Episodio 20 Dreamworks x Disney

Sin duda es el día más odioso y tedioso para Disney: los lunes. Ese patético día en donde siempre llegaba al trabajo de muy mal humor; aunque esta vez podría sentirse más relajado ahora que ya no le dolían las caderas y podía caminar correctamente.

Apenas llegó a su tranquila oficina, al primero en llamar fue al inofensivo Pixar
—¡Pixar, tráeme un café expreso!— ordenó rápidamente mientras comenzaba a escribir en su computadora.

El inocente asistente salió velozmente para buscar lo pedido. Disney se sentía relajado y extrañamente pacífico; sin que haya ni un sólo sonido molesto, y como a muchos ya le suele pasar a "diario", un molesto y fastidioso estudio había entrado sin permiso
—Buenos días, ratoncito, ¿estresado con tus proyectos?—
—¡Puta madre, Dreamworks! ¡¿no tienes a nadie más para joderle la vida?!—
—Jaja, me temo que no. Sin embargo, ver tu arrogancia me satisface—
—Vete a la mierda— exclamó sin querer mirarlo a la cara
—Dime, ratoncito, ¿hoy tienes ganas de..."hacerlo" otra vez?—
—¡Casi me dejas sin caminar, maldito imbécil!—
—Te prometo que seré gentil—
—¡No! y tampoco quiero probarlo con nadie más, y así menos lo haré contigo—
Dreamworks se fue acercando más hasta quedar muy cerca de su rostro; planeaba besarlo
—Al menos déjame besarte~—
En el momento que estaba a punto de intentarlo, Disney le dio una golpiza fuerte que lo hecho al piso
—Auchis, para ser un roedor eres bastante fuerte—
—¡Lárgate de mi oficina!—
—Ok, ok, pero calmate :'v—
Con rendimiento, estaba a punto de marcharse, pero algo lo detuvo gracias a que la puerta no paraba de ser golpeada externamente. Ni siquiera la compañía del ratón entendía que pasaba
—¿Pero qué mier-...—
No había ni llegado a finalizar su pregunta gracias a que la puerta se abrió rápidamente y entraron unas pequeñas empresas que eran idénticos a Disney
—Lo siento, señor pero les urgía verlo— dijo Pixar un tanto cansado de traerlos a prisas
—¡Papiiiii, Disney Channel no quiere entregarme mis bocetos originales! ¡dile que me los devuelva!— exigió el pequeño DisneyXD muy caprichoso con su hermano
—Agh, ¿de nuevo peleando por tonterías?— resongó su padre exhausto en su escritorio. En eso, Dreamworks quiso comunicarse con ellos
—Hola, pequeños. Se nota lo mucho que se esfuerzan en sus caricaturas y programas. He visto algunos jaja; realmente se parecen muchísimo a su padre— comentó inclinándose un poco para estar a su altura
—Mmm...¿tú no eres el enemigo odioso de nuestro papá?— mencionó Disney Channel sospechando de brazos cruzados y con mal genio
—Buenooo...la verdad es que si lo somos pero estamos mejorando en eso, je—
—¡Oye! ¡ni te atrevas a mentirle a mis hijos!— se levantó con rapidez
—Tampoco exageres. Sólo quiero que sepan lo "bien" que va nuestra relación—
—Tsk, bastardo sinvergüenza hijo de- ¡un momento! ¡¿dónde está Disney Junior?! ¡¿dónde está mi bebé?!— comenzó a alterarse de la nada
—Niños, ¿han visto a su hermanito?— dijo muy preocupado
—Relajate, está con Disney Princess en la oficina— confirmo Disney Channel
—Fiuu, menos mal. Oigan, lamento el escándalo jeje, pero es que él y su hermana son más pequeños e inocentes; temo a qué les pase algo—
—Sí, ya lo sabemos papá— confirmó DisneyXD entendible, sin embargo éste y su hermano seguían peleados
—Bien. Ahora, Disney Channel quiero que le regreses lo que quitaste—
—Agh, pero él también se robó algunos míos—
—¡Dije que cada uno devuelva lo suyo o los castigo por un mes sin juntarse con Nick.jr!—
—¡No, no, no!— se asustaron al instante
—¡Entonces hagan lo que digo!—
Apenados, cada hermano devolvió lo que les había causado la discusión y luego se disculparon por obligación.

