— A las chicas nos gustan los hombres fuertes, — Mitsuri siguió hablando. — ¡queremos que nos protejan! ¿Lo entiendes? Supongo que es algo difícil de entender. Quiero decir, los pilares son fuertes, ¿verdad? Pero es difícil hablarles; por eso yo misma me volví un pilar. — la verdad no creo que pueda compartir sus opiniones, pero parece estar segura de lo que quiere; supongo que eso es bueno. En eso, entramos a una de las habitaciones. — ¿Genya está por aquí? — pero la habitación estaba vacía.

— Kanroji-sama. — alguien interrumpió. — Su espada estará lista muy pronto, ¿podría venir al taller para finalizar los detalles...?

— ¡Aww! Parece que debo ir.

— ¡No te preocupes por nosotros! Yo iré a despedirte.

— Está bien, probablemente me iré por la noche.

— No, pero... bueno, entonces, uhhh...

— Tanjiro, Yuki, no sabemos si podremos encontrarnos con vida la próxima vez, pero hay que dar todo de nosotros. Sobrevivieron a una batalla ante una luna superior; eso es un gran logro. De hecho, no hay una experiencia más valuable que esa; equivale a cinco, no, diez años de intenso entrenamiento. Definitivamente son más fuertes ahora que la última vez que los vi; ¡Mitsuri Kanroji los apoya!

— Muchas gracias, — le contestó Tanjiro. – pero aún tengo mucho que aprender. Solamente “gané” porque Uzui me ayudó; trabajaré más duro que nunca ¡para vencer a Muzan Kibutsuji! — ella pareció sorprenderse.

— Tanjiro, aún tienes permiso para quedarte un poco más, ¿cierto?

— Oh, sí... por ahora... — ella le susurró algo que no alcancé a escuchar.

— ¡Por cierto, Yuki! — justo antes de irse, se dirigió a mí. — Tú realmente me agradaste; de hecho, con la conversación que tuvimos antes, creo que me recordaste un poco a la yo del pasado.

— ¿De verdad?

— ¡Sí! Olvidé decírtelo antes, pero estuve pensando... ¿y si te conviertes en mi tsuguko? ¡Podría enseñarte tantas cosas! Y quizás encuentres un estilo de pelea más adecuado para ti; fue lo ocurrió conmigo.

— Pero... — su propuesta me sorprendió. Sí me había dado la impresión de que nos llevamos bien, pero no pensé que llegaría a decirme eso. ¿Realmente estaría bien decirle que sí?

— ¡Estoy segura de que tienes más que suficiente talento! Se ve que dominas muy bien tu técnica, y creo que mencionaste que lo aprendiste en unos meses de entrenamiento.

— ¿Estás segura? Quiero decir, a fin de cuentas sigo siendo un demonio...

— ¡Estoy más que segura! Tú también eres una cazadora, así que no veo por qué no. — me conmovió su gentileza; Mitsuri en serio está dispuesta a que yo sea su discípula, aunque siendo sincera, siento que no lo merezco.

— Bueno... — me miró con ojos suplicantes; ni siquiera yo podría decir que no a eso. — está bien. Pareces bastante segura de tu decisión, así que, estaría honrada.

— ¡Genial! Ahora sí tengo que irme, ¡pero hablaremos de esto en otra ocasión! — empezó a irse. — ¡Nos vemos!

Supongo que ahora sí debería buscar a Genya.

— Por cierto, Yuki. — Tanjiro me habló. — Puedo preguntar, ¿por qué exactamente es que tú y Genya quieren esconder que están saliendo?

— Ya te lo dije; no sabemos cómo vayan a reaccionar los demás, pero en realidad, lo que más le preocupa a Genya es su hermano. Tú también lo viste; entenderás a qué me refiero.

— Cierto, el pilar del viento realmente parecía enojado contigo ese día.

— Su preocupación es comprensible y acertada, por eso accedí a esperar antes de decirle a alguien; aún si no conozco a su hermano realmente.

— ¿No te ha contado sobre él?

— No más allá de la única vez que le pregunté si eran hermanos, pero supongo que tendrá sus razones para no hacerlo.

— Eres bastante comprensiva con él; sólo quisiera que él fuera así conmigo...

— Descuida, en algún momento podrán hablar tranquilamente.

