(Editado*)

Satella conto a Santiago que para huir del ejercito de serpientes habían huido a los pisos bajos, donde se dice que hay una zona segura en la cual las bestias no entraban, eso era en el piso 4, ella confundió la sala del jefe de piso con la zona segura y sin darse cuenta se separo de sus compañeros, pero ellos seguro estaban en un piso debajo.

"Gracias por curarme y prestarme una poción de mana" Santiago lo dijo sin realmente sentirse agradecido.

"Era necesario para que pudiéramos salir de inmediato a buscarlos ¿no?, pero lo siento no pude quitar las cicatrices de tus manos y espalda"

"No pasa nada, un pequeño recuerdo" Realmente Santiago no estaba molesto por ello, es como cuando los viejos guerreros miran sus cicatrices y cuentan sus grandes batallas.

Obviamente Santiago había convocado a sus golem pequeños los cuales había un máximo de 4. Todos equipados con armas y armaduras avanzaban 3 por delante y uno por detrás de Santiago y Satella, luego de unos minutos habían llegado al 4º piso.

"Lo haces parecer tan fácil, ahaha" se reía sin con resignación.

"....Bueno es bastante fácil" Satella quedo en silencio, estaba en frente de alguien con suficiente poder para derrotar a una bestia que ni siquiera el equipo del héroe pudo, era normal que el cuarto piso fuese nada para él.

"Ya veo, hump" Haciendo un puchero y girando su cabeza hacia el lado contrario que Santiago.

Luego de dar unas vueltas en el 4º piso encontraron otra habitación iluminada a lo que Santiago volvió a pensar de manera instintiva "es una trampa" pero viendo como Satella entro sin temor alguno la siguió, por detrás... Y a una distancia de 4 metros, solo por las dudas.

"¡¡Satella!!" Una voz masculina sonó dentro de la habitación, de pronto un grupo de unas 4 personas salieron como balas a pegarse a la chica.

Eran dos elfos y dos elfas, no tardaron en presentarse y dejar confundido a Santiago.

Todos eran de tez blanca como la nieve y pelo rubio brillante, Uno de los chicos se llamaba Silver era el guerrero del grupo, luego estaba Foret era el defensor, recibe el daño para evitar que otros lo hagan, después estaban las otras dos chicas que eran Sabel y Gina eran las magas de ataque y soporte.

Y todos tenían el apellidos Star al igual que Satella, al verlo confundido le explicaron que el apellido es la ciudad o pueblo donde nacieron, esa era una tradición elfica.

"¿Entonces este humano te salvo de un grupo de serpientes del 3º piso?, ¿solo?" Silver estaba mirando a Satella con incredulidad, por lo que Santiago chasqueo los dedos e hizo venir a los golem.

"¿Esos son golem?" La que pregunto fue Gina la maga de soporte

"Si, son mis pequeños compañeros, les caigo bien y por eso me siguen" Otra mentira, si dijese yo los creo sin casi ningún esfuerzo seguro se le pegarían para saber cómo.

"Wow" todos quedaron sorprendidos al oír a Santiago aunque por alguna razón Silver parecía molesto o fastidiado.

"Entonces ¿vamos?, no tengo comida para 2 días si los sumo a ustedes" con ese comentario todos se pusieron en medio de la formación golem.

Luego de unas 4 horas llegaron 2º segundo piso, ya era de noche, Santiago se había demorado apropósito para evitar ser visto, ya en el segundo piso les pidió a los chicos esperar y entro dentro del almacén dejando a los golem dentro y subiendo al 1º piso.

"Ahora ya podemos seguir" Todos vieron como había regresado sin los golem pero no dijeron nada, no era un problema de ellos.

Luego de salir de SnakeHell todos comenzaron a reír, cantar y bailar de alegría, hace poco estuvieron a punto de morir y ahora estaban a salvo.

Todos excepto Satella estaban juntos, ella se quedó junto a Santiago.

"Dudas despejadas, esta está enamorada de mi" Obviamente no lo dijo ni susurro, pero su mente solo tenía esas palabras.

"Tengo que ir al gremio, había una misión de rescate por ustedes, así que si es posible síganme, no queda lejos" Todos le siguieron sin rechistar, era obvio que debían ir después del todo los había salvado.

Ya dentro del gremio se quedaron patas arriba, un chico que había sido fuertemente alabado por el líder del gremio había vuelto con un grupo de elfos.

"¿Alguien sabe dónde está Kotsu?" Santiago pregunto a todos en la taberna sin ningún miedo.

"Esta en el segundo piso" La que respondió fue Mary la recepcionista, por primera vez Santiago pudo verla de frente sin un vidrio de por medio y dándole un poco de atención, una larga cabellera negra caía hasta su cintura y sus ojos eran azul marino, iba perfecto con el traje que llevaba puesto. "Si necesitas algo yo puedo ayudarte" Para Mary, Santiago quería reclamar una recompensa o preguntar alguna duda sobre la dungeon.

"No, tiene que ser Kotsu" La respuesta fue fría y directa, algunos de los aventureros se enojaron por la forma en la que se dirigió a una hermosura como Mary.

"Ya... veo" Con un tono triste Mary se retiró y sin ningún remordimiento o ganas de disculparse Santiago subió al segundo piso de gremio en busca de Kotsu.

Santiago fue a la sala en la que fue llevado por primera vez y fue correcto allí estaba, pero estaba acompañado de una elfa de más o menos la edad de Kotsu, por el aspecto.

"¿Eh?, ¿Santiago que haces aquí?" Kotsu estaba sorprendido de la repentina aparición de Santiago "Bueno, perfecto necesito que..." Antes de que pudiese terminar Santiago lo interrumpió.

"Estaban en el 4º piso y me encontré con un grupo de elfos a punto de morir, los traje aquí pero no sé qué hacer" Santiago hablo de manera tan informal y relajada que no parecía haber salido de una batalla a muerte en la que casi había perdido, encorvado por el cansancio y con una voz floja que le dio broche de oro con un bostezo.

Luego de decir esto el grupo de elfos entro y quedaron sorprendidos, la elfa que estaba con Kotsu era la líder de esos chicos.

Todos saltaron a abrazarla era una escena muy tierna, aunque Santiago esta inmutablemente quieto mirando a Kotsu.

"Buen trabajo Santiago pero ¿no podrías haberle dicho a Mary?" Kotsu estaba dudoso frente a las acciones de Santiago.

"Si, sobre eso, no me agrada en lo absoluto, no tengo pensado hablarle"

"¿Y eso porque?" Kotsu en cierta manera parecía sorprendido pero también molesto "Mary es una gran recepcionista".

"No lo es en lo absoluto, ¿Gritar a todo pulmón lo que logre?, ¿Con que sentido? Me hace enojar que anden hablando de mi" Directo y sincero

"Ga" Kotsu parecía haber recibido un puñetazo en el estómago al oírlo "Ya veo, le diré que no lo vuelva a hacer".