Recobrar una confianza que no existía con anterioridad, era casi imposible. Pero existía una excepción, HeeRan quería confiar en JungKook y que él sintiera lo mismo por ella. Tal vez intentar ser amigos en esta situación sería lo importante y ayudarse a tener una vida fuera de lo que se habían metido. Sin embargo, la amistad entre ellos dos era un poco confusa.

Después de que HeeRan dejará a NamJoon en al cafetería, ambos decidieron pasar tiempo en el departamento de ella. Al llegar, no se dirigieron a la sala para hablar sobre que debían de hacer. El plan había quedado de lado. Sin pensarlo, se lanzaron sobre si, para demostrar quien podía tener mejor control en los labios del otro.

Poco a poco la ropa iba desapareciendo, al quedar en ropa interior comenzaron a recorrer el cuerpo del otro con sus manos. Tal vez no se conocían lo suficiente para sentir sentimientos por el otro, pero era la necesario para poder conocer que era lo que el contrario quería experimentar. El sofá en que se encontraban, fue remplazado por la cama de HeeRan.

JungKook le gustaba experimentar todo lo que creía que fuera necesario para satisfacerse mutuamente, pero en el momento que cayeron en el gran colchón, no le importo hacer lo más normal, algo tranquilo. Penetró a HeeRan haciendo que ella cruzará las piernas para aferrarse a la cintura baja de él. Los jadeos y gemidos que los acompañaba a ambos hicieron que la habitación no se fuera tan silenciosa.

Ambos sentían que ese encuentro fue más significativo que las anteriores. Posiblemente sería la última vez que podrían estar de esa manera y de muchas otras formas. JungKook escondía su cabeza entre el cuello y hombro de HeeRan dejando besos por un pequeño recorrido que él había creado, mientras que ella metía su mano derecha por el cabello de él desde la nuca, mientras su mano izquierda intentaba sostenerse con el brazo y hombro izquierdo de JungKook.

Cuando ambos llegaron al orgasmo, se quedaron abrazados sin hacer ningún movimiento, mirando el techo blanco encontrando la tranquilidad de sus respiraciones. Había una complicidad que compartían, pero que no querían aceptar en voz alta.

La actividad que se realizaría en la Galería Conceptual estaba a la vuelta de la esquina. Así que HeeRan tenía que actuar de manera apresurada pero que todo saliera meticulosamente bien. Luego de pasar el resto de la tarde encerrada en su departamento junto a JungKook como si tuvieran la mejor confianza del mundo, tuvo que planear el trato que tenía que presentar a la organización del evento.

El día siguiente se encontraba en el museo más grande de Seúl, en el camino se contacto con SeokJin que la llevaría con su nueva galerista y con los organizadores del evento. La reunión fue demasiado rápido, con la nueva tendencia de Golden Man, no tuvo que rogar al lugar, sino que la situación fue al revés. La emoción de HeeRan incremento al ingresar en todo el movimiento que estaba sucediendo en los grandes salones donde se esperaba el gran show.

Había sido acompañada por JungKook, que miraba asombrado todo el lugar. Se e hacía irreal todo lo que había pasado, ignoraba el plan y se imaginaba que hubiera pasado si esto hubiera seguido él para continuar una vida normal. Sintió la mano de HeeRan que lo devolvió a la realidad, sentía el nerviosismo de ella al encontrarse una galerista sonriente hablando con HeeRan. Lo único que pudo escuchar antes de volverse a encerrar en su mente fue.

— SeokJin me ha hablado muchas cosas buenas de ti que no me negué en ayudarte en ningún momento. Los guiaré a donde deben de colocarse.

Estando frente al área vacía planearon como quedaría la fachada del lugar, solo tendrían dos días para llenar con todo lo necesario. Cada área tenía una pequeña bodega improvisada para que guardaran lo que no se iba a presentar pero que estaría a la venta. Al finalizar la organización, comenzaron a llevar lo que se iba a utilizar como fachada, necesitando ayuda de JiWoo y de sus trabajadores que se encargaban de la remodelación de la galería. Aunque ellos eran parte de otra empresa, han sido fieles a lo que necesitaba HeeRan.

SeokJin al tener un poco más avanzada su organización y que su galerista hiciera todo el proyecto ya que no era el único en participar, se le unió al equipo de HeeRan para que JungKook no se sintiera tan perdido con su primera presentación. Cuando fueron presentados, le había agradado y presentía que él iba a ser el indicado para seguir sacando a flote el trabajo de HeeRan como de su vida privada.

