La escena era abrumadora, incluso Rayne se colocó detrás del rey para protegerlo, pero se escuchó una voz fuerte que hizo estremecer a todos en la sala.

—¡ALTO!

No era otra persona más que el mismo rey, Wahlberg ni siquiera movió un solo dedo, permaneciendo tranquilo al lado del monarca de los vampiros. Lo que llenó de confusión el rostro de todos. Orter bajo sus garras y regresó a su forma humana, colocándose de nuevo su chaqueta sobre los hombros, Ryoh, Kaldo y Rayne se mantuvieron alertas sin entender.

—¿Podrían soltarme?—dijo Orter a Dot, Lance y Mash, el pelirrojo había sujetado su torso, Mash su brazo derecho y Lance su izquierdo, los únicos que no se movieron fueron Finn y los dos vampiros que los acompañaron todo el trayecto hasta la sala. Orter ajustó sus gafas mientras daba dos pasos hacia atrás conforme lo soltaban, luego inclinó la cabeza—.Me disculpo por lo sucedido.

—No entiendo nada—dijo uno de los vampiros que sirvieron de escolta.

—Alteza, ¿perdonará esto?—le cuestionaron—¡Debemos matarlos, ahora. Los licántropo siempre serán licántropos!—uno de ellos colocó una daga de plata en el cuello de Dot, pero Lance de inmediato tomó su mano, sus ojos azules brillaron un poco.

—Dije que alto, Wahlberg, por favor—el rey se dirigió a su consejero.

—Orter no tenía intención asesina, su alteza como yo nos dimos cuenta desde un inicio, entiendo que defendieron por instinto, pero esa es la realidad—dijo el anciano.

—¿Qué?—Rayne entrecerró los ojos aun sin comprender.

—¡Ja, ja! Era eso—Kaldo riendo al mismo tiempo que guardaba su espada—.Debiste ser cuidadoso o podrías haber perdido la cabeza.

—Aun así no me gusta que le levanten las garras a mi rey—Ryoh suspiro, sacudiendo sus hombros—.Un verdadero hombre, siempre debe protegerse.

Los cuatros menores se vieron entre sí, el vampiro que amenazaba a Dot se alejó por la fuerza de Lance, que se acercó al lobo al ver que tenía una quemadura delgada en su cuello.

—¿Estás bien?

—Si, no es nada—le contestó el pelirrojo.

Alguien levantó la mano, este era Mash, todos voltearon, fue el rey que sonrió un poco y con un gesto le dio permiso para hablar.

—Disculpen, pero sigo sin entender.

«Esta vez estoy con Mash, no entiendo nada...» pensó Finn mirando de reojo a Orter quien le dedicó una penetrante mirada.

—Joven Mash, ¿no?—su alteza respiro hondo y habló calmadamente—.Aunque Orter Mádl me atacó, solo fue para probar algo, ¿no es así?—se dirigió a este.

—Así es.

—No reaccioné porque no sentí que fuera a lastimarme, en realidad quería saber la capacidad de mis subordinados.

—Aah, lo hiciste al sentir nuestra presencia—Kaldo sentándose, parándose firme junto al trono como su guardián del rey.

—Pudiste morir, ¿lo sabes?

—No creo que tengan tanta suerte—sonrió Orter de manera maliciosa.

—¡Ja, ja! Eres un caso muy extraño, ¿te llamas Orter, cierto?

—Claro, el líder de todos los clanes licántropos—dijo este muy serio.

—¡Mhp! Te había dicho que no intentaras nada—Rayne bajando hasta pararse al lado del gran licántropo.

—No debiste asustarnos así—reclamó Lance.

—Si, mi cuello también está en juego—murmuró Dot.

«Creí que moriría de miedo...» pensó Finn tras comprender lo sucedido, pero al mirar a Mash lucía perdido aun.

—¿Mash?—le hablo.

—Ah, sí, creo que entendí, Orter solo fingió atacar—comentó el humano—.Lo tengo.

—Si que los humanos son estúpidos—ajustándose las gafas—.Venir aquí es un riesgo, pero lo que me preocupaba es que no tuvieran oportunidad contra los dragones y quien sea que estuviera detrás de todo esto, debía medir sus habilidades, aun no estoy conforme, pero su reacción al menos fue, medianamente rápida—dijo, molestando a Rayne, Ryoh y Kaldo.

—Ladras mucho—comentó el vampiro de cabellos blancos.

—No eres nada sofisticado—Ryoh con una pequeña sonrisa, aunque se notaba ofendido.

