Ochako y Mina eran amigas desde primaria, ahora que estaban en el primer año de preparatoria, Uravity conoció a un tierno chico de tercer año, en el que se convirtió en su mejor amigo.

O así parecía.

-Ahorita vengo, Mina.- Comentó cierta castaña de mejillas rosas al salir deprisa de su salón de clases, haciendo que Mina no le diera ni el tiempo de responder.

Después de un par de minutos, sintió cómo alguien la tomaba del brazo, para después adentrarse al laboratorio abandonado de la escuela.

-Es una completa tortura mantener nuestra relación así, Ochako.

-Oh vamos, sabes que no tenemos que ocultarlo, pero la adrenalina de ser descubiertos, te gana por mucho, Deku. -Respondió de manera retadora.

Realmente era un secreto a voces, pero para ambos, besarse en cada lugar de la escuela donde alguien podría descubrirlos, de alguna manera les encantaba, y mucho.

-Ahora me llegó la notificación sobre que me aceptaron en la agencia del héroe número uno, supongo que... -Los labios del chico rozaban suavemente con los de Uraraka. -Me merezco un premio, ¿no?

-Así es. -Colocó sus manos sobre su pecho, apartandolo un poco.- Pero será hasta el fin de semana, cuando vayas a visitarme a mi casa, claro. -Izuku hizo un puchero, más Ochako lo besó en la mejilla.- Pero, por mientras te puedo dar un beso cómo premio ahora, o al menos que no quie-

No la dejó terminar, ya que comenzó a devorar sus labios sin piedad, recorriendo cada centímetro de la boca de la chica.

Ella sólo se estremecía, el cómo la tenía abrazada, sus grandes manos recorriendo su cuerpo por encima del uniforme, acariciando y apretando sus muslos por debajo de la falda, la hacía sentir mucho calor.

Se detuvieron después de unos minutos, al escuchar la campana sonar, indicando que iniciarían las clases.

Se despidieron, primero salió Ochako y luego Izuku.

Al llegar al salón, Mina Ashido miró a la castaña con una mirada acusadora. -Al rato me voy a quedar sin mi mejor amiga, ¡por culpa de él!- Señalando a Midoriya, quien iba pasando frente del salón de primero, donde iba su adorable novia de ojos chocolate.

-¿Mía?- Preguntó y se señaló, con una mirada ingenua.

La chica gravitacional suspiró al ver a su lindo novio, podría tener mil defectos y demás, pero... El simplemente era perfecto, ideal para Ochako Uraraka.

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JAJAJA si me pasó 😔😳👌🏻