014. PODER DESCOMUNAL
Izuku y Asta estaban en el suelo hechos polvo.
Yami cubrió su katana de oscuridad. En realidad su figura estaba envuelta en oscuridad. ―Otra vez.
Había pasado una semana entera desde que comenzaron el entrenamiento. Y el hecho era que Izuku y Asta ya le habían encontrado el truco a lo del ki. El inmenso problema era que no podrían bloquear o esquivar el ataque de un capitán. Jamás.
Pero claramente Yami no estaba contento con esto. ¡Estoy mocosos no habían superado sus limites lo suficiente!
Sin embargo, Yami tuvo que volver su katana a su funda, ya que estorbos estaban entrando en el lugar nuevamente. ―¡Es hora del descanso! ―comento una Charmy que entraba a paso lento, acompañada de corderos de algodón quienes cargaban una cantidad absurda de comida.
Izuku estaba al borde del llanto. ―¡Charmy! ¡Nos salvaste la vida!
Esta metió algo de carne de anda a saber que monstruo en su boca. ―No importa. Come come.
Vanessa y Luck tambien estaban acercándose. ―¿No cree que esta siendo demasiado rudo, capitán? ―murmuró algo borracha la chica.
―El mocoso quiere cargar contra un país solo. Si no puede conmigo, morirá ―encendió un cigarrillo, ahora mostrando un rostro neutro―. Aunque alguien sin magia morirá en la siguiente misión.
Asta comía como un loco. ―¡¿Entonces por qué nos entrena?!
Yami se acercó y le tomó de la cabeza, despegándolo del suelo. ―Por que hace tiempo que tengo ganas de matarte.
―¡¡Ouch ouch ouch!! ¡¡Me aplastaras la cabeza!!
―Tu dominaste el ki demasiado rápido. Mas vale que no te me acerques, bicho raro.
―¡¿Entonces por que me toma de la cabeza?!
Luck se sentó en el suelo. ―Escuché que un calabozo nuevo fue descubierto. ¿Podemos ir, capitán?
―Oh. Es cierto ―Yami soltó sin mas a Asta―. De hecho, nosotros estamos a cargo. Apareció en una zona que esta cerca del Reino del Diamante, así que para aseguraros de que no tomen algun objeto del calabozo tenemos que realizar esta misión de la manera mas rapida y adecuada.
Izuku y Asta compartieron el pensamiento. ¿Entonces por qué Yami no se lo dijo antes...?
Sin embargo...
Izuku miró al suelo, parando de comer y captando la atención de Charmy, quien repetía "Come, esta rico" mientras presionaba una pierna de pollo en su mejilla.
El Reino Diamante estaría allí...
Y sin tener la menor idea de que es un calabozo, Asta alzó su mano. ―¡Déjeme ir, por favor!
Izuku asintió con fuerza. ―¡Yo tambien quiero ir!
―Que bueno, por que les iba a enviar de cualquier manera. Ya que no pueden usar magia, no es como si lo fueran a conseguir de todos modos.
Asta nuevamente le observó con sorpresa. «¡¿Entonces por que nos enseñó el ki?!»
Yami exhaló el humo. ―Escuchen. Todos ustedes, idiotas, fueron asignados por mi a esta misión.
Aquello sin dudas les dejó sorprendidos. ¿Para una simple misión de reconocimiento y exploración? ¿Todo un escuadrón de caballería?
Vanessa dudó. ―Pero capitán... ¿No será demasiado?
Negó con simplicidad. ―Como antes mencioné, el calabozo esta cerca del territorio enemigo ―y tomó a Izuku de la cabeza como si fuera un bicho― y a este mocoso lo buscan por alguna razon que aun averiguamos. Parece ser un activo importante para el Reino del Diamante, a si que procuren que no lo capturen.
Izuku, aun colgado, mantenía los brazos caídos. ―¿Soy un estorbo...?
―No hay problema ―Luck chocó sus puños, expulsando algunas chispas―. Puedo yo solo.
―Tu los abandonaras apenas aparezca alguien fuerte para luchar contra él ―Yami soltó al peliverde y comenzó a marcharse―. Contacten con el resto de idiotas. El Rey Mago permitió esto, a si que no tienen otra cosa que hacer.
―Que interesante... ―Vanessa observó a Izuku―. Nunca hicimos una misión todos juntos. ¿Tan importante eres? ¿Por que no dijiste nada?
Izuku no supo que responder. ―N-Ni siquiera yo lo se. Casi me ejecutan. No entiendo por que incluso movilizaron tantos asesinos por mí.
