Capítulo 15

"El frío que me envolvió"

Narra Leannie

Ethan...

Reconocería su voz.

—Quería... pensar un poco —murmura Leannie.

—¿Sobre qué? —se sienta a su lado.

—Te... aseguro que no tiene importancia, Ethan.

—Me gustaría escucharte.

Narra Leannie

¿Cómo le explico que no sé ni por donde comenzar?. Su misterio me está consumiendo.

—¿Quién eres en realidad? —ella se dignó a preguntar.

Narra Leannie

Me animé. Mi corazón está latiendo con fuerzas, mis manos están temblando.

—¿Crees que es importante —hace una breve pausa —cuando en realidad quieres irte de aquí?

La pelinegra se quedó muda, sin saber qué responder. Él tenia razón. Ella quería irse de ese lugar y volver a donde creía que pertenecía, al lugar que ella adoptó como su hogar. El silencio perduró varios minutos, hasta que se quebró.

—¿Sabes nadar? —pregunta Ethan como si nada, con mera tranquilidad.

—N-No. 

En ese preciso instante, Ethan se levanta y se quita todas sus prendas, quedándose solamente con sus pantalones y dejando ver un increíble torso marcado, una espalda definida y unos brazos que mostraban tener gran fortaleza. 

—¿Te gustaría intentarlo? —animándola.

Narra Leannie

¿Qué? ¿Meterme con el con este frío? ¡Debe estar demente sin duda alguna!

—¿Te asusta el agua? O... —su mirada se vuelve desafiante y seductora —¿Te asusta entrar conmigo?

— ¿Qué? ¿Cómo te atreves...? —frunciendo el ceño.

La pelinegra se quita la campera, quedando con su calza negra y su camiseta, también de color negro. El Alpha le extiende su mano y es tomada por ella.

Narra Leannie

A pesar del frío que hace... su mano está tan cálida.

Él se adelanta y ella lo seguía. Los pies de ambos tocan la helada agua del Océano. Las olas que venían y se desvanecían mojaban hasta sus rodillas.

Narra Leannie

Nunca había visto detenidamente la cantidad de tatuajes que Ethan lleva sobre su espalda...

El agua les llegaba hasta su cintura, pero Ethan seguía avanzando logrando que Leannie también se adentrara con él. La joven tiritaba del frío y su espalda se arqueó cuando el agua toco su abdomen. Pero este seguía avanzando. Ahora, el agua llegaba hasta el cuello de Leannie y Ethan se detuvo.

—Voy a sumergirme, ¿estás lista? —le advierte.

—N-No lo.. sé —temblaba del frío.

—Sujétate de mí —le dice el Alpha.

Narra Leannie

"Sujétate de mi"

¿Qué me aferre a él? ¡Sin dudas este hombre está demente!

Como si su cuerpo estaba siendo manejado por hilos y ella, siendo una delicada marioneta, sus frágiles manos toman los hombros de Ethan. Su abdomen se junta con el firme pecho de él. Su respiración era ardiente y pesada, se atrevió a pensar que quemaba el pecho del Alpha. 

Este, con sus grandes manos la toma de la pequeña cintura, la apega hacia él y juntos se sumergen hacia abajo. Ella no se atrevió a abrir los ojos, pero podía sentirse observada, seguramente por él. Habría sido el segundo más largo de toda su vida.

En ese mismo segundo bajo el agua, recordó:

"Una pequeña, de cabello negro azabache se encontraba tumbada entre la nieve que se hallaba en el suelo. Su piel pálida competía con la nieve para ver cuál era más blanca. Temblaba de miedo, su temor era aun más grande que el frío que estaba sintiendo. Tenía la sensación de estar siendo observada y no se encontraba muy equivocada. Sus sentidos auditivos captaron el sonido de alguien acercarse a ella, pero estaba petrificada para voltearse a ver de qué se trataba.

Un hombre..." 

Ambos salen del agua. Ese frío que la contempló y la abrazó por completo logró que la imagen de la pesadilla que la atormenta durante las noches volviera a su mente. Ethan la abraza y él calor que su cuerpo esparcía causó que ella volviera a la realidad. Sus ojos se abrieron pero enseguida se vio obligada a cerrarlos cuando volvieron a sumergirse por otro segundo. Otro segundo que trajo a la mente de Leannie el recuerdo que más odiaba. El que más odiaba porque no sabia quién era ese... hombre.

"Aquel hombre se acerca a ella, a su oído para respirar sobre este y pronunciar:《Eres mía, pequeña. Vendré por ti》. En ese instante, cuando la pequeña quiere ver el rostro de aquella figura todo se torna borroso."

Nuevamente, salen del agua. 

—Lo has hecho muy bien. De seguro tienes frío, vamos.

Durante el camino, Leannie estaba toda empapada, por un segundo, el agua helada le había traído a su mente aquellos recuerdos que la atrapan por las noches. ¿Fragmentos de su pasado o una premonición del futuro?

Por fin, después de una caminata en silencio, la pelinegra camina hasta las escaleras pero es detenida por la gruesa voz de Ethan y al escucharlo, ella se detiene.

—¡Que descanses! —acota Ethan. 

—Gracias... Ethan. Igualmente, descansa —le dedica una última mirada para continuar su camino.

La muchacha se recuesta en su cama, no importaban sus prendas mojadas, sus pies estaban fuera de la cama, solamente apoyaba su espalda y su mirada se centraba en el techo, tumbada boca arriba.

Narra Leannie

¿Qué fue... esa imagen que nunca logro comprender bien? 

Lo único cálido es... el cuerpo de Ethan, su cuerpo tan firme. No. No, debo estar siendo yo la demente. Últimamente estoy muy distraída y no debe ser así. Tengo que conseguir información de como escapar de este lugar cuanto antes y poder volver con Arthur. No tengo que perder tiempo. 

¡Buenas, lobitos y lobitas!
¿Cómo están, lectores?

Quería hacer esta escena para que no nos olvidemos de el sueño que Leannie tiene por las noches. Les aseguro que es muy importante y tiene un significado.

Feliz de actualizar nuevamente y, bueno acá traje un pequeño acercamiento entre Ethan y Lennie. Pero es muy breve (a lo que tengo pensado jeje)

Todo a su debido tiempo🌚
Con nuestra querida Leannie queremos decirles que tengan un bello día!