Los estudiantes bajaban del autobús y se encontraban frente a un conjunto de apartamentos formal. Fueron guiados hasta habitaciones separadas cada uno.

Angelina tomo su maleta y bajo acompañada de Cameron, constantemente se podía divisar a la chica mirando de reojo a su acompañante. Es una chica que comenzaba a sentir cosas más allá de la amistad por uno de los nuevos integrantes del grupo.

Samuel mientras salí había estado buscando a Angelina con la mirada por todo el autobús,el sin duda se preocupa mucho por Angelina sin importar que tan fuerte él sepa que ella es. La diviso en la salida del autobús pero su sonrisa no duró ni 3 segundos al ver con claridad su acompañante.

-Permiso,permiso,ehm... Permiso–Samuel estaba rompiendo la fila y acercándose todo lo que podía a Angelina.

Angelina quién por su lado iba tranquilamente escuchando a Cameron hablar de lo que pudo ser un mundo con los niños dotados fuera.

–Hubiera sido una catástrofe,el mundo nisiquiera está listo aún completamente para aceptar sus diferencias entre ellos que son normales imagínate a nosotros que tenemos poderes más allá de lo que piensan. Nos hubieran utilizado como armas de combate o algo así pero con mucha crueldad o los chinos nos hubieran considerado dioses aunque de ti Angelina es entendible,tu si eres como una diosa–le acaricio el cabello un segundo.

Samuel llegó a escuchar aquello ya que estaba detrás de la persona detrás de Cameron.

<<¿Enserio? ¿Ese es el mejor piropo que hechas a una mujer tan hermosa? Joder,me caes peor>>.

–Gracias,supongo–y agachó su cabeza un poco. Angelina había dirigido su mirada hasta los edificios frente a ella.

Samuel de pronto se cruzó entre ambos rompiendo el acercamiento de Angelina y Camero.

–Perdon si interrumpo algo,te estaba buscando Angelina–. Tenía sus manos en sus bolsillos y su cara con una expresión relajada. De reojo miro a Cameron quién desvío su vista mientras rodaba sus ojos,le incomoda la presencia de Samuel.

–Ah Samu,no te preocupes,no interrumpes nada–le dedica una sonrisa a Samuel–,¿Necesitas algo?–.

–Si,a ti conmigo–,no podía evitar tener esa cierta necesidad de burlarse de Cameron en su cara–Estuve buscándote,supuse que estarías en el otro autobús o algo,me preocupe por ti–.

–Gravias por preocuparte y ehm... Estaba solo en el segundo piso del autobús,que por casualidad me tocó con Cameron–. Ambos miraron a un Cameron de brazos cruzados que iba a paso firme y con la mirada gacha,no había dicho ni una sola palabra desde que llegó Samuel.

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Harry y Greg estaban en el laboratorio con unas pequeñas rocas que estaban situadas atraves de un vidrio de seguridad,las rocas muchas veces se movían solas y soltaban un brillo verde muy raro.

Este era el laboratorio que utilizaban para buscar el origen de los dotes de los estudiantes. Una hecho experimentos con mujeres embarazadas en donde les acercaban las rocas y veían como nacían los bebés luego pero,nada de esto resultó y los bebés nacían normales,y nunca desarrollaban dotes.

El objetivo de estos científicos era encontrar no solo el origen de cómo los bebés consiguen estos poderes,también era buscar una forma para darles dotes a las personas ya adultas pero todo sería raro,ya que la diferencia entre un bebé y un adulto es muy notoria.

Pocas personas se habían ofrecido para hacer esta investigación ya que los demás tenían miedo de que les ocurriera la mismo que la primer grupo que explotó gracias a su investigación con los bebés.

–Eran unos mediocres–menciono Greg.

Greg tenía unas gafas de esas de seguridad que utilizan los científicos,tenía una bata y todo el equipamiento de un científico profesional. Era un chico de origen griego de unos 28 años siendo el más joven dentro de la investigación. Rubio,alto,un cuerpo bien formado y unos ojos color miel eran sus características más llamativas.

–¿Porque lo dices?–Harry preguntó.

Harry era un hombre de unos 46 años con el pelo cubierto de un color blanco por sus canas,un hombre que desde el principio no le importó el peligro para descubrir cómo obtener dotes.

– Según escucho no tenían nisiquiera el vidrio de protección para esos bebés,debian por lo menos imaginar sus muertes,es decir,un bebé con poderes que nisiquiera sabe controlar,es normal que vayan a haber uno o dos muertos sin la seguridad necesaria–.

Detrás de ellos y delante de ellos las rocas que tenían cubiertas comenzaron a temblar y con ellas el piso. Ambos científicos se aferraron a las mesas más cercanas para mantenerse de pie. De pronto los cristales de protección se rompieron al mismo tiempo y las piedras se elevaron y comenzaron a liberar un brillo verde cegante.

Se deformaron más y más poco a poco perdiendo su forma de rocas y aplanando se formando partes de una carta y dejaron de brillar tan intenso. Las piezas se unieron dándole sentido a la carta.

Estaba escrito en otro idioma que no reconocían para nada, inmediatamente contactaron a muchas personas que sabían de idiomas antiguos y nadie reconoció esto.

Llevaron la carta flotante hasta el gobierno y se la mostraron. Uno de los militares se le hicieron conocidas las escrituras.

