Capítulo 8. Momentánea tranquilidad.
-Aquí es donde vivo ahora, Asia-mencionaba el pequeño Goku sonriente parado en frente de su casa junto a la rubia.
El azabache acababa de bajar de entre sus brazos a Asia presentadonle su casa y dónde a partir de ahora la monja viviría.
Con tranquilidad el pequeño saiyan se adentro a la casa abriendo la puerta con la llave como le habian enseñado, pero este se detuvo al notar que su amiga no lo seguía.
-¿Huh? ¿Qué pasa Asia? Entra para ver que hay de comer jejejeje-Goku sonrió, lamentablemente había perdido toda la comida que compró esta tarde debido al insidente ocurrido en aquella casa.
-Y...yo-la chica bajo la mirada juntando sus manos nerviosa-Y...yo realmente no quiero ser una molestia-murmuró apenada.
-¿Otra vez con eso? ¡Ya te dije que no es así porque eres mi amiga jejeje!-exclamó el chico a la vez que recibia la mirada de la rubia quien asintió apenada caminando lentamente hacia la puerta e ingresando-¡Bienvenida! Eso fue lo que Aztas me dijo que diga cuando traiga a alguien jejeje-el chico reía con tranquilidad cerrando la puerta.
La pequeña sonrió tiernamente y se adentro a la casa alegre de que el joven la trate tan buen y fuera tan amable con ella... Aunque aún debía contarle su historia, al menos debería hacer eso, o eso pensaba ella.
-Oh, no hay nada de comer y no aquí nl hay nada-Goku suspiro caminando en la sala de entrada del hogar pensando en ir a dormir para mitigar su hambre.
-Lo lamento peeo yo tampoco se cocinar Goku-san-la chica habló apenada.
-¿Huh? No te preocupes. Seguro mañana Asamael ya volverá y hará algo para comer-habló Goku sonriente-Oh, vamos arriba, allí es donde duermo-mencionó Goku subiendo las escaleras mientras la monja lo seguía.
El saiyan abrió la puerta de su habitación con tranquilidad notándose que estaba algo desarreglado habiendo uno de sus dogis sobre uno de sus escritorios y su cama sin tender. Normalmente cuando el volvía todo ya estaba arreglado, pero esta ocasión no era el caso, tal vez porque el caído no se encontraba.
-Allí es donde yo duermo-Goku señalo con tranquilidad-Puedes acostarte si quieres-mencionó Goku alegre mientras sin pensarlo mucho se iba sacando su ropa de academia.
-¡¿H...eh?!-la chica rápidamente se cubrió sus ojos apenada-¿Qu...qué haces Goku-san?-preguntó avergonzada.
-¿Huh? Me cambio de ropa, es muy incomodo usar todo el rato esta extraña ropa que todos usan en esa academia-respondió colocándose su camiseta y pantalones blancos que le servían de pijama.
-Bi...bien-la chica habló aún roja sin poder ver fijamente al chico.
-Oye, como ya te dije, si quieres puedes acostarte en mi cama-habló Goku repitiendo sus palabras pues pensaba que la muchacha no lo oía.
-¿Y dónde dormiras tu Goku-san?-preguntó la pequeña preocupada pues no queria que su nuevo amigo pierda la comodidad de su cama.
-Pues dormiremos en la misma cama, ¿no?-habló el pequeño confundido pues para el esto era completamente normal ya que el compartía todo con su abuelito cuando vivía en las montañas.
En cambio la joven se ruborizó nuevamente, ¿Acaso iba a pasar una noche entera en la cama con un chico? ¿Estaba eso bien a los ojos de Dios?.
-¿Pue...puedo dormir en otro lugar?-la monjita pregunto mirando el suelo apenada. Sabía que su amigo no tendría otras intenciones ocultas ya que había conocido bastante bien parte de su personalidad y sabia que no era uno de esos llamados pervertidos.
-¿Por qué?-preguntó con tranquilidad Goku sentadose en su cama y poniendo mas nerviosa a la rubia.
