La bendición de los Dioses

Esa noche, mientras Galba estaba en una reunión del Parlamento, guió a Jungkook hasta el paso subterráneo que conducía directamente al puerto. Sin embargo, justo cuando estaba a punto de escapar de la mansión, apareció un enorme caballo que venía al galope y un hombre que lo montaba y desde la  distancia daba la ilusión de tener la cara especialmente pálida.

—... ¡El Cónsul Galba ha sido asesinado!

—¿Asesinado?

—Jungkook... Entonces no vamos a poder escapar esta noche. Si el cónsul Galba realmente murió, entonces el puerto va a bloquearse y ningún barco podrá zarpar de aquí esta noche.

...

—Vamos a tener que idear un nuevo plan. Déjame al bebé a mí ¿De acuerdo? Tranquilo, ya te dije que no me gusta que pongas esa cara tan desesperada. Confía en mí, te prometo que todo va a salir muy bien pero, para eso debes escucharme. Deja que mis hombres te escolten adentro, es mejor que te arresten ellos a qué los soldados de Galba te lleven a la fuerza, vas a quedarte como un prisionero por un momento porque es más fácil protegerte si estás encerrado a que estés vagando por ahí y alguien pueda herirte. —Jungkook asintió.

Estaba de acuerdo con el plan de Taehyung, pero eso no quitaba el hecho de que Galba estuviera muerto y aunque estaba sorprendido por la situación, estaba completamente seguro de que tenía que ver con esa inconfundible aura asesina que Theo le dirigió a Galba en la arena de combate, sin duda él era el culpable.

“(Entonces... El culpable es Theo.)”

Mientras Taehyung se llevaba a Quinn, Jungkook se quedó atrás porque iba a ser "encarcelado" junto a las otras personas de su pueblo, por ser el principal sospechoso en el asesinato del cónsul.

Ya era de noche, y la mansión de Galba estaba rodeada por el ejército de Theo que llevaban consigo, cientos de antorchas
—¿¡Vamos a permitir que Egipto se aproveche de nosotros!? Mi padre trajo a una prostituta como amante y quería convertir al hijo de esa misma puta en el próximo cónsul. ¡Roma debe destruir el Reino de Egipto, ejecutar al abominable Rey Omega, y quemar a su hijo con él! —La voz de Theo, conduciendo al ejército, podía escucharse desde todas direcciones.

“(Que locura. Si intenta asesinarme ¿Qué pasará con la imagen de Roma a nivel internacional? ¿Qué pasará con mi familia?)”

Los hombres de Taehyung se llevaron a Jungkook y lo dejaron metido en un calabozo completamente oscuro.

Luego, una de las sirvientas, que vino a entregarle algo de comer, se acercó y le dijo que tenía que mantenerse muy alerta. —Este es un mensaje del señor Taehyung. Quería que supieras que el niño está bien y que no corre ningún peligro, logró esconderlo y ahora solo espera el momento adecuado para venir por ti. Solo debes preocuparte por ti mismo ahora.

—Esta bien. —Si su niño estaba bien, entonces ya no importaba si algo fallaba o incluso si decidían ejecutarlo. Jungkook le entregó su collar a la dama de honor y le pidió que le diera un mensaje a Taehyung, deletreando con el dedo las palabras romanas que acababa de aprender para que quedaran prendidas en la palma de su mano.

—Dile que no venga por mi y que se lleve al bebé a Egipto. Seré el señuelo aquí así que espero que escape mientras tanto.

Jungkook pensó que Taehyung le había hecho caso, puesto que no importó cuánto buscara o viajaran de casa en casa, Theo no pudo encontrar el paradero de Quinn ni de los esclavos que había traído del Reino de Egipto.

—Tú realmente eres una criatura horrible. Algunas personas dicen que deberías ser ejecutado lo antes posible.

...

—Hay otro príncipe en el Reino de Egipto. Tu gemelo, Junghyung, creo que así se llama. Los hombres que lo apoyan me han mandado un montón de cartas diciendo que quiere ser mi pareja y pidiendo que me casé con él. Dicen que quieren que les de a Galba y a ti como regalo de bodas. Sus cabezas, por supuesto.

¿Theo tenía trato con Libia y Junghyung y se estaba preparando para traicionar a Galba desde el inicio?

—Sin embargo, tengo que decir que después de verte de cerca, cambié de opinión completamente, tú me gustas más que Junghyung. Por eso, decidí que voy a matarlo a él y quedarme contigo. Quiero decir, deshacerse de tu gemelo es algo que mi padre debió hacer desde el principio. Su vida solo es un recordatorio de que Libia podría atacar en cualquier momento.

...

—Tú no eres como Junghyung. Eres un verdadero Faraón, se nota que tienes un porte increíblemente noble así que quiero que seas mi esposo.

