*Lennon en multimedia*

Lennon:

1..

2...

3...

Presiono en el botón de en vivo e inicio una trasmisión mostrando mi mejor sonrisa mientras uso mi ropa de pastelera y en las manos llevo unos cupcakes deliciosos de fresa con chocolate.

—¡Hola a todos!—Saludo y enseguida recibo comentarios, desde hace medio año que empece en tik tok he recibido más y más gente, mis cupcakes se han echo muy conocidos y no hay semana que no tenga pedidos, también elaboro pasteles, pero los cupcakes son mi delirio y los de mis seguidores también.

"Amo tus cupcakes"

"Son tan deliciosos, no dejo de pedirlos"

"El sabor y las decoraciones son hermosas"

—¡Gracias a todos los que se conectan, acabamos de iniciar Live!—Hablo sonriendo y muestro mis cupcakes para luego empezar a responder comentarios.—¡Por favor compartan para llegar a más personas!

"¿Cuanto estan los cupcakes?"

—18 dolares la media docena y 35 la docena.

"¿Usan delivery? ¿Lo pago yo o  ustedes?

—Si uso delivery y lo pagas tú, el precio depende a que distancia te encuentres.

"Ya no quiero, gracias. Deberías pagar el delivery"

Ruedo los ojos.

"¿Tienes pastelería?"

—No, aun no... por ahora me ayudo con las redes y me va muy bien.—Contesto feliz.—Pero deseo tener una pastelería algún día.

"¿De que son los cupcakes que tienes ahi? Me gusta la decoración"

—Estos son de chocolate y fresa, mis favoritos y gracias por el cumplido.—En esta ocasión mis cupcakes tienen mariposas y perlas comestibles como adornos.

"¿Cómo hago el pedido?"

—Por mi instagram.—Contesto.—Me mandas la captura de los que deseas, haces la trasferencia y tus cupcakes llegaran al día siguiente o depende de la distancia en la que te encuentres.

"¿Al día siguiente? Yo quiero comer ahora, despues ya no tendré hambre :/"

—Pues no uso la tele trasportación, asi que... 

Me envían emoticones de risas.

"Cerda, seguro se come todo los postres"

"Ella se paga los mismos postres y se los come, por eso esta tan obesa"

La sonrisa se me borra y suspiro, acerco mi mano al teléfono sobre el aro de luz.

—Y bloquear comentario.—Pronuncio y eso mismo hago.—¿Seguimos?

Escucho la moto estacionarse fuera de la casa y mi amiga no tarda en entrar a la sala, cruza la cocina y me hace señales, aun lleva puesto su casco, asi que intuyo que algo paso y me despido en el live.

—¿Qué traes?—Pregunto cuando se acerca.

—Hicieron un pedido mientras venia hacia aca.—Contesta mostrándome su teléfono y lo observo.—Casi me voy para atrás.

Leo lo que esta escrito.

"Enterprise Rice"

Miro a mi amiga y ambas gritamos.

Se que me he vuelto viral, pero...

¿Cómo es que una empresa que esta en el primer lugar de las más exitosas en el pais y que dirige el mangnate Ryan Rice se fijo en mis postres?

Mackenna:

Creí haber encontrado al hombre perfecto hasta que vi a mi supuesto hombre perfecto metiéndole la lengua hasta la garganta a quien era su socia de ventas. 

—Mackena...—¿Sorprendido? Si, lo esta.

¿Arrepentido? Claro que no.

—Si, Mackena, su esposa.—Miro a la mujer, quien sabe perfectamente quien soy y vuelvo a mirar al infiel.—Tu esposa, Marvin. 

El niega mientras la mujer se limpia el labial corrido por la mejilla izquierda.

—Aunque hagas eso no quita que te valores tan poco para meterte con un hombre casado.—Espeto y me mira furiosa.

—Mackena.—Me llama el infiel y niega.—No le hables asi.

—Tu no tienes vergüenza intentando defenderla. —Contesto y mientras escucho su patéticas palabras, me llevo la mano al anillo y me lo quito.—¿Ves esto? 