Al momento de distraerse, JungKook se fue hacia HeeRan que estaba concentrada en saber cual de todos los cuadres iba a colocar al frente, sabía que la actividad también tendría un cambio significativo para su galería y por eso mismo no iba a desperdiciar la oportunidad.

— ¿No crees que estorbe? — habló JungKook mientras veía a SeokJin dando vueltas por sus cuadros.

— Solo quiere ayudar, es un buen amigo — no le presto atención, solo miraba los cuadros que tenía en la mano — y es mejor tenerlo de esa manera, para que se vea que no esta pasando nada malo.

Asintió no muy contento con la idea, porque si habían más personas involucradas como SeokJin y su representante. Todo iba a terminar mal. Miró a HeeRan muy concentrada en la organización, confundiéndolo.

— ¿En serio era necesario el lugar y que te preocupes en saber que poner? Al final no comprarán nada y tienes la galería para hacer ese tipo de trabajo.

— Todo es necesario, Jeon. Esto es como un concurso de belleza, te das a conocer para que lleguen los patrocinadores y se más creíble para que el tal Grull esté aquí, no sospecharía que en un museo con cientos de personas se le hará algo. — dijo con tanta confianza — Incluyendo que aprovecharé a vender algo tuyo.

HeeRan estaba feliz de poder estar ahí, creerían que era como uno de lo sueños que tienes de niños y conviertes realidad para callar a todos los que creían que no iba a lograr nada y que soñar despierto era tonto. Que se mostrará despreocupada e irresponsable era lo contrario a lo que era realmente, sin embargo, todo decisión que tomaba últimamente la hacían ver mal a vista pública, no le importaba lo que dijeran con tal de poder cumplir lo que siempre a querido.

Las instalaciones eléctricas que se hicieron fueron terminadas, se las notificaron para que los viera y diera el visto bueno para continuar con el resto de cosas. Las primeras pruebas para la coordinación de las pantallas fueron satisfactorias. Mientras miraban las pruebas, Madame Cadice hizo su aparición. Luego de hablarlo con NamJoon y JungKook, se confirmo que debía de aceptar la propuesta de la mujer insistente para que se vea un acto normal.

— ¿Qué lo ha inspirado para recrear simples bolsas de plástico? — se habían apartado de todo el ruido, Cadice colocó la grabadora de su celular por si olvidaba colocar algo en su libreta.

— Es lo que más uso para trabajar — resumió todo el transfondo.

HeeRan asustada intervino — Ya sabe, las cosas que uno utiliza de manera cotidiana, a veces no las encuentra atractivas. Pero él pudo sacarle provecho en otra perspectiva.

— Y son eficaces para lo que se requiere — JungKook volvió a interrumpir como si nada, siendo recriminado por la mirada de HeeRan.

Dichas acciones no fueron captadas por Cadice, del cual continuo con su entrevista — Me encanta esa mentalidad. Pero ha surgido una duda muy importante por los espectadores sobre todo esto, para ser un artista nuevo que ha vendido millones de la noche a la mañana. ¿Por qué no hemos visto una obra tuya en otro lugar público?

Para ella y unos internautas era raro que no haya sido visto fuera de la galería de HeeRan, de Corea o de una red social una de sus piezas, tampoco había nadie que hay contratado un trabajo independiente. Los principales rumores era que provenía de una familia rica y que ellos le compraban las piezas para cumplirle el gusto y sueño de ser artista.

— Realmente he estado interesado en venderle a coleccioncitas que de verdad estén interesados en el arte no a personas que solo lo compran para presumir que tienen algo que este en tendencia — comento, sorprendiendo a Cadice.

Escribía las ideas principales para unirlo luego con lo que pudo faltarle de sus audios — Creo que esto sería un poco difícil de saber, pero ¿qué es lo siguiente que harás como Golden Man?

— Por el momento, nada.

— ¿Se tomará un tiempo para procesar el éxito?

— No es específicamente eso... probar ser un artista fue una idea que se salió de las manos y ya lo experimente, es mejor retirarse...

