Una vida de muchas

Este capítulo tomenlo como un especial sobre las otras vidas en distintas épocas que han vivido Chanyeol y Baekhyun en la historia.

Ser un príncipe muchas veces puede ser aburrido, claro, no lo sería si fuera él siguiente en subir al trono, pero como no lo era, entonces sí era sumamente aburrido.

Las diversiones en el palacio eran pocas pues todos sus hermanos estaban ocupados, y además, él encontraba sus actividades realmente aburridas.

Mientras sus hermanos estaban aprendiendo a usar espadas y técnicas de combate, él estaba mucho mejor paseando por los campos o jugando a la pelota, era tonto, considerando que ya rondaba los veinte, pero a él no le importa lo que los demás pudieran decir u opinar.

Sus deberes no eran muy difíciles, después de todo, como parte de la realeza debía recibir una buena educación que consta de modales y disciplina, cosas aburridas como sus clases de historia o matemáticas, etiqueta, poesía, escritura y blah, blah, blah.

Tal vez por eso sus hermanos lo consideraban muy infantil y le decían todo el tiempo que parecía un niño, pero no podían culparlo, él prefería mil veces ser un niño y seguir teniendo un alma pura e inocente a que lo consumiera la codicia y la amargura que el conseguir un trono puede traerte.

Puede que muchos príncipes solo tuvieran en la cabeza llegar al trono y poseer la corona, pero no él, sus prioridades eran otras...un poco más idealistas y románticas, pero al fin de cuentas otras.

Al ser el décimo príncipe no aspiraba a mucho más que a ser parte del consejo real o vivir siempre con el título de "príncipe", justo por eso, libre de responsabilidades como compromisos reales o asuntos del palacio, era que se dedicaba a buscar su propia felicidad.

No era algo que gritara a los cuatro vientos, sobre todo porque prefería evitar el escuchar burlas, pero en el fondo de su corazón, él quería encontrar a su verdadero amor, uno realmente bueno que lo hiciera sentir especial y amado, claro, no es que estuviera criticando a su padre o sus hermanos que tenían dos o tres esposas, pues cada quien encuentra el amor como puede o lo vive como quiera, pero él quería evitar a toda costa eso, no iba a repartir o dividir su amor entre varias personas porque iba a encontrar a la correcta, tardaría lo que tuviera que tardar, pero sabía que la encontraría, confiaba en las estrellas y los astros para que así fuera.

El rey en muchas ocasiones había insistido en presentarle a muchos jóvenes y jovencitas pero siempre declinaba las ofertas, el rey se preocupaba por su descendencia y quería que la dinastía creciera, pero a pesar de todo, comprendía los propósitos de su hijo y por eso no lo presionaba con el asunto de casarse o comprometerse joven, pues el mismo rey sabía de la inestabilidad que te traía el comprometerse sólo por el bienestar del pueblo o la corona, sus muchas esposas eran prueba de eso, pues en esa época solo se veía por asegurar un futuro estable y no la felicidad propia.

Pero por muy positivo que el décimo príncipe se mantuviera, había momentos en los que estaba por rendirse, prueba de ello, era la cara triste que ponía cada vez que veía a sus hermanos con sus esposas pasear por los jardínes o beber el té en la casa que se encontraba en mitad del arroyo dentro del palacio, también lo deprimía el ver sus rostros de felicidad cuando se tomaban de las manos o escuchar sus voces ilusionadas cuando se hablaba de un posible embarazo, todo esto, mientras él los admiraba a la distancia.

En una ocasión en la que no podía dormir fue a la torre principal que era el hogar del consejero de su padre, el hombre era muy sabio y sabía leer las estrellas, veía premoniciones y hasta podía predecir el futuro, necesitaba que alguien confiable le asegurara que no estaba loco, que esa persona que tanto estaba buscando en verdad existía, que no era un invento de su imaginación porque, de ser todo una ilusión, su corazón se marchitara y tendría que aceptar alguno de los arreglos de matrimonio de su padre.

