Dreamworks y Universal habían ido a comprar algunos cigarros para compartir y mientras fumaban, conversaban de temas interesantes entre ellos.

Ya casi terminaría el horario de descanso, así que deberían regresar a sus oficinas a seguir trabajando con sus rivales
—¿Te veré luego?— le preguntó Universal antes de irse
—Por supuesto, te veré después del trabajo— le dijo Dreamworks, y luego se fue.

Por otra parte, Disney estaba como loco buscando esos bocetos de Toy Story 5 en toda su oficina. Estaba tan desesperado en encontrarlos que su sede quedó hecho un desastre: había papeles tirados por todos lados, algunos productos de Mickey Mouse en el suelo, y sus cajones también estaban por doquier.

Entre todo ese despelote, llegó Dreamworks y quedó inmóvil al ver todo el desastre que había, y percatarse de lo desastroso que estaba siendo Disney
—¿Pero qué mierda...? ¡¿Disney, qué diablos estás haciendo?! ahora si pareces una rata con todo el lío que causaste— burló con su cigarro en mano y luciendo elegante con él
—¡Tu ignorancia no funciona, imbécil!— quejó mostrándole un fuck you sin voltear a mirarlo por estar buscando esos bocetos
—Ja, tú y tus groserías no me afectan en nada. Mejor ordena todo el desorden que hiciste y sigamos trabajando en nuestra película— respondió Dreamworks desinteresado en la preocupación del otro
—¡Hasta que no encuentre mis bocetos, no haré nada!— contestó tirando más papeles de uno de sus muebles con cajones
—Entonces le diré al jefe que tendremos un retraso en el proyecto— ese aviso alarmó a Disney —¡¿Espera, qué?! ¡ni se te ocurra, idiota!— le gritó mientras bajaba de su silla que usaba para husmear por los muebles
—Si no vas a ordenar, te acusaré con nuestro superior. Así de simple e infeliz soy—  terminó Dreamworks de concluir su palabra —Eres un maldito pedazo de-...—
—Shh, no te atrevas a insultarme. En vez de hablarme de esa forma tan grosera, ¿por qué no me respondes con claridad?—
—¡Soy Walt Disney Pictures y te hablo como se da la puta gana! tú deberías respetarme a mí, ya que soy el más grande y mejor de todos—
—Ay...tú y los versos de siempre. Nunca lograrás ser creativo como nadie aquí, y la verdadera razón por la cuál fracasas es porque eres un egoísta manipulador sin talento y creatividad. Al pensar sólo en ti, no te importan una mierda tus propias películas, personajes e historia. Eso te convierte en un buscador de fama fácil— a medida que Dreamworks le seguía hablando de esa manera, también se le iba acercando más a un punto de hacerlo retroceder hasta dejarlo apoyado contra el escritorio
—¿Y bien, querido Disney Pictures? ¿no piensa defenderse con su ego?— ahora mismo se encontraban a una cercanía increíble; Disney estaba sintiendo cierto temor y a la vez vergüenza por el acercamiento de su enemigo. Realmente no tenía argumentos para insultarle ahora mismo
—Ja, era de esperarse...eres una estúpida rata acorralada y cobarde como todas las que existen en el mundo— el menor tenía unas hartas ganas de pegarle en la cara pero en el instante de querer hacerlo, Pixar llegó a interrumpir
—Señor, aquí están los bocetos que usted me-...— el señor lamparita quedó tieso al verlos de esa forma
—¡L-lo lamento mucho! ¡¿vine en un mal momento?!— dijo paniqueado apenas los vió
—Maldita sea, Pixar, ¡¿por qué siempre vienes cuando no te llamo?!— le regañó Disney dándole un empujón a Dreamworks para que se apartará
—Mil disculpas, señor, p-pero usted me pidió que buscará los bocetos y aquí están—
—¡No me importa! ¡tú vienes a mi oficina sólo cuando te lo pido! ¡¿entendiste?!— le gritó señalándole para que le quede claro —S-sí, mi señor...— respondió tembloroso. Aquel otro que se encontraba también presente no toleró la arrogancia por parte de esa "ratita" mediocre, así que no dudo en ir a defender a Pixar
—¡¿Qué necesidad tienes de hablarle así a tu subordinado?! debería darte una golpiza para que entiendas— contestó Dreamworks ubicándose delante de Pixar para protegerlo
—¡Por favor calmense! s-se meteran en problemas si provocan un alboroto aquí. El jefe los unió para cooperar, no para pelear—  Dreamworks se tranquilizó porque no quería consecuencias graves después
—Bien...Pixar, necesito que me dejes a solas con Disney— el mencionado se enojó al oirle
—¡Ni te atrevas a darle órdenes! sólo yo tengo ese poder—
—Cierra la boca, no se le pedí como si fuera su jefe, se lo pedí como un verdadero amigo y compañero— en eso, Pixar salió sin causar problemas, y allí ambos enemigos se quedaron solos —¡Voy a acusarte si vuelves hacer eso!— le contestó Disney furioso por aquella orden no deseada
—Eres un maldito desconsiderado, ¡¿no te das cuenta?!— expresó el otro cambiando su manera de hablar
—¿Y eso a ti qué te importa? ni que fueras mi mejor amigo para aconsejarme— dijo comportándose como todo un ignorante
—¡¿Cuando va a ser el día qué dejes de pensar en ti?! ¡en verdad no logro entenderte, Disney! ¡¿por qué eres tan cruel y vil?!— todas esas palabras que expulsaba Dreamworks, hacían que Disney comenzará a perder control en su mente, a punto que ya no soportó la frustración y comenzó a llorar declarando todo lo que quería decir desde su interior
—¡He estado sufriendo por años y tú jamás entenderías lo que siento!— la atmósfera se convirtió en una más tensa, pues ambos se había quedado en silencio, y Disney se volteó sólo para llorar y desahogarse através de sus lágrimas
—Debo ser perfecto...o sino nunca seré lo suficientemente exitoso para las personas. De todos ustedes, siempre fui el más querido por la gente a lo largo de los años, y desde que descubrí la cantidad de audiencia y dinero que ganaba, me sentía...poderoso y amado...— Dreamworks no lo podía creer...era la primera vez que Disney expresaba sus sentimientos así. Jamás había visto esa versión de él tan emocional, quebrada y marcada.