Claro que lo sabia. Mariella había dicho algo, despues de todo, pero ese tampoco era el punto.
Los objetivos finales del reino diamante seguían siendo un misterio.
Vanessa murmuró por lo bajo, comenzando a alejarse. Parece ser que tenia que vestirse y contactar con todos los demás.
―... ―Izuku observó sus manos. Así que una misión así de importante...
Él... ya era hora de enfrentar a esos tipos. Ya tenia el poder. Ahora solo debía de conseguir ganar si es que se encontraba con alguien, y hacer las preguntas que noche tras noche carcomían su cabeza.
Si hubiese sabido que esto pasaría, no hubiera usado el modo black hoy. Solo le quedaba un uso antes de que su cuerpo ya no lo soporte mas...
Tendría que arreglarse con su poco entrenado ki hasta que se vea en la necesidad de usarlo.
[...]
Zora, Noelle, Asta, Vanessa, Magna, Charmy, Gordon, Luck, Finral, Grey, Gauche, Izuku...
¡¿Esto no era demasiado?!
Mientras los 12 caminaban apretados, adentrándose a la mazmorra... ¡Esto era como lo que sucedía en la sede, pero en un lugar mucho mas apretado!
Claro, excepto por las peleas de Luck y Magna, ya que el rubio iba delante de todos, dando uso a su habilidad sensorial para guiarles.
Mientras Gordon susurraba sobre lo feliz que estaba al hacer una misión juntos a todos sus grandes amigos, los demás sin dudas estaban algo bastante perdidos.
―Me pregunto si encontraremos cosas ricas aquí...
―Oye, puedes tomarme de la mano si te da miedo.
―No intentes tocarme.
―El capitán prometió que podría ver a mi hermanita luego de esto. Agradezcan que no los halla matado ya.
Grey soltó humo de su boca, y Vanessa le observó. ―¿Podrías hacerte algo mas pequeño? Ocupas mucho espacio.
Rápidamente Grey viajó entre las paginas de su grimorio y se transformó en una versión de Vanessa. ―¡Bien!
―Oye, ¿Por que estoy junto a ese bastardo? ―comentó Magna mientras observaba de reojo a Zora―. Ni siquiera quiso participar en el bautizo.
―¿Hm? ¿Me hablas, pequeño delincuente? ―y le arrojó una chinche arcoíris, la cual arrojó un olor que hizo a todos gritar y taparse la nariz, haciendo reír a aquel chico.
Sin embargo, Luck apoyó su mano en la pared y la derribó con suma facilidad.
El olor pudo dispersarse un poco mas, y todos los caballeros pudieron por fin alejarse del otro.
Todo el mundo menos Asta e Izuku estaban asombrados al ver el lugar, no por su apariencia, si no por el denso maná que lo rodeaba y sostenía.
Vanessa les observó. ―Tengan cuidado, puede que este lugar esté lleno de trampas mágicas.
―Trampas, ¿Huh? ―Zora pudo distinguirlas rápidamente―. Si. Parecen ser unas 22 solo en esta sala.
Magna razonablemente no pudo evitar verle con asombro. ―¡¿Cómo las encontraste tan rápido?!
―Terminemos esto rápido para poder ver a Marie ―y Gauche hizo aparecer una cantidad absurda de espejos por toda la habitación―. Magia de Espejo: Reflexión de Reflejo.
La luz que se reflejaba entre todos los espejos se volvió realmente densa, y cada una de las trampas fueron activadas a la vez.
Zora chasqueó la lengua ante esto. ―¡¿Eres idiota?! ―y apoyó su mano en el suelo. En realidad ya se esperaba algo de esto, pero... «¡No me dio el tiempo suficiente para hacer algo!»
Y cuando todas aquellas trampas combinadas se dirigieron a ellos, Noelle no perdió el tiempo y blandió su varita mágica. ―¡¡Magia de Agua: Nido del Dragón del Mar!!
Una gran cúpula de agua rodeó a todos, quienes ya se habían preparado para salvarse de cualquier daño por su propia cuenta. Aquella cúpula soportó todos los ataques sin mayor problema, haciendo que todos menos sus compañeros en el incidente de la aldea se sorprendan al ver que mejoró su control mágico.
Y Finral solo sonrió con algo de ironía. ―Pese a ser tantos... solo ella tiene hechizos defensivos.
Vanessa la abrazó por la espalda. ―¡Bien hecho, Noelle!