El hombre de manera amable lo recibió en su morada a pesar de pasar de la medianoche, lo condujo escaleras arriba a su estudio donde le sirvió una taza de té y le preguntó por su pesar

-Es extraño que me visite a estas horas, ¿Hay algo que lo inquiete, príncipe?-

-Sí, es una cosa que me ha quitado el sueño varias noches pero, hasta ahora, no había tenido el valor de preguntar por ello-

-¿Qué es lo que necesita exactamente?-el consejero ya lo sabía, pues noches atrás, ya había previsto este encuentro

-Se que sabes leer las estrellas-el hombre asintió-necesito una consulta sobre...mi destino-"destino" no era la palabra que el príncipe quería usar, pero estaba algo avergonzado de decir en voz alta el verdadero propósito de su visita

-Comprendo-dejando su taza de té en la mesa de madera, el hombre fue hacia uno de los cajones de un escritorio de donde saco una pequeña bolsa de tela oscura-mi especialidad siempre ha sido la litomancia, ¿Sabe lo que es eso?-el joven príncipe negó-es el arte de adivinar el futuro con piedras o gemas-el hombre fue hacía una mesa más pequeña tomando asiento delante de ella, llamando después al príncipe-tome asiento-dijo extendiendo su palma para señalar el lugar frente a él

-¿Qué es lo que hará?-la confusión reinaba el rostro del más joven

-Dentro de esta bolsa hay nueve piedras, todas con un color y significado distinto-al agitar la bolsita se escuchó el sonido de piedras diminutas chocar-cada una tiene un significado que le explicaré-al decir eso, saco las piedras alineándolas en la mesa-la tierra son los bienes materiales, la luna sus emociones, el sol éxito, Mercurio su relación con el entorno, Venus simboliza el amor-el rostro del príncipe se sonrojó-Marte es dinamismo, Júpiter pasar de página, Saturno los obstáculos y una novena piedra simboliza lo desconocido, ¿Ha entendido?-su asentimiento lo tomo como un sí-bien, siguiente elemento-el consejero acercó una vela que ya tenía puesta sobre una base, la prendió en un rápido movimiento y miró al príncipe-usted deberá hacer una pregunta, no necesariamente en voz alta pero necesita pensar muy bien en ella-

-De acuerdo-cerrando sus ojos pensó en su pregunta, aunque de hecho, no tenía mucho que pensar y le daba más confianza el no tener que decirla, ¿Encontrare a esa persona especial?-listo-BonSong, guardo las piedras en la bolsa que agitó nuevamente para después abrirla y sacar tres piedras

-El número es impar, por lo que la respuesta es sí-la emoción burbujeo en el interior del príncipe-pero antes de precipitarnos debemos leer las piedras-su estómago se apretó, él pensó que sería sencillo-la luna, Venus y el sol-el consejero sonrió-vaya, estos son colores que nunca había visto-

-¿Eso es malo?-sus manos jugaban juntas bajo su hanbok azul

-No, de hecho-las tres piedras fueron colocadas frente a él-son demasiado buenas-con su dedo fue señalando una por una-la luna que representa las emociones es de color verde, lo cual nos indica que habra soluciones en cuanto a problemas sentimientales-la siguiente, Venus, era de color rojo-el amor y la pasión están cerca, tal vez más de lo que usted piensa-su labio inferior temblo un poco, puede que con eso, BonSong ya estuviera imaginando que clase de pregunta hizo-la tercera, el sol, es de un naranja brillante-

-Significa...-en cualquier momento comenzaría a morderse las uñas si BonSong seguía con sus pausas dramáticas

-Éxito, energía y poder personal-las piedras le daban un mensaje muy claro al mayor, pero el más joven no lo entendía-majestad, no es un secreto, y menos para mí, que usted no está interesado en el trono real o la corona-el príncipe desvió la mirada-su mente y corazón están afligidos por una preocupación diferente, ¿O me equivoco?-

-Creo que...no soy muy bueno disimulando-el príncipe aceptó su derrota-es solo que...¿Las personas destinadas existen o solo son cuentos para niños?-sus ojos pedían una explicación-por las noches me la paso mirando las estrellas deseando en verdad encontrar a mi complemento, me cuestiono demasiado el porqué no la he encontrado-de pronto, mirar su vestimenta fue más interesante que mirar las piedras con su destino sobre la mesa-¿Estoy haciendo algo mal?-

