Capitulo 51

"¿Quién es Luca en realidad?"

Ethan sale de su escritorio y en ese momento, Leannie bajaba alistada de las escaleras. Lucía un pantalón negro ideal para salir a correr y un top deportivo que estaba cubierto bajo un buzo que llegaba hasta sus caderas color verde.

—¿Estás lista? —Pregunta el Alpha.

—Sí. —Asiente la joven con una sonrisa. 

Ambos estaban en silencio a trote lento, aunque a medida que avanzaban, Ethan aumentaba un poco más su paso y a pesar de que Leannie no acostumbraba a correr, le seguía el paso. No hablaban solo porque al hacerlo, no se concentraban en el oxigeno que entraba a sus pulmones y en su respiración. 

Terminaron corriendo un recorrido de cuatro kilómetros. Sin embargo, Ethan acostumbraba a correr entre diez kilómetros con Gabriel y un grupo de Bethas como parte de su entrenamiento.

Al fin terminaron el recorrido. Ambos estaban sudados y Ethan se había quitado la camiseta quedando sin nada que cubriera su tonificado cuerpo. Sin aviso alguno, este levanta a la muchacha, haciendo que ella enredara sus piernas sobre poco mas arriba de la cintura de Ethan mientras lo abrazaba. 

Juntos se besaban de forma tierna, como acostumbraban a hacerlo desde el primer momento pero llegaba un momento en el que ambos querían explorar más del otro. Ethan recuesta a Leannie sobre la arena encimándose sobre ella sin aplastarla mientras que con sus dedos, acariciaba todo el cuerpo de la pelinegra generándole un cosquilleo que hacia que sus vellos se erizaran. 

Sus besos aumentaban un poco su intensidad y este, paso a acariciar la intimidad de la joven por encima de sus prendas haciendo que se le escapara un pequeño jadeo notable para el Alpha. Pero esa mañana no paso más allá de unos besos y unas caricias. 

Ambos se detuvieron para volver a sus labores pero estaban conformes con lo ocurrido, cada vez avanzaban un poco más en su intimidad y confianza y solo ellos notaban esos pequeños cambios. 

Al llegar donde habitaban, se encontraron con una escena un tanto graciosa: Emilia estaba encima de la espalda de Gabriel mientras le tiraba de esos rubios cabellos. 

—¡Métete ya mismo a la casa! —Ordenaba Emilia estando encima de este sin despegarse.

—¡Ya quítate de encima! —Reclamaba el rubio. —¡Ya estoy mejor! 

—¡No te creo nada, Gabriel Miller! —Discutía. 

—¡¿Qué es lo que esta pasando!? —Preguntó Ethan mientras se acerca sin su camisa puesta y acompañado de Leannie. —¿Qué intentas, Emilia? —Regañó a su tía.

—Seguro que no toda la culpa es de ella. —Intentó aclarar la pelinegra. —¿Qué has hecho, Gabriel? 

—Gracias Leannie. —Le guiño el ojo a la joven Alpha mientras sonreía. —El punto es que Gabriel tiene que seguir en reposo hasta que sus cicatrices desaparezcan. 

—¡Ya estoy bien! —Explicaba Gabriel en un chillido. —Ethan, por favor haz algo. 

—Gabriel ya está bien, Emilia. No hace falta que lo trates como a un bebé. 

La discusión entre los tres continuaba pero Leannie estaba hundida en sus propios pensamientos.

Narra Leannie

Ya son casi las doce del mediodía, en estos momentos debería estar en camino a verme con Luca. Sé que es un completo extraño pero gracias a él pude hacer bien el entrenamiento que me había otorgado Gabriel. 

Si continuo mi entrenamiento le mostraré mis cambios a Ethan. Él estará orgulloso de mi y yo misma lo estaré, les demostraré lo fuerte que soy. Confío en mis instintos.

—Ethan, —llamó la atención del Alpha jalando de su brazo. —ya debo irme. 

—¿A dónde? —Preguntó Ethan curioso.

—A continuar con mis entrenamientos. Quiero mostrarte una gran sorpresa en cuanto esté lista. —Pronunció emocionada la joven.

—Escucha, —tomó a Leannie del brazo alejándola de Gabriel y Emilia quienes seguían en su disputa. —quiero que vayas con mucho cuidado y no hables con extraños, enserio. 

—No te preocupes, Ethan. —Agarró la mano del Alpha. —Tú has hecho mucho para cuidarme, incluso arriesgar tu vida. Ahora es mi turno de demostrarte que puedo ser una persona digna de proteger a los demás. 

—Se que así sera, pulga. —Este toma de los cachetes a Leannie y besa su frente para después, despeinarla. —Solo ve con mucho cuidado. 

Ella asiente y se retira caminando, y en ese momento, curiosos se acercan ambos tortolitos que anteriormente estaban discutiendo.

—¿A dónde esta yendo? —Preguntó Gabriel.

—Al bosque a entrenar, y no sola. —Inquirió el robusto de ojos celestes. —Cuando llego por la tarde, en su ropa estaba impregnada el aroma de otra persona, pero por una parte no me altera, su aroma era muy conocido.

