HORA DE ACTUAR.

Las clases finalizaron y los alumnos comenzaron su viaje a sus respectivos hogares, por su parte Lincoln recogió su bicicleta y seguía pensando en las palabras de Rachel, después de todo él quería un cambio, pero el ahora entendía que, si quería ese cambio, él debía comenzar a pelear por ello. Solo que no sabía por dónde comenzar, aunque era mejor algo que nada.

Emprendió su viaje a casa donde comenzaría a planear algo.

"(Rachel tiene razón, si quiero tener una mejor vida, debo comenzar a pensar en algo. Creo que lo mejor para comenzar será el concurso de talentos que será la próxima semana. Quizá corra el riesgo de que me castiguen, pero valdrá la pena... Espero.)" Pensó Lincoln.

Llego a casa donde las chicas lo estaban esperando en la puerta, con algunas cosas en manos.

"Qué bueno que llegas perdedor, porque todas nosotras necesitamos tu ayuda, y para que comiences, me ayudaras a practicar para mi próximo torneo de golf que será en una semana, además de que pulirás mis palos de golf." Dijo Lori.

"Lo siento Lori, pero yo ya tengo planes, debo ir a una excursión con mis compañeros y profesora, así que no podré ayudarlas ahora." Mintió Lincoln.

"Las ordenes de papa fueron claras tonto, así que tendrás que ayudarnos primero." Dijo Luna molesta.

"Mis responsabilidades son primero chicas, entiendan que no siempre podré ayudarlas." Dijo Lincoln.

"O lo haces Lincoln, o le digo a papa que rompiste sus zapatos." Dijo Lola con su tono amenazante.

"Primero, Lana los rompió, segundo, no me importa, ya estoy cansado de que siempre me quieran usar de chivo expiatorio, yo me voy a realizar todo para mi excursión y punto." Dijo Lincoln y entro a la casa y fue a su habitación.

Al entrar sintió una sensación un tanto libre y agitada en su corazón, quizá ha esto le llamaban estar vivo.

"(Finalmente confronte a mis hermanas, pese a que mama y papa me castigaran, creo que será lo mejor para mí, no el castigo, sino que empiece a valerme por mí mismo.)" Pensó Lincoln.

Entro y cerró la puerta con seguro para evitar que alguien entrara y también cerro el ducto de ventilación para que cierta amante de la oscuridad no entrara.

"Ahora, por donde comienzo." Dijo Lincoln y saco su cuaderno.

"Debe ser algo original. Creo que me dejado llevar por el amor y desamor. Debo pensar en algo que no haya hecho antes." Dijo Lincoln.

"Que tal algo con.... No eso ya está algo usado.... Puede ser.... No tampoco algo que no tenga un hecho certero. Ummm, no se me ocurre nada. Quizá este así porque nunca había escrito con un objetivo o con algo de presión." Dijo Lincoln.

Lincoln seguía algo falto de ideas, por lo que miro su cuaderno para ver qué era lo que tenía hecho y que podía servirle ante la función.

"Están bien, pero la mayoría siento que les falta algo." Dijo Lincoln.

Siguió leyendo y todas las canciones para el estaban bien, pero sentía que les faltaba algo y que podían ser mejor.

"Curioso, las maestras me dicen que escribo bien, pero la verdad nunca me detuve a analizar mi escritura ya que siempre escribía lo que yo sentía. Y en su mayoría pensando en... No... Debo pensar en otra cosa." Dijo Lincoln.

El albino seguía pensando en podía escribir, pero no se dio cuenta que ciertas personas estaban escuchando lo que él decía, y no estaba muy contentas que digamos.

"Que estará planeando ese tonto." Dijo Lori.

"A lo mejor un plan contra nosotras." Dijo Luan.

"No lo creo sis, porque dijo algo original, tal vez esté buscando una vocación." Dijo Luna.

"Posiblemente. Habrá que vigilarlo para estar seguras." Dijo Liberty.

"Sera mejor que tenga cuidado, porque si hace algo que nos arruine, la pagara muy caro." Dijo Lola con su rostro amenazante.

Las chicas se marcharon de ahí, para comenzar con sus cosas, mientras que el albino seguía pensando que podía ser bueno para su canción.

Llego el jueves, Lincoln se levantó temprano para irse a la escuela y evitar a las chicas de que le pidieran hacer cosas que no quería, tomo su almuerzo que preparo y partió de la casa Loud.

Llegando a su escuela entro y se fue a visitar el salón de música y se sentó en una de las sillas.

