MARCOS

Cuando Gabriela me dijo que estaban en el hospital con mi hermana no dude en marcharme de la universidad, tenía que estar con mi hermana e intentar no poner más nerviosa a Gabriela de lo que ya estaba, aunque eso iba a ser complicado, y menos cuando Carlos se enterase de que no estaba bien.

En cuanto llegué al hospital pude ver que Gabriela estaba peor de lo que me imaginé y a pesar de que Alex estaba con ella y no se separaba prácticamente nada de ella, parecía ser que no mejoraba su estado, me empezaba a preocupar por ella la verdad, y se puso peor luego de lo que dijo el médico de lo que habían encontrado en las pruebas que le habían hecho, si antes estaba de los nervios, ahora estaba al borde del ataque de ansiedad, y eso es lo que debía de evitar, pero no escuchaba nada de lo que le decíamos.

Cuando el médico nos dejó ir a ver a Ana en la habitación, Gabriela no dudo ni un segundo en dirigirse detrás de este, y a pesar de que le dije a Alex que fuese con ella para que no se pusiese peor, no quiso, cosa que le agradezco, porque yo también quería ver cómo estaba mi hermana.

Al entrar en la habitación Gabriela no tarda nada en acercarse a su lado y empezar a llorar.

-Vamos Gabriela, se pondrá bien. No te preocupes tanto.

-Cómo... ¿Cómo pretendes que no me preocupe... por ella Marcos? Es mi niña.

-Sé que es tú niña, pero tu niña aprendió de la mejor. Es fuerte y podrá con todo como tú, su madre. Deberías descansar un rato.

-No me pienso mover de junto a ella hasta que me asegure de que estará bien y no lo vas a poder evitar Marcos.

-Y no lo voy a hacer, solo que deberías relajarte porque la que acabará mal serás tú, y no querrás que cuando mi hermana se despierte te vea mal.

-Yo me pondré mejor cuando ella lo esté.

-Ya verás cómo se pondrá mejor.

Estuvimos un par de minutos calladas y Gabriela le pasaba la mano por el pelo a mi hermana que en este momento estaba dormida y con medicamentos enganchados a ella.

De un momento a otro, el móvil de Gabriela empieza a sonar, pero lo estaba ignorando, y la verdad, por más que le insistía que podía ser sus padres, no quiso ni mirarlo hasta que debió de cansaCuando Gabriela me dijo que estaban en el hospital con mi hermana, no dudé en dejar la universidad, tenía que estar con mi hermana y tratar de que Gabriela no se pusiera más nerviosa de lo que ya está, aunque eso va a ser complicado, sobre todo teniendo a Carlos cerca que iba a estar prácticamente igual de preocupado que ella.

Tan pronto como llegué al hospital pude ver que Gabriela estaba peor de lo que imaginaba y aunque Alex estaba con ella y no se apartaba de su lado, parecía que su condición no mejoraba, algo que empezaba a preocuparme, y empeoró después de lo que dijo el médico que habían encontrado en las pruebas que le habían hecho. Si antes estaba nerviosa, ahora está al borde de un ataque de ansiedad, y eso es lo que debería evitar, pero no escuchó nada de lo que le dijimos.

Cuando el médico nos dejó ir a ver a Ana a la habitación, Gabriela no dudó ni un segundo en ir a buscarla, y aunque le dije a Alex que la acompañara para que no empeorara, no quiso, lo cual le agradezco, porque yo también quería ver cómo está mi hermana.

Al entrar en la habitación, Gabriela no tarda en acercarse a su lado y empezar a llorar. "Vamos Gabriela, va a estar bien. No te preocupes tanto" Traté de consolarla "¿Cómo... ¿Cómo esperas que no me preocupe... Marcos? Es mi niña" susurró la última parte "Sé que es tu niña, pero tu niña está aprendiendo de la mejor. Es fuerte y será capaz de manejar cualquier cosa como tú. Deberías descansar un rato"

"No me voy a alejar de ella hasta que esté segura de que estará bien y no podrás evitarlo" me aseguró y supe que no la iba a convencer, pero tampoco intentaría sacarla de aquí, no si era algo que la ayudaría a estar un poco más tranquila "Y no lo voy a hacer, debes relajarte porque la que va a terminar mal eres tú, y no querrás que mi hermana te vea así cuando despierte"

"Estaré bien cuando ella lo esté" respondió "Verás cómo mejora" Estuvimos en silencio un par de minutos y Gabriela pasaba su mano por el cabello de mi hermana, que en este momento estaba dormida y tenía medicamentos en vena.

De un momento a otro, el teléfono de Gabriela empieza a sonar, pero lo ignora, y la verdad es que, por más que insistí en que podían ser sus padres, ni siquiera quiso mirarlo hasta que debió haberse cansado, pero cada vez estaba peor, cosa que no me explico, y es en ese momento que salió de la habitación enfadada y fui con ella a ver qué le pasaba.

Tan pronto como salimos de la habitación, Gabriela empieza a mirar a su alrededor y caminar unos pasos hasta que se detiene por unos segundos y se desploma. "¡GABRIELAAA!" Ya me había arrodillado a su lado cuando escuché a Alex gritar su nombre y no tardó mucho en acercarse a nosotros y coger a Gabriela en sus brazos.

