- ¡Jade! - Me levanto de golpee sentándome en la cama y viendo a todos los lados de la habitación - ¡Jade!

La puerta de mi habitación se abre y veo a un hombre entrar en esta. La oscuridad de la noche no ayuda de mucho, ya que no puedo verlo, solo veo sus ojos viéndome con miedo y preocupación. 

- ¿Quién eres? - Susurro con miedo inundando mi cuerpo.

- Tenemos que salir de aquí, no es seguro - Se acercó a mí y me tomó de los hombros - A su lado no vas a estar a salvo, el solo quiere lograr su meta por medio de ti - Un chillido salió de mi garganta - No puedo permitirme perderte, no cuando se que yo...

Me despierto de golpe y veo la luz del día entrar en mi habitación asignada por Aaron. Me tapo con las sábanas y lágrimas empiezan a inundar mi rostro. Aquí es seguro. Me repito cada segundo.

No puedo confiar en nadie, eso lo tengo muy en claro desde que llegué. Pero no puedo simplemente vivir mi vida sola. Aaron me hace el menor de los casos y Nadir me dejó a mi suerte. Necesito irme y olvidarme de todo y todos. Necesito empezar a crear una nueva vida para mí, no puedo simplemente quedarme rodeada de cuatro padres, en las cuales no tengo a nadie con quien conversar.

- Tengo que irme de aquí - Suspiré, para después escuchar un golpeteo en la puerta. Después de decir un pequeño "pasen", Aaron entró con una sonrisa en su rostro.

- ¿Cómo está mi bebé? - Me sacó de las sabanas y me sentó arriba de el - ¿Necesitas algo? - Me mordí el labio, el cuál me empezaba a temblar.

Necesito a alguien con quien hablar y que me ame.

- Estoy bien - Escondí mi rostro en el hueco de su cuello e inhalé, para después dar paso a pequeñas lágrimas, las cuáles salían de coraje.

- ¿Por qué lloras mi amor? - Me separó un poco de él, justo para que me viera a los ojos. - Dime por favor.

- No tengo a nadie Aaron - Hipé - Mis padres están muertos, Nadir está con su ex mujer y tú no me haces caso, tú solo te encierras en tu oficina y no sales hasta después de días.

- Jade - Empezó a hablar, pero lo detuve.

- No Aaron, tu sabes que lo que digo tiene razón. Tú no me haces ni el mínimo del caso, hasta que llegas a acordarte de mí, como ahora. 

- Yo no sabía que te sentías así, pensaba que necesitabas tu espacio y no te quería atosigar. Por favor perdóname mi bebé - Me dio un pequeño beso en la frente - Todo ya va a mejorar, seremos los mejores, los más poderosos, seremos la mejorada realeza de los lobos, gracias a ti seremos los más fuertes. 

- ¿De qué hablas Aaron? - Lo miré sin entender algo de lo que estuviera diciendo. 

- Tú solo espéralo pastelito, te amo demasiado y no quiero arruinar algo y menos contigo. Así que aún no pienses en eso, yo te diré cuando sea tiempo. Ahora - Se paró con el en mis brazos - Vamos a salir de aquí, porque me imagino que no haz salido en días.

- Está bien - Le sonreí de lado del todo menos sincera. Ya no quiero estar aquí.

Nadir P.O.V

- Refuercen los lados este y oeste - Demandé hacia mis guerreros - Nadie puede pasar aquí, nuestra ciudad, todo por lo que hemos peleado puede irse en un abrir y cerrar de ojos. 

Todos asintieron y empezaron a hacer su trabajo. Me di media vuelta hacia mi casa y pensé acerca de todo lo que está pasando. Aaron se alió con mandas con las cuales no tenemos buen trato y en resumen, son nuestras enemigas. No puedo simplemente dejar que por su caprichos e destruyan todo lo que mis antepasados hicieron para llegar a a la cima en la cuál estamos. 

Ya tengo dos manadas aliadas a la mía, pero eso no es suficiente, aún me faltan respuesta de otras tres manadas y se puede decir que con su ayuda ganaremos todo esto.

Aaron no se saldrá con la suya, en mi manos aún esta la venganza que le debo por todo lo que me ha hecho. Jade mi amor, voy a ir por ti, solo espera un poco más...

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Helloooo, aquí les dejo un cap nuevo, las amooooo