acomodo bien las piernas en su hombro y dejo de chupar mientras su lengua se iba directo a la parte anal de tae, al llegar su lengua saboreaba cada parte del interior de tae y cuando sintió que estaba bien húmeda introdujo uno de sus dedos, sacándole un gran gemido a tae, empezó a darle embestidas, mientras iba ingresando otros dos más, la polla de Jungkook estaba muy inquieta le palpitaba demasiado, sentía que se le iba a reventar, necesitaba estar dentro de su novio.

Cuando vio que ya estaba preparado, se levantó y tomo su grande y venosa polla y jugaba con su punta en el interior de tae, haciendo que en cada toque, Tae se pusiera nervioso.

-¡Ya!, puedes hacerlo-reclamo un tae demasiado excitado

Jungkook solo río y empezó a introducirlo lentamente, sabía que tae debía acostumbrarse al tamaño, Pero se sentía muy estrecho y el intentaba no perder la poca cordura que le estaba quedando y no dañar a su tae, cuando ya entro completo empezó a moverse lentamente, su polla le palpitaba mucho, y necesitaba contenerse

-Ah~~-Estas tan apretado cariño, no sabes cómo haces sentirme a mi y a mi polla,-Dijo Jungkook sin dejar de mirarlo con deseó

Tae se mordía sus labios, no podía negar que la polla de Jungkook lo hacía sentir lleno y muy satisfecho, Pero necesitaba más acción

-Mas rápido amor

Jungkook no tuvo ni que responder, porqué tomo las caderas de tae y empezó a embestirlo más rápido, con cada movimiento su polla entraba completamente, sus cuerpos chocaban en cada embestída.

-Que rico Papi,-dijo tae entre gemidos

Y eso fue todo para que Jungkook perdiera la poca cordura que le quedaba, apretaba fuertemente las caderas de tae sabía que quedarían marcas, Pero en estos momentos no estaba para pensar

Empezó a embestirlo más rápido y más fuerte, cada embestidas era salvaje, los gemidos de ambas partes eran ecos en esa habitación, luego de unos minutos Jungkook acomodo a tae en la posición de perrito, se subio en la camilla y se acomodo detrás de tae y de un solo movimiento entro en el. Empezó a embestirlo rápido y de un momento a otro lo agarra del cuello y lo levanta pegando la espalda de tae en su pecho.

Tae al sentir ese movimiento un gran gemido salió de el, esas sensaciones de ahorcar lo estaban excitando mucho más, Jungkook siguió penetrandolo, mientras tae hacía movimientos en círculo por cada embestída que recibía.

Luego de varios minutos llegaron al climax, se limpiaron Y Después de un tiempo, se quedaron abrazados, sus cuerpos entrelazados y sus respiraciones sincronizadas. Jungkook miró a Taehyung con una sonrisa satisfecha.

-Definitivamente, este es el mejor masaje que he recibido.

Taehyung rió y besó suavemente su frente.

-Me alegra haber podido ayudarte a relajarte.

Jungkook lo abrazó más fuerte, sintiendo el calor y el amor que fluían entre ellos.

-Gracias, Tae. No solo por el masaje, sino por todo. Eres increíble.

-Tú también lo eres, Jungkook -respondió Taehyung, acariciando su cabello-. Y siempre estaré aquí para ti, en cada momento bueno y malo.

Les dejo un nuevo capítulo
Espero les guste
Perdón la tardanza ☺️ 💞