Una semana habia pasado desde el ataque de Jim quien luego de estar en coma por tres días se encuentra fuera  de peligro claro que esta siendo monitoreada constantemente por los médicos, y obviamente Nico no se ha separado de ella en ningún momento lo que se ha notado en sus ojos que lucen cansados  con ojeras evidentes y aunque la pelirroja ha tratado de decirle que se siente mejor el rubio no ha querido dejarla sola.

—Nico, debes ir a dormir a tu casa hoy—dijo Jim.

—No te dejaré sola hasta que salgas del hospital—dijo Nico.

—Está bien—dijo Jim con voz cansada—. Pero debes ir por un café, tengo sueño y debo dormir—agregó.

Nico asintió le dio un beso en la mejilla y salió hasta la cafetería del hospital. En ese tanto mientras esperaba su café se decidió a que una vez que Jim saliera del hospital le pediría ser su novia.

—Nico te estaba buscando— Leticia la madre de Jim se acercó a él.

—Dígame ¿En qué puedo ayudarle? —preguntó el rubio.

—No había tenido tiempo para  agradecerte por cuidar de mi niña—su tono de voz cambió—. Yo no se que sería de mi vida sin ella.

—Por Jim yo daría hasta mi vida—dijo Nico muy seguro.

—Estoy consciente de eso y agradezco a la vida por volverte a poner en el camino de Jim—la mujer sonreía genuinamente—. Y yo soy fiel creyente de que las segundas oportunidades deben aprovecharse.

Nico sonríe y continúan una amena conversación.

*****

Ramiro y Yam han estado muy juntos desde lo ocurrido con Jim situación que a ambos les afectó de sobre manera, pues consideran a la pelirroja más que su mejor amiga su hermana pequeña, llena de energía y ahora verla en la cama de un hospital en recuperación les provoca una evidente tristeza.

Aunque claro hay algunos que no están felices con todo esto, y ese es el caso de Gustavo que ha intentado hablar con la rubia pero ha sido imposible, por eso apenas la vio recoger sus notas en la academia se acercó a ella.

—¡Yam! —corrió rápidamente hacia ella, la rubia se detuvo—. Necesitamos hablar—dijo tomando aire.

—Ahora no puedo debo ir con Ramiro...

—¡Otra vez con ese chico! —gritó Gustavo—. Te la pasas con él todo el maldito tiempo—acusó.

—Es mi mejor amigo—se defendió Yam—. Y por si no te acuerdas nuestra mejor amiga casi muere—agregó.

—También es tu ex—Gustavo alzó aún más la voz—. Yam o dejas de ver a Ramiro...

—O si no ¿Qué? —interrumpió con decisión—. Gustavo, creo que estas confundiendo las cosas yo no soy tu propiedad no tienes derecho a prohibirme nada y si vas a ser así es mejor dejar lo que tenemos hasta acá—Yam comienza a caminar.

—¿Me dejarás por ese idiota? —preguntó Gustavo tomando el brazo de la rubia.

—Te dejo por imbécil—contestó—. Y ahora sueltame porque me estás lastimando—Gustavo la miró duramente y segundos después soltó su brazo.

*****

—Que pena que ya tengan que volver—dijo Beto mientras caminaban al aeropuerto.

—No podemos dejar el Roller tanto tiempo—dijo Simón cargando su maleta—. Y menos ahora que Nico esta el hospital cuidando de Jim.

—Espero que esa chica esté bien—comentó Linda—. Lo que le sucedió es horrible—agregó con pesar.

—Nuestros amigos dicen que pronto se va a recuperar—interviene Ámbar.

—Simón ¿Seguro que no quieres quedarte? —preguntó Vero.

—Mamá, ya te dije que Ámbar es la chica que elegí para toda la vida es con quien quiero formar una familia—responde Simón con seguridad—. Todo lo que hiciste esta semana de vacaciones me demostró que ella es perfecta para mi.

Vero esbozó una pequeña sonrisa no le gustaba la idea de que su hijo fuese novio de una chica como Ámbar, por eso cuando estuvieron de vacaciones en su casa intentó hacerle la vida imposible a la rubia, sin embargo, ella no cedió en ningun momento.

