Capítulo 18

El Uchiha entró a la cámara de resonancia magnética, cerró sus ojos rezando por un milagro, estaba nervioso, temblaba -por favor trate de relajarse -asintió, no le habían dicho a la familia del azabache del estudio, esperaban buenos resultados y ganar tiempo para no dejar pendientes. Itachi escuchaba como el aparato giraba sobre su cuerpo, sentía que el aire le faltaba, estaba demasiado claustrofóbico en ese momento, el ruido del aparato lo ponía aún más nervioso. Al salir sintió un pinchazo para estudios de sangre de emergencia -bien, es todo, en un momento le enviaremos los resultados al doctor Namikaze-

Itachi asintió, subió con ayuda de un enfermero a la silla, lo llevaron al consultorio. Naruto mordía su mejilla con miedo, cuando lo vio entrar cerró la puerta de su consultorio, lo abrazó con fuerza, besó sus labios con necesidad, ambos temblaban esperando lo mejor -mi Itachi -el Uchiha respiró hondo tratando de calmarse, Naruto escuchó el timbre de correo de su laptop, de inmediato se sentó en su silla del escritorio, abrió el documento, con seriedad comenzó a revisar minuciosamente, ganglio por ganglio, centímetro a centímetro, sin dejar espacio sin revisar. Para el Uchiha cada según era una eternidad, nunca había tenido tanto terror en su vida como en los últimos meses, principalmente ese día, trataba de respirar y calmarse, pero le costaba trabajo. El rubio mordió sus labios, comenzaron a temblar, quería controlar el movimiento involuntario, levantó su mirada con los ojos aguados, Itachi lo vió con miedo, su corazón latía con fuerza, cerró sus ojos resignado, unos brazos lo envolvieron con fuerza -tenemos una semana para huir de aquí amor-

Itachi abrió sus onix de golpe, giró su mirada a su novio quien lloraba con una sonrisa en su rostro, el azabache sonrió con emoción al ver el rostro de su amor sintiendo una carga caer de él, comenzaron a besarse con necesidad -te amo tanto, gracias cariño -Naruto negó viendo con adoración a su hombre -tú y tus ganas de vivir y ser feliz, lograron esto -ambos derramaban lágrimas, se besaban suavemente -vayámonos de aquí a celebrar, no más quimioterapia, sólo debemos seguir monitoreando cada tres meses, por lo menos este año y en adelante dos veces al año -Itachi sonrió de acuerdo -los labios del pequeño atraparon los suyos haciéndo un baile entre ambos lleno de pasión y necesidad.

…..

-Itachi, ¿qué sucede? ¿para que nos citaste?, ¿te encuentras bien? -el Uchiha vio a su familia con cuidado, aún tenía síntomas de las quimioterapias, eso duraría algún tiempo, pero eran positivos, sonrió contento, lo vieron con duda. Fugaku y su esposa veían al rubio con el filo de su mirada junto a su hijo. El azabache vio a su novio, este sonrió ligero, asintió -ya tengo la evaluación de los últimos estudios que sacamos a Itachi -abrieron sus ojos bastante, no les habían informado. Obito los vió con cuidado, ¿por qué no avisar? tal vez habían perdido su confianza por traer a sus padres, negó mentalmente con fastidio, sonrió al verlos tranquilos al igual que Shisui y Sasuke -entonces ¿no más cáncer? -Naruto sonrió -los estudios salieron limpios, no hay células cancerígenas -Shisui y Sasuke sonrieron, de inmediato abrazaron a Itachi -tch tienes prohibido enfermar de nuevo anikii -Itachi sonrió -Itachi, por favor no más hermano, en cuanto te sientas mejor, nos iremos de parranda, conseguiremos unas chicas hermosas y dejaremos todo esto atrás -Naruto apretó el ceño, Itachi carraspeó ignorando el comentario, su rubio era bastante celoso -¿tío? -Obito lo abrazó con cariño -sabes, tengo un leve presentimiento, cuentan conmigo -susurró, Itachi abrió sus ojos con sorpresa, sonrió, su tío era demasiado observador e intuitivo -te agradezco tío-