-Dígame una cosa-BonSong ignoró sus reproches personales-¿Ha tenido sueños extraños? ¿Ve recuerdos que parecen no ser suyos?-

-Sí...-el aliento se le fue por un momento, ¿Cómo sabía BonSong de eso?-yo...he visto a un hombre alto, no distingo muy bien su rostro pero sí sus ropas, se que viste de negro con dorado, los colores de los soldados del palacio-el solo recuerdo de ese misterioso hombre lo hacía estremecer-en mis sueños él siempre está cerca, pero, es como si estuvieramos en otro lugar con ropa diferente y rodeados de otras personas-

-¿Cómo se siente cuando está con ese hombre?-la pregunta lo tomó por sorpresa

-Es...difícil de explicar-su pecho se sintió cálido-a su lado me siento seguro, como si no dudará de que puede protegerme y...me siento amado-una tenue sonrisa iluminó su rostro-¿Eso está relacionado con esto?-su mirada volvió a las piedras sobre la mesa

-Puede ser-el consejero se giró a otros cajones para sacar un saquito más pequeño-las piedras nos dan su predicción pero somos nosotros quienes nos encargamos de cumplirlas-BonSong tomó las tres piedras pasándolas sobre la vela-la paciencia siempre es una virtud, el tiempo es incierto pero los finales son seguros-después de purificar las piedras con el humo de la vela las guardo en el saquito color lila-sea cual sea su pregunta, la respuesta llegará pronto-tomando la mano del príncipe colocó la bolsita sobre su palma-conservelas, pongalas debajo de su almohada y carguelas consigo todo el tiempo-el amuleto sobre su mano lo hizo sonreír, después, ambos hombres se pusieron de pie-el lila representa tranquilidad, dulzura, calidez, meditación y reflexión-BonSong lo guió escaleras abajo-procure prender siempre un incienso de lavanda en su habitación y un baño de rosas también sería bueno-

-D-De acuerdo-el príncipe trató de hacer nota mental de todas las recomendaciones-BonSong...-susurró al consejero antes de irse-no le dirás a nadie de esto ¿Verdad? Ni al rey o a mis hermanos-

-Descuida-el hombre le palmeo la espalda-tu secreto está a salvo conmigo, Baekhyun-.

Durante al menos una semana estuvo siguiendo las recomendaciones de BonSong, todos los días encendía un incienso de lavanda en su habitación, tomaba baños de rosas a media tarde y llevaba consigo todo el tiempo la bolsita lila con las piedras, había tenido que mandar a hacer todos sus hanboks con una pequeña bolsa escondida en el interior, pero le gustaba pensar que todo eso valdría la pena en algún momento.

Aún seguía mirando las estrellas para pedir un milagro e iba al templo al final de la colina a dejar una vela frente al altar de los dioses, se quedaba ahí unos minutos y después se iba, deseando con todo su corazón que sus súplicas y el amuleto de BonSong hicieran efecto.

Solo un día se vio privado de llevar a cabo su ritual, pues, justo cuando estaba por ir a tomar su baño de media tarde, su padre solicitó la presencia de todos sus hijos en el salón del trono, al parecer debían reunirse para darles la bienvenida a los soldados que habían ido a custodiar la frontera del sur, que durante un tiempo se vio atacada por soldados de la región vecina atemorizado a los pobladores de las tierras de su padre, no fue un enfrentamiento sangriento, pero los ataques no faltaban y algunos soldados había perdido la vida, por lo cual, era de admirar que hubieran vuelto al palacio nuevamente.

