Capítulo 08

"¿Hay trato?"

Era de noche. Las luces estaban apagadas, la oscuridad reinaba. Silenciosamente, entra Leannie con una copia de llaves que ella tenia por cualquier inconveniente. En puntillas de pie, va hacia su habitación y cierra la puerta para correr y tumbarse en su cama para gritar de emoción. 

—¡Que alegría! Jamás imaginé que algo así pasaría —susurra Leannie.

Toma de su cajonera un papel blanco, un lápiz de su mesita de luz y escribe, sentada en su cama:

Querida nota: Quiero recordar esta fecha. Arthur acaba de decirme que me prefiere, que prefiere a esta simple Omega por sobre todas las cosas. Prometió darme  mi primer beso lejos de aquí, donde solamente estemos nosotros. 

Leannie se acuesta boca arriba y estira sus brazos leyendo la nota que acaba de escribir, felicidad irradiaba su rostro sin dudas. 

FLASHBACK

—¿Arriesgarías todo por... mí? —repitió Leannie, mirando a Arthur a los ojos.

—¡Claro! —afirma —Dios... no puedo creer que estoy aquí, diciendo estas cosas. 

—Es... muy lindo de tu parte, Arthur. Tú también me gustas, siempre me ha gustado estar contigo, fue de las pocas veces que me sentí acompañada.

—Pero cuando nos escapemos podremos estar juntos, para siempre.

—¿Por la noche? —pregunta ella aun sonriendo.

—Por la noche —asegura.

Ambos, al terminar su conversación, se unen en un cercano abrazo. En el momento de separarse, él le anuncia las siguientes palabras. 

—Cuando estemos juntos, te daré tu primer beso. Será especial —le sonríe.

Ella asiente y se aleja sutilmente, saludando con la palma de su mano, haciendo movimientos ligeros. 

FIN DEL FLASHBACK

Ella, recostada sobre aquellas sábanas blancas, era la mujer más feliz y soñadora, la delataba ese brillo especial sobre sus ojos que le daba una esperanza y oportunidad de ser vista como una Omega y vivir al lado de su compañero, a quien conoce desde que llegó a la casa de los Allem.

Por otra parte, en la habitación de Ethan Griffin

—Ella quiere irse con el futuro Alpha de la familia Morgan. El joven Arthur —le informa Gabriel a Ethan.

—¿Morgan? —por unos instantes se queda pensativo —Sí —suspira —, conozco esa miserable familia.

—¿Formaron parte de los Gul'kah, no? —pregunta Gabriel.

—Líderes —aclara —¡Bajo ningún termino debo permitir que ella se vaya con él! 

—¿Qué vas a hacer? 

—Apenas salga el sol, hablaré inmediatamente con James —predijo cruzándose de brazos.

A la mañana siguiente, al cabo de unas horas después del supuesto encuentro de Leannie y Arthur y la charla de Ethan y Gabriel, la joven de cabello negro estaba en la cocina para hacer sus labores. No obstante, no estaban ninguna de las dos Omegas que la ayudaban, debido a que los visitantes se habían ido a conocer el lugar y hospedarse en un hotel, así que Leannie solo debía preparar el desayuno para la familia Allem, dos hombres importantes y Ethan Griffin con su acompañante, Gabriel. 

Una vez listo el desayuno, Leannie entra con unas bandejas donde estaban siete tazas de café.

—Con su permiso, buen día —habla apropiadamente con educación.

Adam, la miraba con furia en su rostro. Aun no podía creer como un Alpha muy importante se atrevió a enfrentarlo y encima humillarlo por defender a una Omega donde en su cultura, las y los Omegas son tratados así o incluso peor. Como maldad, cuando Leannie iba a servir las tazas con aquel contenido caliente, este le pone el pie para que caiga, derramando todas las tazas y rompiendo la mitad de estas. 

Ethan se levanta sobresaltado al ver tal acto y darse cuenta de que el culpable había sido el joven Allem. Gabriel se levanta y se dispone a ayudarla para que pueda reincorporarse. 

—¿Te encuentras bien? —pregunta Gabriel, tomándola de los brazos para que pueda levantarse del suelo —¿Te hiciste daño?

