Nota🤍

Actualizó ya porqué voy de salida, no sé a que horas regresaré. Si encuentran alguna falta de ortografía dejármelo saber en los comentarios, lo arreglaré después.

Att: Yessi.A

El cielo se encuentra despejado y muy deslumbrante pintado de cálidos colores que anuncian el atardecer. Una bella tarde y vista para un día como ahora.

La familia Zat está celebrando un momento especial y muy emotivo junto a unos cuantos invitados que son sus conocidos, una celebración que quieren compartir con las personas cercanas y muy queridos para ellos.

Todo el lugar ha sido adornado minuciosamente, decorado de una manera elegante pero al mismo tiempo rústico.

—¿Estas nervioso?—Preguntó Fernando.

Hubo un momento en que creí no tener la oportunidad de ver a mi hijo así de hermoso, desbordando felicidad por un día como este, sin embargo si tengo la dicha de tal momento inolvidable.

—No, para nada.—Sostiene cariñosamente la mano de su madre.—Solo estoy feliz, muy feliz.—Sonríe.—Dewei es quien debe de estar nervioso e impaciente por venir rápidamente a mí, junto a nuestro pequeño Aster.

Esta espléndida vista me trae recuerdos agridulces, las bellas hojas secas anunciando el final de otoño. Hojas que  caen suavemente, cubriendo el suelo con ese color anaranjado es maravilloso.

Una vez más me encuentro enmedio de este jardín que parece uno de la realeza, oliendo el aroma de las flores que se impregna en mi ropa. Esos pétalos de rosas amarillas tan sublimes como la hipnotica mirada amarilla de mi alfa.

Dichos pétalos se elevan por los aires a causa del soplido del inquieto viento, rodeando mi cuerpo como si de magia se tratase.

Esta vez no me encuentro perdido, ni mucho menos confundido creyendo que había muerto y llegado a un mundo completamente diferente al mi, tomado posesión y vida de alguien más.

Ni asustado de mi alrededor o consternado por besar a un hombre cuando siempre fuí yo, y que desde un principio ya me había comido de muchas maneras a mi esposo.

Recordado ese tiempo atras es nostálgico y gracioso a la vez. Se podría decir que tenía doble personalidad, una de ellas había vivido una vida completamente diferente a la otra, mi alfa interior hizo todo eso para poder escapar de mis traumas y sofocación provocado por esa desagradable familia.

Le he agradecido mucho por lo que tuvo que soportar para mantenerme bien mientras él, se hirió soportado todo esas aberrantes cosas.

Aunque, no me he recuperado por completo de esos traumas porqué por más que quiera no puede así de fácil, fueron años de prisión en esa mansión. De igual forma, todo está yendo muy bien y soy muy feliz con mi familia principalmente con mi esposo e hijo.

De igual manera, sigo hablando de ello con Raphael, eso me ayuda mucho y he logrado mejor cada día, seguiré así hasta que todo eso sea olvidado por completo.

Bueno, es momento de dejar de pensar en eso, en estos momentos los más importante y lo que debo enfocar toda mi atención es en lo que tengo enfrente de mí. Una vez más voy a darle el sí en el altar a Dewei.

—Ya sabes, si te molesta solo dime.—Expresó Zaid.—Estaremos par ti, siempre.—Abraza a su hijo.

—¿Estás llorando?

—Es imposible no lagrimar un poco cuando mi hijo, se ve así de espléndido.

Ishaan se encuentra de pie en el altar, vistiendo un pulcro traje negro de dos piezas, exudado masculinidad, elegancia con su cabello plateado atado en una coleta con mechones largos sueltos a los lados de su suave frente.

Él está a la espera de ese hombre maravilloso que está a punto de caminar hacía el altar. Dewei viste un traje de tres piezas blanco, al igual que ese pequeñín travieso de su amado hijo, Aster. Le quedan tan bonito ese esmoquin blanco, parecía un pequeño lobo plateado bebé. Aster ya tenía seis meses.

