La pareja Uchiha Namikaze llegó a Italia, tomaron un tren a una provincia cercana a la capital, rentaron un airbnb con una tarjeta de un banco extranjero que habían sacado hace semanas, los investigadores del bufete la tendrían complicada, habían sacado parte del dinero en sus cuentas de negocios en efectivo, dando previo aviso a la oficina de recaudación y lo depositaron en esa cuenta de ahorro; sonrieron con diversión, se quedarían una semana en ese lugar. Itachi estaba emocionado, Naruto corría de un lado a otro con emoción, le había encantado el lugar, era una casa de campo con un enorme jardín, el clima era húmedo ideal para los pulmones de Itachi.

El rubio se acercó coqueto a su novio, Itachi sonrió con diversión -¿sabes?, tengo un poco de hambre -el Uchiha sonrió ligero -¿qué tipo de hambre pequeño? -Naruto se hincó frente a su novio, el miembro del Uchiha se puso duró al verlo de esa forma -hambre de la buena, de esa que no hace daño -sonrieron con diversión ambos, el rubio abrió el cierre del pantalón de su pareja, lamió sus labios con deseo al sacar el miembro de su hombre, estaba duro y grande como le gustaba, sacó su lengua, la pasó suavemente por él -ahhh -Naruto sonrió satisfecho, abrió su boca y chupó con deleite la punta de su miembro, comenzó a moverse suavemente al ritmo de sus manos, su novio era grande -pe… que… ño ahhh -levantó sus manos atrapando los rubios entre sus dedos comenzando a marcar un ritmo más acelerado.

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-¿Encontraste algo que podamos usar contra el doctor? -Kisame los vió con cuidado -está limpio jefe, el niño y su familia dan asco de tanta limpieza que hay, creí que eran fachadas las fundaciones y buscaban lavar dinero o evadir impuestos, pero no hay nada de eso, tienen un despacho contable de renombre "Nara", bastante influyente igual que su familia, ambas son conocidas por su integridad, viven para sus obras de beneficencia, el sesenta por ciento de las ganancias y el cien por ciento de las donaciones se usan para beneficencia en hospitales de menores recursos de ellos mismos donde atienden a gente con necesidades, es bastante increíble su labor, no les gusta crear publicidad, las donaciones vienen de gente a la que han salvado la vida y conocidos suyos; el chico tiene una carrera bastante respetable, es una eminencia a pesar de su apariencia en la oncología, da conferencias en línea, sé de buena fuente que no muestra su apariencia por miedo a que lo subestimen o sobajen al verse exageradamente joven -Fugaku veía a Kisame con molestia, giró su mirada a Obito -te lo dije, la familia de Kakashi está limpia, ya lo sabías de antemano, conociste a Minato-

El líder Uchiha estrelló su mano en el escritorio -¿alguna o algún amante? -Kisame vio con el rostro serio a su jefe, negó -hay una chica, se dice que está obsesionada con el mocoso, pero él nunca le ha hecho caso, otra chica en el hospital, tuvieron sus diferencias al rechazarla, bueno -rascó su nuca con ansiedad -hay un fuerte rumor en el hospital, se dice que tiene una relación con un paciente suyo, llevó su tratamiento con bastante cuidado y atención, sus tiempos libres se los dedicaba por completo, no hay confirmación, pero -Fugaku apretó el ceño -lo lamento jefe, su hijo está involucrado en el rumor -el líder golpeó su escritorio cabreado confirmando sus sospechas -¿algo más? -Kisame los vió nervioso -sí, hay algo más, hace una semana el niño renunció al hospital, el motivo, un viaje para que su pareja terminara de recuperarse -Fugaku y Obito abrieron sus ojos bastante, eso confirmaba las sospechas de Obito.

-Fuí a la casa de Itachi-san, no está su auto, llevo días vigilando el lugar, ayer una vecina me contó que los vio salir, al parecer fueron a visitarlo hace unos días, en cuanto salieron, subieron al auto con maletas, a gran velocidad salieron de ahí -Fugaku golpeó sus dedos en el escritorio -¿Cómo demonios se dieron cuenta que planeaba algo? -Obito volteó los ojos -tal vez por que fuiste descarado con el desprecio al chico, era obvio que no te quedarías con las manos cruzadas, Itachi te conoce bastante bien, sabe como trabajas, seguramente sus cuentas las movieron en efectivo a otro banco fuera del país, no usará medios rastreables, eso es un hecho -Kisame hizo una mueca de molestia -eso es verdad jefe, vaciaron la mitad de sus cuentas, se fueron en un viaje a Italia, sus teléfonos perdieron señal, están en su domicilio, desde el aeropuerto perdí su rastro, ambos chicos son inteligentes, será difícil localizarlos-

Obito veía a su hermano con cuidado pensar, el líder giró su mirada al investigador -búscalos, en cuanto los localices, avísame -Kisame asintió, salió del lugar -¿qué harás Fugaku? -el líder apretó el ceño -no se saldrán con la suya, en cuanto los localicen, hazle saber a Itachi que quedará fuera de mi maldita herencia si continúa humillándome de esta manera, buscaré la forma de destruir a ese chico si insisten en esa estúpida relación, hay muchas formas de hacerlo -Obito apretó el ceño -Fugaku, ¿por qué no simplemente los dejas estar juntos?, no es como que vayan a exhibirse con la sociedad tan cerrada que maneja el país con respecto a la orientación sexual -el líder giró su mirada con coraje -demonios Obito, ¿por una maldita vez en tu vida puedes estar de mi parte?, Itachi tiene que alinearse con la maldita familia, todo era perfecto hasta que salió de aquí; maldita sea, ¿ya localizaron a la hija de puta de Izumi?, la quiero tras las malditas rejas, ese divorcio no la exime de haber vaciado la cuenta mancomunada y humillar de esa forma a mi hijo, si Itachi está con ese maldito chico es su maldita culpa, quiero que pague -estrelló su mano con coraje, Obito asintió con cansancio -ya la localizamos, estamos sobre la demanda -Fugaku asintió bastante molesto, sus onix veían la pared de la oficina con coraje.