mi cuerpo la buscaba y mi vida la nesecitaba.

La sociedad mata todos los días no eres nada y no estás dispuesta a saberlo, sus ojos permanecían cerrados, la luz del sol daba en su cuerpo.

Era casi como un dibujo, precioso, sus labios sus ojos, la figura de su cabello, cada parte en un lugar específico que la hacía ser perfecta, deslicé mis dedos por sus labios y me aleje de ella, se levantó y comenzó a vestirse, parecía estar cansada, pero no lo había notar.

-Dame lo que nesecito y acabaremos con esto- dije mientras ella solo me miró comenzando a reír.

-no lo tengo conmigo - comenzó a tirar y romper todo a su alrededor, la tomé de los hombros y la detuve.

-Tenemos un trato dame lo que te pido- comenzó a reír negando con la cabeza.

-Yo jamás dije que lo tuviera conmigo yo pregunté, ¿Que me darías a cambio por obtener lo que nesecitas?, sabes las barras de Tornasol no son fáciles de conseguir, muchas veces las confunden con las de titaneo, tenía unas cuantas pero tuve que usarlas gracias a ti, si no me hubieras detenido con gusto te hubiera entregado la que ya tenía, claro si hubieras aceptado lo que yo tenía que decir- respire profundo y simplemente la observé.

-Aquello que quieres lo tendrás lo prometo, pero también necesito lo que ya te dije - comenzó a tirar combustible, por todo el lugar.

-¿Que es aquel que quieres que vea,tus recuerdos no creo que sean algo más que farsas eres otro experimento de parte de Warner?- molesta se dejó ir contra mi, no con golpes.

-Eres un mentiroso y trabajabas para el sabías exactamente qué era lo que estaba haciendo - se alejo de mi, sin decir palabra simplemente lo negué.

-Desde que tú apareciste todo en mi mundo se cayó - respondí, sonrió.

-Yo se que me esperabas yo sé que querías que llegara, puedo ver que hay dentro de ti puedo sentir que hay dentro de ti, lo estás pensando en este momento estás confundido tienes miedo y ante todo eso nunca haz visto el anterior nunca haz visto más haya de tus ojos, tu ego la forma en la que eres cada parte de ti se asimila a algo que ya no existe. ¿Que ya no eres el hombre de hace años?- me miró a los ojos daba miedo.

-Quieres ser alguien que desapareció que ya no es y no puede ser, estoy tan segura de ello, no tienes nada, vives en la oscuridad y solo te escondes qué pasó con ella- la tomé del brazo, el solo recuerdo de la cara de Clara, me invadía a cada punto, todo era su culpa solo me usaron.

-Me salvaste ese día, tu me lo advertiste- me beso con cuidado, sus labios eran cálidos y suaves.

-Lo vi, pero eso no quiere decir que deseara salvarte, solo fue eso y nada más- se acercó a mi oreja.

-Esperabas que fueras importante para mí, solo tenemos una conexión conjunta, no se ¿por que?- la tomé de la cintura y la hacer que a mí, la bese de nuevo.

-Ambos queremos una cosa, este mundo no es más que un horrible planeta, antes era hermoso, pero todos aquí acabaron con el, pero ahora serás mi responsabilidad hasta que obtenga lo que quiero - se alejo de mi queriendo que la soltara.

Cada parte de ella, sus ojos su sonrisa,era otra forma una forma que no entendía , era diferente había humanidad en ella, había vida en ella, estaba con vida y lo sabía.

-exactamente que es lo que quieres, que quieres que vea de ti - la solté.

-Quiero que nos concretemos a las redes de Warner, a cada una, hay estructuras y recuerdos míos coordenadas, el tiene cosas que me pertenecen y a estado usando a su conveniencia, pero no puedo conectarme solo yo nesecito un pasante que altere la información y me la entregué- comenzó a tomar sus cosas y me sentí culpable.

Mire a mi alrededor en busca de un sensor rojo, toda la cuidad cada parte de ella tenía, no eran más que pequeñas cámaras, leían a cada uno de nosotros, al menos que ella lo sabía.

-¿Dónde está ?- dije mirando por todo el lugar.

-Todo el lugar, el domo es una red de sensores verde, rojo y amarillo, las amarillas son redes sin cámara gracias a las máquinas migratorias comunistas, las verdes son sensores de movimiento y los rojos son cámaras, en este lugar tiene que aver una, si no es que ya vienen por nosotros- me miró sin entender para después escuchar como tocaban la puerta.

-Hay que salir de aquí - la tomé del brazo y la llevé hacia la ventana del bañó.

-Sal por la ventana corre por toda la calle hasta llegar al final de esta ahí te alcanzo - me miró sin entender.

-¿Que vas a hacer?- salió por la ventana.

-Solo corre, te van a seguir tienes que estar alerta, ¡Ya!- comenzó a correr y cerré la ventana.

Escuché como entraron a la habitación, eran 4 hombres y 3 máquinas pequeñas, ojos aún recuerdo sus propios eran unas cámaras muchos las llamaban pulpos tenían patas que las ayudaban a andar.

Liberarán has de en lugar de tinta, todo lo que venían era visto por ellos, abrí la regadera y las llaves de todo, el agua comenzó a salir en exceso, rompí la sonda de drenaje.

Podía escuchar el como deseaban entrar, el agua comenzaba a tomar un color rojo cuando se combinaba con el agua en la que sumergí a Lilith.

Los hombres comenzaron a intentar abrir la puerta del baño y los ojos caminaban por las paredes abrí la ventana, un olor horrible se hacía presente en el agua, cuando una de las cámaras salió por una pequeña reja.

Observé desde la ventana, lo más increíble fue que al tocar el líquido se apagó automáticamente, podía ver cómo si circuitos se bloqueaban y al cámara se apagaba.

Dentro del ojo comenzó a salir un líquido viscoso de color azul, parecía comerse, comenzó a hacerse cada vez más grande, comencé a correr para alcanzar a Lilith.

Los soldados no quisieron entrar al lugar una vez que vieron ese líquido, corri aún más y me asusté al no ver a Lilith.