El resto de los príncipes, sus familias, el consejo real y el rey en compañía de su consejero ya estaban reunidos esperando por la llegada de los soldados, dentro del salón se escuchaban algunos murmullos de parte de los príncipes, risa y bromas, suspiros de las esposas y futuras felicitaciones por parte de los miembros del consejo, pero, todo esto se vio interrumpido cuando un mensajero entró por la gran puerta, su voz fue clara y los puso a todos en alerta

-El general Park Soo Kyung y su ejército han llegado-el rey asintió en su dirección

-Déjalos pasar-Baekhyun se perdió brevemente pero volvió a la realidad cuando fuertes pisadas se hicieron presentes en el salón, los soldados había ingresado-sean bienvenidos honorables guerreros-el rey les dió la bienvenida bajando del trono para ir al encuentro con el general-Soo Kyung-

-Taejo-el general estrechó su mano seguido de un abrazo-es un placer verte nuevamente viejo amigo-

-El placer es mió, es bueno saber que estás en una sola pieza-ambos se carcajean

-Siempre fui mejor en combate que tú-Soo Kyung miró su vestimenta

-Por eso soy el rey-su padre apretó el hombro contrario-ahora, ¿No vas a presentarme a ese excelente guerrero del que todos hablan?-el general hizo un gesto con la mano al resto de sus soldados, pero solo uno respondió, un hombre más alto que el resto hizo su camino en medio de la multitud hasta posicionarse al lado de Soo Kyung-Taejo, te presento a mi mejor soldado, Park Chanyeol-su pecho se hinchó de orgullo-mi hijo-

Chanyeol, Park Chanyeol...la mente de Baekhyun hizo clic cuando lo miró, ahí, de pie justo al frente de su padre, se encontraba el extraño hombre de sus sueños, aquella figura poderosa que lo acompañaba y llenaba su pecho de calidez, amor y tranquilidad.

¿Cómo no lo reconoció? Fácil, Baekhyun lo conocía, claro que lo hacía, pues convivieron cuando eran niños y parte de su adolescencia, pero de eso habían sido ya muchos años, su apariencia física no era la misma que hace cinco o seis años, no, ahora uno era un príncipe y el otro un reconocido soldado de la guardia real, del ejército de su padre.

Si el destino o aquellas piedras que llevaba en su hanbok escondido tenían razón y Chanyeol era su destino, pues, no iba a quejarse, porque sí era honesto, siempre tuvo un enamoramiento por el soldado, aquel niño que siempre lo protegía de las bromas de sus hermanos mayores, quien no lo rechazaba para jugar a la pelota o que incluso iba a la biblioteca a leer con él.

El tímido adolescente que transcribió su poema favorito y se lo obsequió como regalo de cumpleaños, quien le compró su peineta favorita y quien bebía té de menta con él frente al arroyo. Baekhyun deseaba que fuera él, quería que Chanyeol fuera el elegido del destino para él.

No fue consciente sobre en qué momento pasaron al comedor, no sabe si fue cuestión de parpadear o si sus hermanos lo jalaron del brazo, pero ahora, estaba sentado en el suelo frente a la mesa adornada con distintos platillos, rodeado por sus hermanos y esposas, su padre, BonSong, Soo Kyung y Chanyeol, esperen, ¿Cómo es que solo acabaron ellos en el comedor?

-¿Desea té, príncipe?-le preguntó una de las damas, pero estaba tan distraído que tardó en reaccionar o entender la pregunta

-¿Eh?-miró la tetera que le ofrecían

-Té, es de naranja-explicó la dama, sin embargo, no fue él quien respondió

-Al príncipe no gusta la naranja, si alguna de las otras damas lleva de menta entonces sería perfecto-la profunda voz que sonó a su lado lo puso nervioso

-Como guste, soldado-la respuesta de la dama lo hizo ladear el rostro, topándose con Chanyeol sentado a su lado, ¿En qué momento sucedió eso?