"Vamos Gabriela, reacciona. ¡Por favor, un médico!" No pasa mucho tiempo para que un par de médicos más lleguen a nuestro lado y terminen sacando a Gabriela de los brazos de Alex, y aunque él no quería soltarla, terminan logrando que la suelte y tengo que agarrarlo para que no le arranque un brazo a uno de los médicos.

"Vamos Alex, estará bien" dije, haciendo todo lo posible por calmarlo, porque lo último que necesitaba era que él también se pusiera ma. "¿Qué cojones acaba de pasar, Marcos? ¿A dónde ibais? preguntó, centrando su mirada en la mía. "Solo estaba siguiendo a Gabriela, su teléfono no paraba de sonar y cuando decidió mirarlo, se enfadó aún más... Realmente no tengo idea de lo que le pasó, había empezado a calmarse un poco"

"Esto no puede estar pasando" Alex murmuró, dejando la cabeza entre las manos "Vamos, no te enfades ahora, porque eso es lo último que necesita en este momento. Ella te necesita Alex, todo esto se debe a su ansiedad" Lo informé "Tenía que estar con ella para al menos tratar de calmarla" Señaló y yo asentí, porque si bien podía ayudar con la ansiedad de Gabriela, en este momento es algo complicado de hacer, sobre todo cuando ella no quiere separarse de mi hermana. "Y lo estabas, pero en este momento dudo que alguien pueda hacer algo por ella, está demasiado nerviosa para escucharnos"

En ese momento mi hermano enfadado, y se enfadaría más en cuanto se enterase de lo de Gabriela. "¿Dónde están Ana y Gabriela?" preguntó mi hermano, mirando a todos lados, probablemente buscando a Gabriela. "Ana está en la habitación y Gabriela está siendo atendida"

"No me jodas, ¿tiene lo mismo que Ana?" preguntó Carlos y negué "No, solo tuvo un ataque de ansiedad por culpa de Ana y algo que le llegó al teléfono" Informé "¿Qué le llegó?", preguntó mi hermano, frunciendo el ceño. "No lo sé"

"¿Dónde está su móvil?" preguntó. "Debe tenerlo en el bolsillo" dije sin más, "Esperad aquí" pidió, caminando hacia la habitación en la que estaba Gabriela. "¿A dónde vas?" pregunté "Ahora vuelvo " dice y nos deja allí. No tengo idea de lo que haría, mucho menos de lo que buscaba, pero no tarda mucho en llegar a nuestro lado con el teléfono de Gabriela en la mano.

"Desbloquéalo" Ordenó "No vamos a mirar el teléfono de Gabriela, ¿te has vuelto loco?" pregunté "Alex, ¿sabes la contraseña?" Le preguntó al novio de nuestra mejor amiga y él negó. En ese momento cogió su teléfono y se lo llevó a la oreja, todavía sin tener ni la menor idea de que quería hacer con el teléfono de Gabriela.

"Carlota... Escucha... mierda Carlota, necesito que me escuches... ¿Sabes la contraseña del teléfono de Gabriela?... Es importante, de lo contrario no te preguntaría... Carlota en serio, Marcos te lo dirá todo, pero dime la maldita contraseña... Gracias" Con eso me pasa su teléfono mientras desbloquea el teléfono de Gabriela y comienza a buscar lo que sea que está buscando.

"Marcos, ¿me puedes explicar qué está pasando? ¿Por qué tu hermano necesita la contraseña de Gabriela?" mi mejor amiga preguntó empezando a alterarse ella también "Carlota, te juro que te llamaré en un par de minutos" prometí "Pero..." ya ni siquiera la dejé decir nada, tenía que saber qué es lo que estaba buscando mi hermano en el teléfono de mi otra mejor amiga. Me acerqué a ellos y me puse a mirar la pantalla, porque, aunque no quería que anduviese mirando el teléfono de ella en busca de algo, ahí está la solución de lo que le había pasado a mi mejor amiga para que se desmayase.

"¿Qué coño es esto?" Estuvimos mirando unos mensajes que recibió poco antes de salir de la habitación de Ana y la verdad es que no tenía mucho sentido, si eso es lo que hizo que Gabriela se desmayase, no entiendo exactamente por qué. El mensaje solo decía que disfrutes de tu sorpresa, de la rubia.

"¿Parientes de Gabriela García?", preguntó el médico, "¿Cómo está? ¿Podemos ir a verla? preguntó Alex, desesperado por saber de su novia. "Puedes, pero vengo a decirte que está sedada, su presión arterial estaba alta y cuando se despertó, preguntaba por su hija. ¿Tienes alguna idea de dónde podría estar?"