—Inténtalo una vez más, y te asesinaré sin dudar—Rayne muy serio en sus palabras.

—Si, así es—le contestó el rey, aunque parecía divertido con el joven—.Ahora que está claro, por favor, déjenos—les dijo a los dos vampiros del buró que los acompañaron en el camino.

En la sala solo se quedaron aquellos que estuvieron en el incidente de la ciudad de los licántropos, Ryoh, Kaldo, Wahlberg y el rey.

—Si tienes algo que decir, por favor—dijo el rey dirigiéndose a Orter.

—Es la primera vez que veo al rey de los vampiros, si no fueran estas circunstancias lo que nos trae aquí, no habría manera de una reunión como esta, licántropos y vampiros siempre hemos sido enemigos, incluso cuando hay una tregua de por medio, no existiría una forma de llevarnos bien, dicho esto, solo estoy aquí para acabar el enemigo en común que tenemos, los dragones, cuando esto haya terminado volveremos a ser enemigos, en simples palabras, solo usare su fuerza a mi favor.

—¡Tu!—Rayne molesto al sentir que Orter estaba utilizando a los vampiros, pero el rey tras dedicarle una mirada a Wahlberg, alzó la mano para calmar a Rayne.

—Entiendo, hemos vivido grandes tragedias a través de los años, aun así, deseo desde lo profundo de mi corazón poder entablar la paz con el pueblo Lycan. Tal vez hoy no será el momento, pero tenerlos de aliadas en las batallas que están por venir, será un gran paso hacia esa paz que imagino también desean.

—¡Mh!—resoplo un poco Orter sin contestar nada concreto, logrando que tanto Ryoh, Kaldo y Rayne se sintieran molestos por la manera arrogante del licántropo.

—Ahora bien, vamos a revisar lo sucedido—dijo el monarca, al mismo tiempo Wahlberg con un movimiento hizo surgir del suelo sillas y una gran mesa para los invitados, solo Kaldo se mantuvo parado al lado de su majestad como su fiel caballero.

«¿Cómo hizo eso?...» se preguntó Finn, su rostro lo decía todo puesto que el rey contestó.

—El poder único de cada vampiro, joven Finn Ames, el de Wahlberg es el desplazamiento espacial, aunque las condiciones y su alcance, solo son del dominio de este—explico muy tranquilo.

—Yo...gracias—un poco avergonzado el menor.

—No creo que revelar al enemigo nuestros poderes sea lo correcto.

—Ryoh Grantz, con ello demostramos que somos de confianza—contestó el rey.

—Entiendo, lamento mi imprudencia—el rubio hizo una pequeña reverencia.

—Alteza, por favor—Wahlberg solicitó permiso para hablar, que le fue concedido—.Vamos a iniciar con lo que ocurrió primero, el incidente de los portales, tenemos aquí a aquellos que fueron llevados a otro mundo.

En la conversación se habló a detalle lo que sucedido con los transportados al otro mundo, Finn, Dot y Lance hablaron de sus respectivas experiencias y cómo es que el destino los llevó a conocer a Mash además de su enfrentamiento con los dragonoid, aquellos semi dragones con una gran fuerza.

—El dragonoid que está bajo custodia del buró vampírico no ha dicho nada desde que llegó, pero los eventos ocurridos en la Tierra nos indican que se trata de Innocent Zero.

—¿Innocent Zero? ¿Se refieren a ese humano que usaba la magia hace más de 500 años? Por lo que se, fue encerrado en Hecatrice y murió allí, ningún humano vive tanto—reclamo Orter.

—Ese el punto, joven Lycan, visite Hecatrice y lo vi con mis propios ojos, solo sus huesos estaban ahí, pero había algo escrito—describió Wahlberg.

"LA MUERTE NO ES EL ÚNICO CAMINO, NI ES EL FIN, SINO UN NUEVO INICIO..."

—La muerte no es el único camino, ni es el fin, sino un nuevo inicio—repitió Finn sintiendo un escalofrío—.Si que da miedo.

—¿Qué significa eso?—Lance pensativo.

—¿Dicen que este Innocent Zero era humano? Creí que los humanos no podían venir a este mundo.

—Bueno, eso no es del todo cierto, joven Mash—Wahlberg—.Hubo una época en que nuestros mundos estuvieron conectados, se podría decir que el surgimiento que en tu mundo son leyendas, aquí pudieron ser eventos reales. Yo conocí a Innocent Zero, al menos como se hacía llamar, Adam Jobs fue quien lo trajo a este mundo desde que era un niño.