Noelle estaba tan entusiasmada y avergonzada que no pudo decir nada.
Y con ello, todos observaron el lugar alrededor. Estaba a punto de desmoronarse. Era un milagro que aun no lo hubiera hecho.
Todos blandieron sus grimorios instintivamente, sabiendo que esto de ir juntos no seria posible.
Vanessa y Finral se pusieron en la cabeza. ―Muy bien. Nos dividiremos en grupos para abarcar mas territorio ―sugirió Finral.
Y Vanessa le acompañó. ―Nosotros nos llevaremos a Izuku y Asta.
Magna observó con cierto interés a Zora. ―Yo iré con él.
―A mi no me importa ―declaró con cansancio Zora―. Mas te vale no ser una molestia, mocoso.
―¡¿Yo, un mocoso?!
Charmy sonrió. ―Yo iré con Grey.
Gauche les dio la espalda. ―Iré solo.
Noelle solo pudo parpadear un par de veces al notar que solo quedaba ella, Gordon y Luck. ¡Los raros!
Sin embargo, Luck recibió un par de chispazos, y para la sorpresa de todos él atravesó el hechizo de Noelle ya con su magia de refuerzo aplicado. «¡Yo sabia que habría otros aquí! Y los mas fuertes están...»
―¡¿Ah?! ¡¿Donde vas?!
Este aun en el aire les observó. ―¡Hay una decena de tipos fuertes aquí! ―y sin mas dio tres saltos, desapareciendo de la sala al irse por uno de los pasillos.
Aquello dejó a Finral algo nervioso. ―Acaba de decir...
―¿Que hay una docena de tipos fuertes?
Vanessa suspiró. ―Deben de ser los del Reino Diamante. Tenemos que detenerlos antes de que roben muchos tesoros ―y observó a Izuku y Asta, guiñándoles un ojo―. ¿Nos vamos?
Charmy levantó su brazo en grito de guerra. ―¡No dejare que esos tipos se lleven las cosas deliciosas!
Gauche ya se había marchado, como los demás, y...
Noelle aun estaba fuera de lugar. ―Todos se marcharon tan rápido que...
Sintió la presencia algo turbia de Gordon al lado suya. Este mantenía su mirada fija en ella, susurrando inaudiblemente que no se preocupe, que la protegería como un buen superior y que estaba encantado de estar en su equipo.
Claro estaba que esto no evitaría que Noelle se incomodara. ¿Por que quedó junto a este rarito...?
―Uhm... ―claramente por todo lo que estaba pasando Izuku estaba realmente perdido―. ¿Que debemos de hacer? ¿Vamos a luchar contra los villanos...?
Vanessa negó, observándole de reojo mientras aun todos avanzaban. ―Luck es el único que puede saber exactamente donde esta su enemigo. Deberíamos apegarnos al plan mientras estamos alertas.
Finral asintió con seguridad, aunque por dentro un pequeño instinto cobarde le estaba ganando. ―Nuestra misión es llegar a la zona mas profunda de la mazmorra donde posiblemente este la sala del tesoro.
Asta les observó. ―¿Por que es tan importante? ¿Hay mucho dinero?
―De hecho, probablemente hallan artefactos mágicos muy poderosos.
―¡¡Eso es genial!!
Finral observó delante. «¿Por que otra razon los del Reino del Diamante estarían aquí? Son unos barbaros que usan todo tipo de herramientas mágicas para implantarlas en sus caballeros. Es por eso que debieron de traer a una docena de soldados.»
«¡Ahora... hacia la izquierda!»
Por otro lado, Luck estaba viajando entre los pasillos como un rayo.
Claramente detectó a muchas personas, pero se dirigía a la mas fuerte de todas. ¡Esto seria emocionante!
¡Además poseía un maná oscuro! ¡Estaba genuinamente intrigado!
Sin embargo, mientras avanzaba, podía distinguir con mas certeza el nivel del poder mágico de todos. Estaban separados, cada cual buscando por su cuenta, tal vez.
Todos tenían el nivel de un caballero mágico avanzado, ¡Esto seria realmente emocionante! ¡Todos eran enemigos realmente fuertes! ¡Y parece que no trajeron secuaces!
Pero mas importante, ¡¡El mas poderoso!! ¡¡El capitán...!!
Se detuvo de golpe, completamente paralizado, pero aun observando el pasillo oscurecido delante suya, sonriendo.
―Cuanto... poder mágico... ―su cuerpo entró en una batalla. Una que nunca había experimentado.