–Disculpe ¿Puede acercarla un poco más? –. Greg confuso le acercó la carta.

El moreno armado quedó sorprendido y con la boca entreabierta,reconocía esas escrituras.

– ¡Son las letras que utilizaba la niña que me tocó llevar hace 14 años en un viaje a al instituto de dotes! ¡¿Cómo se llamaba?!–coloco sus dedos en medio de sus cejas masajeando frustrante por no recordar.

Esto llamo la atención inmediata de los científicos presentes quienes tenían una mirada intensa de interés sobre el hombre uniformado por el gobierno. Estaban de brazos cruzados dirigiéndose miradas.

–¡Angelie!–dijo.

–¿Habla de Angelina? –dijo su compañero.

–Si,esa. Cuando tenía apenas dos años se ponía a escribir cosas extrañas en un pequeño cuaderno,con letras muy parecidas a esta. Un día le pregunté que qué eran y me contestó que eran cartas que hacía para Dios–.

Los científicos no podían evitar reír por esto último.

–Bueno,aunque tenga dotes y sea inteligente es una niña con imaginación aun– dijo Greg.

–Agradeceriamos que nos lleve a dónde se hospeda esa chica– Harry habló.

Y así los científicos fueron informados por el reciente incendio en la antigua escuela y que ahora se hospedan en un lugar apartado en unos edificios del gobierno.

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Samuel se había ofrecido para llevar la maleta de Angelina y ahí estaba junto a ella camino a escoger alguna habitación,todos eran rápidos con eso,no queria una ni muy cerca del piso bajo ni una muy arriba en el último piso pero sabía que no era el único que pensaba así.

El edificio que se les dió tenía un ascensor y unas escaleras,subió por el ascensor apretado por el número de personas ahí que eran como unas 15 en un pequeño lugar. Al llegar al piso destinado corrieron todos a buscar una habitación.

Angelina no corrió no hizo el más mínimo esfuerzo,iba a paso tranquilo y al final del pasillo encontró una habitación.

–ire al próximo por este piso y el siguiente a buscar una habitación ¿Si? –bajo la maleta de Angelina–Cuando encuentre una vendré lo más rápido posible–asintio con su cabeza y se fue rápido de ahí.

Angelina sonrió,hace mucho ya que no veía a Samuel tan apresurado.

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Angelina estaba sentada en la silla en el escritorio que tenía la habitación. Era una habitación muy linda y simple,al entrar tenía los útiles escolares necesario y nuevos sobre la cama. Tenía una pequeña cocina y un ventanal hermoso.

Angelina decidió salir un rato,estaba aburrida. Samuel hace rato había regresado y le había avisado que estaría en su habitación leyendo el libro que aún tenía desde la explosión ya que lo llevaba escondido en su pantalón.

Abrió la puerta blanca de madera con cuidado e inmediatamente la cerró,se asustó al sentir  a alguien de repente frente a ella. Pero luego al ver quién era solo soltó un suspiro de alivio y coloco su mano en su pecho.

– Somos vecinos entonces,mi habitación queda a tres habitaciones adelante de la tuya– era Cameron,recargado en la pared con un pie encima de la pared y otro en el suelo.

–Si,supongo que si–. Angelina se sentía avergonzada y con nervios al hablar con él.

Llevaba puesto su usual vestimenta. Era un chico que aparentaba ser malo y frío con las personas que no le caían bien,estaba entendido que no era muy sociable pero aveces era muy chistoso y lo demás con su grupo de amigos (que no era ninguno dentro de la Élite).

–¿Vas a salir?– preguntó Cameron.

–Si, quiero explorar este nuevo lugar ¿Y tú? Veo que estás fuera de tu habitación,también vas a salir–.

–No,yo ya encontré lo que estaba buscando–. Poco a poco fue acercándose a Angelina de una forma provocadora y sostuvo su cintura con una mano mientras con la otra giraba la manesilla de la puerta y entraba junto con ella.

Al entrar cerró la puerta detrás de él con seguro. Angelina estaba confundida y sabía perfectamente lo que buscaba Cameron,estaba totalmente negada a ayudarlo.

–Cameron,quiero salir un rato y ver todo ¿Si? N-no quiero hacer nada en mi habitación–tenia la mirada sería.

El ignoro las palabras de Angelina y se acercó más a ella y su cuello oliendo su aroma. Su respiración en el cuello de Angelina la hizo temblar y querer apartarlo sin encontrar fuerzas para hacerlo.

Sus manos estaban en el pecho de Cameron sintiendo así su rápido palpitar,ella empujó con sus manos en un pequeño esfuerzo a Cameron pero este nisiquiera se inmutó. Depósito un beso en su mejilla y ella desvío su mirada.

–Enserio,no necesito estar aquí ahora–.le dijo mirándolo a los ojos.

De repente y asustandolos entró un militar a la habitación de Angelina. Al ver a los chicos en esa posición comprometedora se giró inmediatamente quedándose con las palabras en la boca.

Se apartaron rápidamente y Angelina con nerviosismo preguntó:

– ¿Me buscaba?–.

–Si,– seguía de espaldas–el gobierno la solicita,tenemos algunas preguntas para usted–. Y se retiró.

Angelina y Cameron se miraron dudosos.