Disney le ordenó a Pixar que se los llevará de nuevo a su oficina infantil, y por suerte ya se había quedado más tranquilo luego de que se fueran, lo malo es que Dreamworks no se había ido
—Al fin otra vez solos, ratoncito—
Podría parecer un lindo momento para ambos, pero Disney no se tomó nada personal la escena y lo echó de una buena patada
"Rayos, convencerlo cuesta más que los regaños de mi creador", pensó torpemente en el suelo.

A pesar de que el testarudo roedor no quería ni siquiera verlo, Dreamworks no se daría por vencido tan fácilmente, pues siempre encontraba algún plan astuto para salirse con la suya.

En su descanso aprovechó a juntarse con Universal en el buffet del piso 3 como todos los días
—¡¿Qué hiciste qué?!— dijo Dreamworks muy sorprendido por lo que acababa de escuchar
—¡Jaja! ¡en tu cara! ahora Warner y yo somos novios, ¿qué tal? es una pena que tu ratoncito aún no te haya aceptado—
—Agh, tramposo—
—Sólo bromeó. Nada más dale el tiempo necesario para que te ame y lograrás conquistarlo rápidamente y tal vez incluso puedas hacerle el amor como yo lo hice en un hotel 5 estrellas—
—Ok, ok, ya entendí, no hace falta seas tan específico😑—
Si le urgía obtener su amor, entonces debía planear muchísimas cosas para hacerlo. De repente, una idea vino a su mente: tal vez sabiendo sus gustos podría averiguar más sobre él y quizás así lograría convencerlo fácilmente, ¡podría funcionar!

Con paciencia comenzó a observar a Disney detalladamente, sea en horas de trabajo o descanso. Viéndolo más atentamente, había ciertas cosas que le gustaban y otras que no, entre ellas se podía reconocer: el encanto hacia las hamburguesas, el cariño hacia los peluches y los pandas rojos, la adicción a la música pop, y por supuesto, el gran cariño paterno que tiene con sus hijos a pesar de que suele exigirles demasiado. Todas esas cosas no parecían tan difíciles de cumplir para él, así que planearía lo mejor. Una cosa a saber es que también averiguó los gustos de los "mini-Disney" para que ellos igualmente puedan divertirse con su idea.

Dreamworks consiguió varias cositas interesantes. El problema es que tenía dificultades para encontrar sus oficinas y vagamente debía preguntarle a alguien más si sabía. Luego de haberse dado tantas vueltas, finalmente pudo encontrar la única oficina que se encontraba en una zona bastante apartada de las otras que solía conocer
"Vaya, deben ser muy pocas empresas infantiles para una sola oficina". Eso pensaba cuando abrió la puerta, ya que allí dentro estaba tan lleno que parecía un jardín de niños; la mayoría de los pequeños trabajaban en lo suyo mientras que otros gritaban, jugaban o peleaban. Con su llegada y presencia, todos se detuvieron hasta quedarse en silencio, pues no acostumbraban a recibir visitas ni siquiera del propio jefe
—¡Miren todos! ¡es la empresa adulta famosa!— dijo uno de ellos señalandólo y todos comenzaron a gritar de la emoción debido a que algunos eran muy fanáticos de él
—H-hola, pequeñines, jeje. Lamento interrumpir su "trabajo" pero estoy buscando a los que son iguales a Disney—
—¡Aquí, aquí! ¡somos nosotros!— exclamó DisneyXD entusiasmado.