-¿Quiere que le sirva?-preguntó el alto mirando su plato vacío

-Debería ser yo quien te sirviera a ti-el soldado negó

-Nunca me han gustado las formalidades, no soy mi padre o el rey-

-Entonces no me hables como si no me conocieras-su falsa molestia hizo reír a Chanyeol

-No has cambiado en nada, Baekhyun-ignorando su respuesta anterior, el alto tomó su plato comenzando a servirle, el príncipe sólo podía admirarlo, la vestimenta de soldado le sentaba bien, el largo cabello lacio sostenido por una cinta lo hacía ver más varonil, ¿A donde se había ido el chico de cabello rizado?-¿Escuchaste lo que dije?-

-¿Eh?-sus mejillas se tiñeron de rojo al haber sido descubierto mirándolo tan descaradamente

-La comida, sin pepino ¿Verdad?-Chanyeol sonrió casi riéndose de él

-Oh, sí-por su vergüenza y el repentino encuentro no hablaron mucho, además de que su padre mantuvo ocupado a Chanyeol hablando de otras cosas, por eso, cuando la comida llegó a su final, Baekhyun se retiró algo triste a su habitación, esperaba que tal vez al día siguiente pudiera ver al alto y hablar con más calma.

A la mañana siguiente, cuando Baekhyun se disponía a seguir con su ritual nuevamente, otra vez se vio interrumpido cuando un sirviente tocó a la puerta de su habitación cuando iba de salida a los baños

-Perdón que lo moleste majestad, pero un soldado quiere verlo-olvidando el baño de rosas que debía darse le contestó de inmediato al sirviente

-Hazlo pasar de inmediato-la reverencia fue la salida del mensajero, tuvo poco tiempo después de eso, pero hizo lo que más pudo al correr a su espejo y comprobar que su peinado estuviera bien y su hanbok amarillo con azul estuviera impecable

-El soldado Park, majestad-Chanyeol vestía ropas diferentes pero en los mismos colores sobrios, siendo esta vez rojo y dorado, eso sí, su espada colgaba del cinturón que iba en su cadera

-Majestad-el alto le otorgó una reverencia y después una sonrisa-si no está ocupado, me gustaría invitarlo a beber el té conmigo-Baekhyun camino hacia él

-Acepto su invitación-correspondió la reverencia, Chanyeol le sonrió extendiendo su brazo para que lo tomara, su gesto caballeroso provocó que se sonrojara-puedes decirle a las damas que cancelen el baño-dijo mirando al sirviente-no necesito compañía-habló adivinando la pregunta que seguramente le haría el joven

-Pero, majestad...-

-Saldré con un soldado, el mejor de toda su clase-el sirviente se guardó lo que iba a decir-creo que estaré en excelentes manos-

-Como ordene, majestad-despidiendo al sirviente, cerró la puerta de su habitación, saliendo del palacio en compañía de Chanyeol.

Como lo supuso, Chanyeol lo llevó a la casa cerca del arroyo, donde la mesa del té ya estaba puesta justo a algunos bocadillos, el príncipe no podía creer que el soldado todavía recordará esos detalles después de algunos años, aunque, no es como si fuera el único.

Baekhyun aún tenía recuerdos y memorias muy claras sobre los gustos del alto, como su gusto por los lugares abiertos y tranquilos como lo era la casa del té, su preferencia por los dulces de fresa con jalea o aquel cojín gris que siempre usaba para sentarse, creo que, ya se podía deducir que ambos eran bastante obvios.

Cuando tomaron asiento y Chanyeol procedió a servir el té, por supuesto que no le extrañó que fuera de menta o que hubiera elegido la vajilla que su madre usaba, casi era como si el soldado pretendiera hacer alguna confesión o una proposición, su corazón se aceleró de solo pensarlo, el peso de la bolsita escondida entre sus ropas de repente hizo que todos sus sentidos se alertarán, ¿Acaso las estrellas lo habían escuchado? ¿El amuleto que llevaba consigo había funcionado?