—Perdón ¿Quién es Adam Jobs?—volvió a levantar la mano Mash.

—Fue quien creó todo lo que conocemos, el reino de los vampiros es prácticamente el primer rey, un vampiro muy poderoso en su época—explico rápido Ryoh.

—No solo eso, él fue la razón de que los mundos lograran separarse, gracias a la piedra filosofal, la única con el poder suficiente para hacerlo—intervino Rayne.

—¿Piedra filosofal? ¿Eso es real?—Mash sorprendido—.En mi mundo solo escuche de ella como un cuento y en libros de fantasía, aunque si lo pienso bien, todo lo que tengo enfrente fue parte de una fantasía—suspiro con un pequeño dolor de cabeza.

—Mash, ¿no?—Kaldo con una pequeña sonrisa—.Cuando nosotros ya éramos una sociedad, los humanos apenas daban sus primeros pasos con sus pequeñas civilizaciones, divididos y peleándose entre sí, fantasía, ¿dices? Aquí todo eso rompe lo que tal vez puedas imaginar.

—Eso ya lo veo—dijo el humano mirando al rey que permanecía callado y escuchando—.Pero ¿Qué pasó con esa piedra filosofal?

—Desapareció, hasta hoy en día nadie sabe dónde está o si fue destruida. Sin embargo, Innocent Zero siendo el discípulo de Adam, se dio cuenta que los humanos tenían capacidades increíbles para crear cosas, y años después de alejarse del camino que Adam le enseñó, él creó un aparato que podría abrir portales—explica Wahlberg.

—¿Por qué haría eso?

—Porque Innocent Zero quiso conquistar nuestro mundo, creía que los humanos debían tener el control, unir nuestros mundos de nuevo, él se creía demasiado poderoso solo porque estando aquí aprendió a usar la magia—dijo Ryoh.

—¡Recórcholis! ¿Los humanos pueden usar magia? ¿Cómo lo hacen ustedes?—el joven humano fascinado con la historia.

—Hasta la fecha, solo hemos conocido un mago, él podía usar el poder con el que un vampiro nace, pero no solo eso, podría robar los poderes de otros, por eso era peligroso. Una vez que dio a conocer su naturaleza, traicionando a Adam, usó el dispositivo para abrir portales y hacer la guerra, usando al clan de los dragones.

—¿Por qué los dragones? Eso no lo entiendo.

—La realidad es que los dragones no quisieron quedarse en Terra en la división de los mundos, ellos desean quedarse con los humanos, dado que muchos de ellos fueron alabados como dioses.

Mash recordaba las leyendas de los dragones en su mundo, en China hablaban de dragones como símbolos de poder, en la edad media se decía que los caballeros peleaban contra esas bestias, tanto representaban el bien como el mal, al menos ante los ojos de un humano.

¿podría ser que los dinosaurios fueran parte de estas leyendas en algún momento? Bueno, para Mash era demasiada información la que necesitaba procesar, pero ya que había decido ir a ese mundo para encontrar su verdadero propósito de su existencia, así que no podía regresar.

—Los humanos de esa época eran tontos, supongo—bromeo Dot llevándose las manos detrás de la cabeza, a lo que Mash se dedicó una mirada—.Oye, no lo decía en serio.

—Así que los dragones se habían quedado en la Tierra, bueno, si lo pienso bien hay muchas leyendas de ellos, pero con la guerra volvieron aquí, pero ¿Cómo los convenció?

—Es correcto, regresaron—esta vez fue el rey quien hablo—.Él era una persona muy persuasiva, sabe encontrar tus debilidades y explotarlas, yo era muy joven cuando ocurrió eso, pero lo recuerdo bien, Innocent Zero era un hombre capaz de mover mundos con su poder y palabras—se detuvo un momento, Mash sintió algo más en esas palabras—.Es por lo que la devastación casi acabó con todos, de no ser porque en esa época los licántropos estaban de nuestro lado, no habríamos ganado esa pelea.

—En esa época éramos esclavos de los vampiros, Albus Adler fue quien realmente lideró el ataque contra los dragones, sin los Lycan todos hubieran muerto—Orter de manera despectiva.

—Tienes razón, sin ustedes todo el mundo de Terra habría parecido a manos de Innocent Zero—le dijo el rey, mas no parecía afectado por la manera en la que Orter hablaba de los vampiros, algo que al lobo le hacía pensar un poco más sobre este monarca.

