Prov. TN

Dos años, es lo que tarda un bebé en caminar y hablar... esos años fueron los necesarios para que acepten a Gaara como el nuevo Kazekage y a mi como su mano derecha, ¿Qué si nos costó? no puedo creer cuantos papeles y encuestas al pueblo tuvimos que hacer, pero tuvimos nuestro final feliz, ya que llevamos unos meses en estos puestos haciendo que el pueblo sepa que han hecho una buena decisión en nombrarnos a nosotros en nuestros respectivos puestos.

TN: lo logramos- dije la primera vez que entramos por la puerta que era para los kazekages y sus manos derechas. Estaba haciendo un gran esfuerzo para no llorar por la emoción de haber cumplido una de las metas que nos planteamos desde niños. El ser reconocidos.

Gaara: ... nos costo, pero, con nuestro trabajo lo hemos logrado- sonrió con cariño, tanto a la habitación como a la chica que estaba junto a él.

Lo primero que hicimos cuando nos nombraron fue devolver el prestigio de las academias ninjas, que últimamente se han dejado de lado, haciendo que cada vez más niños y niñas se inscribieran en las academias... lo malo es que hay chicas como Matsuri que se tiran encima de mi novio cada dos por tres haciendo que mi sentido asesino quiera decapitarlas, pero Gaara siempre se libra de ellas al ver lo enojada que estaba en esos momentos.

Nuestra relación está pasando por un momento muy tranquilo, por lo menos hasta que nos sepamos ubicar bien en nuestras nuevas posiciones, además no queremos que lo personal nos afecte en el trabajo, así que en el día solo conversamos abiertamente únicamente en el almuerzo y pasamos toda la noche juntos.

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Era un día como cualquier otro, por lo menos las personas decían eso, después de todo desde la oficina de Gaara podíamos ver un objeto sobrevolando a Suna, de reojo lo mirábamos mientras trabajábamos, no vaya a ser que se diera cuenta que lo estábamos observando, el resto del día fue sumamente tranquilo, hasta que llego la noche.

Nos encontrábamos siguiendo ese objeto hasta que empezó a descender sobre un edificio, era un chico un poco mayor a nosotros, pelo rubio largo sujetado en una cola de caballo alta y unos ojos muy claros; en la oscuridad de la noche no se qué más decir, no podía ver muy bien.

Gaara: hasta aquí has llegado- dijo seriamente mientras nos miraba a los dos con sorpresa, pero con una sonrisa confiada en sus labios.

???: vaya- dijo simplemente, el mal presentimiento que siempre siento cuando algo malo sucederá me invadió enseguida.

Después de intercambiarnos unas miradas de muerte nos pusimos en guardia y empezamos a atacarnos seguidamente, mientras Gaara ganaba tiempo para que ideara una táctica que no afectará el pueblo, pude ver que algunos ninjas y personas que salían a las calles para tratar de saber lo que estaba pasando.

Después de meditar los pros y contras me acerque al área de la pelea aérea que estaban llevando la batalla aérea, cuando me acerque lo suficiente y ver que Gaara estaba rodeado de esas cosas explosivas los ahuyente mandándolos a volar con uno de mis jutsus de vapor.

TN: ¿puedes manejar la arena que se encuentra bajo de nosotros?- susurre, él asintió- voy a ganar tiempo, reúne el chakra necesario y dale un buen golpe- volvió a asentir.

Como dije anteriormente gracias a mis tácticas le obligue a atacar tantas veces como le era necesario consumiendo así gran parte de esa arcilla que lleva con el. Después de unos pocos minutos Gaara se colocó a mi lado para empezar a combatir nuevamente.

Es magnífico como hacemos ataques combinados sin equivocarnos ni un solo segundo, mientras uno lo acorralaba el otro remataba, pero nada nos preparó para lo que pasó después de estos míseros ataques. El saco de una bolsa rara más explosivos con forma de aves impactando en la arena en donde estamos cerca, no ataca a la aldea, nos atacan a nosotros; miré de reojo a Gaara y parece que llego a la misma conclusión.

Entonces lanzo a otros dos más largos esquivando la arena y acercándose a una velocidad de vértigo, entonces Gaara trato de cubrirnos de ellos, haciendo alrededor nuestro una bola de arena alejándonos de las explosiones. De reojo pude ver que Gaara se está empezando a cansar nuevamente hay que solucionar esto rápido, yo también me estoy quedando sin chakra.

Mientras nosotros estábamos en la esfera de arena recuperándonos, la arena lo encerró en la "prisión de arena", pero se pudo liberar después de algunas explosiones, pero la arena lo seguía persiguiendo, hasta que Gaara consiguió hacer el "sarcófago de arena" en uno de sus bazos sacándoselo.

La pelea seguía y podía ver los nervios de Gaara y la fuerza de nuestro oponente, el pueblo estaba abajo nuestro alentándonos a los dos para que terminemos con él, pero, sentí un mal presentimiento nuevamente, sin que nadie se diera cuenta deje una ligera capa de vapor sobre ellos, por si esto se sale de control por lo menos frenaría un poco la arena y las explosiones.

Lo bueno es que me decidí e hice esa capa de vapor justo antes de que explote ese titan de los explosivos cerca del pueblo, lo malo es que me queda muy poca chacra, Gaara me sostiene de los hombros con una cara indescifrable, como pudimos seguimos defendiendo al pueblo, Gaara utilizó también su arena fusionando con su chacra defendiendo al pueblo de los restos de la lava que se desprendían por causa de la explosión.

No nos dimos cuenta cuando uno de esas cosas se acercó a nosotros explotando a solo tres cm de mi cabeza, pero gracias a la velocidad de la arena nos cubrió, pero al parecer ese sujeto infecto la arena con esas malditas bombas, nos miramos con miedo mientras trataba de eliminarlos sin que explotaran, pero de pronto explotaron recibiendo yo el primer golpe y Gaara la onda expansiva causando que quedemos inconsciente rápidamente y en mi quemaduras de segundo grado.

Pero en el ultimo momento recuperamos la conciencia para que la arena que manejaba Gaara no cayera sobre el pueblo las envió a los límites haciendo un nuevo montículo de arena, yo por mi parte junte todo lo que me quedaba de mi chacra y hablé telepática mente con Lady Tsunade de la Aldea de la Hoja relatando de lo sucedido. Una vez solucionadas las dos cosas nos miramos a los ojos, nos sonreímos levemente y depositamos un rápido beso en nuestros labios lleno de nuestros sentimientos porque no estamos seguros si nos volveremos a ver y de nuestro anhelo más preciado.

TN y Gaara: perdón- dijimos en un susurro cerrando lentamente nuestros ojos dejándonos inconscientes, siendo mi única vieja amiga la oscuridad y el frío, que hace 10 años que no sentía.