Quería decirle que no aceptaba ser su compañero, pero su padre se había encargado de robarse su voz.

—Voy a dejarte embarazado de nuevo y por supuesto cuando encuentre a tu cachorro va a tener que morir. No voy a permitir que vayas por ahí con un hijo ilegítimo.

...

—Nunca pude decirle a nadie sobre la falta de pene de Galba y para respetar esto, mutilé su cuerpo en tantos trozos que no van a saber que tenía encima y que no. —Dijo con una sonrisa socarrona, el hombre era un verdadero psicópata. —Por ahora, cuando llegue tu próxima temporada de apareamiento, voy a cogerte todo el bendito día. Mantendré a Junghyung encerrado aquí hasta que sea el momento correcto de matarlo. —Dicho esto, Theo salió de la mazmorra segundos después de advertirles a todos sus soldados que vigilaran bien la entrada.

¿Qué pretendía exactamente con esto? ¡Theo de seguro iba a matar a Jungkook en algún momento! Justo como lo hizo con Galba y como planeaba hacerlo con Junghyung. Quería obtener el control de la República Romana y del Reino de Egipto y al parecer iba a lorgrarlo en cuestión de días.

Pero mientras Jungkook pensaba en lo que sería su futuro, la ventana lateral se abrió silenciosamente y entonces Taehyung entró saludandolo con un movimiento de la mano, como si nada pasara. No esperaba verlo allí, pero tenía que decir que se sentía muy aliviado de que así fuera.

—Galba tampoco se esperaba su traición.

Tomó su mano y escribió en letra romana todo lo que Theo le había dicho, sobre la palma de su mano, Taehyung asintió.

—...Un hijo ilegítimo. ¿Galba era infértil? Preguntó Taehyung mientras tomaba la mano de Jungkook entre la suya. La voz del hombre tembló cuando este asintió.
—Así que, tú... ¡Demonios! ¿Por qué nunca me...?

Jungkook volvió a tomarlo de la mano. “No voy a poner ninguna excusa por mis mentiras. Quiero que ayudes a mi hijo. Te dije que necesito que lleves al bebé al Reino de Egipto de inmediato”

—¿Por qué no hablas?

“Fui envenenado por Galba. Dijo que voy a estar bien en un año”

—Veneno... ¿Tu cuerpo está bien? ¿Te hizo otra cosa?

—Estoy sano. —Escribió.
—No te preocupes. De todos modos, por favor, hazme caso y ayuda a mi hijo. Mientras tanto, estaré con Theo para ganar algo de tiempo.

—No voy a hacer eso, ¿Theo no dijo que te convertiría en su pareja? Voy a estar contigo.

“Por eso, mi cachorro está en peligro. Quiero que el niño escape. Llévatelo. Ya ni siquiera tendrías que estar aquí ahora, por suerte su objetivo soy yo.”

—Lo siento, no puedo irme y dejarte atrás.

“No seas tonto.”

Si bien era una estupidez pensar en quedarse con Theo, Taehyung era responsable de llevar a casa a su hijo y a la gente del reino de Egipto.

—Si haces eso, vas a perder tu vida.

“¿Quién crees que soy? No voy a ser asesinado por alguien como Theo.” Garabateó en su mano. “Los Dioses me protegeran.” Jungkook le sonrió al final.

—... Entiendo. Pero a cambio....

...

—Quiero hacer un juramento de amor contigo.

Al momento siguiente, Taehyung lo abrazó tan fuerte que Jungkook no supo qué hacer o tan siquiera qué escribirle.

—Seré responsable de llevar al niño y a la gente del Reino de Egipto a otro lugar. Hay un puerto al sur que podemos usar, tomará algún tiempo prepararlo así que, hasta entonces, por favor tienes que estar con vida. No dejes que Theo te haga daño, prometemelo mi amor. —Jungkook asintió, movió los labios y dijo: —Lo prometo.

→⁠_⁠→→⁠_⁠→→⁠_⁠→→⁠_⁠→→⁠_⁠→

Jungkook aceptó ser su compañero.

Por supuesto, al recibir la respuesta, Theo dejó salir al hombre de la mazmorra casi de inmediato.

—Bien, pero quiero pruebas de que no vas a engañarme cuando tengas la oportunidad. —Theo agarró a Jungkook por la barbilla y lo acercó para poder besarlo.

Sin embargo, él lo alejó utilizando las dos manos y movió la boca para que pudiera ver cada una de sus palabras cuando dijo: —No creo que quieras que te bese una puta. —Por lo que Theo sonrió al darse cuenta de que no solo era considerablemente hermoso, sino que tenía un carácter bastante difícil.

—Tienes orgullo, yo respeto eso. Eres el Faraón después de todo. Valió completamente la pena ejecutar a Junghyung y no a ti.

