ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠 𝟜

Tul tomó una respiración profunda intentando recordar la historia que había ensayado para contarle a sus amigos.

Ahora que estaba por entrar al restaurante, los nervios lo comenzaron a invadir, haciendo que creara los peores escenarios posibles, como aquel en el que terminará confesando sus sentimientos por su amigo frente a todos.

Empujo la puerta de entrada y se dirigió a la cocina, saludando a los trabajadores del lugar y viendo a un sonriente chico peliazul, que reconoció como el nuevo mesero.

—Hola, Saint ¿cierto? — saludo con una sonrisa, mientras se acercaba.

Nuevamente le llegó aquel olor a caramelo y semillas de girasol, combinado con un sutil aroma que le hacía recordar una playa y que a él le resultaba muy agradable, supuso que pertenecía al alfa que era su pareja.

—Hola. Oh, tu eres el compañero de trabajo de Win, el que nos dijo donde encontrar un buen departamento— recordó el beta peliazul—. Por cierto hyung, muchas gracias, los departamentos están grandiosos y la zona es muy tranquila, me mudare esta misma semana.

—Veo que te acuerdas de mí —le sonrió —. Que bueno que te gustaron. Es una gran zona y quedan muchos lugares cerca en los que puedes disfrutar de una cita con tu novio, la vez que te conocí él no salió del carro así que a la próxima me lo presentas ¿si?

Saint soltó una risa y negó con la cabeza. — Él no es mi novio, es mi mejor amigo y desde que nos mudamos a Bangkok estuve viviendo en él. Pero ya que conseguí este trabajo, pienso conseguir un lugar para mi. ¿Por qué hyung pensó que él era mi novio?— interrogó divertido el beta.

—Así que no es tu novio. Me preguntaba porque su aroma sobre ti era tan tenue —dijo divertido el omega pelirrojo—. Lo siento, supongo que Perth y Win hicieron sus propias conclusiones, ellos me lo dijeron.

—Está bien hyung, no pasa nada. Pero creo que deberé decirle a Mew que le explique a Perth. Esto pasa porque el solo habla lo necesario — río Saint.

—Tul-huyng, ya estoy aquí —saludo un pequeño omega pelirrosa, mientras se asomaba por encima del hombro del pelirrojo para ver con quien hablaba —.

¡Saint!, hola, me alegra volver a verte, eso quiere decir que si estarás trabajando aquí, ¿cierto?

—Hola Win-hyung. Si, gracias a ti, Perth y Tul-hyung, encontré departamento y trabajo. Jungkook y yo les agradecemos mucho la ayuda —respondió un feliz y agradecido Saint.

—Si quieres agradecernos, más te vale que tu y tu novio nos acepten la invitación a nuestra presentación de baile. El restaurante cerrará temprano porque todos nos van a apoyar, así que no tienes excusas, ¿escuchaste? —. Win finalizó con un ceño fruncido tratando de aclarar su punto, pero solo causo ternura en los presentes por lo lindo que se veía.

—¡Por supuesto!, ahí nos tendrán apoyándolos. Pero Win, antes de que sigas, te aclaro que Mew solo es mi amigo, no mi novio.
—¿Que? ¡No! ¡Perth me mintió! ¡¿Cómo se atreve?¡Lo dejaré en abstinencia un mes! —dramatizo el pequeño omega, haciendo reír a los otros dos.

—Win, baja la voz o Gulf-hyung nos echara por ruidosos —dijo Tul riendo.

—No creo que Perth sepa que no somos novios. Cuando Mew conoce a alguien actúa muy tímido y habla muy poco, así que no seas malo con tu novio —aclaró el peliazul.

—Esta bien. Pero solo porque mi celo está cerca y no lo quiero pasar lleno de supresores. Bueno Saint, te dejamos trabajar, porque en serio nos vendrán a echar de aquí, por distraerte.

—Esta bien hyungs. los veo después —se despidió el sonriente beta.

Ambos omegas siguieron su camino hacia la cocina, para poder saludar a sus amigos y para comer por supuesto.

— 𝓓𝓮𝓼𝓽𝓲𝓷𝓪𝓭𝓸𝓼—

La tarde pasó rápido entre risas,Tul y Win se divirtieron molestando a Gulf y solo pararon cuando el omega los amenazó con un cuchillo y desprendiendo un fuerte y ácido olor a naranja, que opacó por completo sus dulces olores de lirios y orquídeas, por no dejarlo trabajar y por ser escandalosos.

Tul no logro ver a Max hasta tres horas después, ya que el beta estuvo en su oficina, pero solo fue durante el breve momento en el que comió, y volvió a retirarse para continuar su trabajo.

