Melocotón
Parte uno

Otro aburrido día en su rutina, ir a la Universidad otra vez. Esperaba que pasara algo emocionante allí, lo malo, que fue a costa suya.

— ¡porfavor, déjenme salir!.— golpeaba la puerta de la biblioteca asustada.

— olvidalo.— exclamó una chica de voz chillona.— dime como es que conoces a Kid-sama.

— solo es un amigo, nada más.— suplico con voz quebrada.— no somos nada.

— ¡maldita perra mentirosa!.— grito otra enojada y celosa.— el otro día los vi juntos en la entrada de tu casa y el te hablaba muy cariñosamente.

¿Cual es el contexto de esta triste historia? Pues déjenme y les cuento.

Flashback

— ako?.— se detuvo una camioneta roja.— que haces aquí, no tenias terapia?.— hablo extrañamente cuidadoso.

— Kid, killer?.— alzó la mirada encontrándose a ambos hombres de intimidante apariencia.— de allí vengo, ahora me voy pero se hizo algo tarde.

Killer rió y kid abrió la puerta de su camioneta.— vamos, te llevaré a tu casa.

— crees que es buena idea?.— pregunta.— mi hermana sigue molesta contigo.

— sube si no quieres que te asusten los monstruos de la cuadra.— dijo con voz tenebrosa.— verdad killer?.

— claro, claro.

— ay no...— se subió rápidamente a la camioneta.— odio cuando haces eso.

Comenzó a conducir y en un parpadeo ya estaban fuera de su casa, kid bajo de la camioneta junto con ella.

— muy bien, cuidate melocotón.— le apreta la mejilla suavemente.

— ya no soy una niña, kid.— refunfuña con ternura.— intentaré hablar con akemi, para que estés tranquilo.

— eres la mejor, lo sabias?.

Ako esboza una gran sonrisa y se despide de killer también.

Fin flashback

Afortunadamente o para su desgracia, alguien pasaba por allí y no era nada menos que Luffy y sus amigos, la primera en notar algo extraño fue Nami. Su semblante cambio al ver a monnet junto con bonnie, las admiradoras de Eutass kid.

— también lo escuchas?.— se acercó Zoro al lado de Nami y esta asintió.

— esas dos, están molestando a una chica otra vez.— gruño la peli naranja.

— ¡ayuda, porfavor!.

Automáticamente se quedaron callados y mala señal, pues Luffy escucho su grito de ayuda.

Enojado, camino hasta la Biblioteca y enfrentó a las dos chicas.

— dejenla salir.— ordenó.— ahora.

— esto no te incumbe mugiwara.— dijo monnet.

— bonnie Hazte a un lado.— hablo nuevamente.— sabes que no me importa que seas chica.

Molestas, abrieron la puerta y se marcharon de allí. Una vez solos vieron  que había una chica de cabello corto dándoles la espalda, parecía que tendría un ataque de pánico muy pronto.

El primero en acercarse fue sanji y como todo un caballero le tocó el hombro, este quedo enamorado por la belleza según el que tenía adelante suyo.

Sobre todo por sus ojos color melocotón.

— ¡¡es hermosa!!.— se desmayó.