...

—¿Estás impresionado? Te dije que lo iba a hacer ¿No es cierto? Lo maté después de que aceptarás ser mi esposo.

Jungkook trató de fingir desinterés sobre esto cuando Theo le sonrió y le habló sobre la manera en la que le había cortado el cuello a su hermano, pero simplemente no le fue posible. Las lágrimas brotaron de sus ojos sin darse cuenta, una y otra vez así que tuvo que apartarlas tan rápido como pudo incluso al tener las manos tan increíblemente temblorosas.

Junghyung... ¿Junghyung de verdad fue asesinado? Era su gemelo, su sangre. ¡Y todo fue por haberle dicho que aceptaba casarse con él! Por supuesto, su respuesta fue solo para ganar tiempo porque no tenía ni la más mínima intención de convertirse en compañero suyo cuando ya lo era de Taehyung después de haber sido mordido por él.

Aún así, cuando pensaba en ello y sentía el peso de todo lo que había perdido, comenzaba a dolerle el corazón de una manera que no podía explicar con palabras, porque pensaba que Junghyung en realidad había dado su vida en vano.

—¿Estás llorando? —Jungkook negó con la cabeza.

—Él quería tu cadáver ¿Por qué lloras por alguien así? —Jungkook negó con la cabeza nuevamente e inmediatamente después miró a Theo con una expresión que podía definirse como bastante determinada. Tenía que mantener su mente fuerte y su espíritu arriba para no caer en su provocación.

—No lloro por él. —Respondió sin voz, así que Theo le sonrió.

—¿Ves lo que digo? Siempre me has parecido más digno de ser el faraón que tu hermano.

Así lo creía Jungkook también, pero decidió no hacer nada para probarlo. Justo ahora, lo más importante era sacar a su pequeño bebé de este país,  mantener a Taehyung a salvo, y mientras cumpliera eso, pensó que entonces podía aguantar escucharle decir lo que le viniera a la cabeza. Sin importar que fuera una estupidez.

—Anunciaré que nos casaremos. Mientras más pronto, mejor ¿No lo crees?

Sí, eso es lo que quería que hiciera. Que informara a los ciudadanos de Roma sobre sus planes y que comenzaran a esparcirse las historias sobre la manera en que mató a Junghyung para casarse con él ¡Y todo solo para intentar convertirse en otro gobernante del Reino de Egipto! No sonaba como algo que fuera agradable para la multitud, enterarse de que su futuro regente, no era más que un asesino psicópata.

—Espero con ansias nuestro encuentro de mañana.

Jungkook por supuesto que comenzó a pensar que era un completo estúpido. Es decir, este hombre no parecía estar ni un poco consciente de las consecuencias que tendría que pagar por sus acciones y, como si se tratara de cualquier otro día, hasta gozaba de su triunfo como si ya fuera el nuevo rey.

Theo siempre fue conocido por ser un hombre lo suficientemente inteligente como para sacar a Junghyung en secreto del Reino de Egipto sin que Galba lo supiera y era tan meticuloso como para incluso llegar a asesinar a este último sin que se lo esperara. Ahora que lo pensaba, en realidad Galba también se portó como un novato. Se decía que era un gobernante aterrador que silenciaba a los niños que lloraban con solo una mirada y que era un cónsul tan poderoso que no alcanzarían manos para contar todo el apoyo que tenía de la gente. Pero ninguno de estos atributos, le hicieron notar la traición de Theo y en cada una de las oportunidades que tenía de hacer algo bien y tomar venganza, resultó que fracasó de la peor manera posible.

Jungkook se llevó la mano al pecho y pensó: “¿Es culpa mía?” ¿Algo en él estaba volviendo estúpidos a esos hombres? Ya lo había dicho, eran estrategas maravillosos, pero igualmente fallaron contra alguien que no les llegaba a los talones.

Se decía que un Faraón del Reino de Egipto era un mensajero de los Dioses y que por eso mismo poseía poderes bastante misteriosos. Los cielos, conociendo esto, protegían al Faraón del Reino de todas las maneras posibles con el único fin de que cumpliera el proposito por el que nació.

“(Diosa Isis, tú me escuchas siempre... ¿Volviste locos a Galba y Theo por haberme tratado mal? ¿Por eso sus planes fracasaron?)”

Por otro lado, ni Taehyung ni el rey de Libia, que habían aceptado el tratado de paz de Jungkook, tuvieron efectos negativos en sus vidas y en realidad, siempre fue como si todo les saliera bien.

Como se esperaba, estaba siendo guiado hacía su propósito de vida. La Diosa Isis siempre protegía a cualquier persona que estuviera dispuesto a dar su vida por su gente así que, si esto ya era así ahora, ¿Entonces eso significaba que Theo moriría pronto también?

