¿Sabes lo que es la timidez?

Es la emoción que afecta cómo nos sentimos y cómo nos comportamos cuando estamos con otras personas.

Nos hace sentir incómodos, cohibidos, asustados, nervioso e inseguro de nosotros mismos frente a otras personas.

Además, la timidez es un obstáculo que nos impide alcanzar objetivos, ya que las consecuencias se relacionan en todos los ámbitos de la vida, ya sea laboral, sentimental, social y familiar...

¿Sabes con qué se confunde la timidez?

Con la ansiedad social...

Sentimos ansiedad o temor en situaciones en los que otros pueden estar viéndonos, ya sea para analizarnos o juzgandonos, como hablar en público, conocer gente nueva, salir a una cita, ir a una entrevista de trabajo...etcétera.

¿Tú...cómo te sientes ante estás situaciones?

Las clases habían terminado, los alumnos veían al cielo mientras lloraban de forma cómica al escuchar el ruido que a todos les llegó como un mensaje de una paloma mensajera.

*Riinnng* Riinnng*

¡Gracias! ¡Gracias al dios que esté en el cielo por haber desafiado todas las leyes del tiempo para que sonará tan bello sonido!

Cada uno empezaba a retirarse mientras tomaba su bolso/mochila y empezaban a salir como si fuera una manada de animales.

Empujones, trotes, bajar rápido por las escaleras...

¡Esos mocosos se harán daño! ¡Carajo! ¿¡Nadie les dice nada!?

Dentro de todo esto había un bullicio debido a...

¡Issei!

¿Auch...?

Dos puñetazos impactaron por la espalda del chico antes de caer fríamente al suelo, todos se quedaron en silencio debido al shock que había empezado a invadir cada rostro mientras veían al chico con preocupación.

-¡Oye! ¿¡Qué les pasa a ustedes par de idiotas!?-. Tanto chicos como chicas empezaron a gritarle a ambos chicos que se encogieron en sus lugares, al parecer estaban asustados pero unas lágrimas aún más cómicas se bajaban por sus labios, rápidamente se acercaron al chico inerte en el suelo mientras lo levantaban ambos del cuello de su camisa.

-¡Dinos, bastardo! ¿¡Cómo es posible que...que de todas las mujeres sea la capitana de tenis!? ¿¡Por qué!? ¡Maldito traidor!-. Grito uno de ellos mientras el otro asentía a todo lo que su amigo decía, a sus espaldas se acercaba un chico al parecer un año mayor a los tres.

-¡Hey, hey! ¡Eso no fue correcto!-. Había llegado furioso mientras veía a ambos chicos que seguían gritándole al que tenían agarrado de la camisa.- Tal vez lo lastimaron...si Izumi los viera ya estarían fritos-. Susurro el chico para sí mismo, pero esto fue escuchado por ambos chicos que soltaron a su víctima dejándola caer nuevamente al suelo, sus pantalones se querían mojar debido al imaginar a una de las bellezas de la academia con un aura fría mientras los miraba.- Issei, ¿Estás bien?-. Preguntó aquel chico al identificado como Issei, el cual había aceptado una mano que le había ofrecido su hermano mayor mientras empezaba a levantarse con sumo cuidado.

-Gracias...no hacía falta eso-. Sin embargo, agradeció la ayuda de Zac.- Ustedes...¿Solo por Kiyome Abe-sempai están de ese modo?-. Esto causo el furor de ambos chicos que se levantaron del suelo, la imagen de Izumi empezaba a desaparecer de ambos...

-¿¡Solo por eso dices!? ¡Cabron! ¡Tienes a una de las más bellas y solo reaccionas de esa manera!-. Estaba confundido, no entendía como se habían dado cuenta que era él quien practicaba con Kiyome.

-Fiuuu...-. Un silbido empezó a escucharse a su lado, mirando mejor pudo ver a su hermano mayor sonriendo mientras terminaba de silbar.- Lo tenías muy guardado ese secreto, Issei. Aún así, estoy muy sorprendido que sea Kiyome...es sin duda una belleza con grandes pechos, ¿No? ¡Envidio un poco tu suerte! Pero...¡Llegará algún día el momento donde yo pueda disfrutar de unos pechos más grandes que los de Kiyome!-. Una sonrisa pervertida apareció en su rostro, pero aún así felicito a su ototo por su conquista, no mentiría...se encontraba orgulloso de que esa chica pueda ayudarlo en este camino de ser el rey del harem, poco a poco en su mente un vago recuerdo llegó a su mente dónde intentaban que Issei se acoplará mejor a la familia, él solo tuvo que empezar a avanzar mientras intentaba de alguna manera acoplarse a la familia.-¡Definitivamente ambos seremos los reyes del harem, Issei!

-¡Claro que no! ¡Issei-san no es igual que ustedes tres, trío de pervertidos!-. Varias mujeres empezaron a gritarles a los tres pervertidos, los hombres sonreían nerviosamente pero con mucho respeto al menor por las interacciones con la capitana del tenis, por respeto intentarían dejar de mirar de esa manera a la hermosa castaña...aunque ahora reforzarían más la mirada en las bellezas restantes, una de las primeras bellezas había caído bajo los encantos de Issei, deberían cuidar a las demás...