Los "mini-Disney" fueron corriendo hacia Dreamworks como si fuera lo mejor que hayan visto en sus vidas, sin embargo uno de ellos no lo veía de esa manera...
—¿Qué necesita, señor luna?— hablaba Disney Junior con su voz adorable
—¿Necesita colaborar con nosotros? jiji— reía nerviosa la dulce Disney Princess con su pequeño abanico rosado en la carita, ya que era una compañía bastante tímida
—Escuchen, niños, siento que empezamos con el "pie izquierdo", así que decidí traerles algunos obsequios como disculpa, ¿los quieren?—
—¡Siiii!—
Cada uno abrió sus regalos locamente desesperados y se alegraron muchísimo con lo que tenían
—¡Wow! ¡un peluche de Bugs Bunny! ¡gracias!— agradeció Disney Junior alegremente mientras abrazaba al muñeco con todas sus fuerzas, pues era un fanático de los Looney Tones. Lo malo es que su padre nunca le compraba juguetes o mercancía de ese tipo porque siempre evitaba toda cosa relacionada con otras compañías exitosas o rivales
—¡Aww! ¡es el maquillaje que siempre pedí! ¡graciasssss!— dijo la pequeña dando unos brincos emocionantes
—¡No inventes, es el disfraz del Gato con Botas que tanto quise! ¡te lo agradezco!— dijo DisneyXD loco por el regalo.

Los tres niños disfrutaban sus obsequios con mucha felicidad y a su vez le agradecían repetidas veces a Dreamworks con un fuerte abrazo. No obstante, éste se dio cuenta que aún faltaba un regalo para el cuarto hermano que se encontraba apartado de los demás, permaneciendo apoyado en la pared al lado de la puerta con los brazos cruzados
—Ups, casi lo olvido. Éste es para ti, Disney Channel. Aquí tienes— se lo entregó amablemente, pero el otro simplemente lo miró con seriedad, desconfianza y frialdad
—No gracias. No acepto cosas de extraños y MENOS de enemigos— respondió molesto
—Oh, ya veo...entonces, ¿te gustaría hablarme de ti?— sugirió Dreamworks tolerable
—Ni creas que voy a aceptar tus sobornos para que pueda tratarte amigablemente. Jamás seré tu amigo y nunca me caerás bien, estúpido rival plagiador—

...

Todo el ambiente se quedó callado. Dreamworks sin duda no se esperaba la semejante contestación de ese niño. Incluso cualquiera pensaría que es un grosero, un maleducado o un malcriado pero no se lo tomó como algo tan personal "Diablos...éste enano tiene el carácter de su padre, que desafortunado", pensó nervioso
—Eh...de acuerdo. Te dejare el obsequio aquí por si cambias de opinión, jeje. En fin, niños, antes de que me vaya quisiera preguntarles algo—
Disimuladamente les susurró a los tres pequeños sin incluir al "hermano cruel" y estos comenzaron a dar brincos de emoción y aceptación. El trío de hermandad también debían irse, aunque antes de hacerlo quisieron murmurar algo
—Disculpa a Disney Channel; él siempre es así cuando se trata de cuidarnos. Es que...por algo es nuestro hermano mayor, jeje— le explicaba DisneyXD un poco apenado
—Jaja, está bien, lo consideraré—
Estando más relajado se retiró del lugar. Esta vez trataría de obsequiarle algo especial a Disney si quería conquistarlo.

