— ¡Espera! — me detiene Thor. ¡Creí que nunca lo haría!

Oírlo, su voz, todo junto, es fantástico.

Es un alivio.

Cierro los ojos, me muerdo uno de mis labios, y me giro hacia él. 

Cuándo lo veo de nuevo... 

No es lo que esperaba.

¿Qué está pasando? Se supone que debería de confiar en mí incondicionalmente, y ésto es... 

No es eso. 

Ni siquiera parece enojado, sino que me mira, pero no de la misma forma que antes. Parece que una máscara, una invisible, ha aparecido en su cara, llevándose al Thor bromista de éstos días. 

— ¿Me aceptarás? — pregunto, suena como un chillido. Nunca me había sentido tan emotiva, tan nerviosa, nunca nada había parecido tan necesario para mí.

¿Qué me está pasando?

Él me mira fijamente, su mandíbula apretada, y contesta:

—Me diste lo que quería, así que estás dentro. Haré lo posible por protegerte. Desde ahora, eres una de los nuestros. Pero...— gruñe, acercándose a mí, es más alto que yo, así que tiene que mirar hacia abajo, pero aun así lo siento tan cerca que puedo percibir su aliento—. Que nunca vuelva a pasar algo como esto. Te diremos que hacer en cuanto a estos tipos, pero no vuelvas a actuar por impulso, no sabes en lo que te has metido, ¿Y la razón? No escucharme. ¿Alguna vez realmente lo hiciste? 

—Te escuché. Si no fuera por eso no estaría aquí, no confiaría en ti, cosa que hago— digo. Estoy comenzando a exasperarme. Sé que no le dije las cosas antes, pero tuve que ser cuidadosa.

¿No es así? 

No podía sólo decírselo sin estar segura. 

Ahora estoy segura, y es molesto que no pueda confiar en mí, tal como yo estoy confiando en él.

—Tendré que comprobarlo— dice. Las mismas palabras que hace unas horas estaba usando con Patrick, ahora viniendo de él. Que curiosa es la vida—. Pero, por ahora, es momento de que te lleve a nuestra sede. Sígueme rápido, porque no me detendré a ver si vienes detrás de mí. 

Maldita sea, este Thor no me gusta, para nada. 

Y no es que el anterior Thor me gustara, no de esa forma, pero me agradaba. Pelear y bromear con él había sido divertido y revitalizante. Incluso me había hablado de su pasado, lo quiere decir que confiaba en mí. 

Confiaba, claro, porque ahora sólo hay dudas, dudas, y más nuevas dudas. 

Cuando comienza a caminar, es tan rápido que me cuesta muchísimo alcanzarlo. Pasamos por calles, y más calles, y, cuando veo, estamos saliendo del centro de la ciudad. Pasamos los enormes edificios que rodean la zona céntrica, hasta llegar a la zona más sencilla. Puras casas familiares y coloridas nos rodean, veo mucha más vegetación y luminosidad. Las personas riendo, los niños jugando, las parejas enojadas...

Es en cierto modo mágica, muy diferente a la zona universitaria, que, más que una zona linda, es sencilla.

Thor sigue caminando. Vamos más, y más, hasta que llegamos a una zona abierta. Hay varios edificios, todos elegantes y con grandes jardines, y, detrás de ellos, hay una enorme barranca, un río debajo, un cañón arriba. Calle arriba, hay un puente. Un gran y enorme puente que lleva a una gran y enorme iglesia. Justo en el borde de la ciudad.

La construcción es de piedra gris y blanca, consta de tres naves levantadas sobre un puente de dos arcos que atraviesa el río y que funciona como una especie de plaza. Es gótica, enorme y hermosa. Todo ella es impresionante, y no puedo dejar de pensar en como es que se mantiene viva, es algo muy raro.

La religión ha perdido mucha importancia desde hace más de doscientos años, las personas se han dedicado más a creer en las fuerzas de la gran esfera que en las religiones antiguas de los humanos. Algunos ni siquiera piensan que los humanos existan, mucho menos creen en las religiones que «supuestamente» vienen de ellos.

Thor gira en seco, y tenía que hacerlo, o, de otro modo, hubiera caído en el medio del abismo. Me distraigo viendo la gran caída de la barranca, el caudaloso río que pasa debajo. El río Ferrates, uno de los más conocidos de todo el reino. Pasa por todo el gran continente, es enorme. Una vez Tule me habló de él. Dijo que era un íntimo amigo. Me pregunto...

¿Será un río mágico?