-N...no quiero molestarte y-trató de explicarse.
-No es molestia, aunque tal vez puede ser algo incomodo para ti-el saiyan pensó por unos momentos-Ya sé, Salsas me dió ésto-Goku se acercó a su placar japonés donde guardaba la mayoria de sus dogis y demas atuendos comprados por el caído sacando un futon blanco celeste que se encontraba enrrollado con unos hilos-Bien, yo dormiré aquí y tu en la cama, ¿Está bien?-preguntó Goku mientras que con sus manitos comenzaba a extender eo futón.
-¡Yo dormiré en el futón Goku-san!-habló apresurada la rubia.
-¿Huh? No, mi abuelito me dijo que sea amable con las chicas y pues te doy la cama y yo duermo aquí jejeje. Además es muy cómodo-mencionó el saiyan sacando también unas almohadas del ropero.
-...-la rubia no estaba muy segura pues no quería aprovecharse de la amabilidad del chico-No tengo problemas en dormir ahí Goku-san-volvió a insistir la rubia algo apenada.
-Ya te dije que no, ¿Por qué siempre me haces repetir las cosas? Jejejeje-Goku reía al notar aquello de su nueva amiga que se apeno una vez mas.
-Lo lamento-habló la pequeña bajando la mirada y tomando sus manos.
-No te disculpes, es gracioso y no me molesta tanto jejeje-habló el pequeño mientras se recostaba en su futon ya completamente extendido con sus manos en su nuca mirando el techo algo pensativo.
-Jejejeje-Asia reía nerviosa rascando su nuca.
-Ya puedes acostarte si quieres-mencionó Goku señalando la cama que estaba algo desordenado, aunque el saiyan pensó que no era necesario arreglarlo ya que estaba entre sus costumbres.
-¡S...si!-rápidamente la monja se acerco a la cama de Goku y se sento tímidamente no teniendo mucha confianza.
-Oye Asia, ¿Puedo hacerte una pregunta?-el saiyan llamó la atención de la joven monja.
-¿Eh? Si-respondió Asia algo sorprendida al oír a Goku algo más serio.
-¿Por qué estabas con ese sujeto de pelo gris?-preguntó girando su cabeza y mirando a la rubia quien se asombro un poco por la pregunta bajando la mirada algo triste.
-Veras Goku-san, como pudiste ver tengo esta habilidad otorgada por Dios para curar-comenzó a explicar con una triste sonrisa.
-Sí, es una habilidad genial y muy útil-mencionó el chico sonriente.
-Así es, es un poder milagroso, pero-los ojos de la rubia comenzanron a soltar lagrimas asustando a Goku.
-¡O...oye! ¡N...no llores! Lamento si te moleste con algo, ¿Qué hice?-Goku preguntó muy nervioso poniéndose de pie y acercándose a la chica con preocupación.
-No hiciste nada malo Goku-san-respondió la chica limpiando sus lagrimas-Es solo que recordé algo-mencionó con tristeza.
-¿Qué cosa?-preguntó Goku con gotas de sudor en su rostro pues se había exaltado bastante cuando su amiga comenzó a llorar.
-Despues de nacer mis padres me abandonaron. El orfanato de la iglesia fueron quienes me recogieron-comenzó a contar-Cuando recibí este poder tenia 8 años, cuando los de la iglesia notaron esre poder fui tratada como una santa y me comenzaron a adorar. Use este poder para curar a muchas personas y los rumores corrieron con rapidez y la gente venía pidiendo mi ayuda, los de la iglesia me guardaron con cuidado y me trataban bien-explicaba con triste sonrisa.
Goku sólo oía con mucha atención cada palabra de su amiga, su rostro era de tranquilidad y concentración.
