Ahí estaban las luces de neón de colores brillantes, el sonido retro de las máquinas de juego, las risas de las personas y la música de los 90's de fondo, el lugar no era grande pero estaba lo suficientemente amplio para pasar el rato. Los omegas entraron con una amplia sonrisa en sus labios.

Felix traía unos jeans azules ajustados, que hacían ver su trasero bien formado, sus converse blancos, una playera con un estampado ligero y una chamarra de color azul claro, por su lado Jisung traia sus lentes puestos, normalmente usaba lentes de contactos, una playera de un bonito estampado, unos jeans azul oscuro y unos tenis deportivos. Seungmin traía unos jeans negros rasgados, unas botas tipo militar, una saco amplio y largo negro, con una camiseta blanca debajo de su saco, de cuello ve que lucia un poco sus clavículas, un collar ajustado a su cuello.

─Comamos primero ─sugirió Lix

─Tu siempre tienes hambre, ¿no te dan comida en tu casa? ─se burló Seungmin

─Mi madre me tiene a dieta porque dices que mis muslos y trasero están muy grandes ─pronunció con una mueca ─no me deja comer carne y ahora solo quiero morder una deliciosa hamburguesa, una soda grande y unas papas fritas, si no es mucho pedir

─Tu mamá tiene razón tienes un culo muy grande y si sigues comiendo así, ya no entrará tu culo en tus pantalones

─Que te jodan amigo, así quizá así dejes de hablar tanto ─contestó molesto el omega

─Ja, ja, ja, ya, ya ven, hoy invito la cena, vamos a sentarnos ─dijo Seungmin abrazando por el cuello a sus amigos

Los tres se sentaron y pidieron hamburguesas, sodas y papas, cortesía de Seungmin quien pagaría con su tarjeta sin límite, realmente era un chico rico.

─Jisung ¿cómo te fue con el animal de tu novio? ─preguntó Seung metiéndose una papa en la boca.

─Como siempre, realmente ya me canse de pelear si no quiere cambiar, que no lo haga

─Las personas no cambian de la noche a la mañana, además sabes que su familia no se la pone fácil, siempre está solo ─indicó el omega mordiendo su hamburguesa

─Tiene razón Lix ─lo sabía bien Seung sabía bien cómo se sentía la soledad ─dale tiempo

─¿Realmente tenemos tiempo?, el mundo ha cambiado, los alfas no están en la cima, ahora son como nosotros que no tenemos que esforzar para poder ser alguien, pero hay algo diferente de los alfas que nos hacen aun distintos, tenemos un tiempo para enlazarnos, al salir de la universidad nuestro omega comienza a bajar de rango sin un lazo, entre mas pasa el tiempo, nos volvemos mas débiles. Yo se que Minho es mi alfa, pero tampoco quiero un lazo con alguien solo porqué nuestras almas animales lo quieren, quiero estar con él porque lo amo y porqué quiero un futuro juntos ─pronunció Jisung jugando con su comida.

─Come, venimos aquí a divertirnos no tener pensamientos tristes ─le despeinó el cabello Seungmin

─Por primera vez le doy la razón, divirtamos, aún somos jóvenes, nos quedan un par de años.

Después de cenar se van a la zona de juegos con monedas en las manos, uno juega en cada máquina, realmente se siente como si fueran unos niños de nuevo.

─Oh mira Lix, Sunggie es tan bueno que obtuvo muchos tickets, lo podíamos cambiar por dulces después ─con una amplia sonrisa.

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Seungmin es un buen amigo, alguien en quien puedes confiar, pero también alguien que guarda mucho, antes que los tres fueran amigos, Sueng era un omega solitario, sufría mucho por su aspecto, era alguien muy delgado y con cintura que cualquier mujer envidiaría y por ello lo molestaban, decían que solo por su aspecto los alfas estaban a su alrededor, por lo que siempre se encerró en su cueva. Con padres que apenas estaban y con el dinero como su única compañía se hundió en las droga y malas decisiones.