—Entonces, ¿creen realmente que es él? Como dijeron, era un humano, y ese mensaje...—Finn interrumpiendo la conversación, llevándose la mirada de su hermano.

—Es posible—Wahlberg camino por la sala—.Alguna vez estuvo cerca de la magia de la piedra filosofal, su poder tenía alcances inconmensurables.

Habiendo tenido en claro lo peligroso que era realmente Innocent Zero, no debían descartar todas las posibilidades.

—Me siento un poco responsable.

—¿Por qué lo dices Mash?

—Digo, es humano como yo.

—Mash, tú no podrías hacer algo así.

—¿Están seguros? Un humano es un humano, todos sabemos que son seres ávidos de poder, por eso nuestros mundos se separaron. El hecho que un humano esté haciendo todo esto, solo prueba que no deben existir en Terra—dijo Orter.

—¡Oye! Mash no es un mal tipo, y tú lo sabes—le reclamó Dot.

—Basta, no peleen—Lance interfiriendo—.Lo realmente importante ahora es, averiguar lo que pasa realmente, dragonoid, dragones originales e Innocent Zero, esto es demasiado—expresó el joven de cabello celeste—.Yo no quiero que mi hermana salga lastimada por una guerra sin sentido, debemos detenerlos ahora.

—En ese tienes razón, el equilibrio de nuestro mundo se está moviendo—Rayne cruzando la pierna, mientras que Wahlberg regreso a su asiento, para luego dirigirse a Ryoh y Kaldo—.Lo que nos lleva a ustedes, fueron al Castillo de las Glicinias ¿Qué encontraron ahí?

Los vampiros presentes se sorprendieron dado que era un lugar al que no deberían ir, Mash noto sus rostros y cuando iba a preguntar, Orter habló primero.

—El Castillo de las Glicinias es un lugar de un antiguo reino humano que alguna vez existió en Terra, mucho antes de la separación de los mundos, ahí nació y creció Nicolas Flamel, el alquimista que creó la piedra filosofal. Y se caracterizaba por estar rodeados de glicinias, estas flores son letales para los vampiros.

—Vaya, eso es feo—expresó Mash.

—Digamos que fue una época donde los humanos y los vampiros no se llevaban bien.

—Y fue la amistad de Adam y Nicolas lo que terminó con eso—agregó Wahlberg.

—Si, eso—Orter ajustándose de nuevo sus gafas.

Ryoh y Kaldo se dirigieron una mirada, hablando este último.

—Ambos fuimos ahí con una encomienda a revisar ese territorio que se suponía estaba abandonado, claro que sí es peligroso, en especial si aún crecían esas flores, pero todo estaría bien gracias a mí.

—¿A ti?—Rayne aun sin saber mucho sobre ese sujeto, salvo que era el misterioso caballero del rey, Kaldo Gehenna.

—Resulta que Kaldo es mitad elfo, con ello tiene poderes para comunicarse con la naturaleza, además de poder curar a otros.

Al escuchar eso, Finn se sintió interesado, en lo que pasó antes y ver a personas ser heridas frente a él. Como vampiros podían curarse por sí solos, incluso si es grave sólo deben beber sangre para acelerar el proceso, pero curar a otros, eso era algo realmente impresionante.

—Al ser mitad vampiro podría contrarrestar los efectos de las glicinias, y en cualquier caso, ayudar a Ryoh, pero cuando llegamos...—su voz se volvió seria, incluso el semblante de Ryoh cambió.

—El lugar no estaba abandonado, sino había crecido con medida, un castillo con torres más grandes que las de este, hundido en una oscuridad, y aunque aún existían barreras de glicinias, detrás solo se podía ver un mundo lleno de sombras, además de...—dijo el rubio.

—Había una horda de dragones y dragonoid, hablamos de miles de ellos, pero había algo más—Kaldo aseveró su tono—.Ghouls.

Al escuchar esa palabra todos los presentes se vieron impactados, menos Mash, que noto el cambio en el ambiente.

—¿Qué es un ghoul?—se atrevió a preguntar pese a sus rostros.

—Los ghoul son seres demoníacos que se alimentan de cadáveres, en realidad ellos también son "no muertos".

—Suena como un zombie—dijo Mash, pero esta vez fueron los seres sobrenaturales quienes se le quedaron viendo sin entender a lo que se refería—.Zombies, los que se comen los cerebros y hacen así—Mash imitando una lenta caminata con las manos hacia el frente, pero en definitiva nadie en ese lugar los conocía—.Salen en las películas, ¿en serio no los conocen?

—¿Zombie? Es que no sabemos que es—Finn habló.