-De verdad estoy alegre por el poder otorgado por Dios para ayudar a otros, por eso mi corazón esta lleno de agradecimiento, pero desde que fui llamada como "santa" la gente normal me comenzó a mirar diferente y me empecé a sentir algo sola-con cada palabra pronunciada por la joven su voz parecía querer quebrarse-Un dia encontre un deminio herido por un exorcista. Yo usé mi poder para sanarlo y el demonio que salve mato al exorcista-dijo mientras las lagrimas comenzaban a salir.
Goku en cambio, aunque en su rostro no haya cambiado, su puño estaba apretado con fuerza aún mirando a Asia, sí, el estaba molesto.
-Cometí un gran error por salvar al demonio, luego de eso la gente que me adoraba comenzó a llamarme chica demonio, después de eso fui expulsada por la Iglesia y poco despues un ángel caído me recogió-terminó de hablar limpiando sus lagrima.
-"¿Ángel caído? ¿Cómo Rastas?"-Goku se preguntó serio.
-Goku-san yo siempre he tenido un sueño-en ese momento Asia no logro controlar sus emociones y sus lagrimas salían sin control-Tener amigos y salir de comprar como gente normal... conversar normalmente y pasar tiempo con mas amigos-la pequeña trataba de limpiar sus lagrimas, pero así como las limpiaba también salian más, pero justo en ese momentos dos pequeñas manos se chocaron con suavidad sobre las mejillas de la rubia quien no evitó exaltarse y mirar al saiyan.
-¡Yo haré realidad todos tus sueños Asia!-Goku exclamó con determinación logrando sonrojar a la rubia quien abrió sus ojos en sorpresa como si una idea la hubiera golpeado-¡Ya somos amigos, solo falta tener mas! Puedo presentarte a mis amigos, todos te caeran bien, son buenos jejeje-habló con una sonrisa recordando a Bulma, Yamcha, Krillin, Puar, Ulong, Tenchin Han, Chaos, etc.
-Podremos pasar mucho tiempo juntos, no sé mucho sobre eso de salir de compras y demás ¡Pero puedo mostrarte la montaña Paoz o la ciudad de Bulma que es grande y donde tal vez haya eso de compras!-Goku trataba de explicarse mientras Asia solo lo miraba fijamente con la boca y los ojos abiertos.
Goku... Él ya había cumplido su sueño, su primer sueño de tener un amigo. Por fin tenía un lazo con alguien y ese alguien era Son Goku, una persona que sin saberlo estaba ocupando un lugar muy especial en el corazón de la monja.
-¡Goku-san!-Asia se arrojó sobre Goku en un fuerte abrazo que los tumbo sobre el futón de Goku.
-¿Qué pasa Asia?-preguntó Goku al verse abrazado tan fuerte por su nueva amiga.
-Gracias, estoy muy feliz de haberte conocido Goku-san, muchas gracias por salvarme-habló Asia abrazando a Goku y teniendo su cabeza sobre el pequeño hombro de Goku.
Asia no solo se refería a salvarla de los caídos o Freed, quizá incluso se refería de salvarla de la soledad y el vacío que comúnmente ella vivía. Él pequeño Goku la habia salvado en las de una forma.
-No tienes que darme las gracia porque para eso están los amigos-respondio Goku sonriente teniendo a Asia sobre si, pero sintiendo como los frágiles brazos de Asia intensificaban su fuerza sobre el.
Estuvieron asi unos cuantos segundos hasta que el pequeño volvió a hablar.
-Oye Asia, ¿Puedo pedirte algo?-preguntó el saiyan tranquilo.
-Sí-respondió la chica también tranquila.
-¿Puedes soltarme por favor? Tengo calor-habló Goku parpadeando.
-¡Eh! ¡Si! Lo lamento-con rapidez la pequeña se separo del chico sumamente avergonzada y se volvió a sentar en la cama.
-No te preocupes, es solo que tenia algo de calor-mencionó el chico mientras se ponía de pie y se acercaba a la puerra y en un lado de la misma estaba la llave del ventilador y le dio un giro quedando en el 3-Con esto estará bien-Goku se arrojo nuevamente en su futón.
