—No quiero que llores después...— advirtió llevando sus manos a acariciar su pecho, sus pezones estaban duros a pesar de no haberlos tocado, apenas rozando las yemas de sus dedos el cuerpo del rubio se crispó y sus uñas se enterraron en sus antebrazos.

—D-Date prisa...— más que un reclamo sonaba como una súplica, su cuerpo temblaba y cada zona que era tocada por el bicolor descargaba una corriente eléctrica que sacudía todo su ser para luego abrir paso a un hormigueo que se expandía haciéndole perder aún más la cordura, su voluminoso pecho que era masajeado y mimado por el bicolor no dejaba de darle problemas, pues parecía que cada vez era más erógena esa zona.

—Tranquilo, te daré lo que quieres cuando sea necesario— sonrió divertido, sus pulgares formaban círculos con ambos pezones, jugueteando y pellizcandolos con fuerza.

—Que te jodan...— maldijo con voz temblorosa.

—Seré yo el que te joda hasta que supliques que me detenga— dijo sinvergüenza alguna, cosa que hizo sonreír al rubio.

—Si claro— respondió a manera de provocación —Te estás tardando—

—Te dije que te lo daré cuando sea necesario— llevó uno de los pezones a su boca.

—Ugh...— se encorvó abrazando la cabeza del bicolor —No hagas eso— susurró sujetando los mechones de la cabellera ajena.

Hizo caso omiso y continuó chupando y succionando aquel botón rosado. Pronto sus manos descendieron y retiraron la toalla dejando libre acceso al trasero del rubio, tan redondo y de buen tamaño que incluso sus manos no lograban abarcarlo por completo, acarició aquellas mejillas y las apretó entre sus manos.

—Espera...— jadeo apartándose lo suficiente para que el bicolor alzara su vista sorprendiendose cuando divisó dos pequeñas y peludas orejas que se sacudían, entonces bajo su tacto algo peludo rozó sus manos, una cola que se movía con inquietud, ¿o felicidad? Se meneaba de un lado a otro —Mierda— exclamó con vergüenza escondiendo su rostro en el cuello del bicolor —Solo apúrate—

El contrario aún maravillado por lo que acababa de ver continuó manoseando su trasero con más ímpetu ¿le resultaba sexy?, ¿lindo?, ¿excitante? Tal vez era una combinación de las tres cosas, sonrió extasiado y al tener tan cerca al rubio sus colmillos brotaron deseosos de perforar su piel y succionar aquel líquido que seguramente estaría más caliente de lo normal —Lo siento... — pidiendo perdón por adelantado, sin darle oportunidad al rubio de procesar lo que había oído hincó sus colmillos cerca de sus clavículas.

—¡Ah!— enterró sus falanges en la melena del contrario sujetando con fuerza su cabello, su cola no dejaba de moverse de un lado a otro y sus orejas se mantenían gachas.

La sangre estaba tan caliente que le quemaba la garganta, le otorgaba una sensación tan exquisita porque era increíble que incluso en la sangre pudiera sentirse el éxtasis que corría por el cuerpo ajeno, finalmente se separó relamiendo sus labios satisfecho, como pudo deslizó su pantalón junto con su bóxer, dejando al descubierto su vistosa erección la cual se estrelló contra la del rubio haciendo que gimieran al unísono, llevó dos de sus dedos a su boca llenandolos de saliva y pronto los dirigió a la palpitante entrada del rubio quien dió un ligero brinco y se aferró a su cuerpo, comenzó a acariciar el caliente orificio ingresando con cuidado el primer dedo, un calor inexplicable lo envolvió, su interior estaba húmedo y palpitante, tan estrecho que anhelaba poder penetrarlo cuanto antes, ingresó un segundo dedo.

—Mgh... D-Despacio— pidió en un susurro podía sentir como el contrario se adentraba cada vez más profundo, abriéndose paso en su interior, era una sensación extraña, nada comparado a cuando lo hizo por primera vez con Kirishima, estaba tan apurado que ni siquiera se tomó el tiempo de disfrutarlo, sin embargo con Todoroki era diferente, tal vez porque se involucraban los sentimientos, pero le gustaba lo que sentía, era espléndido y satisfactorio que le hacía desear más, pronto sus caderas comenzaron a moverse buscando que aquellos dedos llegaran más allá.

—Alguien está ansioso...— comentó el bicolor con deje de burla, sus dedos formaban tijeras y círculos, los metía y sacaba con ritmo, su falo palpitaba y escurría de líquido pre-seminal.

—Solo mételo ya carajo— gruño, tomando el miembro del bicolor y sacando sus dedos tan aprisa que al sentir el vacío jadeo con fuerza, tras recobrar el aire dirigió el falo adverso a su entrada rozandola con la punta, todo su ser se estremeció estaba caliente y húmedo, relamio sus labios con efervescencia y una sonrisa lasciva se asomó en sus labios, seducido por la lujuria comenzó a descender sus caderas sintiendo un ardor cuando el falo se abrió paso en sus entrañas, lejos de causarle dolor era satisfactorio —Tan grande...— murmuro cansado, su interior palpitaba era una sensación dolorosa pero a su vez excitante, sentía todo su interior lleno y hormigueante hambriento por recibir lo que restaba de aquel miembro.