— ¡¿Vendrás o no?! — grita Thor. Madre Santa, está cruzando lo que parecen más de doscientos peldaños, así que me esfuerzo por alcanzarlo. Varios minutos después, (La iglesia es enorme) llegamos a la enorme entrada de estilo medieval, la cual Thor abre sin ningún tipo de reparo. Pasamos el gran salón, un enorme salón brillante que antes serviría como el lugar de rezos o algo parecido, en el que un montón de personas, de todas las edades, hacen un montón de cosas como entrenar, platicar, estudiar, o incluso jugar. 

Subimos a lo qué vendría siendo el segundo nivel, dónde pasamos por un largo pasillo con enormes vitrales de lado izquierdo y muchos pasillos hacia la derecha, parecen haber un montón de habitaciones en él.

Al fondo, está la oficina de Thor. Es otra gran habitación, con un hermoso vitral de ángeles como techo, un escritorio en el medio, varios tapetes acolchonados que decoran la estancia, y un librero de fondo.

— ¿Una iglesia? ¿Realmente? — pregunto, Thor me ignora.

—Harmony, llama a una reunión de recibimiento— llama como todo un ejecutivo a través del comunicador.

—Thor, ¿Qué es este lugar? ¿Cómo lo conseguiste?

Él comienza a hojear sus papeles cual administrador dedicado. Me ignora por completo.

Bueno... esto será difícil.

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—Chicos, los convoqué aquí para que le den la bienvenida a Diane, que será nuestra nueva compañera, trátenla bien, cuídenla, como todos nos cuidamos— dice Thor. Todos los «miembros» de su equipo están aquí, en mi recibimiento al equipo, y aplauden al verme. Todas esas personas que antes rondaban por el enorme salón, e incluso unos más, están reunidos en la parte central de la estancia, mientras que, también, me analizan.

—Bienvenida, soy Tifón— dice uno de los chicos, es pelirrojo, está al frente de toda la multitud,  mide alrededor de dos metros, lo que hace que no le cueste nada llegar hasta mí para recibirme—. Puedes también llamarme Calium, pero nadie me llama así. 

—Hola, Tifón— digo, estirando mi mano para estirar la suya. Él sonríe, haciéndome sentir aliviada de que al fin alguien parezca amable por aquí—. Encantada. 

Tifón pasa de mí, el siguiente en saludarme es Terri. Tule quiere hablar con él, ahora que recuerdo.

—Bienvenida— dice. Es raro verlo así, sin máscara, pero reconocería ese cabello y ojos en cualquier lugar— llámame Terrance.

—Gracias, amigo— digo— Terri es el diminutivo de Terrance, ¿No es así?

—Sí— dice, una sonrisa radiante en su rostro—. Muy inteligente— me halaga.

La siguiente es una chica de cabello negro, ojos enormes y pómulos altos. Me parece conocida.

—Hola, soy Nifkazy. ¿Me recuerdas cómo Aracné?

—Oh, sí— digo. Ella aprieta mi mano sin esperar a que yo lo haga, está tan animada y feliz que es palpable.

—Notarás que mi nombre es raro, y es porque vengo de Parma. Está muy lejos, otro continente. Es curioso que...

—Ya cállate, niña, estás sobrecargándola— dice Nea— deja que yo la salude, voy a ser su guía después de esto.

Nif, no-sé-qué, Aracné, se sonroja, furiosa, pero sabe que pelear con Nea no traerá nada bueno, así que se despide con una mueca y se marcha.

—Aquí es una tradición decir los nombres reales una vez que alguien es recibido. Es tonto, pero... — rueda los ojos— mi nombre es Vivian, y no aceptaré por ninguna circunstancia que me digas Viv. De hecho, es sólo para que me reconozcas.

—Está bien— digo— ¿Y qué es eso de ser mi «guía»?

Ella sonríe ladeadamente. Me toma de la muñeca, jalándome por el gran salón. Salimos por una de las entradas adyacentes, llegando a lo que parece ser un pequeño mirador. Nunca he tenido miedo de las alturas, pero la vista es intimidante. Vivian, Atenea, Nea, o cómo se le deba llamar, va hasta la esquina más alejada del mirador, esperándome. 

Esto no será bueno.

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N/A. ¡Hola! Tenía este capítulo desde hace un tiempo, originalmente sólo era uno, hasta que, claro, lo edite como tres veces y ahora ya está dividido en dos, para no hacerlo tan largo y difícil de leer. :)

¿Qué les parece que el lugar de reunión sea una iglesia? No lo sé. 😂

En fin, como saben, gracias por leer, sigan haciéndolo  regalándome sus comentarios.

Saludos y gracias...

ANGIE. <3