"Está en este hospital, la ingresaron hace un par de horas" dije rápidamente "Tal vez por eso estaba así, pasará una hora aquí para ver cómo evoluciona, y luego la mantendremos en observación durante un par de horas. Debe estar tranquila, cualquier cosa que pueda alterarla más puede hacerle daño"

"Muchas gracias doctor, pero ¿puedo ir a verla?" preguntó Alex. "Sí, claro, sígueme" Dijo y los tres empezamos a seguirla hasta que Carlos me detuvo. "Vas a ir con Ana y vas a llamar a Carlota como prometiste." ordenó "Pero también quiero ver a Gabriela"

"Y la verás, pero no ahora. Si se entera de que dejamos sola a Ana, nos mataría, así que vas a ir con ella. Voy a acompañar a Alex. Cuando venga Carlota, vas con ella a verla, pero mientras vas con Ana, no podemos dejarlas solas ni un segundo" Dijo con seriedad y fruncí el ceño tratando de entender que estaba pasando. "¿Qué es lo que está pasando Carlos?" pregunté "Tenemos que cuidar a las dos, quédate con eso"

"Como quieras, pero no tardes demasiado, ¿de acuerdo?" pedí "Ve con Ana, te avisaré cuando puedas venir" Y con eso se fue. No sé qué estaba pasando, todo esto es raro, no lo que hizo Gabriela, porque ya esperaba algo así, estaba muy alterada para que no tuviese un ataque de ansiedad, pero ¿qué Carlos me dijera eso? No sé si él sabía algo que el resto no y por eso su forma de actuar.

Un par de minutos después fui a la habitación de mi hermana y me senté en la silla que Gabriela había ocupado hasta hace una hora. Levanto mi teléfono para llamar a Carlota, pero parece que se cansó de esperar porque me estaba llamando, así que le contesto rápido para que no me regañe tanto al menos.

"¿Puedes explicarme qué está pasando? Será mejor que me digas la verdad, Marcos" Dijo en tono amenazante "Mi hermana está hospitalizada" espeté "¿Qué? ¿Por qué?" Mi mejor amiga cuestionó "Envenenamiento por fertilizantes por lo que dijeron los médicos" Respondí, encogiéndome de hombros porque seguía sin entender realmente lo que estaba pasando. "Eso no tiene sentido."

"Lo sé, y Gabriela estaba enfadada por ello" dije "Voy para allá ahora mismo.", informó "Espera un minuto" pedí antes de que colgara "¿Qué está pasando, Marcos?" preguntó exasperada. "Se trata de Gabriela" dije "¿Qué le pasa? Ya me puedo imaginar cómo debe ser, es prácticamente su hija Marcos"

"No, no te puedes imaginar, porque en este momento está en urgencias y sedada" Informé y la escuché tomar una bocanada de aire "¿Qué?" preguntó "Lo que oyes." Confirmé "Salgo ahora mismo. Dime en qué habitación está Ana y apareceré allí en poco más de una hora."

"En el 268, en el segundo piso" respondí y ella colgó. Me pregunté si debía decirle a su familia, teniendo en cuenta que estaban organizando el funeral de Rebeca, no creo que se quedasen tranquilos sabiendo que Gabriela estaba en urgencias... decidí que al menos alguien de su familia tenía que saberlo, así que llamé a Ángela. "¿Marcos? ¿Está mejor tu hermana?" preguntó la abuela de mi mejor amiga. "Bueno, está mejorando, pero no es para eso lo que te estaba llamando"

"¿Qué pasa? ¿Y Gabriela?" preguntó "En urgencias" solté de nuevo, sin saber cómo decirle lo que estaba sucediendo de una manera que no la preocupase tanto "¿Qué?" susurró "Sí, no sé decirte exactamente que es o que le pasa, pero creo que alguien debería estar con ella; de la familia, quiero decir" dije "¿Y Alex?" preguntó, recomponiéndose un poco "Con ella y no piensa en separarse, pero tal vez preferís estar alguno de vosotros aquí"

"Voy ahora mismo" Colgó y yo me quedé mirando al vacío, pensando en todo lo que estaba sucediendo en ese momento. Había pasado una hora desde que mi hermano y Alex se fueron a ver a Gabriela cuando noté cómo Ana empezaba a moverse y a querer abrir los ojos.

"Oye pequeña, ¿cómo te sientes?" Dije con una pequeña sonrisa en mi rostro, apartando todas mis preocupaciones, al menos las que tienen que ver con Gabriela. "Ya no me duele la barriga" murmuró mi hermana con una pequeña sonrisa en su rostro. "No sabes lo feliz que me hace eso" respondí aliviado de que al menos se sienta mejor. "¿Y mami?" preguntó Ana con curiosidad. " Se fue a tomar un café para mantenerse despierta y cuidarte"

Pude ver una leve sonrisa en su rostro lo que me hizo formar una también, pero también sé que le estaba mintiendo. Creo que es mejor que no sepa que Gabriela está en urgencias, no era necesario preocuparla por algo que no era necesario en este momento, no ahora se siente mejor.

"¿Y Carlos?" La niña volvió a preguntar "Fue a acompañar a Gabriela; Sabes lo sobreprotector que es nuestro hermano con vosotras" respondí, al menos algo es cierto "Estoy aquí, princesa" Al oír esas palabras, levantamos la mirada hacia la puerta y nos quedamos mirando a los tres. Parecía que Gabriela no estaba nada bien, pero ahí está, en la puerta de la habitación de mi hermana.