1
Bebé, te voy acechar esta noche
Te voy a cazar, comerte vivo
Así como los animales
Tal vez creas que te puedas ocultar
Puedo oler tu aroma a millas
Como lo hacen los animales.
Cuando Junmyeon llegó a su casa no dió ninguna explicación. Kris ya se encontraba dormido y eso le dió un poco de calma, a pesar de saber que lo que hizo estuvo incorrecto no se sentía mal, tal vez porque sabe que no lo va a volver a hacer.
Tomó una ducha y se fue a su habitación. Al acostarse al lado de su esposo miró hacia el techo y pensó que fue una locura, una muy peligrosa y que no volvería a suceder.
🌃
El sábado llegó en un parpadeo. Kris y él estaban en un centro comercial con la intención de comprarle algo al festejado.
—¿Qué crees que sea bueno para él? —Junmyeon miraba el lugar y no podía decidirse, después de todo no conocía al chico.
—Si fuera yo, me gustaría tenerte desnudo con un moño. —Kris lo tomó de la cintura y besó su cuello.
—No hagas esto aquí. —El más alto volteó los ojos y lo soltó. Estaba frustrado, tenía más de una semana sin tener sexo—. Y no puedo regalarle eso a Sehun.
—Entonces cómprale algún videojuego o una laptop, yo que sé.
Kris se puso de malas y salió de la tienda. Junmyeon podía entenderlo un poco, tenía algunos días sin dejar que su esposo lo tocará de manera sexual y es que algo no se sentía correcto. Estaba seguro de que era por lo que sucedió con aquel joven en el baño.
Compró una bocina inteligente, que según los vendedores era algo que les gustaría tener, salió del lugar y encontró a Kris sentado viendo su teléfono. Era hora de regresar a casa y cumplirle a su esposo, no quería que fueran de mal humor al reencuentro con sus amigos.
—Mi amor —Junmyeon se sentó en sus piernas y tomó su rostro—. ¿Te gustaría ir a casa y hacerme tuyo?
—No hay otra cosa que quiera hacer.
Al llegar a su hogar, dejaron la bolsa en uno de los sillones y se dirigieron a la habitación en medio de besos. La temperatura de sus cuerpos subía y sobre todo la de Junmyeon, se sentía más excitado que nunca. Terminaron desnudos el uno sobre el otro, pero justo cuando acababa de penetrarlo, su esposo terminó dejándolo caliente. Kris no tardó en bajar y regalarle sexo oral, pero Junmyeon no sentía la misma satisfacción. Se corrió, pero no fue lo que imaginó.
Se quedaron acostados en la cama, Kris acariciaba a su esposo y Junmyeon estaba demasiado pensativo. ¿Por qué de repente no se siente satisfecho? ¿Por qué ahora quería más?
Cuando se dieron cuenta, ya hora de arreglarse. Kris optó por un traje completamente negro y Junmyeon se puso un suéter de cuello tortuga con un saco negro, al igual que el pantalón. El reloj marcó las siete de la noche y se dirigieron a la mansión Park.
Sabían que sus amigos con el apoyo de los señores Byun llegaron a ser exitosos y les daba gusto que a pesar de tener a su hijo jóvenes, lograron lo que querían y más. Chanyeol llegó a ser el vicepresidente de Byun's Corporation y Baekhyun era dueño de su propia marca.
La mansión era enorme y Junmyeon se infló el pecho de orgullo.
—¿Listo? —preguntó Kris.
—No puedo creer que después de muchos años vayamos a ver nuevamente a Sehun.
—Sehun tiene veinte años y nosotros no hemos tenido ningún hijo. —Kris soltó sin decir más , sabiendo que aquello le dolía a su esposo.
—Algún día sucederá, estoy seguro.
Beso dulcemente a su pareja y ambos bajaron del auto. Al entrar al lugar vieron que estaba decorado con flores blancas por todos lados y habían algunos meseros repartiendo champaña, la pareja tomó una copa y se dirigieron hacia donde estaban sus amigos.
—¡Kris, Junmyeon! —Fue Baekhyun quien jaló a Chanyeol hacia los recién llegados—. Me da gusto que vinieran.
—Chanyeol ¡Dios! Quedaste casi tan enorme como Kris —dijo Junmyeon.
—Lo sé, no creí crecer más. ¿Cómo han estado?
—Excelentes —contestó Kris con una sonrisa—. No tan bien como ustedes. Ésta casa es una locura, es bellísima.
—Fue un regalo de mis padres cuando decidimos casarnos de una vez por todas —Baekhyun tomó la mano de Chanyeol con orgullo—. Después de que vieron que no éramos pasajeros.
—Estoy tan orgulloso de ustedes —Junmyeon abrazó a Baekhyun.
—¡Ahí viene Sehun! —Gritó Chanyeol.
Junmyeon sintió que las piernas se le doblaban cuando giró en dirección del nombrado. Con un traje rojo y una camisa negra, el hermoso chico de la misma estatura que Chanyeol, con el intenso cabello negro y esos ojos verdes que parecían hipnotizarlo caminaba hacia ellos. Él chico lo miró y no había nerviosismo en su mirada.