—Sí, hijo mío.—Dewei besa la mano de Aster.—Nuestro amado Ishaan se ve majestuoso.

Por un instante mi corazón se detuvo por unos segundos, verlo ahí sensualmente, hermoso, a la espera de nuestra llegada es simplemente emocionante. Provocado tantos nerviosos en mí, está vez todo se siente diferente.

—¿Listos?—Preguntó Adair.—Me sorprendió el hecho de que cambiaron de lugar.

Dewei sugirió que si podía ser el quién vistiera de blanco en está ocasión, quién fuera por mi cuñado, mientras Ishaan lo está esperando en el altar.

Está será su segunda y última boda, una inolvidable como siempre debió ser. Con los anillos y los arreglos preparados meticulosamente por ellos dos. Se llevaron un mese enteró planeado todo, ambos tenían los mismos gustos por lo que no fue difícil.

—Era mi turno de convertirme en el novio.—Sonríe tontamente.—Aster y yo estamos listos para caminar por ese camino que nos llevará a nuestro Ishaan.

Está boda no empezó mal y tampoco es una obligación. Solo es una boda que es por amor y simplemente amor que será eterno. Ya no hay malentendidos de por medio.

En está ocasión ambos diremos nuestros votos sinceros desde lo más profundo de nuestros corazones, ya no serán  fingidos o apresurados como aquel entonces.

Bueno, siempre nos hemos amados solo que nuestras circunstancias y memorias estaban perdidas, distorsionadas con diferentes recuerdos. Pese a todo eso, nos volvimos a enamorar una vez más. Con más intensidad.

—Te vez hermoso.

—Se ven grandiosos, muy guapos.—Acaricia la mejilla de Aster y la de Dewei.

—Cuñado.—Puse la mano de Dewei sobre la de Ishaan.—Cuida de mi tonto hermanito.

Hasta un hombre como yo puede sentirse sensible aveces y hoy es una de esas veces. Entregar a mi hermanito, con su rostro iluminado de felicidad es reconfortante y me hace sentir orgulloso del magnífico hombre que crié. Mamá, papá, ¿lo están viendo? Dewei es feliz, bendecirlos siempre.

—Sean felices para siempre.

En ese momento Adair guió su mirada en dirección al hombre de aspecto rudo pero guapo detrás de Ishaan, esa mirada del alfa también conectó con la de Adair. Poniendo nervioso a Agni.

Desde que el alfa empezó a cuestionar sus sentimientos por el beta, le ha sido difícil el poder mantener el contacto visual con esos bellos ojos amarillos que se vuelven dorados en la luz del sol u otra luz, así de hipnótica es la mirada de Adair.

—Así será, cuñado.—Entrelaza su mano con la de Dewei.—Nos cuidaremos mutuamente.

—Sí, mi vida.—Ambos padres besan las mejillas de Aster.

—Bien, es momento de que tu y yo,—Sostiene en sus brazos a Aster—Nos vayamos a poner junto a los padrinos.

Adair dejó que los padres de Ishaan, le dieran alguna advertencia a su hermanito. Él tenía que ir a posicionarse en medio de Agni y Raphael.

El beta muy discretamente llevo su mano al trasero del alfa, acariciando suavemente los rígidos glúteos de Agni por el movimiento inesperado de su jefe. Se le había olvidado por unos momentos que Adair es todo un pervertido y sádico.

—Hueles bien.—Se inclina un poco más cerca del rostro del alfa, todos los invitados están inmersos viendo a los novios.

—Maestro.—Susurre nerviosamente, ¿por qué está actuando de está manera? ¿En público?

—No te vayas a quitar ese traje.—Demandó, cubriendo los oídos de Aster. De esa manera no escuché lo siguiente.—Tengo pensando hacerte muchas cosas sucias mientras yo te lo quité.—Sonrió lascivo.—Te vez tan caliente que mi polla sea empezando a endurecerse.

—Estamos en la boda del joven maestro Dewei...Maestro—Recalcó.—No diga esas cosas, por favor.—Sus piernas estaban por volverse gelatina y su rostro un tomate.

