—Todos, muévanse. Procedan con precaución. El hombre que acaba de entrar en el edificio no es Ángelo Ruiz. —No tenía ni idea de cómo el ladrón planeaba superar el escáner de retina, pero Earth no estaba dispuesto a esperar para averiguarlo. Tomó la tableta de la consola y la metió en uno de los bolsillos profundos de sus pantalones negros de combate—. Mantente cerca.

—Sí, ya he hecho esto antes, pez gordo.

—Bien. Entonces sabes que no debes correr riesgos estúpidos. —Earth se apresuró a llegar a la puerta del camión, la abrió y saltó por las escaleras. Empezó a correr y Mix le pisó los talones. Se unieron al equipo de seguridad armado, y Earth asintió a Johnson, quien hizo un gesto para que algunos de sus agentes cubrieran las salidas del edificio. Robó su tarjeta de acceso para llevarlos al vestíbulo. Con la Glock en la mano, Earth esperó a que el equipo entrara primero. Johnson hizo un gesto para que la mitad del equipo subiera por las escaleras mientras los demás tomaban el ascensor con él. Earth indicó que él y Mix tomarían la escalera de emergencia.

Al llegar a la puerta de la salida de emergencia, Earth se quitó la tableta, ingresó sus credenciales y apagó la alarma justo en la puerta del vestíbulo. No quería apagar todas las alarmas y alertar a quienquiera que fuera, de su presencia. Una vez hecho esto, se devolvió la tableta al bolsillo, y la pistola lista, subieron apresuradamente las escaleras. Earth sospechaba que su ladrón no iba a salir por la puerta principal con la caja.

Habían llegado al noveno piso cuando Earth oyó un clic. Levantó el puño, haciendo un gesto para que Mix se detuviera. Con cuidado, Earth se acercó a la barandilla. Con el seguro puesto, se inclinó para mirar hacia arriba. Una bala golpeó contra el riel de acero, y se lanzó hacia atrás. Mix le agarró el brazo.

—¿Estás bien?

—Sí —Earth se golpeó el auricular cuando una puerta se cerró en algún lugar por encima de ellos—. Está en el décimo piso. Ten cuidado. Está armado. —Subió, Mix justo detrás de él. Earth tomó el lado izquierdo de la puerta e hizo un gesto para que Mix tomara el derecho. Cuando asintió, Mix agarró la manija de la puerta y la abrió. No había balas, así que Earth miró dentro. El suelo parecía desierto, pero él sabía que no era así. Hizo un gesto para que Mix le siguiera, y ambos se cubrieron detrás de uno de los escritorios. Una puerta se abrió, y Earth miró a hurtadillas, aliviado de ver que era el equipo de seguridad. Se abrieron en abanico, escondiéndose detrás de los muebles y equipos de oficina. La voz de Johnson pasó por el auricular de Earth.

—Las autoridades están en camino.

Con un rápido agradecimiento, Earth sacó su tableta de su bolsillo y trajo las fuentes de seguridad del edificio, entrando al décimo piso.

—Bueno, hola, Sr. no-D'Angelo —Earth susurró en el video de su ladrón—. Está en el baño de hombres —Earth frunció el ceño—. Está tratando de llegar a la ventana.

—Eso es una locura. Estamos en el décimo piso. ¿Qué diablos planea hacer? ¿Saltar?

Los pelos en la parte posterior del cuello de Earth estaban de pie en el extremo, y él dio un golpecito a su tableta, sus ojos se abrieron de par en par cuando vio el basurero abierto convenientemente ubicado debajo de la ventana del baño. Parecía que estaba lleno de algún tipo de espuma o relleno.

—Mierda. ¡Lo está tirando por la ventana! —Earth salió corriendo hacia el baño de hombres, atravesó la puerta y se lanzó contra el ladrón, que se había estado balanceando en el cubo de basura, dándole tiempo suficiente a Earth para derribarlo, pero no antes de que el hombre tirara la caja por la ventana.

Golpearon el suelo de baldosas con fuerza y el ladrón le dio un rodillazo a Earth en las costillas. Afortunadamente, su chaleco amortiguó el golpe, dejándolo libre para bloquear un gancho de derecha apuntando a su cabeza. Golpeó la mano del hombre contra el suelo, haciéndole gritar, su arma saliéndose de sus manos. Earth le dio un puñetazo en la cara al tipo, encogiéndose cuando parte de su cara se derritió.

—¿Qué carajo?

Mix se les unió, su arma apuntando a su ladrón.

—¡No te muevas! —Inclinando la cabeza, Mix se arrugó la nariz—¿Qué le hiciste a su cara? Eso no es.... eso no está bien.

Cuando el equipo de seguridad entró en el baño, Earth le dio un codazo en la mejilla.