-[¡Jajajaja! ¡Espera, espera! ¿Es verdad todo lo que dicen? De todas las personas que no son pervertidos...¿¡Justo tú, compañero!? ¡Jajajaja!]-. Ddraig sin embargo reía locamente frente a la declaración de las chicas, no sabían lo pervertido que era Issei realmente y tampoco querrían imaginarlo, él era la bestia pervertida de clóset...

Issei se avergonzó, un pequeño sonrojo había aparecido en su rostro frente a todos, no se había sonrojado por las palabras de su hermano...esto fue causado por la burla del dragón al recordarle todos sus pensamientos lujuriosos y sobre todo su actitud.

-¡Ustedes no tienen poder sobre mi! ¡Tienen unos pechos fascinantes pero yo voy a guiar a mi hermano menor por el camino correcto de todo hombre...él...él...el será el rey del harem al igual que yo en esta academia!-. Grito Zac al aire mientras elevaba su puño, todos se quedaron en silencio mientras las mujeres empezaban a hacer una cara de asco. Sin embargo, algunos hombres se quedaron en silencio mientras en sus pensamientos...un pequeño apoyo a Zac nacía entre los varones, tal vez era demasiado sincero con sus deseos y palabras, pero eso hizo que se ganará muy poco respeto por los chicos al verse tan determinado.

Issei aún así fue quien más lo apoyo en silencio, por alguna extraña razón era como verse a él mismo, pero sin ocultar su perversión...era algo tan...¿Estupendo? No sabía a ciencias ciertas que sentimiento era el que estaba experimentando ahora mismo, pero decidió quedarse callado mientras asentía muy levemente a las palabras de Zac Hyoudou.

La escena estaba siendo un bullicio por todos lados, pero dentro de un salón en específico pasaban otras cosas más interesantes.

-¿Entonces...?-. Pregunto una joven mientras veía seriamente a una castaña, estaba de brazos cruzados mientras tenía un leve ceño fruncido.

No estaba enojada, solamente la curiosidad la estaba matando mientras veía a la chica sin inmutarse por su presencia, solamente veía por la ventana a una persona en específico, no hacía falta ser un genio para darse cuenta de quién se trataba.-¿P-Puedes responder? Por favor...

Kiyome volvió a la realidad, estaba viendo a Issei mientras su hermano mayor hacía una escena un tengo extraña. Este suceso provocó la risa de Kiyome, aún así había puesto atención a la chica frente a ella.

Izumi Hyoudou. Una chica extremadamente bella con un cuerpo voluptuoso, unas piernas demasiado cómodas para apoyar tu cabeza ahí mismo, unos senos grandes que se notaban pese al conjunto femenino de la academia, su pelo estaba atado en una cola de caballo y sus ojos brillaban de forma fulminante.

Pese a estar en una posición demasiado complicada para ella, Kiyome no se sentía para nada intimidada y devolvió la mirada con la misma intención que la castaña, algo que la sorprendió un poco a la otra chica que simplemente se quedó en silencio.

-¿Entonces...qué deseas, Izumi-san?-. Había devuelto la pregunta bastante convencida de sí misma, quería saber qué quería está chica con ella, pero se daba una vaga idea de que era.

-¿C-cómo has hecho para que Issei-kun te acepte tan rápido?-. ¿Para que Issei la acepte? ¿A qué se refería está chica? No entendía lo que quería decir pero ella siguió hablando.- ¿Desde cuándo son tan...cercanos?-. Un poco de celos se escuchaban de su voz, pero no eran celos de amor, eran celos por la cercanía de ambos.

Izumi no entendía qué pasaba en su pecho, se sentía celosa y ella sabía muy bien que era debido a que alguien había sido aceptada por su hermano menor tan rápido. Ella lo ha intentado desde que eran niños pero costaba mucho que Issei estuviera en el vínculo familiar demasiado tiempo, le costaba a día de hoy llevar algunas charlas con él sin que se vuelvan incómodas, pero...está chica lo había conseguido tan f-fácil y eso le llenaba de celos por tener esas interacciones que ella siempre quiso de esa manera.

-Llevo unas semanas hablando de forma casual con Issei-kun, es mi Kohai después de todo...en cuanto a conocerlo, fue realmente una coincidencia-. Mintió un poco de forma descarada, ella busco más de cerca a Issei para que pudieran entablar conversaciones usuales, pero era algo que se llevaría ella misma a la tumba.- Él se mostró muy interesado en mi entrenamiento de tenis, así que lo invité a formar parte de mis prácticas para pulir sus habilidades en este deporte...tiene potencial para ser demasiado bueno-. Empezó a reírse un poco cuando los recuerdos de todos los partidos de tenis donde ella había barrido el suelo con Issei empezaron a circular en su mente, ella como una buena senpai le enseñaba a jugar.

