Estoy sentado en mi lugar de siempre en la biblioteca mirando a Baekhyun quien para mi sorpresa está solo, no he visto que Chanyeol aparezca por ningún lado, así que me digo a mi mismo que esta es mi oportunidad para acercarme a él, tomo mis cosas y de manera casual me siento frente a él llamando su atención, cuando nuestros ojos se encuentran le doy una media sonrisa, veo disimuladamente los libros que tiene a su lado y noto algo extraño, esta vez no son libros sobre literatura o sobre cuentos, son textos sobre experiencias sobrenaturales, y lo sé porque el título del libro que tiene al lado es bastante obvio "Encuentros con fantasmas o espíritus del más allá", como no pienso desaprovechar lo que tal vez sea mi única oportunidad de hablar con él decido intervenir

-¿Un título curioso y poco común para un estudiante de literatura, no lo crees?-levanta la mirada del libro que está leyendo y me mira

-Podría decir lo mismo del tuyo ¿Trucos para leer la mente? No creo que sea un tema propio para alguien que estudia filosofía-

-¿Todos podemos tener gustos peculiares, no lo crees?-me da la razón con un asentimiento de cabeza, pero antes de que vuelva a su lectura continuó-me parece extraño no verte acompañado ¿Dónde has dejado a tu novio?-lo veo ponerse rojo y tragar saliva, pero a pesar de eso su voz es bastante clara y directa

-Solo es mi amigo, pero eso no es de tu incumbencia-

-Ya veo, lamento si te moleste, pero bueno, por como te trata yo pensé que...-

-No, Chanyeol y yo no somos nada-sus cejas se juntan al decir eso último y guardo mis ganas de reírme, este es el momento perfecto para mi plan

-Bueno...entonces si entre ustedes no hay nada, supongo que no te molestaría si te invito a salir-

-¿Disculpa?-su cara me lo decía todo, estaba completamente rojo y juraría ver que sus manos temblaron cuando trato de cerrar el libro

-Si, claro que no lo hago con un interés amoroso si eso es lo que te preocupa...te propongo salir como amigos podemos, ir a mi departamento a tomar unas cervezas y comer algo de pizza o podemos ir a tu casa si es que desconfías de mí-vi cómo se tomaba un momento para pensarlo, pero estaba seguro de que aceptaría, tal parece que si Chanyeol no está cerca se vuelva más vulnerable, como si ya no tuviera valentía

-¿Esto no es un plan para tratar de secuestrarme o si?-

-Por supuesto que no, después de todo, dudo que de me den mucho por un estudiante promedio de literatura-su ceño se frunció ante eso pero contrario a todo me estiro su mano

-Está bien, acepto tu invitación-estrechamos nuestras manos

-¿Te parece saliendo de aquí?-

-¿Dices justo ahora?-

-Claro, mira, no es que sea un cobarde pero tu amigo de ha dejado muy en claro que no me quiere cerca de ti, y aunque soy bueno defendiéndome se que Chanyeol bien podría partirme en dos-suelta una carcajada pero veo como junta sus libros y se pone de pie así que sigo su ejemplo

-En eso tienes razón, pero no debes preocuparte por eso, se quedó en una clase de regularización así que dudo mucho que nos pueda interrumpir-una vez que ambos tomamos nuestras cosas y dejamos los libros salimos de la biblioteca

-¿A dónde te gustaría ir?-

-Creo que podemos ir a tu departamento, no me das la impresión de que puedas matarme o en todo caso de que quisieras hacerlo, se un poco de defensa personal-

-¿Acaso no me veo peligroso? Puedo ser intimidante si me lo propongo-

-No lo dudo, pero tu mismo has dicho que no te darían mucho por mi-

-Tienes razón, entonces sígueme, no vivo muy lejos de aquí y podemos llegar caminando-con eso ambos empezamos a caminar fuera de la universidad, al parecer mi plan iba a funcionar a la perfección.

Cuando me encontré con Jongdae en la biblioteca no voy a negar que me sentía nervioso, Chanyeol no había podido acompañarme debido a que iba mal en una materia se tenía que quedar a tomar clases extra y debo admitir que no tenerlo a mi lado me ponía ansioso, pues algo en la actitud de Jongdae me parecía extraño, era como si emanara desconfianza y se prendiera un foco rojo que me dijera que era peligroso ir con él, pero al final concluí que solo eran paranoias mías y que debía mantenerme tranquilo, después de todo, ¿Qué es lo peor que podría pasar?.