Se confundió al escucharlo hablar y miró a HeeRan para esperar una respuesta sobre el tema — Créame que como vendedora, me siento devastada — demostró tristeza para hacer más creíble la situación — pero como colega, estoy de acuerdo que es mejor siempre mantenerse bajo perfil.

— ¿O sea que esto sería lo último que veremos de usted?

— Sí, tendremos un último proyecto que se presentará pasado mañana como una pieza sorpresa. — dijo JungKook, siendo continuado por HeeRan.

— Esto quiero que no se entren porque puede influenciar en lo que digan las personas sobre el tema. Solo se lo revelaremos a usted — guiño un ojo para demostrar la confianza hacia Cadice.

Ella asintió entendiendo las palabras de HeeRan, la última pieza era el final de la persona que estaba haciendo ruido en los últimos meses. No creyó del hombre que tenía enfrente haya alcanzado su popularidad y ya esté pidiendo su etapa fuera del ojo público. Era un desperdicio no poder encontrar gente igual a él, pero sabía muy bien que alejarse de lo mediático sin mostrar su rostro podía ser fácil para él y su cotidianidad.

Al día siguiente, las puertas fueron abiertas para los que habían comprado una entrada VIP. Estas se encontraban dando un vistazo de unas piezas que ya se encontraban colocadas, la mayoría de criticas siempre iban de lo positivo a lo halagador. JungKook en su tiempo libre hizo unos cuadros extras para que HeeRan las pudiera vender y tener algo diferente en el lugar, mientras se mentalizaba lo que iba a realizar en el ultimo día de las presentaciones, HeeRan mantenía conversación con el público que podía tener la exclusiva de muchas ventas. Una llamada interrumpió su conversación con un posible cliente.

— Un momento — la personas frente a ella asintió y ella se movió lejos al ver un número desconocido.

— ¿HeeRan? Soy Aiko, — se escuchaba energética — Hable con Grull. No esta muy a favor de presentarse por lo que propuso dar el triple de lo que pides si solo nos presentamos nosotras dos para hacer la compra — chillo de la emoción, creía que iba a ganar una comisión.

— Sería emocionante eso, — río sarcástica por lo dicho — pero si no se presenta no habrá trato — sentención, no quería sonar pesada pero tampoco flexible, quería que callera en la trampa.

— No quiero sonar asustadiza pero ya sabes como son... — escucho que del otro lado no había señal en la llamada — ¿Hola? ¿HeeRan?

Al regresar a la entrada, todas las personas se encontraban haciendo filas en los espacios requeridos para pedir una pieza con anticipación en cada área de cada galerista. Pero la mayoría quedaba decepcionados al saber que la mayoría ya se encontraban apartados por personas que tenían listas de espera.

— ¡No puedo creerlo! Me encanta la selección de cuadros y como están siendo complementarías con el resto del lugar... — se cerco un amigo de HeeRan con ella, se mostraba su emoción al ver todo — Amiga, este hombre realmente hace que todo se vea tan crudo, realista y con un trasfondo maravilloso. — eso hizo reír a HeeRan — Si mi novio no estuviera por ahí viendo sus piezas, te pediría su número porque si me calienta con lo que pinta imagínate lo que puede hacer en persona.

— Lo tengo apartado para mi, así que no lo te lo dejaría fácil — dijo bromeando, haciendo que su amigo sonriera.

HeeRan no entendía como las personas terminaban con orgasmos visuales al estar frente a lo que hacía JungKook, pero sabía que con eso las tenía ganadas para seguir vendiendo. No le importaba escuchar todo tipo de comentarios si eso hacía ganarle dinero por medio de él.

— ¡Choi HeeRan! — se escucho la voz de TaeHyung detrás de ella — ¿Cómo es posible que no tengas una obra disponible cuando le habías dicho a mi novia que ibas a tener uno para nosotros mañana? — se mostraba serio — Ya no serás invitada a la boda — dijo metiendo un sobre blanco a su saco.

— No era mi intención, pero el día de mañana habrá un especial. Que espero que estén ahí, ese será para ustedes — hizo como si fuera un secreto para ellos pero quería que poco a poco se fuera regando la presentación — así que no se olviden de venir mañana al medio día.

— Yo también quiero un especial... — dijo esta vez una mujer que logro escuchar la conversación.

— Ahí lo tendrán, solo si se presentan.

Sabía que este iba a correr la voz, así que luego iba a contestar lo mismo con las personas que llegarían a preguntar.