—Espera, esto es.... Le tiró del cuello de la camisa, sus ojos se abrieron de par en par. Agarrándose de la costura, tiró del látex y le quitó la cara al hombre, o más bien una máscara excepcionalmente detallada.

—Bueno, maldita sea. —Mix emitió un silbido mientras ayudaba a Earth a poner al tipo boca abajo—. Esa es una mierda de Misión Imposible.

Una vez que los zipers con cremallera estaban aseguradas alrededor de las muñecas del tipo, Earth lo enrolló sobre su espalda y le sonrió. —Hola, Sr. Grant. Eso fue muy inteligente, ¿sabes? Pero ahora irás a la cárcel. —Agarró el brazo de Dirk y se puso de pie, arrastrando al hombre con él.

La sonrisa de Dirk era petulante.

—Llegas demasiado tarde. La caja ha sido entregada.

—Oh, bien. Entonces el empleador para el que robó también se unirá a usted en prisión. Hey, tal vez sean compañeros de celda.

—¿Qué? —La cara de Dirk se volvió cenicienta— ¿De qué estás hablando?

—Lo único que vale dinero en esa caja es el dispositivo de rastreo escondido dentro. —La sonrisa de Earth era todo dientes— ¡Sorpresa!

Dirk agitó la cabeza horrorizado.

—No. Eso no es posible.

—Me temo que lo es. El prototipo nunca existió. —Earth golpeó la punta de la nariz de Dirk—. Como las posibilidades de que te salgas con la tuya robando. —Entregó a Dirk a los agentes de policía que llenaron el baño. Aplaudiendo con una mano en el hombro de Mix, Earth hizo un gesto hacia la puerta.

—Vamos, Vaquero. Ahora empieza la verdadera diversión.

—¿Eh?

—Sí. Estoy seguro de que estás muy familiarizado con este procedimiento en particular. Se llama llenar una tonelada de papeleo de mierda.

Mix gimió.

—Y yo que pensaba que todo era diversión y juegos con ustedes los Kings.

La risa de Earth resonó por el piso vacío de la oficina mientras se dirigían al ascensor.

—Eres adorable.

—Eso es lo que sigo diciéndote, —bromeó Mix—. Pero no querías escuchar.

—Idiota. —Earth se rió. Agradeció al equipo que esperaba afuera y les dijo que pasaran una buena noche. Estaba muy contento de cómo había ido todo.

—¿Qué hay de la caja? —preguntó Mix— ¿Quién lo está rastreando? —Un segundo equipo. —Earth sacó su tableta de su bolsillo, inició sesión y accedió a la fuente segura con la información de seguimiento del dispositivo dentro de la caja de prototipos. Se lo mostró a Mix—. El punto rojo es la caja. El punto verde es nuestro equipo, que está en comunicación con la policía. En el momento en que el equipo dé la orden, la policía entrará, y desde la dirección en la que se dirigen, supongo que irán directamente a la compañía rival. Alguien va a pasar una noche muy mala.

Un par de policías se acercaron, junto con el verdadero Mike D'Angelo, que parecía un poco golpeado. Al parecer, Dirk pensó que la mejor manera de conseguir el prototipo era secuestrar a D'Angelo, lo que explicaría cómo Dirk había conseguido superar el escáner de retina. Él y su cómplice utilizaron un software de alta tecnología para escanear la retina de D'Angelo en el teléfono de Dirk, que luego se podía mostrar para escanear en la sala de seguridad. D'Angelo no tenía ni idea de quién lo había secuestrado, pero una vez que Dirk tenía la caja, le había dado el visto bueno a su compañero, y D'Angelo había sido liberado. El plan era salir con la caja, dejarla en la basura, conducir y presentarse a trabajar al día siguiente como si nada hubiera pasado.

D'Angelo le tendió la mano a Earth, quien se la tomó.

—Muchas gracias, Sr. Watthana. Tú y tu equipo han ayudado a salvar mi compañía.

—Estamos muy contentos de poder ayudar, —respondió Earth.

D'Angelo estrechó la mano de Mix y le dio las gracias antes de pasar a dar las gracias al resto del equipo.

» Comprobando el tráfico, Earth cruzó la calle. El sonido de neumáticos quemando caucho llamó su atención, y se giró a tiempo para ver un todoterreno con vidrios negros como el carbón a toda velocidad por la calle. Mix estaba casi en la acera cuando la camioneta se dirigió directamente hacia él.

—¡Mix! —Earth se lanzó hacia Mix, agarrándose a su chaleco y lanzando su peso en la maniobra, haciéndolos volar por los aires. Golpearon el asfalto con fuerza, el peso total de Mix cayó sobre Earth y le dejó sin aliento. La camioneta voló a la vuelta de la esquina y desapareció, seguida de uno de los coches de policía que había estado estacionado fuera del edificio de oficinas.

