10


Capítulo 10

"¡Cuidado, mini Ethan!"



La noche llegó muy rápido. No he vuelto a intercambiar muchas palabras con Gabriel, él estaba sumido en sus pensamientos y solamente quiso quedarse en su cuarto, encerrado. No quise molestarlo, siempre que una persona estaba mal, aprendí a darle su espacio personal a menos que requiera de mi compañía.

Todavía no hemos cenado, pero unas porciones de pizza nos sobraron de la mañana y si llegase a faltar, podíamos llamar a que nos trajeran una más. Debo admitir que lo único que faltaba eran latas de cerveza. 

Me adentre a la ducha, dejando que el agua sumamente caliente me envolviera por completo. Pasaba mis manos por mi largo cabello realizando leves masajeos y las gotas en cantidad se desplazaban por todo mi cuerpo. Rápidamente salí del baño para sentarme en mi cama y poder secarme más tranquilo, aunque no me importaba ponerme la ropa si mi cuerpo aun estaba un poco humedecido. 

Al bajar las escaleras, supe que mi padrino estaba en su habitación. Le deje una pequeña nota de que saldría a correr y comprar unas cervezas para la cena.



Las calles estaban vacías alumbradas por unas luces a sus costados, no había mucha actividad y eso no me molestaba, me daba igual si hay muchas personas alrededor o no, yo sólo quería salir a correr y pensar.

Lo único que escuchaba por el momento eran mis fuertes pisadas aumentando de velocidad, mi respiración regular inhalando por la nariz y exhalando por la boca, mi cabello agitarse a pesar de estar recogido en un rodete y sentir como esas pequeñas gotas caían sobre mi espalda, y ahora, presentía a alguien mirándome.

¡¿Alguien mirándome?!

Esa sensación de sentirte observando a la distancia, y sin importar cuanto corra, esa mirada se siente clavada en mí. Le resté importancia, podía ser mi paranoia. Sin embargo, de vez en cuando me volteaba sin detener mi ritmo.

Zigzagueaba evitando algunos obstáculos que se me entrometían en mi camino y llegue sin darme cuenta hasta la plaza central. Detuve mi paso y relajé mi respiración jadeante. Miré vacilante toda la zona que cubría mi campo visual y aquello era un desierto que contaba con pocas personas a varios kilómetros, podía olfatearlas. Intentaba serenarme y pensar que todo esto formaba parte de mi jodida imaginación.


—Capaz fue imaginación mía —suspiré rindiéndome retomando para volver a casa.


Escuche unos gruñidos guturales y hondos, y eso me dejó estupefacto. Avancé hacia delante con unos lentos pasos para disimular que me encontraba bajo amenaza, cuando en realidad, puedo asegurar todo lo opuesto. Intentaba ocultar mi desesperación y angustia al escuchar aquellos gruñidos provenientes a un animal y hacer de cuenta que es imaginación mía.

Nuevamente esos gruñidos tortuosos.

No estaba del todo aterrado, no era un humano ordinario, podía protegerme pero no sabia a qué me estaba enfrentando. Esa era la cuestión. Seguí mi camino circulando y presentía que aquella mirada oscura me perseguía. No sólo eso, el inmundo olor a carne descompuesta inundaba mis narices.

¡¿Qué carajos...?!

No sabia como intentar disimular ese olor tan asqueroso y mi mente recordó aquella grotesca imagen de esos cuerpos descuartizados. Y ahora mismo no sólo estaba caminando, sino trotando para acelerar mi paso. Esto no era parte de mi imaginación, una criatura no humana estaba acechándome. 

Con mucho valor me di vuelta hacia atrás y no había nadie, me quedé unos cuantos segundos para confirmarlo y sí, no había nadie. Al voltearme, de un callejón se acercó un lobo enorme. Sus ojos eran verdes, estaba seguro que se trataba de un Betha, y tenia unas heridas sobre todo su cuerpo lo que hacia que expulsara un olor nauseabundo.


—¡¿Quién eres?! —grité estrechando mi mano para que pudiera olfatearme. 


No obstante, esto no dio resultado. Este lobo carecía de inteligencia o conocimiento de si mismo, es como si no fuera el mismo. Amenazaba con atacarme en cualquier momento mostrando aquellos colmillos deteriorados expulsando una baba espesa y asquerosa. El simple hecho de pensar que se acercaba a mí me daba nauseas. 

Dio dos pasos hacia delante, y a pesar de la oscuridad que brindaba la noche, podía ver con excelencia  sus movimientos. En el momento que quiso atacarme, me quedé plasmado, tenia sólo unos segundos para pensar rápido qué era lo debía hacer, estaba perdido.


—¡No te quedes parado, idiota! —la voz prepotente de una mujer que me tomó por la espalda y me empujó hasta caernos al suelo me sorprendió.

—¡Auch! —me quejé al golpear mi mentón sobre el duro suelo y sentir un peso extra encima mío.


No estaba consciente de la situación o lo qué estaba pasando, solo sé que aquel lobo no era normal. Levanté mi mirada aun quejándome mentalmente por el dolor y ese extraño animal descontrolado, ya no estaba, pero si ha dejado un rastro de sangre con otros fluidos olorosos que no quisiera oler y mucho menos, tocar.


—¿Estás bien? —me preguntó aquella voz desconocida que nunca había escuchado.

—Sí —afirmé y ella me tendió una mano, quise apreciar su rostro pero me desilusionó encontrarme con una máscara al estilo japonés que recuerdo haber visto en algún lugar. 

—Ten cuidado —dijo para darse la media vuelta, pensé que esta era la parte para que me de explicaciones.

—¡Espera! —la detuve, necesitaba que me explicara qué es lo que acaba de pasar —¿Quién eres y por qué me ayudaste?

—Es peligroso estar solo a estas horas de la noche. No es importante saber de mí, solo ten cuidado, niño. 


Ni siquiera la detuve y ella ni se molestó en voltearse a mirarme a la cara para decirme aquello. Estaba indignado ante lo que acaba de pasar. Me quede estático en en lugar cuando me sentí amenazado y no fui capaz de mover un solo dedo.

Me quede en mi lugar, viendo como aquella chica de cabellos castaños, tal cual como el mío, desaparecía en la abrumadora oscuridad de la noche.






¡Buenas, lobitos lectores y lobitas lectoras! ¿Cómo están?

¿Qué les ha parecido la aparición misteriosa de un nuevo personaje? ¿Creen que es alguien nuevo o deducen que se trata de algún personaje femenino de antes? Les voy a dejar algunas imágenes de su vestimenta y máscara:




Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top