—Tranquilo, no te presiones— comentó acariciando una de sus mejillas, el rubio frotó su rostro contra aquella cálida mano —Te echaré una mano— sonrió libidinoso y sin previo aviso de una estocada terminó por penetrarlo.

—¡Ahhh...!— se aferró con uñas a los hombros del bicolor, sus orejas y cola en alto por la sorpresa de tal acción, un ardor le recorría toda la espalda baja y un dolor agudo recorrió su columna —Maldito...— le susurró con voz temblorosa.

Al oír la maldición soltó una risita regalando un beso en su clavícula —Lo siento cariño, pero parecía que necesitabas ayuda— dijo con sarcasmo disfrutando de la espléndida vista que le otorgaba el contrario, su torso perlado por el sudor sacudiendose por los pequeños espasmos, mordió con suavidad su pecho dando tiempo a que se acotumbrara de la repentina penetración »Tan estrecho...« sonrió ante aquel pensamiento, comenzaba a ponerse ansioso por moverse así que empezó a elevar sus caderas.

—E-espera... Aún no— gimió, podía sentir como su interior se ajustaba al falo del bicolor quien ignorando la súplica continuó moviéndose de arriba a abajo aumentando gradualmente la velocidad —Mmh... Más lento...— temiendo perder el equilibrio debido al constante brincoteo decidio abrazarse al torso adverso escuchando de cerca su respiración entrecortada y los suaves gemidos que emitía en cada estocada, era una sexy melodía que encantaba sus sentidos. Cada embestida llenaba su interior, golpeando sus entrañas buscando llegar más lejos, cada embestida una más fuerte que la anterior, enterró su rostro en la curvatura de su cuello mordiendo con fuerza aquella extensión.

Siseo ante el placentero dolor dio una estocada más profunda que todas las anteriores haciendo que el contrario perdiera el aliento en un largo y fuerte gemido —Te escucharán todos— comentó con burla.

—Ve-vete al diablo...— respondió tras recuperar el aire, su trasero palpitaba.

Tras reír por lo bajo dirigió su diestra a acariciar su cola para después sostenerla y retomar sus embestidas.

—Sueltala...— su cuerpo tembló, y pequeñas lágrimas recorrieron sus mejillas mezclándose con su saliva al final de su mentón.

—Vamos dije que no quería que lloraras— repartió besos en su rostro recogiendo los canales salados —Haces que sienta lástima por ti— asestó una ruda estocada.

—¡A-ah...! Mngh~— apretó su paredes una extraña sensación se arremolinó en su abdomen bajo.

Parecía que el bicolor había dado con su punto dulce, al percatarse de ello comenzó a golpear ese punto con fuerza y rapidez.

Perdió el aliento —Tan de repente...— abrazó al bicolor sintiendo como su cuerpo brincaba con rapidez, sus piernas temblorosas no le permitían apoyarse, había perdido completamente el control de su cuerpo, como una corriente eléctrica desencadenandose desde su espalda baja le recorrió toda su columna vertebral alojándose en su nuca, su cuerpo se sacudió y su interior se ajustó, aprisionando el falo del bicolor, quien gimió por lo bajo el detonante para que aquel cosquilleo se produjera en su vientre recorriendo todo su miembro —Ahh...~♡— inclinó su espalda hacia atrás dejando salir su esencia manchando ambos abdomen, el bicolor lo jaló hacia él sujetándolo desde su espalda baja sin darle un respiro al rubio continuó con la penetración, a pesar de que el contrario lo apretaba lejos de molestarle era satisfactorio —¡E-espera...!—  suplicó y más lágrimas brotaron de nuevo, su rostro completamente sonrojado y su mente adormecida, haber eyaculado recientemente le había dejado más sensible y ahora que el bicolor había dado con su punto G estaba empeñado en destrozar esa zona.

—Solo un poco más...— con el ceño fruncido continuó dando fuertes estocadas, extendió su diestra y alcanzó el rostro del rubio quien con torpeza lo miro —Mira nada más— sonrió —Apesar de que me pediste que parara lo disfrutas por completo— con su lengua recogió la saliva que se desbordaba uniendo sus labios y enredando sus lenguas, era un beso sofocante con ambos alientos calientes y agitados factores que les dificultaba mantener el ritmo.

—Ngh, basta...— se alejó tomando una bocanada de aire —¿C-Cuanto... Mngh... Más...~?— mordió su labio inferior.

—Ya casi...— alzó su vista, el rubio mantenía su rostro alzado dejando libre vista de su cuello, relamió sus labios al ver las venas que recorrían su cuello lo abrazó quedando a la altura de su cuello deslizó su lengua por toda la extensión de este.

—N-no me muerdas...— pidió al sentir la caliente lengua recorrer su cuello, recibiendo como respuesta los colmillos clavandose en su piel, jadeó tragando en seco y apretó el abrazo, pronto comenzó a sentir como su piel era penetrada y su sangre succionada —¡Hmph~!— nuevamente aquella corriente se hizo presente volviendo a eyacular.