No caminamos mucho una vez que salimos de la universidad, llegamos a unos edificios muy altos y por lo que podía ver muy costosos, mirando asombrado todo lo seguí por la entrada donde saludamos al guardia y subimos al elevador, vi como marcaba el número cuatro y comenzábamos a subir, sin embargo había algo en el ambiente que lo hacía pesado, así que para aligerar la carga quise intentar conversar

-¿De verdad vives aquí o le invadiste a alguien el lugar?-

-¿No me crees con el suficiente dinero para pagarme esto?-

-No dije eso, solo que ni donde yo vivo es tan bueno-

-Bueno, algunos rompemos con el estereotipo de que si estudiamos artes o humanidades debemos vivir como vagos y parecerlo-

-En eso tienes razón...¿Vives solo o con tus padres?-

-Solo, mi madre vive con mi abuela lejos de aquí y mi padre...bueno, esa es otra historia-

-Te entiendo...supongo que no nos vamos a poner sentimentales ¿Verdad? No me das la impresión de ser alguien sentimental-

-Por supuesto que no lo soy, en todo caso lo serías tú-

-Contrario a lo que piensas no lo soy, como tú has dicho algunos rompemos el estereotipo de nuestra carrera-

-Touché-paramos nuestra conversación al llegar a su piso y nos dirigimos al departamento marcado con el número veintiuno , en vez de meter una llave Jongdae sacó de su cartera una tarjeta negra y la paso por el lector

-¿Eso es demasiada seguridad, no?-

-Nunca esta de más, no sabes que loco puede entrar a tu casa-cuando ambos ingresamos pude ver que el departamento era moderno y funcional, había una sala amplia en color gris acompañada de una mesa para café y un mueble para la televisión que al lado tenía unas repisas, todo en un pulcro negro, del otro lado estaba la cocina con una isla y un comedor pequeño en plateado, desde mi lugar en la entrada podía ver que el pasillo conducía a las demás habitaciones y que en las paredes había distintos cuadros con algunas pinturas famosas

-¿Impresionante, no?-

-Vaya...creo que no es como lo imaginaba, pensé que tendrías un desorden de papeles o miles de libros por todos lados-

-No me gusta el desorden ni la suciedad, eso solo obstruye tu creatividad, además no necesito tener libros tirados si una de las habitaciones la uso como mi oficina, ven, te mostraré el resto-

Tal como lo dijo me dio un recorrido por el resto del departamento, en efecto, había acondicionado una de las habitaciones como su oficina dejando la otra como su habitación personal la cual tenía un baño incluido más uno que había en el pasillo, pero a pesar de eso...no dejaba de sentir una sensación extraña en mi cuerpo la cual se intensificó en los breves momentos en los que estuvimos en su habitación, pero no tuve tiempo para cuestionarme eso cuando volvimos a la sala y Jongdae saco un par de cervezas para sentarnos en el sillón a hablar.

La plática que mantuvimos fue sencilla pero amena, Jongdae era un chico interesante aunque muy reservado, alguien muy ordenado y meticuloso por lo que pude ver, sin duda un obsesionado por el orden y la limpieza también, pero nada que no fuera normal, hasta me atrevo a decir que nuestro sentido del humor encajo bien aunque la mayor parte del tiempo hiciéramos comentarios sarcásticos, tampoco iba a negar que era atractivo, sus facciones eran muy masculinas y marcadas, tenía unos ojos violeta demasiado atrayentes, su cabello era de un negro profundo y tenía unos labios delgados, pero sin duda su mayor atractivo era ese extraño tatuaje que tenía en el cuello y que gracias a que iba sin sudadera podía ver que llegaba hasta su muñeca, era completamente extraño que esos trazos parecidos a los truenos en una tormenta eléctrica se me hicieran familiares, quise preguntar, pero me abstuve, después de todo no somos grandes amigos y apenas nos estábamos conociendo. Salí de mis pensamientos cuando mi teléfono sonó, al mirar el nombre le di una sonrisa apenada a Jongdae

-Perdona, pero ¿Puedo contestar mi llamada en tu baño? No tardare tanto-

-Si, ya sabes donde queda-me puse de pie y una vez que llegue al baño le puse seguro a la puerta y conteste la llamada

-¿Diga?-a pesar de que respondí en un tono tranquilo la voz del otro lado no pareció hacerlo de esa misma forma

-¿¡Se puede saber dónde carajos estás!? Te he mandado miles de mensajes y no me has respondido-

-Estaba ocupado-

-¿Ocupado? No me jodas Baekhyun, dijiste que me esperarías en la biblioteca, pero llego y no te encuentro ahí y cuando le pregunto al señor Milkway si te ha visto me dice que te vio con otro chico-Chanyeol hizo una pausa en donde pude oír cómo tomo una profunda respiración-¿Dime que no estás con quién creo que estas?-abrí mi boca para hablar pero no salió nada ¿Qué le iba a decir?