El día siguiente, Tanjiro salió a hacer no sé qué cosa, y yo por fin pude encontrar a Genya y hablar con él.

— Ah... hola. — me saludó mientras estaba tranquilo en una habitación; yo me senté a su lado para poder hablarle con más tranquilidad.

— ¿Sabes que Tanjiro está deprimido porque no has querido hablar con él?

— Es lindo que seas tan directa, pero, ¿por qué me lo dices tú?

— Él me lo pidió.

— Sí, debí haberlo esperado.

— No te pediré que sean amigos si no quieres, aunque eso es lo que él quiere, pero por lo menos intenta ser un poco más comprensivo con él; parece ser que es bastante sensible.

—...No prometo nada, pero supongo que puedo hacer un pequeño esfuerzo ya que me lo estás pidiendo.

— Gracias.

— ¿Era todo lo que venías a decirme?

— No, — tomé una de sus manos a medida que sentía mis mejillas arder por la vergüenza. — la verdad es que también quería pasar un rato contigo. — sólo espero que eso no suene muy empalagoso.

— Ah... eh... — él también se avergonzó y sonrojó. — está bien. — no sé de qué hablar con él en realidad; sólo no tenía ganas de salir porque de todas maneras ya pude hablar con él herrero que hace mi espada y estará lista en... algún momento. Quería estar con Genya , pero supongo que no pensé mucho más allá.

Recordé la conversación que tuvo Tanjiro con Mitsuri el día anterior; me pregunto si Genya y su hermano realmente se llevan mal, y si es así, ¿por qué? Era algo que me daba un poco de curiosidad, sin embargo, decidí que no debería meterme en sus asuntos familiares. Después de todo, él jamás ha hablado de eso conmigo, y existe la posibilidad de que sea porque no quiere hacerlo, por alguna razón.

Debería haber otra cosa de la que pueda hablar con él...

— ¿Yuki? — me llamó. — ¿En qué tanto piensas? Desde hace rato estás mirando a la nada.

—...Lo siento, tenía la mente en otra parte.

— ¿Te preocupa algo? — me sorprendió un poco que haya notado eso.

— No, no es eso. — en verdad no preocupaba no saber mucho sobre lo que sea que haya pasado entre él y su hermano; sólo fue un pequeño momento de curiosidad, y más que preocupación, pienso en que quizás no sea un problema que no se pueda resolver hablando. No lo sé, igual y sí estoy preocupada y no me doy cuenta.

— ¿Entonces qué tienes?

— Ah... ayer hablé con Mitsuri y me dijo que quería que me convirtiera en su tsuguko.

— Pero eso es bueno, pensé que estabas angustiada o algo así.

— La verdad es que pensé que quizás no estaba calificada para hacer eso, pero ella insistió en que tengo mucho talento y no pude negarme.

— Bueno... tiene razón; tú eres bastante increíble. — otra vez me sonrojé. ¿Este chico no se cansa de hacer eso? Luego vi que él también tenía la cara roja; supongo que le da vergüenza decir esas cosas.

—...Gracias, a-aunque yo no creo que sea para tanto...

— Pero... ¿estás segura de que es todo? Tengo la impresión de que hay algo que no estás queriendo decirme.

— No quiero preguntar algo que pueda molestarte; por eso no lo dije.

— No me voy a molestar, puedes decirlo.

— Está bien, Genya, no es nada que tenga importancia. Además, me sentiría todavía peor si me lo dices sólo porque te dije que quiero saberlo.

—...Bien. — miré como estaba bastante decidido y luego se acercó para darme un beso rápido. — Sólo quiero que sepas que puedes confiar en mí así como yo he confiado en ti. — lo que logró con eso fue que me sintiera un poco culpable por no decirle. Suspiré.

— Bueno, la verdad es que me preguntaba... ¿no te llevas bien con tu hermano?

🌀 Aprovechando que es el capítulo 44, les digo que para el capítulo 50 haré un especial con dos escenarios muy random que vinieron a mi cabeza. Uno sobre Yuki siendo comediante y el otro sobre un universo alternativo donde Yuki es un demonio como cualquier otro, y verán qué tan lejos hubiera llegado de haber comido humanos.

Agregaría más escenarios, pero hasta ahora no se me ha ocurrido ninguno.

Besitos en las manos, cuídense y tomen mucha agua.