1 mes después.

Llevo 1 mes que solo miro por la ventana en dirección al bosque, pensando en aquellos ojos negros envolventes de Mew. Miro mi muñeca y ya está sana, ya no tengo nada más que una cicatriz.

Mi madre ya está bien también, se puede decir cómo que nunca pasó nada.

—Aún no entiendo que si lo extrañas no has ido a verlo —manifiesta la madre mirando a su hijo solo suspirar.

—No digas tonterías.

Jamás podría engañar a mi madre, ella me conoce muy bien. Y sinceramente sí quiero verlo.

—Ja, ¿tonterías? El guardian te trae suspirando todo el día, Mew si es muy apuesto, tuviera tu edad, no dudaría en estar con él.

—Mamá, se te está quemando el arroz.

—¡Mierda!

Mi madre sale corriendo y yo miro la hora. Debía salir, pero claramente ahora no lo haré, no tengo ánimos.

Me voy a mi habitación mejor a dormir.

Quito mis zapatos y entro a mi cama. Lentamente, empiezo a cerrar los ojos y caer en sueño.

¡Fuego! ¿Dónde estoy? Empiezo a caminar lentamente y miro la advertencia de no pasar. ¡No puede ser! Es donde vive Mew.

Me pongo a correr, necesito saber que todo está bien, necesito saber que es otro lugar del bosque el que se está incendiando, mi corazón está muy agitado.

Me hace recordar cuando tuve que correr por salvar mi vida, sé que tengo que correr sin detenerme y sin mirar atrás.

El olor a fuego y el calor se hace más insoportable, pero no me importa, necesito saber que todo está bien, necesito saber que esta vez no perdí a un ser importante en mi vida.

—¡Mew!

Grito fuertemente al ver el peor de los escenarios delante de mí, el bosque estaba en llamas y dónde salían vivir, ya no existe.

—¡Mew! ¡Mew! ¿¡Dónde estás?! ¡Responde!

Grito una y otra vez… Cerraba los ojos cuando podía observar cadáveres calcinados, cadáveres de humanos como también de lobos, ¿qué paso?

—¡Qué alguien me conteste! ¿¡Qué mierda paso aquí?!

Mi corazón se estrujaba, no me importaba quemarme, no me importa sentir el dolor del fuego en mi cuerpo, solo quería encontrar a Mew.

Cuando levanté la vista pude verlo amarrado en un árbol, bañado en sangre y mi corazón se detuvo.

Corrí a verlo, lo tocaba, trataba de soltarlo de ese amarre, pero me era imposible.

—¡Mew! ¡Mew! ¡Abre los ojos te lo imploro!

—Él no lo hará, ya está muerto.

Volteo a ver al dueño de esa voz y un lobo castaño dejaba caer de su hocico a un pequeño lobito que podía reconocer perfectamente, era uno de los pequeños lobitos que jugaba afuera de la casa cuando salí en búsqueda de mi madre.

—Este es el último que quedaba aquí.

—¿¡Quien mierda eres?! ¿¡Eres el responsable de todo esto?! ¿¡Cómo que ya está muerto?!

—Soy el Omega Fiat, le advertí a Mew que esto pasaría si no me daba su lugar, hoy todos pagaron las consecuencias de su necedad, especialmente Mew, quien fue emboscado por mi manada y le hicimos pagar con mucho sufrimiento.

—¡Maldito!

Imaginar todo lo que este malnacido le hizo sentir a Mew me estruja mi alma, ver cómo este desgraciado poza su pata sobre el pequeño lobito y lo aplasta me producía un terrible escalofrío. Estaba inmóvil, no me podía mover, me aferré a Mew listo para ser asesinado también.

—¡Gulf Kanawut!

—¡Mew!

—Hijo… ¿Qué paso? Te escuché gritar y estabas muy inquietó.

—¡Necesito volver a ver a Mew! ¡Necesito saber que está bien!

Me levanté rápidamente y me puse mis zapatos, me movía como un loco por todos lados buscando un pequeño bolso y echar lo necesario. Necesito saber que está bien y que mi sueño solo fue eso, un sueño.

—¿Qué ocurre hijo?

—Tuve una pesadilla, necesito saber que Mew está bien, necesito saber que todos están vivos.

—Debió ser una horrible pesadilla hijo, te acompañaría, pero debo trabajar, no puedo perder mi fuente de trabajo.

—No te preocupes mamá, iré yo. Te llamo cualquier cosa.

Mi mamá solo me dio un beso en la frente y yo tomé mi bolso y me fui.
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★★ Camino Aldea★★

Gracias a Dios recordaba el camino a la aldea, camine un largo tiempo hasta que vi la advertencia y me adentre en el bosque.