—Ha sido torpeza mía, pido disculpas —apenada.

—¡Debes darte cuenta por donde caminas, inútil! —regaño Adam sin ni siquiera dirigir la mirada.

—¡Adam! —regañó Valerie —Vengan conmigo señores —mirando a los hombres que quedaron sorprendidos ante la situación inesperada —¡Pasemos al jardín!

Valerie se lleva a ambos hombres afuera y en aquel amplío comedor solamente quedaron James y Adam Allem, Ethan, quien miraba furioso al joven y Gabriel ayudando a Lennie. 

—¡Debes tener mas cuidado, Leannie! —recalca James.

—Disculpe —interrumpe Ethan antes de que Leannie pudiera hablar —¿Puedo hablar con usted?  

—Por supuesto, ¿gusta pasar ahora por mi despacho? 

—Será un placer —responde complacido Ethan mientras se levanta de su asiento.

—Leannie —habla James mirando a la pelinegra  —limpia este desastre. Por favor, señor Griffin, acompáñeme. 

Gabriel se queda inspeccionando las prendas que quedaron manchadas y luego, su mirada se posó en todas las tazas tiradas y rotas.

—¿Ya ves lo qué haces? ¡No sirves para nada! —escupe Adam sus palabras hirientes.

—No le faltes el respeto —interviene el Betha.

—¿Respeto? ¡Es una simple Omega! —reclama —Y tú eres solamente un perro faldero de ese tal Ethan. Debe ser un farsante que solamente quiere algo de la fortuna de mi padre. 

En un movimiento rápido, el Betha se posiciona detrás del muchacho, tomándolo con su antebrazo sobre el cuello de Adam, dejándolo sin movilidad y poca respiración. Se acerca hasta su oído y le pronuncia unas palabras.

—Nunca vuelvas a dirigirte así de Ethan. No quiere ninguna fortuna, eso no lo es todo —lo suelta, empujándolo y dejando que caiga al suelo —¡Vamos, Leannie! —ambos se retiran.

Esta solamente asiente apenada porque jamas le había faltado el respeto de esa manera a Adam y además, nunca nadie la había defendido ante los ataques verbales de él. A excepción de Ethan y Gabriel, quienes le dieron una lección para su mente cerrada y Arthur, quien solamente se dignó a hablar con su amigo pero nunca enfrentarlo.

Mientras tanto, en el despacho de James Allem

—¿Y bien? ¿De qué querías hablarme con urgencia? —se acomoda James en su asiento.

—Dentro de unos días, deberé irme a mis frías tierras.

—Comprendo. Tú sabes que siempre serás bienvenido aquí y tienes una manada muy... fuerte.

—Sabe como son los negocios, mis hombres no están disponibles "por su cara bonita" —comenta Ethan, haciendo reír al señor Allem.

—¿De cuánta suma de dinero hablamos? —cuestiona complacido, pero Griffin ríe a carcajadas.

—No busco dinero. ¿Sabe? No soy una persona que quiere algo a cambio, pero... he visto algo que me interesó muchísimo y tal vez podemos llegar a un acuerdo.

—¿Y qué es? —pregunta interesado James.

—Aquella Omega a la que ustedes llaman "Leannie". Es una joven muy atractiva.

—¿Una simple Omega? —responde desconcertado ante su propuesta. Claramente, esperaba oír más —¡Tenemos unas hermosas Bethas, si eso buscas! 

—Perdone mi falta de respeto pero cuando quiero una mujer, la consigo. 

—¡Hmm! —asiente —De acuerdo.

—Entonces... ¿Hay trato? —sonríe Ethan.

Ambos estrechan sus manos para dárselas mutuamente. Era el inicio de un acuerdo.

¡Hola lobitos y lobitas lectorxs! 
¿Cómo están?

Ayyyyy, hasta yo estoy muy emocionada, parece que el plan de fugarse quedará en vano.

¿Damos apoyo al Team Griffin? 
¿O seguimos de acuerdo con el Team Morgan?

Ustedes elijan la pareja que más les gusta y díganmelo en los comentarios.

Con nuestra querida pelinegra les enviamos saluditos a todos y todas.