—¿Películas?—Dot confundido.

—Bueno...una película relata historias, y eso...

—Creme Mash, esas cosas no son de cuentos, son seres difíciles de matar, tienen una fuerza parecida a un Lycan, y que digas de su velocidad, pero lo que es peor de todo, es que se comen a todo ser vivo a su alrededor.

—Los ghuols son seres creados, un ghuol nace de magia oscura, y si estamos hablando de Innocent Zero, si maestro en las artes mágicas, debe ser su obra—habló Ryoh.

—En ese caso, debemos tener extremo cuidado, los ghuols puede crear a otros con una mordida—comentó Rayne.

—Efectivamente, debemos tener cuidado y todo esto nos lleva a una solución—el rey se levantó de su asiento en la base de la gran mesa y subió unos escalones, para verlos a todos—.Esto será una batalla que no podemos ganar solo con el reino vampiro o los licántropos, después de todo, se decidirá el destino de todo Terra, debemos unir a todos los pueblos, clanes y seres de nuestro mundo—al decir eso, se enfocó en Mash—.Incluso esto puede ser peligroso para tu mundo.

Mash pensando en su padres no dejaría que eso llegara a pasar, por lo que había una cosa más para ayudarlos.

—Alteza, unir a Terra no es una tarea fácil—hablo Ryoh.

—Y hay algo más—Kaldo se unió a la conversación—.No sabemos cuándo Innocent Zero va a atacar, si sus planes son los mismos que en el pasado ¿Cómo ha sobrevivido tanto tiempo? Si obtuvo ese poder de la piedra filosofal, no tenemos ni idea de lo que realmente es capaz—dijo de una manera que podría helar la sangre de todos los presentes.

—Tienes razón Kaldo, Wahlberg—él se dirigió al anciano.

—Regresaremos al Castillo de las Glicinias para averiguar lo que Innocent Zero, de eso me encargare en persona—habló el mayor.

—No irás solo, ese lugar es peligroso y el veneno...—Ryoh preocupado.

—¡Ja, ja! Este anciano no ha vivido durante casi un milenio por nada, pero no iré solo—miro a Mash—.Espero tener compañía.

—En ese caso, iré—contestó valientemente Mash.

—Wahlberg, espera...—el rey se vio preocupado aunque tras darse cuenta de la expresión de todos ante su negativa, respiro hondo y dijo—.Mash Burnedead, eres un humano, aún no sabemos nada de lo que te ata a nuestro mundo, pero estamos de acuerdo todos que hay algo de tu pasado que se alberga aquí, aun así, aunque tu hogar ahora, la Tierra podría estar en peligro si Innocent Zero quiere revivir sus ambiciones pasadas, no es necesario que pelees.

—No, lo es, su alteza—Mash muy serio—.Es cierto que vine para saber más de esta gran fuerza que tengo, mis padres me dijeron que vine de este mundo, al menos eso lo creo, pero no estoy solo aquí para averiguar de mi pasado, sino porque quiero salvar a mis padres y ayudar a mis amigos, amigos que hice en este mundo, no soy inteligente, pero soy fuerte—se levantó la manga mostrando sus músculos—.Déjeme ayudar a pelear.

Sus palabras alegraron las caras sombrías de muchos, Finn que se veía preocupado cuando hablaron de ghoul y posible guerra, notando que si él tomaba el valor, también debía hacerlo, algo parecido en Dot y Lance.

—¡Ja, ja, ja! Vamos, si Mash pelea, nosotros estaremos a su lado—dijo Dot.

—Pienso igual, voy a proteger todo lo que me importa, mi hermana y...—Lance dio la vista hacia sus ahora amigos—.Pero claro, mi hermana va primero.

—¡Si, si! Loco siscon—gruño Dot.

—¡Ja, ja, ja! Me encanta tu manera de pensar, humano, eres un verdadero hombre—sonrió Ryoh.

—Demente diría yo, pero divertido—Kaldo sonriendo.

Rayne por su parte permaneció callado, solo observando a Mash, quien le dedicó una mirada. Aunque había algo que debía decir sobre la sangre de este humano en particular, frente a todos no era la manera de hacerlo, en especial porque aún recordaba su dulce sabor.

—Habiendo puesto en claro esto—Wahlberg estiró su barba y se dirigió a todos—.Creo que debemos separarnos, joven Mash, iras conmigo a cumplir esta tarea, descuida que te protegeré.

—Yo iré también—Rayne se ofreció de inmediato—.Después de todo me encomendaron protegerlo.