Jungkook no sabía qué pensar ante sus propias suposiciones.

El sol estaba a punto de ponerse y Jungkook todavía estaba de pie en el balcón, sintiendo los rayos del sol sobre él mientras también bañaban el cielo occidental en llamas brillantes de un fuerte color naranja. Al parecer, lo que se podía ver en el Reino de Egipto era lo mismo que aparecía para él estando en Roma. Sin embargo, a comparación de aquí, se pensaba que este fenómeno era gracias a la aparición de una deidad que iba mucho más allá de ser solo un ente.

Una entidad que iluminaba el mundo por la mañana, retrocedía por la noche y volvía a aparecer para hacer brillar el mundo a primera hora del día para sus hijos y el sentimiento de reverencia por esa abrumadora existencia daba lugar a las creencias sobre el inframundo, la reencarnación y el más allá, en donde podías encontrar a Anubis y Horus y pedir un favor especial de sus manos.

Claro, aunque no los vieras como en las estatuas que estaban en los templos, se decía que ellos siempre estaban cerca, en el mundo de los mortales, cuidando a todos en forma de escarabajos, mariposas y flores de loto. Siempre los podías ver, si sabías donde buscar.

Sintiendo una vez más que la bendición de los Dioses estaba ahí para él, quien estaba tratando de proteger este país y también el suyo, se paró en el balcón, en la esquina más alejada de la mansión de Theo, y observó a los ciudadanos, a los sirvientes y a los soldados que no dejaban de revelarse en contra del nuevo orden de Roma.

—¿Dónde está Theo?

—¡Hay que matarlo!

—¡Hay que deshacernos de ese traidor!

Como había predicho, tan pronto como Theo anunció su matrimonio con él, los ciudadanos de Roma se volvieron locos y comenzaron a planear distintas formas de quitarlo del trono.

Dejando atrás a Jungkook, Theo escapó diciendo que sería solo hasta que "las cosas se tranquilizaran en el reino" y tomó un velero para huir de Roma, pero él sabía que los ciudadanos eventualmente lo encontrarían y lo matarían de una forma que ni siquiera él podía imaginar.

Lo vio claramente en una visión: Vio la manera en que la gente hablaba a gritos sobre un Omega del Reino de Egipto que destruyó Roma. Además, ya que no solo Galba, sino también Theo estaban obsesionados con él, había rumores constantes de que muchos de los Alfas se están batiendo a duelo por Jungkook aquí y allá.

—¡Hay que matar a Theo! Luego hay que hacer lo mismo con Jungkook.

—¡El Rey Omega vuelve locos a los Alfas de Roma! Hay que ejecutarlo o de lo contrario, la paz no llegará a Roma.

—¡El Faraón debe ser ejecutado o exiliado de regreso a Egipto!

No podían ver a Jungkook en el balcón, probablemente porque era un punto ciego. Pero desde allí, él podía escuchar todo lo que estaban planeando en su contra, entonces se inclinó ante el sol en la distancia, junto las manos y cerró completamente los ojos para orar. —Gracias Diosa Isis. —Dijo. —Por favor, déjame ver a mi hijo y déjame estar a salvo de todo esto. Permite que vuelva al Reino del Egipto. No solo yo, sino toda mi familia.

Después de rezar, bajó las escaleras hasta el sótano, dónde las criadas que estaban de su lado, le dijeron que había alguien que lo estaba esperando desde muy entrado el día. Luego, tomó una antorcha de aceite, sus cosas y continuó su recorrido a través de un estrecho y angosto canal subterráneo que estaba lleno de goteras y manchas de humedad. Aparentemente, fue construido por los antiguos gobernantes romanos para que pudieran escapar al puerto en caso de batallas. Era lo suficientemente ancho como para que pasara una sola persona, pero tenía piedras en punta y agujeros que eran peligrosos en caso de que se le ocurriera meter el pie.

El agua estaba fluyendo, se acumulaba en cada esquina y se conectaba al manantial que suministraba a cada hogar del centro y también del este. El nivel de control de inundaciones, que no se encontraba en el Reino de Egipto, era completamente maravilloso así que pensó que podía utilizarlo como referencia cuando regresara sano y salvo a su hogar y gobernara su reino.

Mientras más caminaba, más notaba que se habían comenzado a iluminar varios lugares alrededor y por las esquinas así que, aunque era un pasaje subterráneo por la noche, descubrió que la vista lograba abrirse rápidamente por la mañana y  también, notó que Taehyung estaba esperando por él con la mano extendida para que pudiera tomarla. Se suponía que ya debía haberse ido desde la mañana, pero de todas maneras no estaba enojado con él.

—El niño y tu pueblo están en un lugar más seguro ahora. En otro puerto, cerca de Poniente. Yo vine por mi cuenta porque odio terriblemente estar sin ti.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top