"(Por lo general tengo mejor inspiración por acá, así que será mejor escribir una buena canción.)" Dijo Lincoln.

"Ya sé lo que me dirán, Lincoln, ¿Cómo vas a recitar tu canción, si no tienes un instrumento? Bueno, eso no será problema, ya que cuando vengo acá, por lo general practico un poco la guitarra, no soy un experto como Luna, pero se cómo tocarla y componer una que otra canción." Dijo Lincoln al espectador.

"Otra vez hablando solo, Lincoln." Dijo una mujer de pelo café claro, atado con una cola de caballo, que vestía de una camisa purpura y una falda azul oscuro y zapatillas negras.

"Hola maestra Sabrina, algo así, pero solo es para aclarar mis ideas." Explico Lincoln.

"Okey, aunque si es algo raro de ti. dejando eso de lado, venía a preguntarte que hacías aquí tan temprano." Dijo Sabrina.

"Vera maestra, lo estuve pensando varias veces, y creo que es hora de darme a conocer y tener algo en que dedicarme." Dijo Lincoln.

"Sabía que tomarías la decisión correcta Lincoln, tanto la maestra Kate, Johnson y yo te aconsejábamos que debías explotar tu talento." Dijo Sabrina.

"Y para dar el primer paso, participare en el concurso de talentos que se vendrá el próximo sábado, y decidí que recitare una canción que escribiré además de practicar un instrumento." Dijo Lincoln.

"Excelente Lincoln, solo una pregunta, ¿Qué fue lo que te hizo cambiar de opinión?" Pregunto Sabrina sobre su elección.

"Emm, bueno. Digamos que tuve una conversación con un "Ángel" que me decía que ya era hora de comenzar mi propio camino." Explico Lincoln, recordando su charla con Rachel.

"Está bien Lincoln, siempre ten en mente que todo se tiene que llevar con humildad, este consejo se lo di a varias personas que han sido mis alumnos, y se han convertido en personas muy exitosas, queridas y respetadas. Recuerda que no solo el talento te pondrá en la pantalla grande, sino el que seas una persona respetuosa, responsable, carismático. Te convertirá en alguien querido. Como mi padre me decía, "El éxito no se encuentra en las grandes conquistas, sino que también en los pequeños logros del día a día", te deseo lo mejor para el concurso Lincoln, estas para grandes cosas." Dijo Sabrina y se retiró del aula.

"Gracias maestra Sabrina, lo hare." Dijo Lincoln.

Mientras que el albino seguía concentrándose, una limosina llego a la institución y bajo Rachel y entrar a las clases, fue directo a su casillero y saco lo que necesitaba para hoy y se fue a su salón donde vio que era la primera en llegar.

"Al parecer tendré unos minutos de tranquilidad, antes de que lleguen todos." Dijo Rachel.

"Hola Rachel." Saludo Lincoln quien había llegado al salón y notar que Rachel había llegado temprano.

"Hable demasiado pronto. Hola Lincoln." Respondió Rachel.

"Sabes Rachel, estuve pensando en lo que me dijiste. Y tienes razón, es hora de que comience a hacer las cosas por mí mismo." Dijo Lincoln.

"Me alegra que hayas tomado la decisión correcta." Dijo Rachel con una sonrisa. "¿Qué te hizo tomar esa decisión?" Pregunto.

"El hecho de que quiera cambiar las cosas, tener pequeños logros para elegir mi sueño. Se que mi familia no lo ve ahora, pero estoy seguro de que estarán orgullosos." Dijo Lincoln.

"(Espero que sí, de todos modos, puedes hacerlo tu solo) Bien por ti." Dijo Rachel y siguió en su móvil.

"Oye Rachel, hoy habrá un estreno de una película de terror llamada "El recolector" y quería saber si querías ir conmigo." Propuso Lincoln.

"Umm, bueno, creo que no es mala idea, claro, todo sea para no llegar temprano a mi Mansión." Dijo Rachel.

"Bien, entonces iremos después de clases." Dijo Lincoln.

Mientras ellos platicaban no se dieron cuenta que ciertas personitas andaban metiéndose en los asuntos ajenos, que no disfrutaban de lo que oían.

"Con que eso era. Al parecer Lincoln quiere andar con ella." Dijo Lana.

"Eh, negativo unidad fraterna, de acuerdo con mis cálculos, Lincoln quiere comenzar a ser independiente y deslindarse de la familia." Dijo Lisa.

"En español Lisa." Se quejo Lola.

"Que Lincoln quiere hacer las cosas por su cuenta." Dijo Lisa.

