Kenia

Finaliza la semana y todo ha sido irreal, he pasado dos noches geniales en la presencia de Bruce. Quien cada día me demuestra lo romántico y maravilloso que es. Hoy tuve que mentirle y decirle que iba a estar con Hanna -cosa que no es del todo falso, ya que la veré para almorzar- para que no viniera en la noche, quedamos en hablar mañana para planear algo. ¡Ese hombre me descoloca! Me mantiene caliente todo el tiempo.

- Amiga, buen día- dice Hanna, sacándome de mis cavilaciones. Le sonrió e indicó que pase adelante a mi oficina.

Luego de dos horas contándole con detalles cada cosa que me ha pasado en tan sólo una semana. Ella me mira sorprendida y asombrada. Con la boca abierta y en silencio absoluto. Nos quedamos calladas mientras ella analiza todo lo que le he dicho.

- Entonces déjame ver si lo entendí -dice finalmente- ¿quieres estar con los dos?

Le miro asustada, al Ella poner en voz alta lo que tanto he pensado. Y es que en voz alta se escucha tan ridículo. No puedo pensar claramente, estos hombres me hacen creer que todo es probable. Sin embargo, la realidad es que no puedo estar con dos hombres. Y más importante aún no puedo seguir mintiéndoles, porque no soy así. Es deshonesto, si me enamoro de alguno. Las bases de esa relación serían de mentira. Respiró intentando controlar mis deseos inmensos de llorar. En pocas horas saldré con Ryan, hacía una noche donde estoy más que segura que tendremos sexo. Entonces mi peor miedo se hará realidad, me convertiré en una zorra. Que duerme con dos hombres al mismo tiempo y engaña a los dos.

Siento un vacío en mi pecho, no puedo seguir mancillándome de esta forma. Tengo que ponerle fin antes que me pierda entre ellos dos.

-No, es que no lo sé. Hanna -digo confundida.

- entonces, ¿qué? Kenia, está pequeña aventura debe acabar. ¿Qué dirán tus padres cuando les presentes a dos hombres? ¿Qué va pasar contigo? -dice casi a gritos.

Nunca había visto a Hanna molesta conmigo, su cara está roja, tal parece que le fuera a dar un ataque de rabia. No sé qué pasaba por mi mente al hablarlo con Hanna, ella es igual o más puritana que mis padres o yo misma antes de este a debacle.

Después de esta incómoda reunión, donde sólo hice enojar a mi amada amiga, quien al final no supo ayudarme. Mi mente está más que confundida, jamás había estado así. Mientras pienso en cada pregunta hecha por ella, preguntas que yo misma me había hecho. Sin embargo siguen sin respuesta. ¿Cómo se puede en una semana desordenar tanto tu vida? Quizás sólo deba seguir con Bruce y decirle adiós a Ryan. Quizás sólo deba olvidar esta semana y seguir con mi vida, tal cual como estaba antes. Sola, totalmente sola y ansiosa por un amor con quién Compartir esta soledad. Vuelvo a mi realidad al notar que se acerca la hora en que Ryan vendrá, mi rostro está húmedo, no me di cuenta que estaba llorando. Corro al baño y veo lo hinchada que estoy. ¿Porque tiene que ser tan difícil?

Ryan está muy ilusionado con ésta cita, no he tenido corazón para decirle que no quería ir. Vamos de camino hacia un destino que desconozco. Ryan no ha querido decirme hacía donde vamos. El recorrido es hermoso, lleno de árboles y verdor. Puedo respirar cada espora de cada flor. La noche es muy oscura, sólo logró ver los destellos de las estrellas, que iluminan con su fulgor nuestro camino. Hay un silencio tácito, no es incómodo. Sólo vamos observando el camino y expectantes hacia lo que está por venir. Mi estómago tiene un montón de sensaciones, de momento es miedo, de momento es felicidad, de momento es incertidumbre. Veo a Ryan de reojo conducir, su perfil es hermoso. Y no se confundan no sólo me gusta su físico, me gusta todo lo que sus ojos me transmiten. Lo feliz y completa que me siento a su lado. El cómo puede tomar decisiones por mí sin sentimientos de culpa.