—En ese caso, con solo tres será suficiente para esta tarea.

—Espera anciano, yo también iré—Dot molesto, pero Orter lo tomó por la cabeza y lo golpeó contra la mesa, tomando por sorpresa a varios.

—No deberías ser irrespetuoso.

—¡Ouch! Pero ¿Lo dices tú?—Dot que apenas podía hablar, tratando de golpearlo, más sus garras no llegaban a él.

—Tienes razón, pero yo soy yo y tú, un sucio perro guardián, además nosotros iremos a un lugar—miró al rey—.Si quiere advertir a todos por esta posible guerra, sabemos muy bien que hay clanes que no se someterán a los vampiros.

—No pido someter a nadie Orter Mádl—dijo el rey.

—No, lo sé, pero ellos son fuertes y serán guerreros que pueden servir, antes los vampiros se fiaron solo de la fuerza de los licántropos, pero seamos sinceros, no somos tantos como entonces, y tampoco haré que mi pueblo se sacrifique por ustedes.

—Jamás pediré eso—respondió el rey—¿Qué propones?

—Hablar con los clanes del sur, las...

—Tierras de las sombras, eso no es una buena idea—le dijo Ryoh—.Son salvajes y...

—Poderosos, como enemigos de los vampiros nos llevamos bien con ellos, llegamos a comerciar, su alteza dijo que debemos unirnos, ¿no? Estamos hablando de dragones, cientos de ellos por lo que escuche, ¿en serio cree que podremos hacerlos solo con sus aliados? A diferencia de sus creencias, los vampiros no son una clase social, siempre se han creído superiores, es por lo que iré con los clanes de los elfos oscuros, aracnes, los cíclopes arpías.

—Esas razas son minoría en Terra, aunque se nos unieran, no confiaría en ellos, son solo saqueadores y asesinos—dijo Rayne muy seguro.

Orter ajustó sus gafas y tras soltar a Dot, quien molesto refunfuño, miró al rey.

—Si confía en mí, en que voy a respetar la tregua, debe confiar en que yo lidiaré con ellos, cuando establezco una regla, la hago valer, y ante usted, juro que no intentare nada hasta que todo se haya resuelto, ni dejaré que ellos dañen a otros, incluso haré un juramento de sangre—dijo de una manera muy severo en sus palabras.

—¡¿Qué dijiste?!—le dijo alarmado Ryoh.

—Alteza, no creo que...—Kaldo intentando que no aceptara.

—¿Que es un juramento de sangre?—Mash confundido a lo que Rayne le contesta.

—Es un vínculo donde dos partes juran algo, si alguno lo rompe, morirá instantáneamente.

—Vaya, eso es fuerte—sorprendió Mash.

—Ryoh Grantz, Kaldo, por favor—el rey llamó su atención, el rubio bajó la cabeza ante este—.Orter, sé que cumplirás a tu palabra, pero tienes razón, desde hoy, y frente a todos ustedes haré un juramento de sangre—el rey se levantó y caminó hacia Orter.

—Alteza, creo que también me uniré a ellos—Wahlberg.

—Si queremos terminar con siglos de desdén, odio y muerte, creo que hay que dar un primer paso—el monarca se acercó a Orter, el enorme licántropo también se puso de pie.

Ambos frente a frente se vieron, el rey extendió su mano y con sus colmillos abrió una herida en su muñeca, Orter hizo lo mismo con sus garras, la sangre se derramó al piso, fue Wahlberg que se paró entre ellos y comenzó a recitar unas palabras en un idioma que Mash no comprendía.

—Es un idioma antiguo—dijo Lance—.Mi padre me dijo una vez que se interpretaba como "Sangre a la sangre, muerte a la muerte, el lazo que hoy nos unirá, solo ante las palabras de desconfianza se romperá..."—les reveló el vampiro de cabello celeste.

—Jamás pensé que vería algo así—Finn sorprendido.

Mash vio como tras recitar esas palabras, la sangre en el piso formó un círculo entre ellos, luego comenzó a brillar, era un halo dorado que emergió de ella y fue hasta sus manos atándolas.

—Yo Orter Mádl, líder actual del clan licántropo, juro que asumiré la cabeza de la vanguardia con los clanes perdidos del sur, solo para pelear contra el enemigo de los habitantes de Terra, en caso de que no cumpla mi palabra y alguien más salga herido, moriré.