"Y que por eso Lincoln no haya querido ayudarnos ese día, creo que esa chica tiene algo que ver con esto." Dijo Lucy.

"Habrá que decirles a nuestros padres para que tomen cartas en el asunto." Dijo Liberty.

"Después de vengarnos de esa tipa después de lo que nos hizo." Dijo Linka muy enojada.

"No me digas que ella las baño de pintura azul." Dijo Lola.

Solo vieron la cara de molestia de las albinas, dejando a entender que estaban en lo correcto, provocando la risa de las pequeñas.

"No se rían, eso no fue gracioso." Se quejaron las albinas.

"Para nosotras lo fue, parecían pitufinas de Xochimilco." Se rio Lana.

"O la versión barata de los personajes de avatar." Se rio Lucy.

"O las hijas no deseadas de Nébula." Se rio Lisa.

Las pequeñas siguieron con las risas, hasta que las albinas las callaron con unos coscorrones.

"Basta de burlarse de nosotras, y concentrémonos en un plan para que Lincoln respete nuestra autoridad." Dijo Liberty.

"No será necesario realizar un plan, solo es cuestión de dejar las cosas claras con Lincoln para que evite conductas reprobables." Dijo Lisa.

"Lisa tiene razón, Lincoln no es capaz de alzarnos la mano, aunque su vida dependería de ello." Dijo Lola.

"Pero en caso de que se atreva, deberemos ser más rudas con él para que entienda y tenga claro su lugar en esta familia." Dijo Lana.

La gótica reviso su reloj y vio que era hora de que comenzaran las clases.

"Debemos apresurarnos chicas, las clases ya van a comenzar, y no quiero llegar tarde." Dijo Lucy.

"Espeluznante y todo, pero siempre siendo una nerd." Dijo Liberty.

"Lo soy, pero eso no quiere decir que no cuide mi desempeño académico." Dijo Lucy y se fue alejando junto con Lisa.

"Concuerdo contigo hermana, debemos estudiar para no acabar como cabezas huecas." Dijo Lisa.

"O en el peor de los casos, en Lynn." Bromeo Lucy.

"Eso sí que sería una pesadilla." Se rio Lisa por el chiste de su hermana gótica.

Las clases transcurrieron normalmente y llego la hora de la partida de los estudiantes, aunque para algunos alumnos tenían planes luego de los deberes escolares, y un chico peliblanco junto con una chica pelinegra. Los jóvenes se reunieron en el estacionamiento de la escuela.

"Bueno, le avise a mi hermana que llegare un poco tarde." Dijo Rachel.

"Okey, ya conseguí las entradas, solo habrá que recogerlas y entrar a la función." Dijo Lincoln.

"Entonces vayamos." Dijo Rachel empezando a caminar.

"¿A dónde vas?" Pregunto Lincoln.

"Pues ese es el camino al cine ¿No?" Dijo Rachel confundida.

"Pero primero debemos ir por las entradas, están a unas cuadras cerca de la taberna y de la tienda de instrumentos." Dijo Lincoln.

"¿Qué no es una de las calles más peligrosas de la ciudad?" Pregunto Rachel.

"Si, pero consiguí las entradas con descuento. Tu solo espérame en la tienda de instrumentos en lo que yo recojo las entradas." Dijo Lincoln.

"Está bien, vámonos." Dijo Rachel.

Los chicos emprendieron su viaje para recoger sus entradas y luego ir a la función. Pese a que la gente no era muy agradable cuando se fueron acercando a su destino. Rachel fue a la tienda de instrumentos donde el albino dijo que la esperara. Este fue acercándose a uno de los callejones donde había unos contenedores de basura, llegando toco uno de los contenedores y este se abrió, revelando un chico de pelo negro con lentes, pecas y playera verde lima.

"¿Tienes la mercancía?" Pregunto Lincoln como si fuera una especie de clave.

"¿Tienes la cantidad?" Pregunto el chico de la misma manera que el peliblanco.

El albino le dio una bolsa de papel y este la abrió y asintió, dejando entender que estaba de acuerdo con la paga.

"15 dólares y 8 barras de chocolate. Tenemos un trato." Dijo el chico y el entrego las entradas al albino.

"Gracias Dave. No sé cómo lo haces, pero me sorprende como consigues las cosas tan rápido." Dijo Lincoln.

"Solo es cuestión de conocer a las personas correctas." Dijo Dave y se volvió a esconder en la basura.