—Bien.—Quería seguir molestado, pero se abstuvo.

—¡¿M-Maestro?!—Tartamudeo bajito, Adair solo le sonrío.

Agni no comprendía del porqué su mano se encuentra entrelazada con la de su maestro, sin embargo su corazón estaba latiendo al máximo, por lo que intento soltarle antes de tener un ataque al corazón por esa emoción desbordante en alma.

No obstante, fue inútil su intento de saltarse. El beta lo tenía fuertemente agarrado y no tenía la mínima intención de soltarlo. Agni no le quedo de otra que tranquilizar su corazón.

—¿Eh?

Raphael estuvo a segundos de sonreír, Aster había estrellado sus manitas en el rostro de Adair, como si supiera e intuía que su tío estaba molestando al alfa. Por eso fue el quién lo reprendió. Por desvergonzado.

—¿Por qué eres tan inteligente?—Susurró.

Adair acercado todavía más cerca su rostro del oído de Aster, susurrando otras cosas más que solo fueron escuchadas por su sobrino.

Debió ser algo bueno porqué sonrió escandalosamente, atrayendo la atención de todos e incluso la de sus padres. Era una completa ternura su sonrisa.

"¿Qué le estará diciendo Adair?" Se preguntaron los padres, sonriendo al verlo tan feliz como ellos dos lo están.

—Es el momento de decir los votos.—Comunicó el abogado.

Ishaan sostiene fuertemente las manos de Dewei, mirándose fijamente con sus ojos brillantes. Sintieron que todo a su alrededor se volvió silencioso y solo existía ellos dos y la sonrisa de su pequeño Aster que todavía hacía eco en sus oídos.

—El amarillo de tus ojos es mi sol radiante en el frío invierno, calienta mi corazón y lo hace florecer en todas las épocas del año.

Acaricia suavemente las mejillas de su esposo, el alfa mayor solo cierra sus ojos disfrutando de las caricias de su amada esposa. Los invitados tienen sus ojos cristalinos por tener la dicha de presenciar ese amor tan bonito y sincero.

—Tal vez te haya olvidado en aquel entonces, perdón. Pese a, todo eso con recuerdos hermosos olvidados y muchas cosas más...nos volvimos a enamorar con más fuerza que la primera vez. Te amo esposo mío, te amo hoy y para siempre.

—Gracias por tomar mi mano.—Expreso Dewei.—Por quedarte conmigo aún cuando te defraude y rompí mi promesa...soy estupido a veces. Perdón.

—¿Solo a veces?—Pregunto con una sonrisa.

—Tal vez la mayoría del tiempo.—Posa sufren sobre la de Ishaan.—Juro no volverte a soltar nunca más, así me sueltes entonces prometo ser yo, quien se aferre fuertemente a ti. Viviremos juntos y moriremos juntos porqué no pienso quedarme en un mundo dónde no existas tú. Por eso, mantengamos sanos y fuerte para poder ver crecer a nuestros hijo, Aster. Te amo mi alma gemela, mi alfa.

—Te amo.

Ambos se morían por besarse pero tuvieron que contenerse hasta que el abogado, terminara el final de su discurso. Ya al deslizar las argollas matrimoniales en los dedos anulares, la pareja de alfas se besaron mucho antes de que dijeran, "pueden besarse"

El abogado y los invitados sólo negaron con la cabeza al mismo tiempo que sus rostros se adornaron con una espléndida sonrisa. Los esposos tenían ese algo que cuando los miras felices también te transmite esa felicidad.

—¡Muchas felicidades!

Llovieron los emotivos y muy ruidosos aplausos, júbilo de los invitados que empezaron a rodear a la feliz pareja de esposos.

—¡Dewei tira el ramo!—Pidió Fernando.—Chicos, alinearse.—Sonrío.

—Usted también, cuñado.—Expreso Cari, el hermano menor de Zaid.

—¿Yo?—Mostró su mano.—Ya estoy comprometido.—Se sostiene del brazo de Zaid.—Mi alfa me pidió matrimonio unos minutos antes de que Ishaan esperara a Dewei en el altar.