—Yo, Vladimir Hellsing juro cumplir mi palabra de no traicionar la confianza del clan Lycan, protegerlos en el curso de una guerra que amenace nuestro mundo, en tanto, ambas condiciones se cumplan seguiremos la ruta de la sangre.

—Seguiremos la ruta de la sangre—Orter contestó muy serio.

El aro dorado que los unía desapareció tras eso, el rey se vio un poco afectado porque casi se desmayaba, de no ser por Kaldo, su alteza habría caído al suelo.

—Alteza—Ryoh se acercó, pero Kaldo evitó que lo tocara, mirándolo fijamente, aunque el líder del buró sabía la respuesta a esa expresión. La verdadera identidad que ocultaba el rey, Orter también se sintió mareado aunque no en la misma medida, Dot sin más, se acercó a este.

—¿Estás bien?

—No necesito tu ayuda—el licántropo retrocede un paso.

—Creo que es todo por hoy—Wahlberg pidió a todos ir a descansar, hablando de los planes al día siguiente—.Hemos hablado mucho, mañana seguiremos—mandó hablar a unos sirvientes y tras darles instrucciones se dirigió a Rayne—.Por favor, acompáñalos.

—Si—asintió el joven vampiro.

Al estar solos, Kaldo levantó al rey en brazos y se dirigió hacia la ventana, parándose en la orilla.

—Llevaré a su majestad a su habitación.

—Por favor—Wahlberg le dio permiso.

Posteriormente el vampiro de cabellos blancos desapareció en el viento, Ryoh no se sorprendió puesto que sabía con exactitud que esa clase de situaciones ya las había manejado antes.

—¿Cree prudente lo que hizo?

—Cuando su alteza se mete algo en la cabeza, es difícil hacerlo cambiar de opinión.

—¿Seguirá refiriéndose como él? Sé la verdad.

—Es preciso que eso no cambie, Ryoh Grantz, eres un hombre astuto, lo sé, confío en tu juicio y sabes que hay una razón por la que su alteza oculta su género.

—Así que eso era—Orter apareció, habían creído que se fue con Rayne y los demás, pero el astuto y escurridizo lobo, usando su gran sigilo de caza se acercó a ellos, Ryoh reaccionó de inmediato y usando su poder único lo rodeo con un halo de luz en su cuello.

—¡Alto, Ryoh!—Wahlberg lo detuvo—.Si él hubiese querido exponer a su alteza, lo habría hecho antes, ¿no es así?

—Es listo, lord Baigan, mi abuelo alguna vez me habló de ti, el hombre que confinó a los Lycan a los bosques.

—Era la única manera de detener la matanza.

—Descuida, no tengo resentimientos, en especial porque de alguna manera ayudó al clan.

—¿Qué es lo que quieres ahora?

—Hice el juramento, descuida, no dañare a su rey hasta que se acabe esta gran amenaza, aunque después de eso, no podría asegurarlo.

—Como lo suponía, no podemos confiar en ti—el vampiro elegante se acercó con una mirada amenazante, pero Wahlberg volvió a detenerlo.

—¡Basta! Ryoh déjalo hablar—le alzó la voz—.Dime ¿Cómo te diste cuenta?

—Los licántropos tenemos buen olfato, podemos oler la diferencia entre un macho y una hembra, aunque no es como si realmente me interesara, los géneros.

—¿Qué dices degenerado?—Ryoh imaginando cosas.

—Eso no es de tu incumbencia, realmente respeto a las personas fuertes, la fuerza es lo que rige la ley, y estoy interesado en eso, el orden, solo apreciaría que no me incluyeran en sus futuros planes, odiaría tener que desconfiar de ustedes, hice el juramento, eso debería bastar.

Los sirvientes del castillo les dieron habitaciones y ofrecieron esa noche una gran cena, aunque nadie les había dicho que sería una cena en la que deberían ir bien vestidos, para cuando los sirvientes llegaron con trajes a las habitaciones, se preocuparon.

—No pienso ponerme esto, soy un Lycan, debemos tener libertad de movimiento, no trajes apretados—a lo que Lance mostró una pequeña sonrisa, molestando al pelirrojo—¿Cuál es tu problema?

—Ninguno, los licántropos son unos salvajes, pero incluso ese Orter, viste bien.

—¡Ah! No creas que...

—Chicos, solo es ropa, no creo que debamos preocuparnos por eso, sería el...

—Menor de los problemas, entiendo lo que dice Finn, nos vimos involucrados en esto, ahora debemos continuar hasta el final, muchos depende de nosotros—habló Lance evitando un golpe con un zapato que Dot le lanzó como si nada.