El bicolor gimio cuando su miembro fue nuevamente ajustado, pudo sentir el cosquilleo en su abdomen mordió con más fuerza el cuello adverso y comenzó a eyacular.

—Idiota... ¿Q-quien te dijo que lo hicieras dentro...?— cuestionó ya más lúcido, podía sentir como su interior se llenaba de aquel espeso y caliente líquido que pronto comenzó a desbordarse escurriendo y goteando, manchando la madera que cubría el suelo.

Se separó finalmente de su cuello limpiando con su lengua la sangre que aún salía de los orificios —No iba a manchar el sofá— sonrió con sorna, podía sentir como la cola se movía con brusquedad golpeando sus piernas.

—Jódete— cuando se percató de que finalmente había terminando de eyacular intentó pararse, sin embargo su cabeza dio vueltas cayendo inconsciente sobre el bicolor quien asustado lo sostuvo, al percatarse de que dormía suspiró de alivio lo alzó en brazos y lo recosto en el sillón más grande, luego de limpiar el semen que aún desbordaba le colocó su ropa interior y lo cubrió con una manta, en un rato luego de bañarse si aún no despertaba lo bañaría. Acomodó sus ropas y acarició el cabello alborotado del rubio donde aún sobresalían las pequeñas orejas, sonrió enternecido y regaló un beso en una de ellas la cual se sacudió ante el contacto.

—Creí que no acabarían— una tercera voz lo sacó de sus pensamientos girando con rapidez su vista observando al ojiverde que se hallaba parado en el marco de la puerta.

—¿Escuchaste todo?— pregunto con nerviosismo y un ligero rubor.

—Por más que traté me resultó imposible ignorarlo, además, su aroma también me despertó— ladeo la cabeza enfocando su vista en el rubio —Ya veo por qué te gusta, es embriagador su aroma—

—Así como él me gusta, tu de igual manera lo haces, apesar de tu cambio aún tenemos sentimientos por ti— le obsequió una gentil sonrisa.

Frunció él ceño y desvió la mirada, un sentimiento había dado un vuelco a su corazón —Tonterías...— caminó a la cocina y sirvió el té que aún estaba en la tetera, lo olió y tras formar una mueca de aceptación dio un sorbo.

—Bebiste la sangre suficiente para rechazar la comida humana, ¿cierto?— el contrario lo miró sobre la taza y asintió —¿Sería correcto pensar que mi padre tiene control sobre tu cuerpo?— el peliverde detuvo sus acciones y bajó la taza con lentitud, una sensación extraña se alojó en su pecho, como si una fuerza invisible ejerciera presión sobre este.

—No puedo responder a eso— se apoyó sobre la barra de la cocina buscando calmar su ansiedad.

—Hace rato dijiste que experimentó contigo, te referías a cuando los vampiros volvíamos esclavos a los humanos, fuiste el conejillo de indias y veo que dio resultado— se acercó a su posición.

—No del todo, aún tengo momentos de lucidez—

—¡Touché!— alzó su índice y su mirada se iluminó —Significa que no te transformó por completo o que opones resistencia ante su dominio, a final de cuentas eres un pura sangre, no eres tan débil—

—No estaría tan feliz si fuera tú— cerró sus ojos, cambió de parecer ante lo que iba a decir —De una manera u otra sigue teniendo poder sobre mi— suspiró terminando el té.

—Y es por ello que te ayudaremos a desintoxicarte, llamaré-... — su boca se vio cubierta por la mano del peliverde con su otra mano colocó su índice sobre sus labios.

—Él te puede escuchar tambien, sea lo que sea que planeas no me lo digas— dicho esto apartó su mano e involuntariamente sonrió.

El bicolor lo observó atónito, la sonrisa que le mostraba era tan natural como todas las anteriores, sin pensarlo mucho se acercó a él lo suficiente para rozar sus labios y que sus respiraciones chocaran.

✶⊶⊷⊶⊷❍⊶⊷⊶⊷✶

Hola criaturitas u.u

Esperando como siempre que el capítulo haya sido de su agrado, hace mucho que ya quería pasivear a Bakugo jajaj así que disfrute mucho de escribir este cap, espero sea lo mismo con  ustedes jsjs.

Si llegaran a ver alguna incongruencia en la redacción les pido de antemano me disculpen y me hagan el favor de mencionarlo n.n suelo escribir los capítulos y los dejo pendientes, y no es hasta semanas después que lo retomo y luego por la flojera de releer continúo escribiendo como si nada, pero si me he percatado que a veces repito mucho las palabras o incluso que escribo mal jaja la dislexia :b
Y una cosita más me percaté que en el capítulo anterior los guiones largos se hicieron chiquitos de esto "—" a esto "-" no sé porque Wattpad lo cambia y son varias veces que ocurre, si en este cap ocurriera lo mismo quisiera también lo comentaran para yo así editar el cap a como se debe jeje u.u

Sin más me despido que tengan un/a lindx día, tarde o noche.

Lxs quiero.~

Bye.~

××Sam××