Cuando el pelirrojo lo vio, recordó lo que les tenía que contar a sus amigos y su corazón se aceleró, no quería que sus amigos descubrieran que estaba mintiendo y mucho menos quería que se enteraran de la razón por la que lo hacía.

Decidió esperar al cierre del lugar, para poder contarles a todos juntos.
Así que salio del local para acompañar a Win a las compras que el pelirosa quería hacer. Durante ese tiempo platicaron sobre su próxima presentación, mientras disfrutaban de un helado.

Sin embargo, todo el tiempo que estuvieron caminando, Tul sintio un incesante dolor de cabeza, su cuerpo se sentía cada vez mas cansado y un escalofrió no dejaba de recorrer su piel, pero lo atribuyó al repentino descanso después de semanas de ensayos, así que no dijo nada para no preocupar al pequeño y tierno pelirrosa.

Seguía aportando sonriente a la conversación esperando por volver pronto a su casa a descansar y sin saber que su aroma se volvía poco a poco más dulce e intenso.

Max se estiró, quitando el adormecimiento de sus músculos.
Llevaba toda la tarde sentado en su oficina, dejando en orden las cuentas para el fin de mes.

Solo se detuvo un momento para ir a comer a la cocina, encontrándose con Tul y Win, y se golpeo mentalmente por haber olvidado que su amigo estaría ahí para la hora de comida, ya que pudo haber pasado ese tiempo con el pelirrojo antes de que se volviera a ir con Win.

Se escuchó un par de golpes en su puerta y enseguida entró un Gulf con el ceño fruncido y una charola en sus manos.

—Maxi, te he dicho cientos de veces que no te olvides de comer, no importa cuán concentrado estés. La próxima vez te dejaré morir de hambre y no te traeré nada.

Gulf dejó la bandeja en el escritorio mientras decía eso y se sentó enfrente de él con los brazos cruzados observando sus movimientos.

—Hyung, lo siento, sabes que soy muy distraído, no te enojes conmigo, ¿si?

Namjoon rodeo el escritorio para sentarse en la silla que se encontraba al lado derecho del omega y tomo su mano entre las suyas.

—Hyung~, ¿cómo podría sobrevivir si tu me dejas de alimentar? Sabes que no soy bueno en la cocina. ¿Que tal si muero intentando hacer un cereal?

—¿Cómo es posible que te mueras por hacer un cereal? —pregunto el pelimenta con una sonrisa en sus labios.

—Puede ser que quiera calentar la leche y al prender la estufa esta explote y yo quede calcinado, hyung sabes que los accidentes me persiguen —respondió Max haciendo gestos dramáticos con su cara y sus manos, haciendo reír a su hyung.

—Tienes razón, algo así te podría ocurrir a ti y yo no quiero cargar con una muerte en mi conciencia.

—Hyung~ no seas malo.

—Bueno, bueno, esta bien, te seguiré recordando tus comidas, solo porque soy una buena persona.

—Y a cambio, yo le daré a hyung muchos mimos por cuidarme —dijo el beta abrazando a Gulf e intentando darle un beso en la mejilla mientras este lo empujaba y se hacia para atrás lo mas que podía.

—Yo n-no quiero. Ya, suéltame —se resistía el pequeño omega sin lograr nada realmente, ya que Max era más grande y fuerte que el.

—Vamos hyung, yo se que te encantan los mimos, déjame agradecerte por tus cuidados —repetía Max divertido acercandolo.

La puerta fue abierta y ambos voltearon viendo como Tul los miraba desde el umbral pasando su mirada de uno al otro.

Max soltó con cuidado a Gulf y se levantó del suelo en el que estaba hincado para sonreirle y saludar al lindo omega.

—Hola hyung, ¿cómo les fue a ti a Win con sus compras?

—Pe-perdón, yo-o n-no que-quería interrumpirlos, y-yo es-escuche ruido y po-por eso entre.

Tul hablaba mientras miraba a todos lados y se retorcía los dedos de las manos. Además Max pudo notar que sus ojos se encontraban más brillosos de lo normal, como si estuviera a punto de llorar.

—Hyung, ¿que tienes? ¿porque quieres llorar? —pregunto Max rodeándolo de inmediato con sus brazos.

Al parecer Gulf era el único que se percataba de lo que estaba pasando en esa habitación, así que se decidió a hablar.

—Tul no interrumpes nada, al contrario, que bueno que llegaste.
Me salvaste de un Max agradecido por haberle traído comida. Sentía que moriría por tanto agradecimiento —dijo Gulf con movimientos exagerados, tratando de calmar al omega —Tul, en serio me salvaste la vida.