Viéndolo en su descanso, podía presenciar que se encontraba solo sin la presencia de Pixar, así que podría aprovechar a pasar el rato con él sin dificultades
—Hola de nuevo, ratoncito, ¿disfrutando tu soledad?—
dijo sentándose a su lado
—Mientras tú no estés en ella puedo disfrutarla, idiota—
—Uy que mal humor—
—Déjame en paz, desgraciado. Arruinas mi vida—
—Y también puedo mejorarla— mencionó coqueto acercándose más a su rostro
—¡Aléjate!—
Disney estaba a punto de empujarlo pero Dreamworks lo abrazó al instante con un tanto de fuerza para que no escapara
—¡Sueltame, sueltame!—
—Shh, quédate quieto. Nunca te he abrazado, ¿alguna vez alguien más realizó esto?—
Mientras Disney se movía descontroladamente para liberarse, sintió una lamida en su cuello y nuca a la vez
—¡¿Qué crees qué estás haciendo?! ¡estamos en público, pervertido asqueroso!—
—A nadie le importa. Si ellos se quejan la bronca es de ellos—
—¡Pues yo tengo una reputación que mantener, idiota! no me quiero imaginar lo que dirían todos si me ven con mi enemigo en esta repugnante situación—
Todo parecía salirse de control en cualquier momento con estos dos, sin embargo tuvieron una pequeña sorpresa que llegó a interrumpirlos
—¡Papá, papá, papá!— gritaban los adorables "mini-Disney" a lo lejos corriendo a una velocidad con tiernos brincos. Rápidamente Dreamworks soltó al menor y ambos comenzaron a actuar normalmente torpes
—Mmm, ¿qué les sucede, niños?— preguntó Disney intrigado, levantándose de su asiento hasta dirigirse a ellos y agacharse a su altura
—Papi, ¿podemos ir al parque de diversiones con el señor luna, porfaaaa?— suplicó Disney Junior rezando bastante alegre
—¿Eh? ¿por qué quieren ir ahí si ya tienen su propio parque? y además...¿se puede saber por qué mencionaron a ese tal..."señor luna"?— habló intimidante al final a medida que apretaba los puños, fruncía el seño y además parecía estar rojo de la ira que contenía, debido a que era muy obvio a quien se referían
—Oh, ¡nos cayó súper bien! ¡mira! ¡nos regaló todas las cosas que tanto queríamos!— decía Junior a puros brincos de emoción mostrando a su peluche de Bugs Bunny. Luego, Disney también vio los demás obsequios, y sin duda...no podía evitar la furia inmensa que sentía ahora, aunque solamente se controlaba por estar cerca de sus hijos menores. Al "relajarse", se levantó y esta vez miró al responsable
—Dreamworks...¿podemos hablar...?— sugirió con un tono tranquilo que reflejaba puro enojo enmascarado. El mencionado no notó mucho estas cualidades y aún así aceptó su charla privada muy apartada de los niños
—¡¿Intentas sobornar o manipular a mis hijos, malnacido?! ¡te voy a decapitar si llegas a cometer algo serio contra ellos!—
—Woah, relájate, ratoncito, no es lo que piensas. Simplemente quería caerle bien a los pequeñines, y como noté que nunca les regalas lo que desean, yo me ofrecí a entregarlos como una muestra de "disculpa" por comenzar con el "pie izquierdo". Incluso uno de ellos es más idéntico a ti—
—¡Pues por algo son mis hijos, tarado! agh, como sea...¿y ahora qué carajos puedo hacer para negarles ese paseo a un parque de diversiones? ¡si no fuera por tus putas ideas, ahora no me sentiría tan presionado!—
—Según puedo notar: creo que casi nunca tienes tiempo para ellos, pero no te preocupes, puedo ayudarte con tu responsabilidad—
—Pff, si como no, ni que fueras padre—
—Mmm, tú podrías ser la madre~—
—¡Hijo de-...—
—Papi, ¿está todo bien?— preguntó Disney Junior con inocencia
—Ah, ¡sí, sí, mi pequeñín! s-sólo discutíamos los planes para ir al...parque— se sintió arrepentido con la última frase, ahora si que se quedaría fundido según sus pensamientos...

Como el trabajo terminaba siempre a las 10 pm, irían a un estilo de parque o una feria nocturna en donde podrían divertirse mejor.

Estando allí, Disney tenía hartas ganas de huir, puesto a que no soportaba mucho el ruido o la cantidad de personas a su alrededor; le parecía incomodo. Dreamworks por otra parte se divertía a cada rato con los pequeños traviesos. Incluso parecía que él los mimaba más de costumbre, ya que les compraba algodón de azúcar, juguetes, premios, peluches, y hasta les pagaba los juegos en donde querían estar.