Simón al darse cuenta de la situación de incomodidad intentó hablar con su madre, pero era imposible hacerla entrar en razón es por eso que decidió que lo mejor era volver a Argentina antes de lo previsto con la escusa que el roller no podía estar sin ellos tanto tiempo.

—Es hora—dijo Ámbar tomando su bolsa.

—Tengan un buen viaje—dijo Beto—. No olviden llamar.

—Lograste separarme de mi hijo—susurró Vero en el oído de Ámbar—. Espero les dure la felicidad.

— Bien, tenemos que irnos—Simón tomó de la mano a Ámbar, miró a su madre decepcionado y se despidió.

Ámbar por su parte solo esperaba que algún día Vero la aceptara, pero por ahora no tenía ganas de verle la cara por un buen tiempo más.

*****

La situación en el Roller estaba algo complicada Eric seguía a cargo un poco más aliviado al enterarse que Ámbar volvería pronto, aún así hacerse cargo por completo era muy agotador; aunque la relación con los chicos era buena, existía una tensión entre él y Maximiliano.

—Te traje algo de comer—Jazmín se acercó a él.

—Gracias Jaz—el chico le sonrió de inmediato—. Perdón por no estar tanto contigo.

—Tranquilo te entiendo—Jazmín acarició la mano del chico—. Aunque cuando Ámbar vuelva le pediré que te de unos días de descanso para que vayamos a la playa—sonrió y Eric le dio un beso en los labios.

En ese momento entró Nina si bien se incomodó un poco, podía notar como su ex estaba feliz.

—Nina, Creí que estabas en el club de periodismo—la voz de Pedro se escuchó tras ella.

—Pedro—Nina le sonrió—. Si pero venía a contarte que me aceptaron en UCH para el programa de intercambio —dijo emocionada.

—Esa es una gran noticia—se alegró Pedro.

—Es lo mejor que me ha pasado en la vida—Nina no podía más con la emoción.

—Eres la mejor escritora que conozco, y claro que tenían que reconocer tu talento.

Nina le da un abrazo que el chico recibe con gusto sintiendo algo más que una simple amistad por la pelinegra, sin embargo, confesarse ahora sería contraprudente.

*****

Como se ha vuelto costumbre Gastón espera a Delfina a la salida de la universidad.

—Perdón por la demora—se disculpó Delfi—. El profesor alargó la clase—dijo con cansancio.

—No te preocupes—Gastón le dio un corto beso—. Pero tengo solo una hora antes de entrar al roller.

—Una hora que podemos aprovechar muy bien—Delfi enrolla sus manos en el cuello del chico y le da un apasionado beso.

Gastón la toma por la cintura continuando el beso, Delfi toma la mano del chico para comenzar a caminar.

—Delfi, te amo—Gastón acarició el cabello de la chica.

—Te amo, Gastón—Delfina sonríe.

Ambos están completamente feliz del buen camino que ha tomado su relación, y sin dudas cada vez su amor se hace más fuerte.

*****

—¡Corte! —gritó el director—. Quedan libres—informó.

—Mañana es el último día de grabación—dijo Matteo—. Sabes siempre creí que sería la mejor princesa del mundo—le sonríe a la chica.

—¿Eso crees? —pregunta Emilia.

—Primero te quise como protagonista de mi video por tu técnica para patinar—dijo—. Pero luego con el tiempo y cada ensayo juntos me di cuenta que además eres hermosa—confesó.

—Matteo... No es un buen momento—dijo Emilia.

—¿Es por Luna? —preguntó Matteo.

—No quiero que ella nos haga daño, y estando juntos lo va querer hacer—Emilia sonaba triste—. Yo prefiero que ella supere lo que ustedes tuvieron y luego vemos que pasa—agregó con un pequeña sonrisa.

Matteo suspiró entendiendo lo que Emilia le decía, pero no podía dejar que por alguien más las cosas entre ellos se vieran afectadas por lo que debía hablar con Luna lo antes posible y tratar de hacerla entender que debía de seguir su vida sin meterse en la de él.

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Yo se que esta historia estuvo abandonada mucho tiempo, pero es que no encontraba las palabras justas para que todo tuviese sentido, pero ahora les aseguro que vuelve y va a tener su debido final
Gracias por seguir leyendo!!