-Ha...hasta mañana Goku-san-Asia habló recostandose en la cama algo apenada.
-Sí, nos vemos enseguida jejeje-reía el saiyan mientras recostaba su cabeza en la almohada-A momir-susurró para luego quedar completamente inconsciente.
-"Se durmió muy rapido"-Asia se dijo a si misma asomándose levemente a ver a Goku al escuchar sus ronquidos-Supongo que también debo dormir. Seguro mañana conocere a los señores que cuidan de Goku-san-murmuraba pensativa la rubia teniendo una imagen algo errónea de como se componia la casa. No era tanto su culpa, Goku no le había dicho mucho, despues de todo Son Goku era así.
-"Este olor... ¡Es de Goku-san!"-la chica de inmediato noto el característico olor de Goku en una de las dos almohadas de la cama volviendo a ponerse roja, pero con algo de pena tomo una de ellas y lo abrazo con suavidad y con una tierna sonrisa.
Rápidamente la joven también cayó en los brazos de Morfeo quedando completamente dormida y despues de mucho por fin logrando dormir tranquila.
Un par de horas despues el mismísimo lider de los ángeles caídos llegó con suma tranquilidad entrando a la casa.
-"Al parecer Goku no comió nada. Prensar que no sabe cocinar jaja"-el caído se decía a si mismo en burla notando como la cocina estaba completamente limpia demostrando que el chico no había hecho de las suyas.
-Debo ver si ese muchacho esta durmiendo o no. Es mi deber como su "tutor" despues de todo jeje-habló en divertido de sus propias palabras y con sumo cuidado subio por las escaleras llegando hasta la puerta de la habitación de Goku.
Lentamente abrió la puerta, pero no se esperó lo que vio. Una rubia estaba completamente dormida en la cama de Goku mientras este último estaba en el futón que él había comprado por si el chico no estaba acostumbrado a dormir en cama, ya que por lo que sabia el venía de las montañas.
-"¿No eres muy pequeño para traer mujeres a casa, mocoso?"-Azazel preguntó internamente algo asombrado por esta situación-"¿No que muy inocente?"-
-¿Huh?-Azazel afiló su mirada fijandose en la chica. Algo le habia llamado la atención-Esto es-susurró analíticamente.
El rostro del rubio se puso algo más serio, pero tras un suspiro volvio a su característico rostro sereno y cerro con lentitud la puerta de la habitación.
Las horas pasaron con prontitud llegando nuevamente otra mañana. De forma sobre natural Goku se puso de pie mientras olfateaba un rico olor.
-Asamel-Goku habló en tono bajo para no despertar a la chica mientras rápidamente se ponía sus ropas de academia, las limpias ya que tenia un par de ellas. Curiosamente tomo uno de sus tantos dogis y lo puso en su mochila, todo sin que la chica se despierte, al parecer no había dormido mucho últimamente.
Haciendo el mínimo ruido posible salió de la habitación cuidando de no despertar a Asia. Apenas cerro la puerta bajo a toda velocidad mientras algo de baba salia de la comisura de sus labios.
-¡Agujetas!-Goku exclamó mientras entraba a la cocina viendo al angel caído vestido con una camisa cafe claro dentro unos pantalones negros y unos zapatos bien lustrados, y claro, su clásico delantal rosa.
-Oye mocoso, eso ni siquiera rima-Azazel habló entrecerrando sus ojos nervioso-Estoy comenzando a pensar que lo haces apropósito-habló suspirando.
-¿Qué cosa?-pregunto Goku ya sentado en la silla frente a la mesa sin entender las palabras del rubio.
-Nada-respondió girando unas salchichas que estaban en la paila-¿Me puedes decir quién es esa joven que esta en tu cama?-preguntó Azazel con tono tranquilo y si mirar a Goku.
-¡Ah! Ella es Asia, una nueva amiga-fue la simple respuesta de Goku mientras tomaba el tenedor y el cuchillo estando mas concentrado en la comida.