—Yo presentí exactamente lo mismo. —Acotó la castaña mientras colocaba sus dedos en su barbilla a modo pensativo. 

—¡Ethan! —Exclamó Samantha vestida con un jardinero. —¿Estás listo? —Preguntaba a su acompañante para ir a buscar leña.

—Enseguida vamos con Gabriel y los Bethas, —contestó mientras se acercó a Emilia que ya estaba a punto de protestar. —quiero que te encargues de ver con quien esta entrenando Leannie alejada de estas tierras.

—Está bien. —Asintió enojada. —Que conste que después de esto me tendrás que dejas salir de compras con Leannie y, mucho cuidado lo que haces con Samantha. —Susurró en el oído de su sobrino.

—No te preocupes por eso, es lo de menos. —Afirmó Ethan. 

Mientras tanto, con Leannie en el bosque

Esta se adentraba cada vez más al bosque, alejándose de las tierras de Ethan Griffin. Al llegar, sonrió al ver a la distancia a aquel rubio de ojos dorados; estaba sin camisa y con un pantalón de vestir muy ajustado a su cuerpo. 

El sudor de su frente brillaba con la luz del sol y unas gotas caían de su frente, y su cuerpo bien trabajado y marcado por unos firmes abdominales estaba también sudoroso. 

—¿Haciendo ejercicio desde tan temprano? —Preguntaba Leannie mientras se acercaba con una sonrisa amable. 

—Estaba esperando tu llegada, —encaminó hasta la pelinegra para tomar de su mano y dejar un delicado beso allí. —¿lista para tu nuevo entrenamiento? 

—Creo que sí. —Murmuró emocionada y nerviosa ante el tacto de sus labios con su mano, sin dudas ella lo veía como un joven muy apuesto y educado.

—Bien, para empezar, si quieres trepar mucho más alto deberás tener mucha más fuerza en tus piernas. —Sugirió Luca.

—¿Cómo? 

—Comencemos hoy con una rutina de sentadillas, te aseguro que mañana sera más duro aun. —Comentó este mientras sonreía picaramente. 

Aquella tarde, Luca le ordenó a Leannie que se la pasara haciendo varios tipos de sentadillas, pero era solo para tonificar sus músculos y los ejercicios de piernas que anteriormente había hecho con Emilia. Sin dudas, él tenia planes más duros para la joven Alpha. 

El sol estaba casi por ocultarse, pero aun seguía resplandeciendo. Leannie ya no aguantaba más el hecho de tener sus piernas flexionadas. Sin embargo, Luca la obligaba a continuar sin descanso alguno. 

Narra Leannie 

Me mantuvo todo este tiempo haciendo sentadillas. Dios... siento que mis piernas no dan a más. Un humano normal se hubiera quedado paralitico de tanto ejercicio, y aun así mis piernas se están endureciendo... 

Vamos Leannie, tienes que ser más fuerte que esto. 

Leannie estaba apoyando su espalda de forma recta en el tronco de un árbol mientras se mantenía con las piernas flexionadas sin hacer un minúsculo movimiento. Toda la tarde había sido una verdadera tortura a pesar de no ser el entrenamiento oficial que Luca tenia pensado. 

Ella cruje sus dientes y comenzaba a hacer fuerza con su abdomen. En cierto modo, el ejercicio que él le estaba dando era para fortalecer sus músculos y que hiciera fuerza con los mismos, y esto hacia que ella sudara mucho más. 

Luca la miraba detenidamente; sus expresiones, como los gestos de su rostro y la transpiración que emanaba su cuerpo dejándolo completamente húmedo o sus movimientos. Pero pensó que ya era suficiente el día de hoy.

—Terminamos el día de hoy. —Pronunció mientras aplaudía y caminaba hacia ella. 

—¡Por fin! —Exclamo Leannie y al intentar recomponer su postura, sus piernas se tambalearon pero antes de caer, unas manos sujetaron su cintura. 

—¡Te tengo! —Este la tomaba y apego su cuerpo al de él, mientras observaba detenidamente sus ojos celestinos. 

—¡Leannie! —Apareció Emilia interrumpiendo el momento, aunque este la seguía sosteniendo. —¿Luca? ¿Luca qué haces aquí? —Interrogó. 

Narra Leannie

¿Emilia conoce a Luca? 

¿Quién es Luca en realidad?

Fin del capitulo 51

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Buenas, quiero pedir perdón por el tiempo que no actualice, es que anduve un poco ocupada. Estoy haciendo tramites para cuando comience nuevamente la universidad así que les pido una disculpa por el retraso. 

Sin embargo, estoy preparando dos capítulos (parte I y parte II) donde revelare TODA LA VERDAD de esta historia para darle un final definitivo en un par de capítulos mas. Pero no se preocupen, habrá SEGUNDA PARTE pero no puedo revelar mas.

Sin mas que decir, con Leannie les deseamos un buen comienzo de semana.

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