Pensar que Tanjiro empezó todo este entrenamiento después que nosotros y ya se va porque logró mover la roca. La vida es extraña últimamente, incluso Zenitsu ha estado calmado de forma inusual; sigue repitiendo que tiene algo que debe hacer o una cosa así, y ni siquiera ha molestado a nadie. Jamás pensé que llegaría a preocuparme por él, pero es demasiado raro verlo así; el único que nunca cambia es Inosuke, que otra vez está tan animado como siempre.

Pero, ¿no es gracioso? Hay veces en que ni siquiera nos esperamos lo peor. Es decir, pensé que Tanjiro era un imán de problemas, pero el hecho de que se haya ido no evitó el desastre inminente.

Todo estaba relativamente tranquilo esa noche. No había pasado mucho desde que Tanjiro se fue, así que en realidad no hicimos mucho más antes de los acontecimientos que nos esperaban y nosotros no veíamos, pero el peligro llega justo en estos momentos. Desde que Nezuko pudo superar la dificultad del sol, los demonios dejaron de aparecer de forma repentina; la calma antes de la tormenta, que en realidad se convertiría más adelante en un huracán completo.

Creo no debí haber pasado un poco más de tiempo con toda la gente que me quería...

Todo comenzó esa noche, poco después de que Tanjiro se fuera. Todo con un llamado de emergencia. En ese momento, Genya estaba conmigo porque, esta vez, era yo quien necesitaba ayuda suya para mejorar; sin embargo no pudimos hablar mucho antes de lo que sucedió.

Ni siquiera nos dio tiempo de reaccionar; para cuando nos dimos cuenta estábamos en un lugar diferente. Estaba repleto de demonios, además de tener una forma extraña; tenía un sinfín de entradas y puertas, pero ninguna salida. Algo malo estaba pasando; algo muy malo.

— ¿Qué demonios es éste sitio? No tiene sentido de cualquier forma que lo veas. — Genya mencionó después de haber avanzado un poco. Lo único que podíamos hacer en ese momento era defendernos entre nosotros y seguir avanzando.

— No estoy segura, pero me da escalofríos; emite muy malas vibras. — pensé por un momento qué más podría hacer para ayudar. — Bien, ya sé. — hice una copia de mí, cosa que no había hecho en un tiempo, pero estaba segura de que iba a funcionar bien. — Una de estas se irá por otro lugar; así cubrirá más terreno y quizás pueda encontrar a alguien que necesite ayuda.

— Eso es... muy conveniente.

— Hay que tratar de no separarnos; de lo contrario tendríamos que enfrentar lo que sea que podamos encontrar aquí solos. Además, por lo que parece, este lugar no tiene escapatoria; probablemente es como una trampa mortal.

— Piensas demasiado rápido, ¿cómo es que ya analizaste toda la situación?

— Hay que concentrarnos en lo importante, y lo importante es que la mayor cantidad de personas sobrevivan.

Lo admito, lo que pasó después fue descuido mío. Cuando nos encontramos con un demonio, me caí justo después de derrotarlo. Es porque no me di cuenta de que quedé justo a la orilla, o quizás es suelo desapareció...

— ¡Yuki, literalmente acabas de decir que no hay que separarnos! — me gritó al darse cuenta de que ya no podía alcanzarme.

— ¡No te preocupes por mí, yo estaré bien! ¡Regresare contigo, así que no te mueras! — alcé la voz lo más que pude de igual forma mientras caía. — ¡¿Me oíste?! ¡No te mueras!

Bien, bien, tranquila. Todo saldrá bien; sólo tengo que... regresar, de alguna forma. La copia de mí que hice antes ya está lejos como para regresar; necesito encontrar la forma de volver a encontrarme con Genya.

Cambio de narración para que vean como le va a la copia de Yuki. Bueno, es la misma narración, pero ahora estamos con la copia.