-Ya veo-fue lo único que dijo Azazel, sabia que había una razón de peso por la cual Goku trajo a esa chica, ademas de esa sensación de cuando la vio, ya luego le preguntaría directamente a ella.
Azazel comenzó a servir el desayuno a Goku dejando apartado una ración para la invitada del pequeño bribón. El saiyan no tardo mucho en liquidar toda la comida que le habian dado frotando su vientre algo hinchado con sus manos.
-¡Fuaa, tu comida es deliciosa Astaroth!-exclamó Goku poniéndose de pie.
-Sigh...-Azazel dio un gran suspiro sonriendo-Toma, esta es para la academia-Azazel le entrego un táper de unos tres pisos que Goku metió en su mochila dejando ver por unos pocos momentos el anaranjado de su dogi, cosa que el angel caído notó, pero decidió no decir nada.
-Bueno, me voy. Por favor cuida de Asia y dile que vendre pronto para hacer las cosas de amigos que ella quiere-habló Goku caminando hacia la puerta de la salida.
-¿No te despediras de ella?-preguntó Azazel curioso. Algunas veces este chico podía ser algo insensible.
-No quiero despertarla, vi que estaba durmiendo muy cómodamente-respondió Goku abriendo la puerta de la salida-Nos vemos luego. Y como te dije, cuida de ella-pidió nuevamente.
-Sí, sí. Como digas-respondió Azazel sacándose el delantal.
Nota de autor: Siempre puedes confiar en big mamá Azazel.
El saiyan repitió su mismo camino de todas las mañanas, algo pensativo.
-Si mal no recuerdo hoy tengo esa reunión con esas chicas estatua. Ojalá tengan rica comida, si no lo tienen les invitaré de la mia jejeje-reía alegre Goku como niño con su mochila naranja con detalles azul en su espalda.
Ciertamente parecia un niño de primaria llamando mucho la atención por estar vestido con un traje de academia.
El joven no tardo mucho en llegar a su academia donde ingreso con normalidad notando que las "chicas estatua" no estaban allí, pero no le dió mucha importancia ingresando en las instalaciones colocando su mochila en su casillero que por suerte recordaba como usar por su amiga Aika, lo único que tomo de allí fue su taper de comida y sus materiales como cartuchera y cuadernos.
Como siempre el chico entro en su salón encontrándose con su amiga Koneko quien lo recibió con su tipica expresión casi sin emociones pues tenia una pequeña sonrisa casi imperceptible.
-¡Hola Koneko!-saludó alegre Goku sentándose en su lugar. Ya no llamaba tanto la atención de sus compañeros como cuando era nuevo, pero aún sorprendía lo bien que se llevaba con la Toujou.
-Buenos días-saludó la nekomata con tranquilidad-¿Hoy comeremos juntos?-preguntó serena la diablesa mirando el clásico taper de su amigo que tenia algunos detalles de estrellas y dragones.
-No, hoy no. Hoy ire con las chicas estatuas-habló Goku guardando su taper en algun lugar de su pupitre. En cambio la albina se puso algo confusa al oir aquel extraño nombre.
-¿Quiénes?-preguntó nuevamente Koneko sin entender bien las ocurriencias de su amigo.
-Shinraki y Souma-respondió Goku dejando caer su rostro sobre el pupitre.
-¿Shinraki y Souma? ¿Eh? ¿Acaso te refieres a la señorita Sona y Tsubaki-san?-preguntó nuevamente Koneko algo asombrada y entrecerrando sus ojos analíticamente.
-Ah, sí, ellas jejeje-reía el pequeño rascando su nuca, en cambio Koneko puso un rostro pensativo.
-"¿Por qué Sona-sama querría hablar con Goku?"-se preguntó pensativa-"¿Acaso saben algo de Goku?"-el rostro de la pequeña cambió a uno más de nervios.
-¿Qué pasa Koneko?-preguntó Goku mirando a su amiga mientras veíamos como estaba haciendo unos garabatos en una hoja.