-Chan...perdón pero yo...te juro que estoy bien...Jongdae no es tan malo como piensas, él solo me invito a tomar algo a su departamento, conversamos un poco pero estaba a punto de irme-

-¿Te invito a tomar algo? ¿Acaso estás loco? Le pudo haber puesto algo a la bebida-

-No exageres, solo son unas cervezas y yo vi cuando las abrió así que no te preocupes ya estaba por irme-no planeaba escuchar un sermón de parte de Chanyeol, estaba dispuesto a colgar cuando algo me llamó la atención, delante de mí, Jongdae tenía distintos frascos pero un brillo provenía de ahí, aún con el celular en mi oreja me acerque para ver mejor lo que era hasta que lo tomo entre mis manos, era un anillo de plata pero no cualquier anillo, este tenía incrustaciones parecidas a una cadena alrededor, era muy pesado pero aún así lo levante para ponerlo a contraluz y cuando lo hice sentí como mi piel se puso fría y automáticamente una visión se presentó frente a mi

"Las lágrimas salían de mis ojos y por más que trataba de detenerlas estas no paraban, a mi lado se encontraban mis hermanos con sus rostros iguales al mío...una tristeza inmensa se podía palpar en la habitación y el hecho de que una tormenta se estuviera desatando afuera tampoco nos ayudaba mucho. Dirigí mi mirada a Chanyeol quien estaba a un lado mío con su mano apoyada en mi espalda en señal de apoyo, no teníamos nada que decir ante lo que teníamos enfrente, pues el cuerpo sin vida de mi padre yacía en la cama, yo había sido quien lo encontró, venía a despedirme de él pues tenía que acudir a atender unos asuntos con la corte en las fronteras del desierto de los mil soles...cuando al abrir la puerta lo encontré desplomado en el piso en medio de la habitación, había hecho todo lo que estuvo en mis manos para reanimarlo pero todos mis esfuerzos fueron en vano, había salido de la habitación para pedir ayuda...trajeron al médico real pero él tampoco pudo hacer nada...el rey había muerto.

Con ayuda de mis hermanos lo llevamos hasta la cama donde lo cubrimos y decidimos rezar una plegaria en su honor, nadie podía creer lo que pasaba...el rey quien no había presentado ninguna enfermedad o algún padecimiento había muerto, yo no me atrevía a mirar a nadie que no fueran mis hermanos y compartir nuestra pena pasando mi mirada por cada uno de ellos hasta que mi mirada se detuvo en Jongdae...él estaba apartado de todos y su rostro no denotaba emoción alguna, no había rastros de lágrimas en sus mejillas o algo que que me dijera que estaba triste, estaba por pasar de largo cuando note el anillo en su dedo...el anillo de mi padre estaba en su dedo, lo analice con cautela y pude ver como al bajar la cabeza se dibujaba una sonrisa en su mirada y tocaba el anillo...simplemente no había otra explicación...sin que nadie lo esperara me abalance sobre él llamando la atención de todos

-¡Eres un maldito, bastardo!-lo tomé por el cuello de la camisa y con todas mis fuerzas lo estampe contra la pared-¡Cómo pudiste, maldita bestia sin corazón!-su expresión era de horror y trataba de librarse de mi agarre gritando 

-¡Suéltame, hermano! ¡Baekhyun, por favor!-Chanyeol y Tao fueron hasta nosotros para separarme de él, pero aun así cuando lograron separarnos seguí gritando

-¡Tú lo mataste!...¡Eres un maldito traidor cobarde!...¡Asesinaste al rey, a tu padre!-quería molerlo a golpes pero los brazos de Chanyeol me lo impidieron

-Baekhyun por favor, no sabes lo que dices, tiene que respirar su majestad-

-¡Jongdae lo mató! ¡Lleva el anillo de plata de mi padre!-volví a intentar atacar pero Tao me lo prohibió, lo único que pude hacer fue mirar el anillo y luego a él-Sé que fuiste tú, mi padre llevaba ese anillo anoche y tú no llegaste hasta la madruga al castillo-su mirada me lo dijo todo...sus ojos verdes eran fríos y me desafiaban...Jongdae había matado a mi padre...había robado el anillo del rey"

La voz de Chanyeol me trajo a la realidad, era su voz pronunciando mi nombre desde muy lejos, con el anillo en la mano y mi mente despejada al fin logré hablar

-Chanyeol-

-¡Acabas de escucharme Baekhyun!-

-Chanyeol...necesito que vengas...te necesito ahora-su respiración se oía agitada igual que la mía

-¿Qué? ¿Baekhyun, que paso?-

-Fue Jongdae...Chanyeol fue él...él fue quien mató a mi padre...es el hijo del rey del trueno-