Cuando Hoseok entró al cuarto de Yoongi sintió un tremendo olor pesado a molestia, su aroma estaba intensificado a mil y Hoseok se preguntó que habría pasado con el. Entró a la habitación sin tocar porque sabia que si intentaba entrar por las buenas, el principe lo mandaría ain ninguna educacion a la mierda. Entro tambien el carrito con el desayuno. Yoongi estaba bajo sabanas enfurruñado y soltando las mil maldiciones.

Hoseok abrio todas las cortinas cerradas para que el pelinegro despertara.

-Vamos Yoongi arriba, traje el desayuno, esta vez Jimin preparó mousse de fresa.

-¡No quiero nada que venga de él!

Hoseok se quedó sorprendido por ello. Asi que...algo ha sucedido con Jimin pero... ¿Qué? Todo parecia ir bien y Yoongi parecia más que feliz, asi que,¿que pudo haber cambiado tan de repente?

No supo que hacer, ¿seria lo más sensato buscar a Jimin y que explicara todo este alboroto? No, viendo el humor de Yoongi, esa no era la mejor opción.

-Vamos Yoongi, tienes que levantarte.

Lo sarandeo, dentro de exactamente media hora el principe tenia unas clases de espadas,pero si seguia asi llegaria tarde y Namjoon, el rey no tardaria en venir a regañarlo poe haber permitido tal cosa. Siguió moviendo el cuerpo pesado de Yoongi, pero, en algún momento, Yoongi lo tomo por su muñeca y lo hizo acercarse a el. ¿Que mierda? Yoongi estaba como loco abrazandolo con fuerza.

Oh... podria ser...

-Mío, mío, mío, omega mío-murmuro Yoongi restregando toda su nariz en su cuello.

Si, efectivamente, celo. Pero penso que llamaria a Jimin, sin embargo lo estaba repudiando, quizas efectos colaterales de algo que sucefio el dia anterior que aun no sabia que habra sido.

Hoseok trató de safarse pero el agarre era muy fuerte, Yoongi cada vez lo acercaba a el y restregaba pegando todo el olor a tieera mojada en si. Era imposiblez el sólo siendo un omega no iba a poder safarse de tal agarre. Y oh, para su salvación alguien habia entrado en escena.

John lo habia separado con una fuerza indescriptible de Yoongi, poniéndolo inmediatamente tras de si. Yoongi gruño hacia el alfa.

-¡Tranquilo! ¡El no es tu omega!-gruño John de la misma forma, o mas fuerte que Yoongi y al parecer eso hizo que la partw racional de Yoongi volviera de nuevo.

-¿Uh? ¿Hoseok? ¿Porfesor John? ¿Que sucedió?

Yoongi lo examinó de pies a cabeaza, y cayó en cuenta en su muñeca dónde había una marca rojiza.

-Oh, no yo...lo siento Hoseok...

Yoongi se veia bastante apenado y ¿como no estarlo cuando enfeentas una situación como estas? No lo culpaba, era parte de tener una mitad salvaje conviviendo contigo.

-Esta bien...

Todo dentro del cuarto fue retirado, Yoongi se quedo en medio de la cama sentado mirando a la nada y Hoseok salio de la habitación acompañado del otro alfa moreno. Antes de seguir su camino de vuelta a la cocina se giró a John.

-Uh... gracias por salvarme supongo...

John sonrió.

-No hay de que, siempre estaré alli cuando estes en problemas, serás mi doncella en apuros y yo tu principe azul.

Ugh, ¡tan romántico! Hoseok no pudo evitar sentir vestigios en su estómago. Todo era tan raro, pero en parte le gustaba toda esa atencion y altaneria del alfa.

No supo en que momento, o en que fragmento de minutos, sin darse cuenta, quedó totalmente acorralado por el alfa a una de las paredes con ambos brazos del alfa a los lados de su cabeza. Miró a los ojos del alfa y estos estaban indescriptiblemente oscuros. El alfa sin previo aviso se acercó a su cuello y olfateo el lugar.

Oh,¿entonces no era Yoongi el del celo? Porque si no, no se explicaria las acciones del alfa.

-Hueles a otro alfa, no me gusta.-Demandó John.

Sintió como algo húmedo pasaba por lo largo de su cuello, y luego unos filosos dientes atravesaron su piel. ¿¡Que diablod había sido aquello!? John se separo y lamio de nuevo el lugar. Una sonrisa se asomo por sus labios, Hoseok solo quiso golpearla. ¡Suficiente habia teniado con Yoongi para que ahora el haya dejado una pequeña marca en su cuello!

Hoseok solo lo separó con fuerza, haciendo reaccionar al alfa con algo de duda, Hoseok le miro mordaz y retomó su camino.

Definitivamente, hoy no había sido su mejor día. Y contandole, que el era el que tenía etapa de celo. Increible.