Fugaku se acercó con su esposa, levantó su mano, acarició suavemente la cabeza de Itachi -me hace inmensamente feliz ver que superas este obstáculo hijo -se agachó, besó su frente con cariño una vez más como en aquella ocasión, el líder limpió una lágrima -te agradezco padre -los brazos de Mikoto lo envolvieron con cariño -mi Itachi, todo estará bien, ya verás, la familia será más unida esta vez, sólo déjanos ayudar -el Uchiha menor la vió con cuidado, no respondió, al final después de unas horas, cada uno se fue yendo de su casa; la pareja ya había ido a despedirse de la familia Namikaze, su familia sólo debía saber que ya estaba bien y comenzarían el tratamiento para desintoxicarse de las quimioterapias. En cuanto la familia del Uchiha salió, Naruto corrió por las llaves, las maletas ya estaban en la cajuela, sacó su maletín colgante con los pasaportes y documentos de viaje, colocó la alarma en la casa y metió a Itachi en el auto, subió al auto de inmediato, tenían semanas viviendo juntos, Naruto había dejado su apartamento y sus cosas las envió a una bodega del hospital de su abuela, renunció al hospital donde trabajaba por causas de fuerza mayor, tenía que estar con su pareja quién se iba a rehabilitar en otro país.

Mientras se dirigían al hospital se sonrieron con emoción -te amo Naru, gracias por estar a mi lado y no dejarme solo en esto -el rubio sonrió siendo lindo -nunca te dejaré, eres mi amor -ambos sonrieron con cariño, al llegar al aeropuerto registraron el equipaje, levantaron su mirada y sonrieron, Kakashi y Anko llegaban -gracias tío -el peliplata negó -no sé preocupen, sólo dejaré el auto en el estacionamiento del hospital de la abuela, cuando regresen, ahí estará, el de mantenimiento lo correrá una vez a la semana -el rubio lo abrazó con emoción -gracias por tu ayuda -les había conseguido las ubicaciones y rutas que debían tomar para evadir el rastreo del investigador del bufete de abogados, era amigo de Obito y sabían como trabajaban al igual que Itachi, pero este último no tenía mucha energía para hacerlo -eres como mi pequeño hermano casi hijo, sólo quiero que sean felices, Fugaku se pondrá pesado, es mejor así hasta que se calme -ambos asintieron -gracias kakashi, tío se da una idea de la situación, sólo dile que estamos bien -el peliplata sonrió -cuida bien al pastel de pescado, los extrañaremos chicos-

Anko sonrió -¿vas a ponerte a llorar? -kakashi volteó los ojos -es mi sobrino Anko, si tengo que llorar, lo haré y quiero ese enorme pecho para reconfortarme -los cuatro rieron con diversión -son demasiado cursis y pegajosos chicos, les irá bien, el bastardo de tu padre puede conformarse con saber eso -los menores rieron, su vuelo se activó -es hora, vayamos -ambos se dejaron de ver en la zona de abordaje -¿ese maldito loco los seguirá? -Kakashi suspiró con cansancio -ya lo has dicho, maldito loco, tiene fama de salirse con la suya a cualquier costo, supongo los joderá un tiempo, no creo que acepte tan fácil que su hijo es gay y que tal vez sea a causa de Naru-chan -Anko negó con fastidio, el peliplata pensaba en como ayudarlos, tal vez si le daba detalles de la situación a su padre -maldito neandertal, ya no es el siglo pasado, si Itachi es narusexual, es su problema y no de nadie más -el peliplata sonrió con diversión, la abrazó del hombro con cariño -¿aún puedo reconfortarme en tu pecho? -Anko sonrió divertida -puedo reconfortarte entre mis piernas cariño -ambos se besaron con diversión.

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