—Mash ¿Qué piensas?—Finn al verlo serio.

—¿Eh? Es que, nunca he usado traje, no se hacer un moño o corbata...—les dijo, los tres seres sobrenaturales se cayeron hacia atrás por ese tema tan insignificante.

—¡Hablamos en serio!—le reclamo Lance.

—Si, bueno, ya lo dije antes, no me echaré para atrás, pelearé y encontraré la verdad de mi pasado.

—¿Buscarás a tu madre?—le cuestionó Dot sentándose en la cama, dado que los tres se habían reunido en la habitación de Mash porque se les hacía más cómodo.

—No lo sé, no creo que sea prudente buscarla ahora, primero debo hacer que este mundo esté en paz

—No será algo fácil, no sabemos cuánto tiempo nos tome, además los humanos no viven tanto.

—¡Lance!—le regaño Finn a lo que el chico de cabellos celestes suspiro—.No lo dije por eso, es que podría ser que ella sea humana como tú, y que muriera, ¿no?

—¡Lance, eso no ayuda!—Finn de nuevo tratando de hacerlo callar.

—Chicos, lo sé, descuiden, haré lo que mi poder pueda hacer—les sonrió Mash un poco abrumado, dirigiéndose hacia la puerta.

—¿A dónde vas? La cena será dentro de dos horas.

—Si, solo iré a caminar, gracias—el chico se alejó por la puerta.

Dot, Lance y Finn decidieron dejarlo solos, en especial cuando vieron esa cara, sabían que para alguien como Mash, el tiempo estaba en su contra, y ahora todo lo que sucedía.

Mash camino por el castillo hasta que olfateo algo, era pan recién horneado, por lo que siguió su aroma hasta llegar a la panadería del lugar.

—Oh, es uno de los invitados—le dijo el chef del castillo.

—Huele bien—Mash se acercó para tocar la mesa y viendo todos los ingredientes—.Disculpen, ¿puedo usar algo?

—¿Eh? ¿Para qué? Estamos haciendo la cena, no creo que...

—Es que hornear panecillos me ayuda pensar—les dijo.

Los sujetos se vieron entre sí, luego le ofrecieron una mesa en una esquina junto a un horno, después de todo era un invitado del rey, no darle lo que pide podría ser problemático.

El joven humano era blanco de las miradas de todos, pero él se concentró en hacer panecillos rellenos de crema.

—Aquí de nuevo, siempre cubierto de harina—Rayne apareció en la ventana, sentándose en ella.

—Rayne, eres tú—Mash ya no se sentía tan nervioso a su lado, después de todo entendió que los vampiros beben sangre.

—No te alejes demasiado, puede que sea el castillo del rey, pero sigue siendo otro mundo para ti, ¿no?

—¡Osu!—contesto como acostumbraba, mientras batía habló con el vampiro—¿Puedo preguntar algo?—le dijo, Rayne se le quedó viendo, abriendo la pauta para su pregunta—.Bueno, es que dejaste venir a Finn, ¿significa que por fin se llevarán bien?

—Eso no es de tu incumbencia, solo me di cuenta de que no tengo que cuidarlo todo el tiempo.

—Entiendo, eres un buen hermano mayor.

—Solo cállate y hornea.

—¿Te gustaron antes? Digo, en el bosque—Mash pensando cuando los hizo para todos los licántropos.

—No comí ninguno.

—Ya veo, espero que pruebes uno esta vez—le sonrió Mash muy tierno, a lo que Rayne al ver su cara, simplemente sintió como un latido fuerte lo atacó, recordando su cercanía en ese casi beso de sangre.

—Sabes, debo irme, no hagas locuras—le dijo, desapareciendo como vino, por la ventana.

El vampiro saltó hasta lo alto de una torre, mirando la luna menguante a lo lejos, llevándose la mano al pecho.

—No debería sentir esto—murmuro, pero una visita lo distrajo, era Wahlberg—.Señor, es usted.

—Solo vine a buscarte, antes percibí que querías decirme algo, dime ¿Tiene que ver con el joven Mash?

—Lo es, su sangre, su sangre es especial.

—¿Has bebido la sangre de un humano?

—Si, lo siento—Rayne bajó la cabeza y puso una rodilla en el suelo, mostrando su arrepentimiento—.Fue de vida o muerte.

—Entiendo, no te castigaré, pero es un tabú y lo sabes.

—Lo sé, pero hay algo con su sangre que debe saber—Rayne decidió explicar todas sus conjeturas al anciano consejero del rey antes de esa cena.