—Mackena, yo...

—Debería arrojártelo, pero hare algo mejor y lo venderé. —Paso la mirada a la mujer con la que me engaño.—Y a ti que te encanta hacer la papel de rompe hogares si le importaras tanto no te tendría con el titulo de "Amante"

—La "Amante" serias tu.

—Si claro.—Le muestro mi anillo de casada, el que pronto me desharé, pero no pienso quedar menos que esta víbora.

Se viene sobre mi y el la detiene, duele ver como la toca, claro que si y no voy a aguantar esto, salgo de la oficina y siento no solo miradas, sino teléfonos grabándonos y antes de llegar al ascensor, lo escucho.

—¡Mackena!

Mis pies se detienen.

—Devuélveme el anillo.

Hijo de puta.

Ni siquiera se digno a seguirme por otra razón.

Mis puños se aprietan y me doy media vuelta, aprieto el anillo de compromiso en mi mano y camino hacia el, pero durante el trayecto cojo un vaso lleno de café que se encontraba en el escritorio de uno de sus compañeros, abro la tapa y se lo aviento.

Café helado para aclarar.

La rompe hogares grita llevándose las manos a la boca.

—Tus cosas las quiero fuera de la propiedad de mis padres.

—¡Marvin, dejaras que te trate asi!

Marvin esta ocupado limpiando la espuma de su rostro, rompe hogares.

—¡Marvin!—Vuelve a chillar.—¡Me prometiste la casa!

Oigan a esta tipa.

—La casa, mi dinero en las cuentas de bancos me pertenece, es un acuerdo que firmamos al casarnos y más si uno le era infiel al otro.—Contesto por el. Esta mujer creía que iba a permitir que siguiera gastándose mi dinero en ella.—¿No te lo dijo mientras estaba ocupado metiéndote el pene?

—¡Maleducada!

—¡Una lección de moral de una rompe hogares!

—¡Marvin!—Chilla.

—¡Estas haciendo un espectáculo, Mackena, tengo contactos!

—¡Metete tus contactos por el culo!—Le arrojo el anillo y me voy.

Mamá tenia razón. Todo el tiempo lo tuvo, de manera cruel, pero lo tuvo.

(***)

Creo que subi tres kilos más despues de acabarme dos recipientes de helado y una de dos, amaneceré mal mañana o amaneceré mal.

En realidad es una de una.

Respiro profundo y comienzo a recibir mensajes al móvil, entre ellos uno de papá, queriendo matar al infiel.

¿Esperen como?

Me levanto del mueble e ingreso a una publicación en la que me etiquetaron en Facebook, Instagram y finalmente en tik tok...

—¡Noooo!

Mierda, soy tendencia en tik tok.

Nika:

Y ahora el nuevo éxito de Austin Gosper...

Austin Gosper, cantauror, escritor, poeta y mi inspiración...

Suelto un grito interno y le subo volumen a mi teléfono, coloco bien los auriculares inalámbricos y sigo moviendo las cosas detrás de las cortinas del escenario, los demás miembros del Staff también trabajan tras bambalinas y en el mismo escenario moviendo cosas o añadiendo más que hayan sido solicitados por el organizador del evento.

Esta semana nos toco atender que todo este correcto para una cantante de opera.

—¡Nika!—Me quitan uno de los audífonos.

—¡Hey!—Mierda, mi jefa.—Lo siento.

—Olvida eso, necesitan ayuda fuera del escenario ¡Ve ahora!

—¡Enseguida!

Corro hacia donde me indico.

"Tenemos buenas noticias ... Después de un corto descanso, Austin Gosper anuncia su próxima gira..."

¡Oh por dios!

Hailee:

Espero paciente a que el dueño de la editorial lea el primer avance de la segunda parte de mi novela y parece gustarle, termina las últimas líneas y...

—Me gusta.—Contesta con una sonrisa.

¡Si!

—Genial, No creí que inicio seria un  buen enganche y tenia dudas...