Camine unos minutos más y un escalofrío empezó a recorrer mi cuerpo, me sentía observado o mejor dicho acechado.

Me sentía la cena de algún animal, me sentía listo para ser devorado y eso me hacía ser un buen cristiano, nunca en mi vida había rezado tanto.

Ya no podía más y me eche a correr, corrí demasiado, pero esta vez cometí un error, mire atrás y no me equivoqué, alguien sí venía detrás de mí y parecía ser el mismo lobo de mi sueño.

—¡Mew! ¡Mew! ¡Ayuda!

Empecé a gritar fuertemente ¿¡Cómo mierda se me ocurrió venir aquí?! Estúpidamente, caigo y me levanté otra vez para seguir corriendo. Gritando una y otra vez el nombre de Mew.

Salto un tronco, pero producto de eso me hiero mi pierna, pero no me importa, necesito salvar mi vida, no llegue hasta aquí para ver la cena de un lobo.

Insisto que la muerte en un acantilado es más decente que morir en el hocico de un lobo.

Nuevamente, caigo, pero esta vez ya no tenía fuerzas para levantarme. Estaba muy agitado y volví a mirar y ya estaba encima de mí aquel lobo. ¡Te amo mamá!

Escondo mi rostro y solo escucho un fuerte gruñido y al levantar la vista puedo reconocer aquel pelaje negro que saltada sobre mí a defenderme.

—¡Mew!

—¡Corre!

Es todo lo que escucho de Mew como puedo me levanto y corro hacia detrás de un gran árbol y solo puedo observar como se inicia una pelea entre ambos. C laramente el Alfa de Mew era el doble del tamaño de aquel lobo que solo era un Omega. Los estudié y sé que es un Omega.

—¡Te dije que no cruzaras este territorio! ¿¡Qué haces aquí?! —regaña Mew enojado—. ¡Vete ahora mismo Fiat!

—¡Deberás matarme! —desafía Fiat gruñendo—. ¡Los malditos Betas me corrieron de la manada! ¡Soy un lobo sin manada y solo estaba cazando para comer!

—¡Gulf no será tu presa! ¡Vete a otro lugar y no vuelvas más! —Mew aúlla fuertemente haciendo que los de su manada empezarán a aparecer y Fiat se viera amenazado.

—¡Maldito seas Mew! —gruñe Fiat para irse corriendo rápidamente cuando se ve intimidado.

Mew volteo a mirarme y cambió a su forma humana.

Yo respiré desplomándome ya casi sin fuerzas, por fin podía respirar y dejar mi estado nervioso de lado.

Como pude me levanté y corrí una vez más y lo abrace fuertemente respirando el dulce aroma que desprendía de flores silvestres con una esencia de vainilla.

—¿¡Estás bien?! ¿¡Qué haces aquí?!

Mew parecía más nervioso que yo y me miraba de pies a cabeza buscando algún rastro de ataque y solo podía ver mi pierna herida cuando la dañe saltando el tronco.

—Estoy bien, gracias por venir a ayudarme.

Solo lo quedé mirando y realmente extrañaba esa hermosa sonrisa que me dio que me hizo sonrojar y los demás lobos voltearon más avergonzados que yo.

Ese ambiente tan romántico que estábamos viviendo se ve interrumpido cuando se escucha no muy a lo lejos un disparo y un fuerte aullido.

—Ese fue Fiat.

—Alfa guardian, ¿quiere que vayamos a verificar que ocurrió?

—No. Fiat estaba sin manada ahora y estaba cazando en estos territorios, seguro fue asesinado por algún cazador, no expongan sus vidas, volvamos a nuestro hogar.

Nadie dijo nada más y Mew volvió a cambiar a su forma de lobo, me indicó que subiera a su lomo y así fue.

Me subí y se echó a correr y los demás lobos a su lado, después de unos minutos ya estábamos en su hogar.

Con cuidado bajo y el cambio su forma tomando mi mano y me guío a su casa, la casa que pude volver a ver a mi madre después de que la salvarán.

—No me has respondido que haces aquí.

—Necesitaba verte, necesita saber que estabas bien —le hago saber viendo que estaba sacando un pequeño botiquín.

—¿Por qué no estaría bien? —me pregunta y me hace sentar para tomar mi pierna y empezar a curarme.

—Tuve un horrible sueño dónde veía a ese mismo lobo que me atacó, pero tú estabas muerto y esta aldea, estaba en llamas, fue algo horrible.

—Otro hubiera terminado muerto si no aparecía.

Tiene razón. Solo bajo la cabeza al sentirme culpable, ya que quizás yo mismo puse su vida en peligro si Fiat no hubiera estado solo.