-Nada, ¿Luego me puedes decir como conociste a la presidenta Sona?-preguntó con mirada tranquila la albina pero con interés en su voz.
-¿Huh? Claro, te lo contaré jaja-Goku esbozó una gran sonrisa.
-"Debo saber cuál es el interes de la presidenta Sona por Goku. ¿Acaso quiere unirlo a su nobleza?"-ante aquella pregunta la albina negó con su cabeza algo preocupada-"No, no creo que Goku acepte eso... ¿Verdad"-la nekomata miró a Goku quien seguia concentrado en su dibujo.
-Mira Koneko ¡Es Krilin!-Goku mostró una hoja de su cuaderno en donde estaba dibujado una especie de persona con gran cabeza calva con seís puntos en su frentey con un cuerpo desproporcionado.
-¡Pff!-rápidamente Koneko cubrió su boca pues casi se le escaba una carcajada al ver aquel dibujo, incluso si no conocía a ese tal Krillin le pareció muy divertido eo dibujo de su amigo-Buen dibujo-Keneko levantó un pulgar en apoyo.
-Jejeje-Goku reía tomando unos colores de su cartuchera y comenzar a pintar a su amigo.
Luego de eso el profesor llegó cargando algunas carpetas y materiales para el desarrollo de las actividades. Las clases continuaron normalmente hasta el receso donde el chico se despidió de su amiga para ir al Conejo Estudiantil, quedando con Koneko que luego le explicaría cómo conocí a la "chica estatua". Por suerte recordaba el camino por el cual Tsubaki le había llevado anteriormente y por lo mismo le fue fácil llegar y sin importarle mucho abrió la puerta cargando con el su taper de comida.
-¡Hola!-saludó Goku sonriendo y cerrando la puerta detrás suyo con uno de sus pies.
En cambio todos los miembros del concejo estudiantil se exaltaron un poco al ver como de repente la puerta simplemente se abrió sin que nadie haya tocado con aterioridad, pero todos se calmaron al ver que se trataba del pequeño Goku quien los saludaba alegre.
Sona, como siempre, estaba en sentada en su lugar de presidenta mientras Tsubaki estaba detrás de ella mirando con una pequeña sonrisa a Goku, el resto de la nobleza de la diablesa estaban sentados en unas sillas que se encontraban al rededor de una pequeña mesa en dinde Goku se acerco y coloco su taper de comida.
-Bienvenido, Son Goku-habló Sona con una sonrisa indescifrable al ver que el chico si vino.
-¿Cuantas veces debo decirte que solo me digas Goku? ¿Acaso no lo recuerdas Souma?-preguntó el pequeño Goku levantando una ceja.
Sona en cambio se puso nerviosa teniendo un pequeño tik en su hojo con unas gotas de sudor en su rostro, ¿Un chico con apariencia de niño lo estaba corrigiendo? ¿De verdad?.
-¿E....eh? S...si, bienvenido Goku-Sona se corrigió para ver como Goku solo esbozaba una sonrisa-Ahora, iniciemos nuestra reunión-habló algo más seria Sona cruzando sus dedos sobre su escritorio.
--Fin del capítulo--
Bueno, fin del capitulo que fue algo mas corto comprado con el resto, no quería alargar mucho esta parte ya que en el siguiente capítulo se vendra lo bueno o al menos eso quiero creer y se cerrará el arco de los caídos :').
No saben como me estoy rompiendo la cabeza junto a otro amigo mío, Joto-san Destroit10K para elegir las mejores rutas y decisiones para la historia, quiero que esté hecho lo mejor posible para que ustedes lo disfruten ya que eso es lo importante.
Lamentablemente no llegamos a los 200 votos en el anterior capítulos y es posiblemente porque no los pedí, y por eso para el siguiente capítulo pido 205 votos. A ver si podemos conseguirlo. Y ya saben, si tienen alguna duda o critica comenten, que yo respondo alegre :').
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