-¿Issei-kun interesado en el tenis? ¿Eh?-. Los pensamientos de Izumi habían hecho un pequeño cortocircuito, en su mente empezaba a ilustrarse una imagen de Issei jugando este deporte mientras perdía de forma humillante frente a la capitana del tenis.- eso es...no sé cómo explicarlo...extraño-. Mostró una cara un poco incómoda, quería saber más acerca de su hermano menor pero se rehusaba a hablar demasiado, se mostraba muy reservado en cuanto a su privacidad y ella lo entendía perfectamente.

-[¡Le encanta mirarme los pechos mientras practicamos!]-. Pensó de forma emocionada la capitana de tenis, sus dotes de mujer se hacían relucir frente al chico de primer año.- Tal vez sea extraño, puedo hablar con él demasiado tranquilo e incluso se deja acariciar la mejilla...

-Eso fue...demasiado innecesario de decir, no me interesa mucho lo que hacen en las prácticas más que jugar, ¿Cierto?-. Izumi se había sonrojado, no quería imaginarse una situación así entre la castaña y su hermano, era demasiado incómodo para ella misma.

-¡Oh! No lo veo innecesario...Issei-kun habla mucho de ustedes-. Una pequeña mentira se había formado en Kiyome al ver el estado pesimista de la chica, notaba que quería acercarse a Issei más por lo que le daría una pequeña ayuda.- habla muy bien de ti, te preocupas por él hasta el punto de querer ayudarlo en sus exámenes, te esfuerzas por estar cerca de él cada día e incluso sus charlas cuando vienen a la academia...él habla mucho de ti al igual que Zac. Les guarda mucho aprecio aunque no lo demuestre de esa manera-. Aún así, Kiyome no mentía del todo en eso, ella misma le había insistido a Issei que le diera información de sus hermanos mayores al estar bastante intranquila e incómoda sabiendo que esto era tan diferente a como ella lo recordaba, por lo que se llevó una gran sorpresa cuando Issei hablo tan bien de ambos.

Pudo ver cómo las mejillas de Izumi se volvían de un rojo más claro, esto la hizo entrecerrar los ojos mientras ella apretaba un poco los bordes de su falda con fuerza, se notaba que la había tomado de forma desprevenida está información que ella brindaba.

-¿E...es cierto todo eso? ¿Él ha dicho todo eso?-. Esperanzada. Ese es el sentimiento que llegó a los oídos de Kiyome mientras veía a la chica con una sonrisa muy grande, se notaba la felicidad desde lejos al igual que ese pequeño pigmento rojo en sus mejillas que le daban un toque más lindo.

-Por cierto...¡Cantas muy bien!-. Esto hizo que la sonrisa de Izumi se mostrará un poco sorprendida, al parecer Issei aún conservaba el vídeo donde ella cantaba en el bar de Tobio.- ¡Simplemente eres brillante cantando! ¡Tienes una voz muy linda!-. Los halagos de Kiyome eran recibidos por agradecimientos de la chica que aún no salía de la sorpresa, no esperaba que Issei aún conservará los vídeos esos pero un sentimiento de felicidad invadió en su pecho mientras sentía un pequeño latido fuerte.

-G-gracias, Kiyome-san-. Agradeció antes de ver qué la chica volvía a calmarse, ella suspiró un poco pero la sonrisa en su rostro no se borraba.- Issei-kun siempre se mostró un poco más alejado de nosotros cuando éramos niños, por eso me sorprende que te acepte tan rápido o practicarán tenis juntos, no negaré que me hizo feliz todo lo que me has dicho, pero...me gustaría que él mismo me lo dijera algún día porque yo...-. Una determinación se había hecho en la castaña, la capitana de tenis veía esa mirada y compartía un sentimiento similar, ambas buscarían la aceptación completa del chico.

Mientras la capitana del tenis buscaría la aceptación del chico sobre él mismo para que vea sus sentimientos. Por el otro lado estaba la hermana mayor que buscaba la aceptación de su hermano menor para que pasen más tiempo juntos, mucho más...

En ese momento la amistad de ambas castañas había nacido. Una amistad que en el futuro tendrá varios revuelos, algunas complicaciones, malos tiempos, algunos celos y felicidad, pero...seguirán siendo grandes compañeras después de todo.

Una apoyará a la otra...y viceversa.

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Na que decir. Nos vemos y espero se estén portando bien chavales.🐐

Ah...creo que me recomendaron muy buenas amigas de la infancia, pero todo se verá a futuro a ver qué decisión tomo al final 🍸

Ya tengo otros caps listos en el horno (que expresión de mierda XD)

Por cierto, el interés de Izumi va en aumento, pero no llega al enamoramiento aún.

Interés ≠ amor

No son lo mismo.

Kiyome será muy influyente para que Izumi pueda aceptar que está enamorada de Issei y decida declararse a él, pero será pufff...más adelante, mucho más adelante.

Aún no llegamos ni al canon 🗿