(Editado*)

En pocas palabras se encontraron con este chico dentro de SnakeHell y decidieron traerlo, hasta ese punto todo está bien, pero ¿podría saber cómo es que este chico termino allí dentro?"

Actualmente un grupo de unas 5 personas estaban en un hospital declarando lo que habían pasado y dando su conocimiento sobre un extraño chico que encontraron en la dungeon de SnakeHell.

"No tenemos idea del porque estaba allí, de hecho esta dungeon es la más reciente y nosotros éramos los encargados de hacer la primera revisión"

La que respondió era la chica de la katana mientras que todo el resto del grupo se quedaba detrás de ella, como gatitos asustado detrás de su madre.

"Ya veo, entonces preguntémosle, ya debería estar por despertar, van a necesitar esta información para hablar con el líder del gremio de aventureros, ¿no?"

Cuando la encargada del hospital termino la frase todos menos la madre de los gatitos quedaron pálidos.

"Tienes razón, vamos"

"Nosotros mejor nos quedamos Shina"

"Bien"

La encargada y Shina entraron a la habitación y lo primero que vieron fue al chico casi saltando de la ventana.

"Ah, mierda"

Por otro lado al escuchar todo lo que estaban diciendo Santiago intento huir lo más rápido posible, pero estando medio confuso y mareado, no tuvo tiempo para saltar.

En un instante la chica de la katana, Shina, alcanzo a Santiago, lo arrojó al suelo y apretó su rostro contra el suelocomo si fuese una policia atrapando a un delincuente y estuviese a punto de esposarlo.

"Quédate quieto"

"Va, va, ok" Santiago sin ningún ánimo le respondió

Aun así la chica se mantuvo sentada sobre él, no parecia estar ni una pisca de convencida de que no intentaria escapar de ellas, por lo que se le quedo mirando un poco de mala gana desde encima.

"¿Entonces, porque estabas dentro de la dungeon?" La encargada le dirigió una mirada sospechosa, como si estuviese tratando con un criminal.

"....." Santiago estaba contra la espada y la pared, arrinconado, ""¿Qué debería decirle?, no creo que sirva algo como, mira vengo de otro mundo así que no me molestes, tampoco puedo inventarme alguna excusa si ni siquiera sé cómo es el mundo, mierda, AH ya lo sé""

"No lo sé, pregúntale al tipo que me tiro ahí dentro"

Aunque el tono en el que santiago lo habia dicho era con un tono simplon, la encargada parecia convencida o mejor dicho, parecia tener la certeza de que Santiago decia la verdad.

"Ya veo, entonces alguien te arrojo a lo profundo de la dungeon" La encargada y Shina parecian estar un poco perturbadas, ¿Tirar a alguien a una dungeon? ¿Qué sentido tenia eso?

¿Puede que hubiese alguien tan cruel de tirar a alguien al 5to piso de una dungeon solo para matarlo? ¿No era mas facil y normal matarle con un cuchillo o magia?

"Con más razón debes de ir a hablar con el líder del gremio, lo sabes ¿no?" La encargada parecía estar despreciando a la chica, puede que hubiese alguna enemistad o algun tipo de situacion que provocaba muchos roces.

"Si, lo sé, por otro lado, ¿Cuándo se va a recuperar?"

La chica hablo con un tono seco y desinteresado por la mujer, pero ella solo se lo devolvio sin molestarse.

"Un día más es suficiente"

Una respuesta que no requirio de inspeccionar demasiado a Santiago, solo con un vistazo por encima ya parecia estar decidida.

""¿¿¡¡Casi muero de hambre y sed y me voy a recuperar en dos días!!??... ¿Quien se creen que soy?.... O eso me encantaria gritarle a esas dos tipas""

"Bien entonces yo y mi grupo lo vamos a vigilar, no me fio de que se escape"

"Tienes razón es lo mínimo que pueden hacer" Con esas palabras la encargada se retiró de la sala y la chica dirigió la mirada hacia Santiago, parecia poco satisfecha con la situacion pero aun asi trato un poco bien al chico sobre el cual se estaba sentando.

"Bien, entonces dime tu nombre"

"¿Eh?, ¿Por qué lo haría?, ni siquiera te conozco"

A la chica se le resaltaron las venas del enojo, pero aun así se contuvo de darle una paliza, puede ser porque Santiago estaba hospitalizado o puede que sea porque penso que solo era retardado.

"Nosotros fuimos quienes te salvamos, así que deberías mostrar respeto"

Esas palabras dañaron el orgullo de Santiago, hasta ahora nunca necesito ayuda de nadie o mejor dicho prefirió no recibir ayuda de nadie, estaba totalmente cerrado hacia las personas de su entorno, inclusive familiares, sus notas eran perfectas, su físico no tanto pero nunca tuvo ninguna necesidad de recurrir a la fuerza.

"Tch, lo único que hiciste fue arruinar mi perfecto plan"

"¿plan?, estabas a punto de morir" La chica parecía más sorprendida que molesta, levanto sus cejas y se quedo mirando firmemente hacia los ojos de santiago.

"Yo jamás moriría de una manera tan patética"

"¿Patética?, ¿piensas que ser derrotado es patético?"

"Correcto, sin importar como lo veas morir de hambre en un sitio lleno de serpientes debiluchas es patético"

"¿Acabas de decir débiles?, eran serpientes de nivel 8, estabas en el 4º piso de SnakeHell"

"Débiles, demasiado débiles, hpm" Girando su cabeza hacia el suelo y para dejar de hacer contacto visual, cerro los ojos.

"Shina, Shina Kan, ese es mi nombre" Shina ya parecía haberse dado cuenta de que era una persona muy compleja por lo que... Mostrando su talento para tratar con ese tipo de personas, Shina se introdujo dando su nombre.

"......." El silencio creo una atmosfera incomoda, y Shina aún estaba esperando recibir el nombre del chico frente a ella pero conforme avanzaba el tiempo le iban saltando aun mas venas del enojo.

"Santiago Real" Luego de oir el nombre, Shina lo solto y se sento sobre una de las camas, en cambio, Santiago corrio hacia el lado opuesto.

Luego de haber dado su nombre de mala gana, molesto abrió su ventana de estado y pum algo inesperado le sucedió.

Santiago Real

Ocupación: -------

Profesión: Aventurero (9)

HP: 800/800

MP: 500/2250

Inteligencia: 43

Sabiduría: 50

Fuerza: 6

Agilidad: 5

Resistencia: 10

Habilidades: -Afinidad elemental-(-)

-Creación de tierra-(16)---Creación de golem(1)

-Transmutación-(1)

-Mente cero-(-)

"ahahahhahahah" soltando una risa comento en voz baja "Una habilidad derivada"

"E-ese cristal, t-tu ¿Quién eres?"

Un símbolo de pregunta salto en la cabeza de Santiago, y miro a Shina con una expresión entre la molestia y curiosidad.

"ya te lo dije, soy Santiago Real"

Con un tono estupido y lleno de satira, Santiago parecia estar burlandose de alguien tarado pero, en vez de enojarse, shina lo estaba viendo con ojo abiertos como platos.

"Ese cristal es el cristal del héroe"

"Ehhhhh, me lo regalaron" Una excusa perfecta de no ser porque las personas de este mundo naces con esos cristales.

"..... ¿Piensas que voy a creer eso?"

Ahora la que parecia estar hablandole con satira era Shina que sentia que la persona que tenia en frente era un imbecil sin remedio.

"¿Tenía que intentarlo?"

La puerta se abrió de golpe y el resto del equipo entro.