Corrí lo más que pude; hasta ahora llevaba corriendo bastante y no había encontrado nada, pero tengo la sensación de que me estoy acercando a algo peligroso.

Los cuervos estaban en todas partes informando y guiando; pronto llegó la noticia de que Shinobu murió enfrentándose a la segunda luna superior.

Shinobu... era muy amable, y la admiré desde que la vi la primera vez; es extraño. No sé cómo me siento justo ahora, ¿cómo se llama esto? Ya he llorado antes, pero esto se siente diferente. Shinobu fue amable conmigo y me ayudó mucho, pero ahora no está; cuando alguien muere significa que ya no lo volverás a ver. No es tanto la muerte, es el pensamiento de saber que jamás volverás a ver a esa persona.

Fue difícil; la de Shinobu no fue la última muerte que habría esa noche, y creo que todos lo sabíamos.

Para cuando pude encontrar a alguien, me metí en una situación complicada. Justo mientras estaba pensando, mientras me sentía extraña por la muerte de Shinobu, encontré a Kanao y a Inosuke. La segunda luna superior frente a ellos, y ahora frente a mí; sentí como me miraba con detenimiento.

— Un demonio... que inusual, un demonio luchando contra otros demonios. ¿Por qué haces eso? No tiene sentido, ¿sabes? ¿Lo sabías? Se supone que los demonios comen humanos; quizás estás confundida. Oh, bueno, pero no puedo dejarte ir si los estás defendiendo, y además... — otra vez mirándome fijamente. — ¿ya nos habíamos visto antes?

— ¿De qué-

— Ohhh, ¡ya lo recuerdo! No fue hace mucho, yo te convertí en demonio.

¿Qué? No, espera, en serio, ¿qué dijo?

— Estás mintiendo.

— No, no, es en serio; lo recuerdo bien. Asesiné a tu familia, y tú seguías repitiendo algo sobre que no debiste haberte escapado. Ese día te convertí en demonio porque me recordaste a mí; no percibí miedo en ti cuando me viste y aún así saliste corriendo, asesiné a toda tu familia frente a ti y no lloraste, no te enojaste, no gritaste, sólo te quedaste ahí como aceptando tu muerte; fue como verme en un espejo muy pequeño. Pensé que si te convertía en demonio, serías igual que yo y llegarías muy lejos... ya veo que me equivoqué. Hay algo diferente en ti; juntarte con humanos te cambió.

— Yo... no me compares contigo. — me sentí enojada y apreté el agarre en mi espada. No lo recordaba, pero luego de que lo dijo en voz alta, me di cuenta de que era cierto; fue él quien me causó tantos problemas.

Antes de que me diera cuenta, le había quitado la máscara a Inosuke; luego fue a él a quien miró atentamente.

— ¿Ohhh? Te recuerdo de alguna parte, tu cara. — tenía una sonrisa escalofriante y fría, casi como falsa. — Ustedes dos se parecen mucho, ¿son hermanos? Diría que sí lo son. ¿Nos hemos encontrado en algún otro lugar antes?

🌀 Hola. Pues nada, llegamos al arco final, supongo... no sé qué haré cuando termine. O sea, no me siento lista para dejar de escribir a Yuki; le agarré mucho cariño (como a todos mis personajes) Es que todos los personajes que hago son como mis hijas, y Yuki es de las que más les he tomado cariño.

Quizás después de esto haga más capítulos sobre lo que pasó después o... tal vez haga otra historia pero con el tema de la academia kimetsu porque me quedé con las ganas; el caso es que no me siento lista para dejar ir a mi niña.

Ah, y sí, sí fue Douma quien convirtió a Yuki en demonio; la escena que acabo de escribir nada más llegó a mi mente, y no sé. Pobrecita mi bebé, siendo comparada con Douma.

Tuve un pensamiento random, pero estamos en modo serio.

Besitos en las manos, cuídense y tomen mucha agua.