Quería avanzar y luchar contra este tipo absurdamente fuerte, pero sus instintos de supervivencia como humano le paralizaron el cuerpo, como si supiera que si seguía avanzando tal vez nunca saldría de esta mazmorra.
Sin embargo, Luck oscureció su sonrisa, pareciendo casi un demonio entre toda esta oscuridad, venciéndose a si mismo y comenzando a avanzar nuevamente.
¡Era un suicidio, pero no alcanzaba un poder que no hiciera que quiera luchar contra él!
Y tras poco tiempo...
Luck atravesó la oscuridad, encontrándose cara a cara contra su enemigo. «¡Magia de Rayo: Esfera de Colapso del Trueno!»
Aquel enemigo recibió de lleno el golpe, siendo alejado enormemente y derrapando en el suelo, pero aun de pie.
En esta zona mas iluminada, Luck sonreía como un loco. «¡Te encontré!»
―Vaya... Toros Negros... ¿El Reino del Trébol llega y manda a su peor escuadrón?
Luck, completamente inundado por sus instintos de batalla, no estaba para dialogar. ―¡¡Luchemos!!
Con algo de sangre bajando de su frente, aquel enemigo sonrió. ―Ey. Considera que me tomaste por sorpresa. No esperes que podrás volverme a tocar ―y viajando entre las paginas de su grimorio... su sonrisa se volvió oscura. Literalmente.
Luck, aun preparado para la batalla, solo pudo ver que aquel tipo que tenía en frente dejaba de ser humano. Sus cuernos crecieron, y sus alas se desplegaron.
Y como si ello no fuera suficiente... ―Poder Demoniaco: 55%.
«¿Esto solo es... el 55%...? ―bueno, pero él no retrocedería. Jamás―. Muy bien. Si me da un golpe posiblemente moriré. Que emocionante...»
―Acabemos esto rápido ―y aquel enemigo deformó sus dedos―. Quiero obtener las joyas faltantes para los retoques de mi proyecto. No soy un guerrero, despues de todo.
«Aunque digas eso... ―Luck intensificó sus rayos―. ¡Tu poder mágico es abismal!»
―Magia de Reconstrucción ―y el suelo repentinamente explotó en decenas de escombros, formándose púas en su lugar.
Luck saltó antes de esto, apoyándose en la pared, y pese a ser alguien con una velocidad impresionante...
―Buenos reflejos... Digno de un portador de Magia de Rayo ―sonrió macabramente, y las protuberancias en sus dedos se apoyaron en la nada misma, en el aire―. ¿Serás mas rápido que la magia que te dio origen?
Luck compartió su sonrisa. «Ya veo...»
―¿Quienes creen que serán esos "tipos fuertes"? ―preguntó Asta.
―Probablemente solo sean soldados normales ―supuso Vannesa―. El Reino Diamante no varia mucho del Reino Trébol. Tiene incluso a sus capitanes de orden. Es normal que envíen a sus soldados a misiones como estas, mientras sus "capitanes" resguardan el país.
Finral pareció dudar. ―Pero Luck pareció mas difícil de controlarse que las otras veces. Al menos uno o dos de esos capitanes deben de haber venido.
Izuku les observó. Hablan demasiado tranquilos... ―¿Él estará bien...?
Vanessa bufó levemente. ―Luck tiene una actitud difícil, pero es muy fuerte. Cualquier orden de caballería hubiera querido reclutarlo solo hablando de su fuerza y detección de maná.
Aquello sorprendió al peliverde. ―¡¿Incluso el Amanecer Dorado?!
Asintió sin ninguna duda. ―Es perfectamente capaz de vencer a un noble. Sabiendo eso, no me preocupa en lo mas mínimo.
Finral sonrió algo forzado. ―Solo espero que no se deje dar tantos golpes.
Luck cayó de rodillas, jadeando con fuerza. Tras eso, dio un gran salto en medio de su respiro, observando desde la lejanía a su enemigo. «¡Magia de Rayo-!»
―Magia de Reconstrucción: Edificación.
«¡Ahí viene!»
―¡¿Estas seguro de no querer rendirte?! ¡Tu información vale mucho para mi, caballero!
Luck se apoyó en el techo del lugar, impulsándose antes de que de esta emerjan grandes púas de roca. A la vez, esquivó en el aire decenas de lanzas y flechas de viento, para luego continuar con su hechizo, apuntando a su enemigo. «¡Magia de Rayo: Esfera de Colapso del Trueno!»