Mix se apresuró, dejando a Earth, y suavemente le acunó la cara.

—Maldición. ¿Te encuentras bien? Cariño, háblame.

—Estoy bien, —resolló Earth, dejando que Mix le ayudara a sentarse. Tocó su sien y se estremeció de dolor.

—Estás herido.

—Es sólo un rasguño, Estoy bien —prometió Earth.

Mix no parecía convencido. Revisó a Earth para asegurarse, antes de ponerse de pie y ayudarlo a levantarse. El equipo vino corriendo, y Earth levantó una mano.

—Estoy bien. Johnson, quiero saber si la policía alcanza a ese imbécil, y quiero saber quiénes son.

—Probablemente fue algún idiota borracho —dijo Mix.

—Podrían haberte matado —gruñó Earth antes de volver a prestar atención a Johnson.

—Manténgame informado

Johnson asintió y se fue.

Si los policías no lo encontraban, su equipo lo haría. Lo último que Earth quería era que ese bastardo atropellara a un pobre inocente. Dios, ¿y si Earth no hubiera llegado a Mix a tiempo?

—Todos, vayan a casa —Earth se dirigió al camión con Mix a su lado, con la mano en el hombro de Earth, como si tuviera miedo de perderlo de vista. Tan pronto como estaban en el camión, Mix señaló a uno de los asientos de la consola.

—Siéntate. Supongo que hay un botiquín de primeros auxilios o un hospital portátil en esta plataforma.

Earth resopló.

—¿Realmente crees que Ohm nos dejaría ir a algún lado sin un equipo que él mismo haya preparado? —Señaló a uno de los armarios, y Mix agitó la cabeza, divertido, cuando vio lo que había dentro.

—Ustedes realmente no hacen nada a medias. Esto es como una mini sala de emergencias. —Sacó la bolsa de lona con cremallera y la abrió, luego sacó uno de los pequeños botiquines de primeros auxilios— ¿Qué es esto? —Levantó una lata de vendas estilo vintage— ¿Vendas de Valor?

Earth se rió.

—Sí. A Ohm le encantan esas cosas. —Eran vendas que parecían medallas militares, cada una con un bonito dicho como, "He tenido cosas peores, o He sufrido valientemente."—. Es sólo un rasguño —repitió Earth—. He tenido cosas mucho peores, créeme.

—Estoy seguro de que sí, soldado, pero ¿qué tal si me dejas que me preocupe por ti por un segundo?

Earth retuvo una sonrisa y asintió.

Si Mix quería preocuparse por él, que así fuera. No es que Earth no estuviera acostumbrado a ser molestado. Después de todo, venía de una familia cubana.

Se quedó muy quieto, observando cada movimiento de Mix mientras se ponía los guantes y traía una de las toallitas desinfectantes. De pie sobre Earth, Mix tocó en la sien de Earth.

Vaya, ni siquiera se inmutó ante la picadura.

—Apuesto a que te ríes en la cara de los cortes de papel.

Earth se rió e hizo todo lo que pudo para ignorar lo cerca que estaba Mix, lo tierno que era su tacto.

—Oh no, Vaquero. Los cortes de papel son un negocio serio. Deberías ver a Nick cuando recibe uno, pensarías que está a punto de perder una extremidad.

La risa de Mix era suave y apretaba el corazón de Earth.

¿Cómo sería estar con un hombre como Mix? ¿Para ser importante para él?

—Hola. —La palabra de voz suave hizo que las mariposas en el estómago de Earth se agitaran salvajemente, pero no tanto como cuando Mix puso un dulce beso en sus labios. Sus ojos se encontraron, y la sonrisa de Mix le quitó el aliento a Earth—. Gracias por salvarme la vida, cariño.

—De nada —Las palabras de Earth no eran más que un susurro, pero Mix lo oyó. Miró a los labios de Earth antes de inclinarse para recibir otro beso. Como un tonto, Earth lo permitió. ¿A quién estaba engañando? Lo necesitaba. Separando sus labios en invitación, Earth dio la bienvenida a la lengua de Mix dentro de su boca. Sus labios eran cálidos, suaves, y sabían divinamente. Mix ahuecó la mandíbula de Earth, profundizando el beso, pero manteniéndolo suave, como si estuviera decidido a matar a Earth con ternura. Cuando Mix retrocedió, el corazón de Earth estaba en su garganta. Diablos, era tan hermoso.

—Deberíamos irnos —murmuró Earth, aliviado cuando Mix le sonrió calurosamente.

—Está bien, cariño. Vamos a casa.

¿Casa?

Si Earth no tenía cuidado, podría ceder a su tentación y pedirle a Mix que volviera a casa con él, especialmente después del día que habían tenido.

Necesitaba irse a casa. Solo. Mañana todo sería diferente. 

🔥 𝕭𝖑-𝖋𝖎𝖈𝖘