𝟶𝟷𝟿 𝙅𝙪𝙞𝙘𝙞𝙤

— ¿Tienes alguna manera de probar que no has devorado a nadie? — me preguntó alguien.

Bueno, son muchas personas y no me sé sus nombres; sólo Shinobu porque lo dijo en voz alta.

— No. — usé toda mi sinceridad para contestar. — Existe la posibilidad de que sí haya devorado a esas personas que estaban frente a mí cuando me convertí en demonio; sería comprensible si decidieran matarme por eso.

— Deja de decir que quieres morir; es deprimente.

— ¿Qué más me queda? La vida no tiene sentido, el tiempo es una ilusión y la muerte un hecho del que nadie puede escapar; ni siquiera los seres que creen ser inmortales. Sólo mátenme de una vez.

— Bueno, si ella insiste-

— Aún tenemos que esperar al juicio; no tenemos permiso para matarla antes de que se tome una decisión.

— Esperen, ¿sí es una chica? A mí me parecía un chico con cabello muy largo y rasgos extravagantes.

— Sí soy una chica, ¿por qué a todos les cuesta tanto creerlo? Tengo decencia y una etiqueta perfecta, ¿qué más quieren de mí? Sólo me falta ponerme un cartel enfrente que diga "Sí, soy una chica".

— Volviendo al tema principal; ¿cómo fue que dijiste que te llamabas? — Shinobu me preguntó.

— Yuki, pensé que ya lo había dicho.

— Yuki, — continuó. — ¿qué pensabas hacer al convertirte en cazadora de demonios?

— No estoy muy segura; creo que era algo que muy dentro de mí sabía que tenía que hacer, y no quería sentirme tan culpable por haberme convertido en demonio. Es hacer hoy lo que no hice ayer.

—  ¿Querías perdonarte a ti misma?

— Sí, supongo que algo así.

Y bueno, mientras todo eso pasaba, Tanjiro terminó por despertar. Obviamente lucía desesperado porque no va a ningún lugar sin Nezuko y ella no estaba ahí, pero dada la situación, no había mucho que él pudiera hacer.

Parecía algo confundido de verme ahí también, aunque también se veía algo aliviado de ver al menos un rostro conocido.

Como era de esperarse, Shinobu y el resto de, yo supuse, los demás pilares, se pusieron a debatir sobre que si mataban a Tanjiro o si no lo mataban. Aunque más que un debate, yo diría que era una decisión casi unánime de “hay que matarlo sí o sí”.

— A mí me interesa oír lo que tiene que decir el chico. — habló Shinobu. — Pese a ser un asesino de demonios, realiza misiones acompañado por uno; quiero oír su explicación. Eso va contra las normas de nuestra organización; lo sabes, ¿verdad? Tanjiro Kamado, ¿por qué viajas con un demonio cuando tu deber es asesinarlos?

— No es necesario preguntárselo. — alguien ya estaba bastante preparado para matarlo.

— Puedes tomarte tu tiempo para contárnoslo. — Shinobu continuó.

— Mi... Mi her... — empezó a toser.

— Deberías beber agua. — le ofreció Shinobu. — Te lastimaste la mandíbula, así que bebe despacio; lleva un calmante que mitigará el dolor. — Tanjiro terminó de beber. — No estás recuperado del todo, así que ve con cuidado. Adelante, Tanjiro Kamado.

— El demonio es mi hermana; atacaron mi casa mientras yo no estaba. — explicó. — Estaban todos muertos cuando regresé. Transformaron a Nezuko, pero ella no devoró a nadie. Ni lo hizo ni lo hará; no lastimará a ningún humano.

— No quiero oír tus fantasías. Si es de tu familia, es natural que la protejas. — el que estaba más lejos opinó. — No podemos confiar en ti; yo no te creo.

— Ese demonio lo está poseyendo; matemos al pobre chico cuanto antes para liberarlo.

— ¡Escúchenme, por favor! Me convertí en un cazador de demonios para sanar a Nezuko. — ¿algo como eso de verdad se puede? — Nezuko se convirtió en demonio hace más de dos años, ¡y no devoró a nadie en todo ese tiempo!

— Estás repitiéndote, idiota. Demuestra de forma bien extravagante que ni comió ni comerá a nadie.

— Disculpen, — la otra mujer presente interrumpió. — tengo una duda. Me cuesta creer que el patrón no supiera nada de ésto, ¿seguro que podemos matarlo sin permiso? Deberíamos esperar a que llegue.

— ¡Mi hermana puede pelear a mi lado! — Tanjiro gritó de repente. — ¡Puede proteger a los humanos conmigo! ¡Yuki lo hace, así que no pueden decir que es imposible! Así que...

— Esto es muy interesante. — ¿es la caja de Nezuko lo que tiene ese desconocido? — ¿Ese es el asesino que viaja con un demonio? — la forma en que está sosteniendo esa caja es muy descuidada... — ¿Se puede saber qué es lo que pretendes?

— Señor Shinazugawa, — alguien vino corriendo detrás. — suelte la caja, por favor.

— Shinazugawa, no actúes por tu cuenta. — Shinobu lucía enojada.

— ¿Qué dijiste? — ignoró completamente los comentarios y siguió hablando. — ¿Que un demonio puede pelear para proteger a los humanos? Eso... ¡es imposible, idiota! — en un momento tomó su espada y atravesó la caja de Nezuko con ella. Ella no hizo nada para merecer eso.

Tanjiro corrió.

— Aunque seas un pilar, ¡no perdonaré a nadie que lastime a mi hermana! — y lo que hizo el tal Shinazugawa fue reírse mientras seguía enterrando la espada en la caja antes de sacarla.

— Me alegra oír eso.

Obviamente Tanjiro estaba muy enojado y terminó gritando.

— ¡Basta! — alguien gritó a la distancia. — ¡El patrón estará aquí enseguida!

Ese pequeño momento de distracción fue suficiente para que Tanjiro pudiera saltar y luego le dio un cabezazo. Ambos terminaron en el suelo.

Pobre Nezuko; estar en esa caja todo el día debe ser difícil.

— Si no puedes distinguir a un demonio bueno de uno malo, ¡no deberías ser un pilar!

— Serás... ¡te mataré!

— Pero el razonamiento de Tanjiro es correcto. — hablé sin pensarlo mucho. — Aunque hoy aprendí que la moral es relativa.

— ¿Qué dijiste? — eso casi se sintió como si estuviera tratando de ver si me atrevía a repetirlo.

— La gente buena sabe tanto del bien como del mal; la gente mala no lo sabe. Digo que el carácter de las personas es su comportamiento; todos son capaces del bien y del mal, todos, y cada ser vivo por igual debería ser merecedor de un juicio justo sin necesidad de críticas. Creo que nunca terminas de conocer a alguien completamente porque hay muchas cosas que no se notan; las apariencias engañan, las situaciones se malinterpretan, existen dos caras de una misma moneda y a veces el azúcar luce igual que la sal. ¿No es cierto?

🌀 Disculpen que a veces tengo la mala costumbre de hacer una situación más cómica de lo que debería ser; es que la tensión a veces me desespera, pero es mucho mejor que poner drama a cada rato.

Besitos en las manos, cuídense y tomen mucha.

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