Morris tocó el suelo, protegiéndose con una cúpula de roca. ―Parece que solo tienes un hechizo a larga distancia. Es predecible.
―¡Vamos! ¡Deja de jugar con el entorno! ¡Pelea!
―Lo siento ―Morris deshizo la cúpula, blandiendo sus dedos― pero dije que no volverías a tocarme.
Luck lo sabia. Si se acercaba a poca velocidad seria asesinado al instante. Si se dejaba de mover seria atravesado al instante. Si dejaba de atacar recibiría un ataque definitivo. Y sostener esto a una batalla de desgaste tampoco era una opcion, ya que nunca había luchado contra alguien con tanto maná como este hombre.
Había una verdad. La verdad mas cruda que alguna vez se encontró en su vida. ¡Que esta batalla ya estaba decidida!
Pero aun así...
Luck no se sentía mareado pese a haber perdido tanta sangre. Aquellas palabras de ella...
Gana...
Se el vencedor...
Sigue ganando...
«No me había divertido tanto... ―Luck nuevamente preparó sus esferas― ¡¡En mucho tiempo!!»
Morris bufó. «Podre mantenerlo con vida hasta poder hurgar en su mente con tranquilidad... ―y las protuberancias nuevamente se apoyaron en la nada―, así que terminemos esto ahora.»
Luck usó su magia reforzante hasta sus limites, haciendo tambien una maniobra en el aire y apoyándose en la pared, activando una trampa que poco le importó.
―¡¡Magia de Rayo...!!
―Magia de Reconstrucción...
Tras un segundo, la trampa explotó y los ataques de ambos magos se cruzaron a increíble velocidad, y tras otro segundo impactaron en el otro, chocando contra las paredes.
El lugar tembló con inmensa fuerza, haciendo caer rocas del techo. Todos y cada uno de los magos en la mazmorra finalmente sintieron la batalla, justo cuando llegó a su fin.
Completamente ensangrentado, Luck habia atravezado su pierna derecha en Morris. ―Magia de Rayo: Ogro de Rayo.
―Esple...ndido ―un poco de sangre salió de la boca de Morris―. Así que eres de esos selectos magos que es capaz de transformar su cuerpo en un elemento por un breve periodo de tiempo. Fantástico. Transformaste tu cuerpo en un rayo... ¡Y lograste atravesar mi ataque!
Luck se alejó casi en un destello, y comenzó a jadear con inmensa fuerza y dificultad.
Morris cayó de rodillas... pero sonrió. Sostuvo sus lentes con una mano, mientras que deformó la otra. ―¿Pero... a que costo?
Leves fragmentos amarillos se deshicieron en el aire, dejando a Luck una enorme herida abierta en lado izquierdo de su estomago. Tenia el tamaño de una lanza grande, y...
Luck cayó de rodillas al igual que su enemigo, y su magia reforzante desapareció. Mas que caer ante la herida...
El daño de esa explosión, pese a que sumó potencia a su ataque...
―Cirugía...
Luck pudo observar a aquel tipo regenerar el agujero que su pierna había dejado en el pecho de Morris, y su sonrisa permaneció intacta. Así que su magia permitía afectar su propio cuerpo...
¿Acaso estaba luchando contra... un inmortal?
Bueno. Tampoco es como si no se lo esperara completamente. Su cuerpo ya se lo había advertido...
Y con esfuerzo... pudo ponerse de pie.
Se vio rodeado de rayos, los cuales apenas pudieron materializarse en sus botas. ―¡Botas del Dios del Rayo!
Morris se vio genuinamente intrigado. Los niños de la edad de este chico en su reino no eran tan resistentes ni tan poderosos sin cirugías de mejora...
Estaba casi seguro que si Mars se enfrentaba a este chico en su 100%... le costaría vencerlo.
Había algo especial en este niño... y lo descubriría. Gracias al poder del demonio tenia algo mas de sensibilidad al maná.
¿Este chico escondía algo en... su alma?
―Poder Demoniaco: 60%.
Luck se vio casi abrumado. Pese a subir solo un 5% mas...
Morris expandió su sonrisa. ―Este es mi poder total. Todo por retener en una pieza a un espécimen como tu.
«Poder Demoniaco... No... Si no lo derroto... mamá se enojara conmigo... ―Luck se preparó. Enfrentaba cara a cara la muerte con aquella sonrisa en su rostro―. ¡¡Si no lo derroto volveré a estar solo!!»
Luck el delirante... Así era como le llamaban.
Y no había un apodo mas adecuado para alguien que pensaba salir victorioso de esta.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top