—¿Por eso querías llorar Tul-hyung? No te preocupes, hyung, tú sabes que puedes entrar cuando quieras a mi oficina, tu nunca interrumpes nada.

—N-no que-quería llorar, s-solo que hay mucho p-polvo en tu oficina.

—¡Oh, cierto! Hyung es alérgico al polvo y yo no he limpiado la oficina. Lo siento hyung —dijo Max viéndose totalmente culpable.

—No, Maxi, no te preocupes, estoy bien.

Tul le regaló una sonrisa a Max mientras le devolvía el abrazo.

Gulf miraba incrédulo a sus dongsaengs. Ni Tul ni Max ocultaban su mutuo enamoramiento, cualquiera que estuviera unos minutos con ellos se darían cuenta.

Por eso se preguntaba, ¿cómo es que esos dos no lo notaban?

Max era muy inteligente, fue el mejor de su clase y gracias a todo su trabajo, es que se hizo realidad el sueño de Bright y de él, de abrir su restaurante propio.

Peor al parecer esa inteligencia se esfumaba, cuando Tul estaba cerca.

—Tul, tu dijiste que nos contarías algo cuando el restaurante estuviera cerrado, así que vayamos a la cocina ¿te parece? —pregunto Gulf.

—Ah, cierto, cl-claro vamos —respondió Tul un poco nervioso.

Gulf tomó la bandeja, con la comida de Max y los tres se dirigieron a la cocina, donde los esperaba Bright, Win y Saint, ya que este último esperaba a su amigo para que lo llevara a su casa.

Entraron para situarse en las sillas que rodeaban la barra central de la cocina. Max empezó a comer de la bandeja que Saint le situó enfrente, mientras esperaba que su amigo comenzará a con su relato.

—Haber Tul, me tienes esperando toda la tarde por lo que sea que nos vayas a contar así que empieza —dijo un curioso y ansioso Bright.

—Bueno, veran, y-yo, mmm, conocí...ammm, no se como explicarlo... porque fue muy raro y pa-paso muy rápido...—Tul tomó una gran bocanada de aire, tenía que contarles como lo habia planeado —Yo me encontré con mi pareja destinada — finalizó Tul con los ojos apretados y la cabeza baja.

—¡¿Que?! —dijeron Bright y Win al mismo tiempo.

Mientras Saint lo miraba con una sonrisa y Saint volteaba su cabeza con dirección a Max , quien bajaba la mirada y apoyaba ambas manos hechas puños sobre la mesa, intentando sostenerse de alguna forma.

—¡¿Y?! ¿Cómo se llama? ¿Dónde lo viste?

—¿Cuando se conocieron? ¿Por qué no nos contaste antes?

Win y Bright empezaron a bombardear con preguntas ya que estaban emocionados por el omega, pero sin dejar de lado la preocupación por cierto beta castaño que se encontraba con ellos.

—Bueno lo conocí hoy en la mañana, cuando salí de aquí. Estaba en el estacionamiento, pero no se como se llama, yo lo vi y... —bueno, aquí era donde Tul tenía que cambiar un poco la historia — yo me emocione tanto y me puse nervioso, porque ustedes saben que siempre he querido conocerlo, tuve miedo de no verme bien o de que no me salieran las palabras al hablar y quedara como un tonto, y yo solo salí corriendo. No se porque lo hice , debo de parecerles un tonto.

—Bueno yo entiendo que te pusieras nervioso hyung, a los omegas nos gusta vernos bien para nuestros alfas —dijo Win con sus abultadas mejillas rojas.

—Emm, si, creo que no lo pude controlar —siguió Tul.

—Pero, Tul, a la hora que tu te fuiste aun no estaba abierto el restaurante, así que no pudo haber sido un cliente, probablemente vino a pedir empleo o preguntar por algo o alguien — habló Gulf volteando de nuevo con Tul —. Si es así, probablemente Amira-nona lo atendió, le puedes preguntar mañana.

—Eso es cierto Gulf, Tul se fue cuando Maxi fue a entrevistar a Saint —mencionó el alfa rubio.

—Si, y solo estaba ese carro negro en el estacionamiento... —recordó Tul.

—Perdón que interrumpa hyung, pero de casualidad ¿aquel alfa era alto, con cabello negro y vestido completamente de negro? —preguntó el beta peliazul.

—¡Si!, Saint, ¿tú también lo viste cuando llegaste?

—Emm algo así. En realidad yo llegué con él. Es mi amigo, Mew.

No olviden los votos y comentarios no sean lecturas fantasmas

Las amo ❤️

Palabras 2171

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top