Cuando Felix lo conoció apenas era un vestigio de lo que ahora es, el omega mayor se acercó sabiendo todo lo que su corazón guardaba, no lo juzgo solo se quedo a su lado, luego Jisung llegó a su vida, los tres se volvieron unidos y así el omega dejó sentir esa soledad que lo hundía, aunque había veces que al llegar a esa gran fría casa, volvía sentir esa soledad. Pero ya no era tan dolorosa cuando sus amigos inundaban su móvil con mensajes, realmente los quería más que a nada en este mundo.

Además tenía ese pequeño alfa que lo hacía sentir tanto.

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Los alfas llegaron, Minho apagó su cigarro antes de entrar al lugar, Hyunjin lo siguió de ahí Changbin. Los tres entraron para sentir la mezcla de olores, no eran desagradables pero realmente buscaban un olor específico. El de sus omegas.

─Jisung no me contesta ─indicó Minho chasqueando la lengua molesto.

─Ja, ja, tranquilo ─pronuncio Hyunjin ─a mi tampoco me contesta Lix, lo mas seguro que nos están ignorando

─¿Y eso qué tiene de divertido? ─preguntó molesto Minho

─Que ninguno nos espera aquí, ─encogió los hombros.

Los tres caminan y ven a lo lejos un grupo de personas en un solo juego, gritando, es cuando pueden sentir el leve olor de los omegas.

─¿Por qué siempre tienen que ser el maldito centro de atención? ─volvió a cuestionar el inquieto alfa que camina entre las personas para ver cual es motivo de la reunión.

Ahí estaba Jisung y Seungmin compitiendo en un juego de baile que tiene flechas, ambos se mueven de manera rápida, mientras sonríen.

─Si gano me harás la tarea de matemáticas ─indicó Seungmin

─Lo dudo ─respondió Jisung ─tú tendrás que comprarme esa mochila

─Ya veremos.

Felix está a un lado mirándolos, llevan varios minutos y ninguno ha fallado. El alfa llega y rodea el hombro del omega.

─Hola, ─Saludo Hyunjin con una sonrisa

─Ey, hola ─respondió el saludo el omega

─¿Estos llevan mucho aquí? ─preguntó el alfa

─Si, unos 20 minutos, ninguno quiere perder

Minho observó los movimientos del omega, pero sobre todo su sonrisa, tan feliz, su corazón se siente agitado, lo ama, y quiere ser el motivo de su sonrisa, quiero hacerlo feliz, pero al final siempre parece hacerlo llorar. No dijo nada (por primera vez), se quedo en silencio mirando aquella hermosa sonrisa.

Por su parte Changbin miró al omega mayor, realmente le gustaba, era tan único, su cabello que caía levemente tras su oreja, su pecho levemente expuesto, realmente cualquier alfa caería antes los encantos de aquel omega.

─Hola Minho ─Saludo Seugmin haciendo que Jisung se quedara parado perdiendo ─gane

─No cuenta, es trampa ─bufo Jisung bajando del juego con una sonrisa ─Hola ─saludó al alfa quien lo tomo del cintura

Seungmin solo pone los ojos, odiaba las cursilerias.

─¿Ustedes no tiene vida propia?, parecen perros siguiendo la cola de sus amos, ah si, son perros ─bufó acomodándose y mirando al pequeño alfa.

─Lo que pasa que a ti nadie te quiere ─pronunció Minho

─¿Estás seguro de eso? ─bromeó el omega ─me quiere hasta tu papá

─Jodete Seungmin ─pronunció el alfa

─¿Te dolió? ─se burla el omega ─bien ya que están aquí, vayamos a beber alcohol

─Realmente tienes un problema de alcoholismo ─Minho

─Lo dice el vende narcóticos.

Hyunjin miro Felix y beso su frente atrayéndolo a él.

─Yo digo que vayamos al karaoke cerca ─sugirió Hyunjin

─Si, si me gusta esa idea ─respondió Minho

─Pues bien vayamos los 6 ─Finalizó Seungmin

Los seis salieron de juntos; Hyunjin abrazado del cuello a Felix, mientras Minho caminaba junto a Jisung tomados de la manos, un poco atrás el pequeño alfa Changbin caminaba junto a Seungmin quien hablaba con una sonrisa en sus labios sobre todo lo que había pasado.

Realmente eran un grupo interesante.

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Arcade

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Makishi Konue