Mis labios fueron atrapados y Mew me sonríe. Si supiera que esa sonrisa me desarma, complementa y no me quedo de otra que tomar su nuca y profundizar más el beso.

Aquel dulce beso dejó de ser dulce y Mew desprendió una maravillosa fragancia que extrañamente encendía mis hormonas.

—Te he extrañado demasiado… —me hace saber Mew.

—Yo mucho más.
🔞

Le hago saber besándolo. Me levanté de la silla y fuimos a su habitación, donde nuestra ropa empezó a sobrar con cada beso y caricia que nos dábamos hasta que quedamos desnudos y entramos a su cama.

Subí a horcajadas y él besaba mi cuello, hombros y dejaba suaves caricias en mi espalda que me hacía gemir y delirar.

—Te quiero hacer mío Gulf.

—Quiero serlo Mew, quiero ser solo tuyo.

—Escucha bien mis palabras Gulf, si eres mío no te puedo dejar volver a tu hogar, te debes quedar contigo, porque aunque no seas de mi raza, mi Alfa te acepta como suyo y si te vas podrías matar a mi Alfa. Piensa bien lo que deseas hacer.

¿No volveré jamás? Ese era un dilema, no por mi vida en la ciudad, solo por mi madre, pero mi madre es inteligente y estoy seguro de que sabe que si vine aquí fue para quedarme y no me importa perder mi vida en la ciudad, realmente ni la tenía.

—Prepare hermoso Alfa que tendrás un esposo ahora.

Me sonrió y me beso nuevamente ante la feliz noticia, nuestros besos encendieron nuevamente nuestros cuerpos.

Yo empecé a gemir cuando sus dedos empezaron a rodear mi entrada con la intención de prepararme y así fue de forma muy gentil.

Solo podía gemir ante las sensaciones que me provocaba, mi excitación era desbordante y en vez de sentirme nervioso me sentía relajado, ese aroma que desprendía me relajaba y me daba seguridad.

Ya cuando estaba listo quito sus dedos y sin darme cuenta ya estaba penetrado y bajaba lentamente, acostumbrándome al gran tamaño de su miembro.

Empecé a subir y bajar una y otra vez mientras nos besábamos. Ambos gemíamos hasta que me di cuenta de que sus ojos destellaban un rojo intenso y sus colmillos empezaban a salir.

Por lo que leí es cuando el Alfa quiere marcar a su pareja, en mi caso no soy de su raza, pero seré su pareja.

Suspiró y apretó fuertemente los ojos y lo acerco a mi cuello para que su Alfa me reconozca como su pareja, aunque no sea de su raza.

Mew me entierra sus colmillos y el dolor era muy intenso, que mis lágrimas se desbordaban como cascadas, pero aun así lo deje seguir hasta que pronto siendo un alivio cuando Mew empezó a lamer mi herida y el dolor desapareció instantáneamente.

—Te amaré y cuidaré con mi vida mi hermoso humano —me hace saber el Alfa.

—Gracias Alfa, cuida por favor de mí.

Extrañamente, me siento más excitado y empecé a subir y bajar más rápido hasta que me corrí sin tocarme y siento como Mew eyacula en mí y no solo eso. Me sentía presionado, un leve dolor se apoderó de mí.

—No te muevas, recuerda que soy un Alfa, por ende se forma el nudo que pronto bajará.

—Tengo mucho que aprender.

—Mi Alfa te marco como suyo, es una linda marca, perdón por dañarte.

—Fue un momento el dolor, ya ni duele, pero aquí abajo sí.

Le hago saber sonriendo y él me vuelve a sonreír y me abraza fuertemente. Yo solamente vuelvo a oler su dulce fragancia y me siento realmente muy feliz de que Mew correspondiera a mis sentimientos.
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Años después.

—Alexander y Natasha, dejen el juego y vayan a comer.

Tengo dos hermosos Gemelos cachorros de 3 años, Alexander que es Alfa y Natasha que es una Omega. Resulta que podré ser humano, pero resulte ser un lindo Doncel con capacidad de engendrar hijos.

—¡Sí, papi! —responden ambos gemelos.

—Obedezcan a su papi, dejen de ser lobos, vayan a lavarse y comer.

—¡Sí, papá! —gritan los gemelos para volver a ser humanos y correr a la casa.

—Hola amor.

Saludo a Mew quién es mi esposo desde hace 3 años, mi madre nos viene a visitar de vez en cuando, ya que está en una relación.

—¿Cómo estás, amor? —me pregunta Mew besándome y abrazándome.

—Bien, solo extrañándote, ¿todo bien alrededor?

—Ningún problema, tú sabes mi amor que tu esposo es…

—El Alfa guardian..

꧁𝐹𝑖𝑛꧂