—Sehunnie —empezó Baekhyun—. Te presento a Kris y Junmyeon, los dejaste de ver cuando eras muy pequeño probablemente no los recuerdas.
Con una sonrisa se dirigió a la pareja—. Estoy seguro de que no podría olvidarme de esos rostros.
—Eres todo un hombre, muchacho —Kris extendió la mano y lo saludó—. Espero estés listo para competir por un puesto en el bufete donde trabajo.
—Yo siempre estoy listo para competir —el joven se giró hacia Junmyeon y sonrió de lado—. No creí tener un tío tan guapo.
—Yo…
—Myeonnie, ¿te sientes bien? —Baekhyun le tocó la frente, pues su amigo de repente se veía pálido.
—Yo sólo, me siento mareado.
—¡Por dios! ¿Estarás embarazado? —Suelta fuerte su mejor amigo.
Junmyeon no contestó porque realmente podría ser una posibilidad, hasta hace una semana no tuvo relaciones con su esposo, pero antes de eso todo era relativamente normal.
—Si gustan —Sehun interrumpió—. Lo puedo llevar a mi habitación a descansar un momento.
—¡No! —contestó Suho casi con un grito—, yo ya estoy bien.
—Deberías ir a lavarte la cara, amor. Te ves un poco mal. ¿Quieres que te acompañe?
—No, Kris. Sólo necesito aire.
Sin que nadie lo siguiera caminó lo más rápido que pudo hacia donde visualizó que estaba el jardín. Era como sí estuviera huyendo de quién, evidentemente, no podía.
Se sentó en una banca que están allí respirando agitado. El jovencito del bar era algo así como su sobrino y tuvo un orgasmo pensando en él. Estuvo a punto de tener relaciones sexuales con un chico quince años menor que él y para colmo, lo que compartieron le encantó.
Tardó aproximadamente veinte minutos cuando empezó a explorar un poco el lugar, le mandó un mensaje a Kris diciendo que en un momento entraba a lo que su esposo contestó que tuviera cuidado.
—El lugar es enorme, puedes perderte. —La voz lo hizo saltar y cuando giró vio a su "sobrino"—. Ahora actúas tímido, no es como si ese día estuvieras un poco más aventado, pero tú aura era diferente y me atrajo.
—Fue un error.
—¿Sabes…? —El jovencito se acercaba a él de una manera seductora, era como sí quisiera alejarse y a la vez acercarse—. Muchas veces vi tus fotos en las redes sociales de mis papás y tenías esa aura imponente que me excitaba, llegué a pensar que tú serías el activo de nuestra relación.
—No estoy…
—Pero es obvio que a ti te gusta que te controlen y dominen en todos los sentidos. —Sehun estaba demasiado cerca, podía oler su aliento que era precisamente el mismo de cuando se vieron por primera vez—. No sabes cuántas veces soñé con tenerte así de cerca y no planeo mentirte, Junmyeon.
—¿Tú…?
—¿Que sí me gustabas sin conocerte? —El cinismo y la seguridad en la voz de Sehun era demasiado atrayente, era cómo una polilla a la luz—. Me gustabas desde que pude sentir deseo sexual. Una vez tomé el teléfono de mi padre y ví las fotos que subiste en Hawaii. Soñé con tocar tu cuerpo, con hacerte mío.
—Esto está mal —Junmyeon pudo recuperar la conciencia y empujarlo un poco—. Yo estoy casado y tú….
—Aquel día no te importó, además, ni se te ocurra decir que eres mi tío porque no lo eres.
—Soy mayor que tú y yo vivo feliz con mi esposo.
Sehun nuevamente se acercó y sin pedir permiso jaló a Junmyeon hacia un lugar un poco más oscuro, a la pared donde terminaba la mansión y sin decir nada lo puso contra ella y empezó a besarlo.
Junmyeon podía catalogar los besos de Sehun como adictivos, como una droga. No hizo nada por empujarlo todo lo contrario, jaló su nuca y empezó a devorarlo. Aquel momento se convirtió en una guerra que ambos querían ganar, los toques se volvieron cada vez más intensos. Incluso, fue Junmyeon quien bajó las manos hasta el miembro del joven quien gimió en los labios contrarios, restregandose más, exigiendo más.
—Estás jugando con fuego, Junmyeon.
—No te confundas, Sehun. Tú eres el que está jugando con fuego. —Junmyeon lo empujó y emprendió camino a la casa, pero no tardó en ser alcanzado.
—Te haré rogar, te haré desearme y me pedirás que te folle hasta que ya no puedas más.
—Mi marido puede hacer eso.
—Y aún así, vas a rogar por mí.
Con una mirada despectiva Junmyeon se despidió de Sehun y caminó hacia la mansión, buscó a su esposo y le dijo que no se sentía bien. Regresaron a su hogar y al momento de cambiarse se dio cuenta que su teléfono tenía un mensaje.
"Si no quieres que tu esposo se entere, me verás mañana en el Hilton a las ocho. Habitación 92.
SH"
¿A caso Sehun lo estaba chantajeando? ¿Y cómo diablos consiguió su número?
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