—Es maravilloso.—Me interrumpe y sigue pasando las hojas.—¿Podrás tenerlo listo dentro de tres meses?

—¿Tres meses?

—Terminaste tu primer libro en seis meses.

—Ya lo tenia escrito.—Digo honesta.—Solo me faltaban unas correcciones y de igual forma borre y cambie otras líneas

—No seria difícil para ti, tienes talento.

La cara me arde.

—En cuanto a lo que me entregaste que Lydia lea un fragmento del nuevo libro.—Le entrega el manuscrito a su secretaria, quien permanecía al lado.—Hoy mismo haremos un Live presentándolo.

La sonrisa se me borra.—¿Tan pronto lo va...?

—Por supuesto, los fans piden más de este romance y quieren ver a su autora leerlo, a Lydia.

Respiro profundo.

—¿Tienes alguna observación con eso?

—No, no lo tengo.

(***)

Llego a casa y abro Instagram, donde Lydia esta leyendo el inicio de mi novela, tiene más de 2000 personas conectadas y cada vez se suman más, todas enviando emoticones emocionados por el nuevo avance.

Respiro profundo y sonrio. Al menos mi novela es conocida y ... la paga es buena, me va bien y...

Dejo el móvil y me dirijo a la habitación, me quito la ropa quedándome en sujetador y bragas, mis manos se pasean por mi cuerpo y aplasto los lugares con exceso de piel.

Lydia es bonita y yo....

¿Si descubren que asi se ve la verdadera escritora de la saga que tanto aman, me aceptaran?

No soporto verme en el espejo, cojo una bata y me cubro con ella.

No me siento lista para sufrir más burlas.

Macy:

—¿Todo eso va a comer la cirujana?—Murmuran los internos y ya se quien será el próximo a quien reprobare.

Claro que no.

Ganas no me faltan.

—Es demasiada comida.

—Una persona no podría comer tanto.

—Ella si.—Risas y más risas.

—Oí que tiene una cirugía de 12 horas, se cagara encima.

Mis manos arrugan la bandeja que traigo, recibo lo último y es una naranja, agradezco y me vuelvo hacia las mesas, la mayoría ocupada por internos y todos ignoran que no me ven.

—Si.—Hablo para todos .—Voy a comerme todo esto ¿Ahora que lo saben estan felices?

Ninguno contesta.

—Sander.—Llamo a uno de los internos, los demás ríen en voz baja. Ya les tocara su turno.

—¡Si, señora! Digo... Señorita...

Ríen más fuerte y el se pone de pie.

—¿Quieres estar en el quirófano, no es asi?

—Por supuesto, es mi sueño, cirujana.—Su expresión preocupada se recupera.

—¿Y piensas que el ir al baño durante una cirugía es una prioridad por encima de atender un paciente y te parece gracioso que los cirujanos se hagan encima?—Prosigo.—Eres el cirujano a cargo... ¿Crees que debes dejar al paciente para ir a hacer tus necesidades?

Pueden usar pañales, pero esa no es la lección que quiero dar.

El intercambia miradas con sus amigos, ellos ya no ríen.

—Una vez que entras a un quirófano tu única preocupación debe ser tu paciente .—Miro nuevamente al interno.—Y vas a cagarte encima muchas veces si llegas a estar en uno. Todos ustedes...—Me dirijo a cada uno.—Van a cagar mucho, maldición y asi cagados no van a dejar de operar, y eso no es motivo de burlas.

—Cirujana Gelbman.

—No era nuestra intención..—Intenta hablar otra.

—Creo que ya todos entendieron que deben ir al baño antes, cirujana.

La voz desconocida me hace girar y es un hombre que no he visto antes, lleva bata y a diferencia de todos estos doctores, tiene un atractivo destacado, aunque eso es lo de menos.

—¿Y tu quien eres?

—El nuevo cirujano, soy Xavier.—Me extiende la mano.—Xavier Breant.

Puta madre...

Primer capítulo de "El amor no se mide en Kilos"

Volvimos con las historias múltiples jejej

Díganme que les parecio.

Nos leemos.

>>Yiemir.