Tanto Agon como la pareja de alfa, asistieron. Ellos estaban presentes en ese instante en que Fernando le dijo; "sí, acepto casarme contigo."

—Pero de igual manera no me importaría unirme a ustedes.

—No es necesario, cariño.—Besa la mano de su omega.—Puedo darte cuantos ramos de rosas quieras, puedo llenar la habitación con muchas de diferente color.

—Eso me hace recordar la vez que te regalé un jardín de magnolias.—Comentó el padre de Jaylen, mirado a su esposa.

—Cierto.—Sonríe tímido.—Gracias a ese dia fue que nos conocimos, cuando fui empujado por todas esas personas que quería atrapar el ramo de la novia.

—¿Está es una clase de competencia?—Preguntó Raphael.

—Solo tira ese ramo de rosas—Comentó Jaylen.—Para que de esa manera podamos ir a dentro, a comer.

El omega ya quería meterle el diente al pastel de cinco pisos que se encuentra en la sala de fiestas en el interior de la mansión Zat.

—Ponerse en la fila.—Da media vuelta.

Adair sorprendió a los demás al ver que le entrego su sobrino a Ishaan, porque también pensaba unirse y con toda la intención de ser él, quién lo atrapé.

—¿Listos?

—¡Sí!—Respondieron.

Sus miradas estaban atentas a los movimientos de Dewei, irritados al ver que el alfa los engaña en su momento, el alfa de ojos amarillos al sentir que ya era suficiente de jugar con ellos, lanzo el ramo.

—¡¿Eh?!

Los que quieran atrapar el ramo ni siquiera lo vieron, Dewei lo lanzo tan fuerte, cayendo sobre la cabeza de Agni, era la única persona que no se había forma y fue él quién terminó atrapado por el ramo.

—Agni será el próximo en conseguir pareja y casarse al parecer.—Expresó Dewei, abrazado a su esposa e hijo.

—Que cosas dice, joven maestro.—Apreta con fuerza ese ramo.—Mi aspecto no es algo atractivo para las personas...

—No digas eso.—Jaylen abraza la cintura del alfa.—Cuando te conocí por primera vez creí que eras aterrador, pero luego me di cuenta que eras una gran persona con un corazón enorme.—Mira disimuladamente a, Adair.—No me importaría...

—Es momento de ir a la sala.—Sutilmente empujó a Jaylen, lejos del alfa.

Así que mis sospechas eran correctas, Adair se trae algo con Agni. ¿Desde cuándo? Bueno, como sea. Adair también merece ser feliz.

—Sí, vamos a comer.—Expresó Jaylen.

Jaylen también evita la mirada celosa de Cari. Si Adair no alejaba a Jaylen de Agni, el beta lo hubiese echo. Cari estába celoso por como el Omega abrazo al alfa.

—Vayan primero, nosotros los alcanzamos en un momento.—Informó Dewei.

—Bien, no tarden. Recuerden que son los personajes principales.—Comentó Agon, tomado la mano de su pareja, Raphael.

Al quedar ahí solo ellos tres, contemplaron el último rastro del atardecer abrazados cariñosamente. Feliz de poder disfrutar estos momentos, son una familia radiando felicidad.

Los alfas se juraron amor eterno una vez más, está vez frente a Aster. Quién sonríe ampliamente, causado ternura en sus padres al escuchar su linda sonrisa.

Fin.🤧🤧

Buenos días. 🌅 Otra historia a llegado a su fin. No me acostumbro a dar por finalizada una historia, por todos esos momentos, enojos, llantos, sí. Cuándo escribió cosas tristes, mis ojos suele cristalizarse. 😶 Sin embargo, estoy feliz de llegar hasta aquí.

Gracias a ustedes por su apoyo y por quedarse hasta el final. (⁠◍⁠•⁠ᴗ⁠•⁠◍⁠) Solo queda pendiente el epílogo y los extras de la pareja principal como de las parejas secundarias.

Atte; Yessi.A