Lincoln salió del lugar y fue con Rachel a la tienda donde la estaba esperando, pero se percató de un chico de 14 años, tumbado en el suelo con varios golpes en su rostro. Mientras que la chica estaba parada en la puerta con una sonrisa.

"¿Qué paso?" Pregunto Lincoln.

"Nada, solo aquí esperándote, ¿Tienes las entradas?" Dijo Rachel y pregunto eso ultimo.

"Claro, tenemos que ir rápido, ya que la función comienza en unos 20 minutos." Dijo Lincoln.

Emprendieron el viaje y al llegar pidieron las botanas y entraron a la sala.

Una hora y 20 minutos de terror después.

La gente iba saliendo de la sala, platicando sobre la película, Lincoln iba saliendo de manera tranquila y comiendo sus palomitas.

"Si asusta, pero no tanto. Incluso las películas de Jason son más terroríficas, ¿Qué opinas tu Rachel? ¿Rachel?" Pregunto Lincoln al no ver a la chica.

Rachel iba saliendo lentamente con una cara algo extraña, como si estuviera tratando de ocultar su miedo.

"Creo que mejor no pregunto." Dijo Lincoln con algo de burla.

"Ni una palabra de esto Lincoln Loud." Dijo Rachel con cierto trauma y enfado en su expresión.

"Umm, que tal si vamos a comer algo para que bajes el miedo." Propuso Lincoln.

"NO TENGO MIEDO." Grito. "Pero tengo hambre, así que vamos." Y empezó a caminar rápidamente.

"Ruda y todo, pero no sabe ocultar su miedo, (Suspiro) Es ..." Susurro Lincoln.

"Vámonos Lincoln o no llegaremos a comer." Dijo Rachel quien ya se había adelantado.

Los chicos fueron a la cafetería y pidieron sus respectivas comidas. En el caso de Lincoln, pidió un omelette de huevo con espinacas, y en el caso de Rachel, ella pidió un emparedado de albóndigas bañada en salsa casera.

"(No están tan buenos como muchos decían)" Pensó Lincoln.

"En serio espinacas y huevo, ¿En serio?" Dijo Rachel.

"La verdad me gusta la comida balanceada." Dijo Lincoln.

"Aunque de vez en cuando no está mal probar algo más delicioso, ten, prueba algo de mi emparedado." Dijo Rachel.

"Esa salsa que le pusiste no pica, ¿Verdad?" Dijo Lincoln al ver la cantidad de salsa que tenía el emparedado de Rachel.

"Para nada, he probado salsas más fuertes que esta. Así que prueba, sin miedo." Dijo Rachel.

Lincoln dio una mordida y empezó a comerlo. "Umm, esta rico." Luego de que dijera eso su cara empezó a ponerse roja y le salió humo por las orejas y fuego por la boca. "¿De qué es esa salsa?" Apenas pudo preguntar el albino.

"De habanero con serrano." Dijo Rachel.

"¡¿QUÉ?!" Exclamo Lincoln y empezó a correr gritando por toda la cafetería pidiendo agua.

"Jaja, no pudo con la salsa." Dijo Rachel en tono burlón y mirando al espectador.

Luego de terminar sus almuerzos y de darle leche al albino para que pudiera calmar el picante en su boca. Fueron a la mansión River a dejar a Rachel, para que luego Lincoln se fuera a casa.

"La pase bien Lincoln, solo que la próxima vez no elijas algo tan sádico o perturbador." Dijo Rachel.

"Y tú la próxima vez no me des algo que este cargado de picante. Bastante tengo con mi hermana y sus emparedados. Bueno Rachel, me la pase bien contigo, mañana te veo para terminar el trabajo. Así que, me despido señorita Rachel River." Dijo Lincoln e hizo una reverencia.

"Jaja, que caballeroso Señor Lincoln Loud." Se rio Rachel ante la acción del albino.

"Adiós Rachel, nos vemos mañana." Dijo Lincoln montándose en su bicicleta y partió del lugar.

"Adiós Lincoln." Dijo Rachel y cuando se dio la vuelta miro a Michelle con una sonrisa de oreja a oreja. "(Aquí vamos de nuevo.)" Pensó y entro a la mansión.

Mientras que los señores River miraban todo desde la ventana, con una sonrisa en sus rostros.

Continuara...

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Muy bien chicos otro capitulo más, espero que les haya gustado la salida de Rachel y Lincoln. Y prepárense para lo que viene ya que las cosas se pondrán mas interesantes en esta historia. 

Sin mas que decir, dejen su voto, comentario sobre que piensan de esta historia y compartan con sus amigos. yo me largo, y nos vemos en un próximo capitulo.