Ya no veía al mismo ser egoísta y perfeccionista de siempre, ahora sus ojos miraban a un Disney diferente con sentimientos de arrepentimiento, dolor y depresión, ¿acaso él nunca recibió cariño o amor?
—Ay...Disney...esa nunca va a ser la forma correcta de pedir aceptación o atención. Si quieres ser perfecto, debes aprender a ser comprensivo con todos lo que te rodean, incluyendo tus fanáticos. Ellos siempre piensan lo mejor en ti; debes pensar en los que te aman para ser un gran inspirador y genio en todo...es así de fácil— le explicó Dreamworks tratando de consolarlo
—*Nif*, no es simple para mí...realmente nadie me quiere, y tampoco tengo amigos...¡¿cómo puedo pensar con claridad si sólo soy un triste perro solitario...?!— dijo sin querer mirarlo a la cara
y tratándose como un infeliz
—Si quieres tener amistades, debes dejar tu arrogante actitud atrás y ser alguien altruista y compasivo. Tú nunca nos apoyas y tampoco das buenos cumplidos, nos tratas como basura, y así no funcionan las cosas—
—Es imposible...cambiar fue complicado, y si quiero hacerlo otra vez, me costará el doble...—
—Yo puedo ayudarte con eso— le dijo Dreamworks tocando su hombro como señal de apoyo.

En ese momento, Disney volvió a pensar en Dreamworks, pero no era algo positivo. Recordó lo traicionero que fue en ese entonces, desde que él se fue, buscó una manera ingeniosa de ser superior y así consiguió la gran fama que tiene actualmente. Gracias eso, logró robarle muchísima cantidad de público y atención, por lo cual se convirtió en el nuevo centro de admiración
—Eso es...todo esto es tu culpa...—mencionó Disney en voz baja
—¿Eh? ¿qué dices?— Dreamworks no pudo escucharlo bien
—¡Que todo lo que me pasa es por tu culpa! ¡si no hubieras existido, yo ahora mismo estaría en la sima del mundo! ¡gracias a tu insignificante creación es que mis fanáticos fueron detrás de ti y no de mí! ¡¿cómo mierda te atreves?!— le gritó empujándolo a un lado —¡¿De qué mierda hablas?! ¡¿acaso también me culpas de qué seas un fracasado?!— Disney no lo toleró más y lo echó de su oficina rápidamente, cerró la puerta con seguro, se quedó en el suelo sentando apoyado contra la puerta y luego siguió con sus ganas inmensas de llorar por la frustración
—¡Disney, abre la puerta! ¡no puedes seguir así!— el menor no le respondió y sólo continuó llorando en silencio.

Entre todo el escándalo que había con ambos, Nickelodeon logró escucharlos mientras iba pasando por ahí lejos, y al ver a Dreamworks tan desesperado, fue directamente hacia él para preguntarle —¡Woah! ¡Oye, oye, Dreamworks! ¿qué está sucediendo? ¿por qué tanto alboroto?—
—Es Disney. Está totalmente depresivo, sentimental y sobretodo triste. No quiere salir para hablar— le explicó mientras seguía golpeando la puerta
—¡¿Cómo?!— no quisieron perder el tiempo en explicaciones, así que Nickelodeon también lo ayudó en llamar a Disney para que salga.

Era inútil intentarlo, él no quería salir y tampoco deseaba escuchar a nadie
—La soledad siempre fue mi única compañía...y ahora no dejaré que nadie más venga a arruinarla— se dijo Disney a si mismo con la mirada hacia abajo.