- llegamos, hermosa -dice emocionado.

Miró alrededor y sólo veo árboles, a lo lejos se escucha algo que parece él caudal de un río. Logró oler la humedad de la tierra, no entiendo a donde me ha traído pero decido seguirle el juego. Me toma de la mano, me lleva por entre la maleza. Entonces sucede algo mágico, desaparece la maleza y los árboles, nos encontramos en un pequeño espacio sin árboles. Allí logró ver un río, a la orilla una manta con una cesta en ella me hace saber que tendremos un picnic. Mi corazón late con fuerza. Me guía hacia la manta, allí me siento mientras él me sirve vino. Este sitio es tan romántico! Escucho los sapos y los grillos cantarme. Me hace sentir en esa película de Disney donde cantaba "besala". Sin dudar lo veo y me lanzo a sus brazos, mientras le beso con desesperación y locura. En un inicio mi acto le sorprende, sin embargo luego se une a una batalla de lenguas. Entre beso y beso me acuesta sobre la manta. ¡No puedo creer que no hemos pronunciado ni una sola palabra! Amo cada cosa de cada uno de estos hombres. Amo lo que siento a su lado. Y todas las emociones que comienzo a conocer.

-Eres tan hermosa -dice Ryan, mientras su mano recorre con lentitud mi pierna.

Se levanta para comenzar a servir la cena, yo me quedo acostada disfrutando de la hermosa vista del cielo. Sumida en el silencio, disfrutando de cada cosa a mi alrededor.

Media hora después hemos hablado de nosotros y de nada. Él está ansioso por compartir conmigo su vida. Yo vuelvo a sentir la culpa, así que tomó la decisión. Decido ser honesta con él.

- Ryan, hay algo que debo decirte -me mira con inquietud.

- nena, si es algo que podría arruinar esta noche mágica -se acerca a mí- podemos hablarlo luego, porque hasta el momento hemos tenido malas citas y quiero quitarme de encima la maldición.

Entiendo su punto, cada cita nuestra ha sido un desastre y no le he dado la oportunidad de mostrarme como es. Asiento con la cabeza, él sonríe. Me toma de la mano y me ayuda a levantarme. Le sigo expectante, a unos metros del río entre los árboles está una pequeña cabaña. Sonrió nada más verla, me siento en un cuento de hadas definitivamente.

-Este es mi lugar de paz -dice- aquí vengo cuando necesito aclarar mis ideas o escapar del estrés de mi cargo.

- ¿has traído a alguien más?- pregunto dudosa de su respuesta, quisiera ser especial para él.

- no, nunca lo había hecho. Es sólo que quiero mostrarte todo de mí. No quiero ocultarte nada - mientras lo dice baja la cabeza, algo que me pone en alerta.

- es un sitio hermoso, gracias por mostrármelo -sonrió como una tonta.

Entramos a su pequeño escondite, es una cabaña de cazador. Al entrar el olor a madera inunda mis fosas nasales, todo es en madera. Tiene una pequeña cocina, es una casa de un sólo ambiente. Después de la cocina hay una puerta que imagino irá al baño. La cama es gigante, podrían caber al menos diez personas, ocupa todo el espacio.

- hay algo muy importante que debo decirte, pero necesito que guardes la calma- han notado que cuando alguien dice que te calmes, ¿sucede todo lo contrario? ...

*****************************************************************************************************

Hola hoy estoy sin muchas palabras, ha sido una semana dura aqui en mi pais, cada dia es mas dificil conseguir las cosas necesarias para sobrevivir. Hay dias que no tengo nada de comer y de continuar asi es probable que deje de escribir. Gracias por todos sus comentarios y votos. Es lo unico que aun me da ilusion...