Aunque los tres hermanos se divertían en cada juego, el único que no disfrutaba eso era Disney Channel; él sentía tanto rencor con Dreamworks que no podía evitar enojarse, pero al igual que pasaba con su padre, debía ocultar sus emociones fastidiosas y quejumbrosas
—Señor Dreamworks, ¿podemos ir a esos patitos qué giran?— preguntó DisneyXD señalando el juego
—Emm, está bien—
Todos los pequeños fueron corriendo hasta allá, mientras que Dreamworks sólo se quedó con Disney y su otro hijo para observar juntos a los hermanitos
—Esos niños si que tienen mucha energía— comentó simpático, pero ambos lo ignoraron estando cruzados de brazos y simplemente observando
"Jaja, incluso usan la misma pose", lo pensó chistosito
—Papá, ¿por qué aceptaste la invitación del odioso ese?— preguntó Disney Channel aburrido
—No tuve opción. No quería desilucionar a tus hermanos, además parece que se están apegando mucho a él, y eso es conflictivo para nosotros—
—Lo siento, todo es mi culpa; les advertí que no aceptarán esos estúpidos sobornos pero obviamente no me escucharon—
—Al menos lo intentaste—
Cuando todo estaba ya por cerrar, les llegó la hora de irse.

Todos se dirigieron a la entrada/salida. A los inocentes "mini-Disney" les daba mucha pena despedirse del mayor. El trío de hermandad se había encariñado tanto con Dreamworks que les costaba separarse de él
—¡Por favor, señor luna, no nos deje! queremos seguir jugando con usted😭— lloriqueaba Disney Junior y Princess al mismo tiempo, y DisneyXD se contenía las ganas
—Lo siento, chiquitínes pero deben irse con su padre y su... hermano mayor, jeje—
—Ow, papá nunca nos presta atención. Siempre queremos mostrarle algo y nos ignora por completo...— dijo Junior haciendo un puchero en su boquita conforme seguía llorando con ojitos de perro. Disney había escuchado lo mencionado, ahora realmente se sintió avergonzado y nervioso
—¡Junior! deja de decir esas cosas y ven aquí, ¡y ustedes también!— lo llamó a él junto a sus hermanos al poco tiempo
—¡Sí, papi, ahorita vamos! disculpe, señor Dream, ya...debemos irnos...— dijo DisneyXD despidiéndose con lástima. Los demás no tuvieron más opción que obedecer a su papá, y así se fueron con él tomados de la mano.

Disney simplemente quería irse sin verlo, pero Dreamworks lo detuvo con un llamado
—Mmm, Disney...¿te gustó el paseo?—
—Ja, no sabría que decirte...básicamente vine arrastrado hasta aquí así que...no existe una respuesta simple para responderte—
Sin más charla, quiso continuar su camino, sin embargo se detuvo al escucharlo otra vez
—Jaja, supongo que no eres muy expresivo. No te preocupes, aunque no lo sepas hacer, podría ayudarte. Sólo tienes que abrirte y liberar todo lo que te motiva o encanta; guardarlo todo no siempre funciona. Aún así, no quisiera forzarte, es más preferible que todo lo digas tú; después de todo, tú tienes el control—
Eso lo había dejado pensativo. Quizás le podría sonar obvio pero sentía que le complicaba entender todo a la primera. Se volteó un poco y vio a Dreamworks nuevamente, no obstante...no comprendía porque razón sentía vergüenza al verlo, parecía un acto de timidez.

Sin querer continuar viéndolo, se fue de una vez y despidiéndose rápidamente al igual que sus hijos "¡Contrólate, Disney! ¡es importante guardar estos asquerosos sentimientos en mi trabajo y reputación! ¡no quiero que sigan viéndome fracasar por culpa de éste idiota!", pensó él mismo con un remordimiento terrible.

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