-Estas muy distraído-habló Chanyeol luego de darle un sorbo a su taza

-Pensativo y distraído son cosas distintas-una mentira para no decir que él lo distraía

-Uhm...¿Es malo? ¿Te preocupa?-sus delgados dedos dejaron la taza en el plato

-El pensar no necesariamente involucra cosas malas, pero agradezco que preguntaras-aún así, el ceño fruncido no desapareció del rostro del soldado

-Pensé que...podría ser algo relacionado con un compromiso-su mandíbula se tensó al hablar-tu padre...mencionó que todos sus hijos estaban comprometidos menos tú-Baekhyun se concentró en las galletas-¿No quieres llegar al trono?-

-Sabes que no me interesa el trono-la molestia se reflejó en sus ojos-no pienso en el compromiso, eso es todo-se puso nervioso-lo haré cuando llegue la persona correcta-

-Romántico como siempre-Baekhyun rodó los ojos a la respuesta de Chanyeol-yo lo he pensado, supongo que el estar a punto de morir aunque sea en pequeños enfrentamientos te hace pensar en ese tipo de cosas-

-¿Alguien en mente?-no es como si quisiera escuchar la respuesta, pero la curiosidad lo instó a preguntar-ahora que has vuelto, apuesto a que miles de jovencitas harán fila para ser tus esposas, tu fama de gran guerrero ha llegado hasta el pueblo incluidos los sirvientes y la casa de baños-lo caliente del té parecía calentarlo a él también-puedes elegir-el chocar de su taza con el plato no fue amable

-Mis opciones solo se reducen a una persona-Chanyeol bebió de su taza con calma-un distraído jovencito que creí que adivinaría mis intenciones al traerlo a beber su té favorito y escoger los mejores bocadillos-el príncipe se crispó como un gato-pero, veo que me hace falta ser más directo si pienso llegar a algo-con calma, el soldado sacó de un bolsillo pequeño dentro de sus ropas una piedra-antes de partir al sur, BonSong me dió esto-al extender su mano, Chanyeol le mostró un cuarzo rosa-me dijo que cuando llegara el momento, esta piedra me traería de vuelta a casa y me mostraría mi destino-Baekhyun miraba la piedra pensando en las que llevaba consigo-antes, su color era opaco y hasta llegué a pensar que solo era una tontería de BonSong pero, por muy increíble que parezca, el último día está cosa brillo, en verdad lo hizo-los ojos de ambos estaban puestos en el objeto-luego de eso recibimos la noticia de que podíamos volver a casa, supuse que no pasaría nada después de eso, pero, ayer cuando estaba por dormirme y la saqué de mi bolsillo, su color se volvió más intenso, BonSong dijo que eso solo pasaría cuando el cuarzo encontrara a mi destino, cuando tuviera delante de mí lo que tanto estuve pidiendo a las estrellas-sus ojos pasaron del cuarzo al príncipe-en mis sueños, veo una figura delgada que viste un elegante hanbok azul, alguien que me trae paz y tranquilidad pero, que sobre todo, me hace sentir amado-

-Hay un hombre, una figura alta que viste ropas de soldado que me visita a mí también-su mano viajó al bolsillo entre sus ropas donde escondía su amuleto-ese hombre me hace sentir protegido, cálido y amado-por alguna extraña razón, el saquito lila que protegía las piedras había desaparecido, por lo que sólo extendió su mano con las piedras al descubierto-jamás pude ver su rostro, tal vez era porque el destino quería que lo observara frente a frente-Baekhyun colocó las piedras sobre la mesa y Chanyeol hizo lo mismo con la suya

-Entonces...¿Qué opinas del compromiso ahora?-la mano del soldado tomó la suya

-Creo que podría pensarlo-el príncipe se rió risueño-puede que lo piense mejor si tomamos el té más seguido-Chanyeol alineó las piedras sobre la mesa, dejando que las de Baekhyun rodearan su cuarzo

-Creo que entonces tomaremos té todos los días-ambos habían querido ser el destino del otro, y las estrellas los escucharon.

Tome un poco de referencia el drama en el que apareció Baekhyun, Moon Lovers: Scarlet Heart Ryeo, obviamente, sin la dolorosa muerte de Wang Eun personaje que interpreta Baek.

Se que me tarde casi todo el mes en actualizar, pero fue mi cumpleaños, además, enfoque toda mi atención en "Loey-Fan" por San Valentín, si no la han leído ya está en mi perfil, espero les guste.

En fin, ya voy a estar actualizando la historia y deben estar pendientes porque estamos cerca del final, eso es todo, nos leemos luego.

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